Mapa Contech: Soluciones tecnológicas para transformar la construcción

La plataforma, que reúne más de 50 soluciones innovadoras para la construcción, cuenta con la validación de 14 instituciones especializadas en innovación, tecnología y construcción, permitiendo resolver diversas necesidades que actualmente tienen las empresas del rubro.

Seguir el avance de la obra en tiempo real, ser parte de un marketplace de maquinarias, utilizar la Realidad Virtual o la Inteligencia Artificial para el manejo de activos, son solo algunas de las novedades que forman parte del “Mapa Contech 2023”, una iniciativa impulsada por la Cámara Chilena de la Construcción a través de su programa de innovación abierta “Construir Innovando” y “Construye 2025”, programa impulsado por CORFO, que busca dar visibilidad a las soluciones tecnológicas que están transformando el sector.

Con más de 10 mil visitas en su primera edición, esta plataforma intuitiva que agrupa las soluciones en base a las necesidades que hoy tienen las empresas de la construcción, pretende superar la meta anterior disponiendo de un portafolio de herramientas validadas y listas para ser implementadas en las diferentes etapas del proceso constructivo (desarrollo, planificación, construcción, operación y usuario final).

El Mapa Contech pretende llegar a todas aquellas empresas que deseen incorporar nuevas formas de tecnologías, pero también a aquellos inversionistas que quieran conocer las nuevas tendencias de la construcción. Estos proyectos se basan en distintos tipos de tecnologías tales como: Gobierno de datos y analítica, gestión en la nube, digitalización de procesos, nuevos materiales, realidad aumentada, prefabricación y robótica, internet de las Cosas (IoT) y BIM.

Conrad Von Igel, gerente de Innovación y Sostenibilidad de la Cámara Chilena de la Construcción, asegura que el Mapa Contech es una oportunidad de incorporar nuevos talentos y acelerar el proceso de transformación cultural y adopción de innovaciones. “Los desafíos que el sector de la construcción enfrenta en Chile y el mundo son cada vez más complejos y relevantes, con potencial impacto directo en la viabilidad y legitimidad del negocio, por lo que se requiere enfrentarlos de manera innovadora y, en muchos casos, colaborativamente. En este sentido, el trabajo de actores establecidos de la industria con nuevas tecnologías y modelos de negocio, a través de la vinculación con startups y soluciones tecnológicas, es lo que precisamente facilita la plataforma” explica Von Igel.

En tanto, Marcos Brito, gerente de Construye2025, programa impulsado por Corfo y administrado por el Instituto de la Construcción, asegura que por la experiencia internacional de este tipo de proyectos las expectativas son altas. “Luego del éxito de este tipo de iniciativas en otros países y de la primera versión del Mapa Contech en Chile, esperamos que el Mapa se establezca como la plataforma que conecta a grandes empresas con startups, basadas en tecnologías totalmente preparadas para solucionar sus problemas, mejorar su productividad y ayudarles a ser más sustentables”, sostiene.

Los proyectos ganadores fueron seleccionadas por un jurado compuesto por: Brinca, Centro Tecnológico para la Innovación en la Construcción (CTeC), Centro Interdisciplinario para la Productividad y Construcción Sustentable (CIPYCS), Open Beauchef, Socialab, UDD Ventures, Construir Innovando Ventures (CIV), ProChile, CDT (Corporación de Desarrollo Tecnológico) , Instituto 3IE, Transforme Consultores, Bluebox México, Centro de Innovación UC Anacleto Angelini (CIUC) y StartUp Chile.

Empresas destacadas

Industrialización

Boetek comercializa centrales térmicas prefabricadas. Cuentan con modelos a gas y eléctricos, que llegan 100% terminados a la obra y cuentan con tecnología de monitoreo, control y alta eficiencia en generación de agua caliente.

Postularon al Mapa Contech, porque “lo vimos como una gran oportunidad para ser parte de un portafolio que facilita a la construcción encontrar soluciones de excelencia que muchas veces se desconocen en el mercado. Vimos reflejada nuestra central térmica modular con la esencia del Mapa: un producto tecnológico, de calidad e innovador que permite transformar la manera de construir y la experiencia en operación”, comenta Clemente Salgado, Key Account Manager de Boetek.

Estos módulos son el resultado de años de ingeniería, experiencias, estudios de data y monitoreo. “Una mejora continua que nos permite estar con un producto de excelencia, versátil y estandarizado en esta gran vitrina Mapa Contech disponible para toda la industria de la construcción”, dice Salgado. En ese sentido, para el profesional “es un orgullo y un importante reconocimiento al producto en sí y a todo el esfuerzo que existe detrás”. 

Sustentabilidad

Binario Tech es una startup chilena que en base a innovación y desarrollo, crea soluciones que resuelvan problemas relacionados con el agua.

Son los creadores de la tecnología Reiniger, sistema electroquímico compacto para el tratamiento de aguas residuales, mediante oxidación avanzada y electrocoagulación.

Nuestra líneas de negocio:

  1. Tratamiento de aguas servidas
  2. Tratamiento de aguas grises
  3. Tratamiento de residuos industriales líquidos
  4. Agua potable

Como ganadores del Construir Innovando Ventures 2022, con el proyecto de tratamiento y recuperación de aguas grises para su uso en riego de áreas verdes, como premio fueron incorporados al Mapa Contech.

Pese a ello, Patrick Aravena, director comercial de Binario Tech, cree que “la importancia de estar en esta versión del Mapa es que más empresas constructoras e inmobiliarias puedan conocer sobre nuestras soluciones rentables y sostenibles para la recuperación de aguas residuales, logrando así impactar positivamente en los indicadores de sostenibilidad de la industria”.

De esta manera, Binario Tech sigue desarrollando soluciones para recuperar agua a partir del tratamiento de aguas servidas y aguas grises, “pudiendo generar disminución en los costos de uso de agua potable o industrial en la etapa de construcción de un proyecto, por ejemplo, humectación de caminos interiores, curado de hormigón y excavaciones; o en la etapa de usuario final permitiendo regar las áreas verdes de un proyecto. A modo de caso de éxito podemos comentar que para humectación de caminos en instalaciones de faena hemos generado una disminución de un 61% en los costos de compra de agua”, cuenta Aravena.

Transformación digital 

A través del uso de las tecnologías inmersivas y sus datos, IMOVA logra facilitar la comunicación, el aprendizaje, la práctica y la evaluación de personas, competencias y operaciones. En ese sentido, ofrecen aplicaciones en una plataforma enfocada en obtener conocimiento a partir de los datos de una compañía. 

Sus soluciones ayudan a mejorar procesos; optimizando tiempos, aumentando calidad, facilitando el aprendizaje y mejorando la colaboración. Y además, el desempeño de todas las tareas se registra en su plataforma, entregando un seguimiento completo de las experiencias.

Francisco Javier Serrano Lara, desarrollador de Negocios en IMOVA, asegura que la postulación al Mapa Contech se dio “para dar visibilidad a nuestras soluciones tecnológicas que aplican al sector de la construcción en Chile, de manera de que las empresas de la industria puedan conocer la solución IMOVA Try-Out, que consiste en que facilitar la experiencia de los usuarios con productos constructivos y conocerlos a través de la realidad aumentada”,

Asimismo, querían dar a conocer a la industria de la construcción su Laboratorio de Edificación, el cual está conformado por una plataforma de aprendizaje y práctica virtual, que recrea el proceso de elaboración de elementos constructivos de hormigón armado.

Haber sido seleccionados “significa un reconocimiento a las soluciones tecnológicas que brinda IMOVA y, a la vez, es una oportunidad para ampliar su alcance y llegar a nuevos clientes en el sector de la construcción en Chile”, cree Serrano.

 

Capital Humano 

Pignus es una plataforma autogestionable, que permite evaluar y disminuir brechas conductuales, utilizando entornos de realidad virtual y modelos predictivos de comportamiento. Su solución es Rehaviour, herramienta de detección y disminución de las brechas conductuales de los trabajadores, desarrollada completamente por Pignus utilizando las tecnologías más avanzadas del mercado.

Rehaviour es totalmente auto gestionable, se utiliza directamente en las dependencias de la organización y entrega reportabilidad instantánea para agilizar el fortalecimiento de las competencias que influyen en la seguridad y productividad.

“Postulamos al Mapa Contech, porque queremos ser un aporte importante a la transformación del sector y consideramos que es una excelente iniciativa que une a todas las startups que estamos apoyando el cambio mediante tecnología”, dice Felipe Sanhueza, CEO y Founder de la empresa.

Por ello, especifica que el hecho de haber sido seleccionados, “significa que ya estamos generando un impacto en el sector, nos da un mayor nivel de visibilidad y permite que toda la industria sepa sobre lo que estamos haciendo, lo que nos abre la puerta a trabajar con más empresas ligadas a la construcción”.

Actualmente, Pignus ya está participando activamente en el sector de la construcción, con clientes como Vial y Vives, Ferrovial, Gardilcic y Desarrollos Constructivos Axis. “Este último cliente fue premiado por el uso de nuestra herramienta Rehaviour durante el concurso Compartiendo Buenas Prácticas en Seguridad y Salud en el Trabajo de la Cámara Chilena de la Construcción junto a la Mutual de Seguridad”, asegura Sanhueza. 

 

Innovación 

Discóbolo partner Latam es un sistema de credenciales digitales con blockchain, que consolida información formativa de trabajadores, de forma segura, verificable y portable. Los mandantes acceden a información a prueba de falsificaciones, inventario de talentos, gestionan trayectorias formativas.

Como partner para Hispanoamérica del líder mundial en Certificaciones Digitales Inteligentes, en Discóbolo S.p.A.,  “una de nuestra labores fundamentales es difundir las mejores prácticas de más de 1.800 instituciones en más de 160 países que se benefician de certificados full digital, compartibles, verificables a 1 click, a prueba de falsificaciones, y amigables con el medio ambiente”, señala Germán Muñoz, director ejecutivo de la compañía.

Dentro de los usuarios a nivel mundial hay varios del área de la construcción y con su apoyo las empresas nacionales pueden estar a nivel mundial en materias de certificaciones, según el ejecutivo. “El ser seleccionado entre los múltiples postulantes por un comité de 14 instituciones especializadas en innovación es un gran respaldo para nuestro trabajo de más de tres años en el mercado hispanoamericano. Es un impulso significativo para dar a conocer nuestras soluciones de certificaciones digitales inteligentes a la industria de la construcción y todo el ecosistema de proveedores, subcontratistas y constructoras, para contar con información confiables de sus colaboradores, sus habilidades y los mapas de talentos disponibles”, precisa Muñoz.

“Hoy, el capital humano en todas las industrias es de suma importancia, pero en el sector construcción es una variable critica, y con nuestro apoyo podrán contar con información verificables e historiales de formación y entrenamientos full digital, los que entre otros beneficios permite visibilizar los talentos con que cuentan, visibilizar los planes de formación y especialización, y la posibilidad de que trabajadores cuenten con su historial full digital; lo que se materializa en procesos de reclutamiento y selección mucho más agiles y seguros”, afirma el director ejecutivo de Discóbolo.

Dentro de los casos de uso internacional cuentan con:

Conoce las más de 50 soluciones tecnológicas para la construcción en https://mapacontech.cl/ 

 

Construye2025 se suma a la economía circular del Gran Concepción

En el contexto del Seminario Internacional “Arquitectura, Urbes y Territorios para una Economía Circular”, que contó con la participación de Alejandra Tapia, coordinadora de Sustentabilidad del programa, junto con diversas ponencias sobre la temática, se firmó una carta de compromiso para impulsar la economía circular del Gran Concepción.

La Universidad del Bío-Bío, en conjunto con el Programa Iberoamericano de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo (CYTED), la Red de Economía Circular como Estrategia para una Industria de Construcción más Sustentable (ECoEICo) y la Red de Ciudades Inclusivas Resilientes Eficientes y Sustentables (RED CIRES), organizaron el Seminario Internacional “Arquitectura, Urbes y Territorios para una Economía Circular”. 

Este contempló ponencias de distintos expositores nacionales e internacionales, con el objetivo de convocar a distintos actores de la academia, y del sector público y privado, en aspectos de la sostenibilidad urbana y economía circular.

En la primera fase, expusieron sus temas el Dr. Mario Núñez Decap, director de Innovación de la Vicerrectoría de Investigación y Postgrado UBB; la Dra. Claudia Muñoz Sanguinetti, coordinadora de Red CYTED ECOEICO UBB; el Dr. Ariel Bobadilla, director del Centro de Investigación en Tecnología de la Construcción (CITEC UBB); el Dr. Sergio Baeriswyl, académico del Departamento de Planificación y Diseño Urbano y Premio Nacional de Urbanismo; Óscar Reicher, Seremi de Medio Ambiente de la región del Bíobío; Cristina Engel, coordinadora Red CYTED, y Alejandra Tapia, coordinadora de Sustentabilidad de Construye2025, entre otros.

En la jornada de la tarde, se desarrollaron dos mesas temáticas en el Edificio de CITEC UBB. Por un lado, la mesa denominada: Arquitectura y Construcción para una Economía Circular, instancia que contó con la moderación de la Dra. Claudia Muñoz Sanguinetti y la Dra. Mabel Vega, docente de la Facultad de Ingeniería, en que se abordó la gobernanza, circularidad, recursos y residuos en la construcción. En paralelo, se materializó la mesa: Urbes y Territorios para una Economía Circular, con la moderación del Dr. Aaron Napadensky, coordinador de Red CYTED CIRES UBB, y académico del Departamento de Planificación y Diseño Urbano, en que se abordó la economía circular, territorios alimentarios, además de la gobernanza urbana y territorial.

Respecto de las implicancias del evento, el Dr. Aaron Napadensky y la Dr. Claudia Muñoz, quienes además de pertenecer a estas redes Iberoamericanas, CIRES y ECOEICO, como investigadores asociados principales, fueron los gestores del presente seminario, manifestaron que la instancia representó un punto de inicio y encuentro para actores públicos, privados y comunidad organizada, que junto con la academia, dieron un espacio y tiempo para aunar miradas y diagnósticos, tanto de las buenas prácticas llevadas adelante en materia de economía circular local, como de los nudos territoriales que parecen impedir su masificación y ampliación.

En tanto el decano de la Farcodi UBB, Mg. Roberto Burdiles Allende, expresó que iniciativas como esta, apuntan hacia objetivos que la universidad se ha trazado en los últimos años.  Añadió que la facultad que encabeza “ha construido esta plataforma multidisciplinar donde converge la arquitectura, construcción, urbanismo y el diseño, pensando en que realizamos un aporte en la sociedad en nuevos conocimientos y tecnología” aseguró.

La jornada cerró con la firma de la Carta de Compromiso para Impulsar la Economía Circular del Gran Concepción, acto efectuado en el Edificio INES. Centro de Innovación Sustentable de la Universidad del Bío-Bío. Se suscribió por parte de los participantes del seminario, un compromiso de reconocimiento de la importancia de la coordinación de los distintos actores territoriales, en llevar adelante iniciativas de convergencia que permitan visibilizar la relevancia de la economía circular, tanto a nivel urbano comunal, como barrial y regional. Finalmente, los organizadores dejaron invitados a todos los asistentes a posteriores eventos que se harán en el marco de esta Red Iberoamericana que comienza ECOEICO.

“Sin duda este es un gran compromiso que involucra no solo a la construcción, sino que también a la ciudad; es una gran declaración y un ejemplo para muchas ciudades del país”, declaró Alejandra Tapia.

La actividad contó con el patrocinio del Laboratorio de Estudios Urbanos, LEU, Laboratorio de Gobierno Local; la Escuela de Ingeniería en Construcción; Magister de Hábitat Sustentable y Eficiencia Energética; Doctorado en Arquitectura y Urbanismo y Sal en Conce “Sistemas Alimentarios Locales en el Gran Concepción” con su proyecto ESAL25.

Los centros tecnológicos de la construcción muestran sus avances

Tras cinco años desde su creación, los centros tecnológicos de la construcción: CIPYCS y CTeC, nacidos bajo el alero de Construye2025, con financiamiento de Corfo, comienzan a mostrar señales de consolidación y de trabajo cercano y estratégico junto a la industria.

Corría el año 2017, cuando Construye2025 apalancó fondos de Corfo para la creación de dos centros tecnológicos para la construcción, licitación en la que resultaron finalistas el Centro Interdisciplinario de Productividad y Construcción Sustentable (CIPYCS) y el Centro Tecnológico para la Innovación en Productividad y Sustentabilidad en la Construcción (CTeC)

De esta manera, durante cinco años y junto con el programa impulsado por Corfo, ambos centros han recorrido un camino de apertura hacia la innovación, la sustentabilidad, la tecnología y la productividad en la industria. 

Por una parte, “el CTeC ha logrado transitar de una etapa de conformación y posicionamiento hacia un ciclo de consolidación, demostrando ser un aporte para la industria. Gracias al conocimiento aportado por su equipo, junto al trabajo desarrollado con las universidades socias y la experticia internacional, el Centro se ha convertido en una institución apreciada en el ecosistema nacional”, considera Carolina Briones Lazo, directora ejecutiva del CTeC.

En los últimos años, el CTEC ha puesto el foco en ayudar a levantar una industria golpeada por una fuerte recesión, y que enfrenta desafíos como el déficit de vivienda y la crisis climática, por medio del desarrollo de iniciativas bajo un enfoque de innovación abierta y colaborativa. “Estos han sido aspectos claves y diferenciadores en la búsqueda de ofrecer soluciones robustas y conectadas con las necesidades actuales de las empresas e instituciones del sector”, asegura Briones.

Y algo parecido ocurre con el CIPYCS, que vio el año 2022 como el de su consolidación, a juicio de su gerente general, Miguel Mora. “Pudimos terminar la construcción de IMA, el primer laboratorio de infraestructura modular de Latinoamérica, lo cual nos permitió comenzar a posicionarnos como un centro no solo con capacidad de conocimiento, tecnología para innovar, sino también como uno con infraestructura para innovar”, cuenta. Si bien Mora reconoce que les gustaría avanzar más rápido en el trabajo en conjunto con la industria, a su juicio, “las condiciones del mercado mundial durante 2022 no fueron las más favorables para la industria de la construcción. Sin embargo, hemos logrado generar espacios de trabajo con empresas que esperamos puedan generar proyectos de I+D+i durante 2023”.

El mandato de Corfo

Como cuenta Carolina Briones, desde su creación, el CTeC ha debido reportar a Corfo de manera anual el cumplimiento de KPIs asociados a a gestión administrativa, de posicionamiento, de venta de servicios y el desarrollo de infraestructura, entre otros aspectos, “los cuales hemos podido cumplir pese a los escenarios complejos que ha tenido nuestro sector en los últimos tres años”. Y cita como ejemplo la construcción del Parque de Innovación CTeC, construido en plena pandemia, “donde la movilidad era reducida y existía un grave problema de abastecimiento de la cadena de suministro, sumado al alto costo de los materiales”.

En tanto, Miguel Mora, especifica que “hasta ahora hemos cumplido lo propuesto inicialmente como centro; sin embargo, estamos trabajando en convertirnos en una plataforma que permita generar soluciones y oportunidades en el marco de los objetivos de desarrollo del país. Por lo cual, tenemos desafíos importantes en 2023 en alinear nuestros incentivos de I+D+i a las diferentes hojas de ruta de las industrias y la política pública”.

Los hitos de 2022

En 2022, ambos centros pudieron concretar importantes avances. Estos son los principales hitos:

CTeC

  • Durante el 2022 se logró concretar la apertura y acciones de posicionamiento del Parque de Innovación CTeC, el cual se materializó con su lanzamiento en enero de ese año. Se trata del primer parque tecnológico para el sector construcción en Chile, donde las empresas y/o instituciones pueden pilotear, prototipar, monitorear y validar innovaciones, soluciones constructivas, materiales, tecnología, etc. a escala real y de manera integrada, antes de ser implementados en obra. 
  • En cuanto a los servicios de pilotaje, se han instalado más de 13 prototipos y suscrito contratos de innovación y convenios de pilotaje con más de 40 empresas, las cuales están presentes en el Parque y participan en las distintas actividades de vinculación. Este es un elemento diferenciador para el Centro, generando valor al ecosistema, convirtiéndose en el espacio donde las empresas están invitadas a innovar de manera segura y colaborativa, evitando riesgos al hacerlo en proyectos reales.
  • En paralelo, el Centro ha logrado posicionarse dentro del mercado nacional, destacando la demanda por sus servicios de consultorías en torno a transformación digital, sustentabilidad, innovación e industrialización, contando, a la fecha, con una cartera de clientes conformada por connotadas empresas y consorcios del rubro, como también por PyMEs y emprendedores. Los clientes valoran la calidad y rigurosidad de los servicios ofrecidos, quienes en un alto porcentaje vuelven a solicitar nuevos apoyos.

CIPYCS

  • Inauguración de IMA en agosto de 2022, primer laboratorio de infraestructura modular de Latinoamérica.
  • Trabajar con CINTAC en los primeros proyectos de I+D+i con la industria utilizando las capacidades instaladas en IMA.
  • Trabajar con Volcán para generar los primeros cursos de capacitación en el piso de industrialización de IMA.
  • Dictar cursos y charlas de interés público, utilizando CIPYCS como plataforma de capacitación y mejoramiento de capital humano.

Los desafíos

Por supuesto, aún hay trabajo por llevar a cabo. De esta forma, durante 2023, Carolina Briones comenta que los esfuerzos del CTeC se concentrarán en el desarrollo de una campaña masiva de digitalización dirigida a los segmentos de clientes identificados por el Centro, con un especial énfasis en PYMEs”. Para su implementación, se elaboró para el Eje de Ecosistemas Digitales de la CChC, material metodológico como la “Guía de adopción de BIM” dirigida a los tomadores de decisiones y la “Guía de 25 pasos de implementación BIM”, desarrollada para quienes deban ejecutar una estrategia de implementación dentro de su organización.  

Paralelamente, se están desarrollando acciones de definición de estrategias y planes de trabajo para habilitar y poner en funcionamiento los Nodos Regionales, ubicados en Antofagasta y Temuco. “Estos nodos centrarán su quehacer en fomentar la adopción de capacidades por parte de grandes empresas y contratistas, en aspectos relacionados a la Construcción Industrializada (CI) y la adopción de Métodos Modernos de Construcción (MMC), bajo una lógica de operación de innovación abierta, donde el riesgo y los recursos invertidos pueden ser divididos entre varios colaboradores, los que, a su vez, capturan los beneficios y aprendizajes”, dice la directora ejecutiva del CTeC y agrega que este método de trabajo ya ha sido instalado por el CTeC en el Parque de Innovación, con gran éxito e importantes sinergias por parte de las empresas participantes. 

Por otro lado, proyectos como “Modhabitar” en Antofagasta y el “Reto de Vivienda Industrializada” junto al Construir Innovando de la CChC, van por esta misma línea. “Esperamos seguir desarrollando está lógica colaborativa en otras regiones del país, y fortalecer una red de networking, en pos de elevar los niveles de sustentabilidad e industrialización del sector, propiciando la creación de emprendimientos de base tecnológica y disminuyendo el déficit de vivienda social”, proyecta Briones.

Asimismo, han sumado a su cartera de proyectos otro gran desafío: “Construye Zero”, que con una mirada a tres años promueve el desarrollo de 10 proyectos tecnológicos. El proyecto aborda retos asociados a la productividad, eficiencia y sustentabilidad a lo largo del ciclo de vida del entorno construido, e impacta en áreas como eficiencia energética e hídrica; energía renovables y autogeneración; edificios de consumo energético casi nulo; reducción de CO2; economía circular; Métodos Modernos de Construcción (MMC) para la Construcción Industrializada; medición y reporte y digitalización de la información. “Por medio de Construye Zero, CTeC buscan impulsar el desarrollo, adaptación y transferencia de soluciones que contribuyan a la descarbonización de nuestro país bajo un contexto de crisis climática”, precisa la profesional.

Los desafíos para el CIPYCS pasan por la construcción del PEP [lab] en la Universidad del Bío-Bío, “el cual es un laboratorio de prototipado a escala real que permitirá validar la elementos y materiales de construcción a nivel prototipo y que, además, generará infraestructura para innovar en la Región del Biobío”, asegura Mora. Y, por otro lado, está la creación y el desarrollo de nuevos proyectos de I+D+i ,que permitan a las empresas generar ventajas competitivas mediante la mejora de la productividad y la implementación de procesos y materiales más sostenibles.

“Hoy estamos trabajando en ser un aporte real a las empresas de construcción y las de otras industrias relacionadas con construcción, por lo que las invitamos a ponerse en contacto con nosotros para que en conjunto podamos generar soluciones que las ayuden a ser más competitivas en sus mercados”, sostiene Miguel Mora.

Nuevo Consejo del IC busca resolver las controversias en los contratos de construcción

El recientemente creado Consejo Ampliado de Relaciones Contractuales del Instituto de la Construcción tiene por objetivo promover propuestas que busquen mejorar las relaciones contractuales de todos los integrantes de la cadena de valor en un contrato de construcción.

En los últimos años, han aumentado los niveles de divergencia contractual, tanto así que actualmente se encuentran en torno al 50%, es decir, que uno de cada dos contratos de construcción presenta algún tipo de controversia que impacta en los plazos y costos del proyecto.

Por ello, frente al aumento de las controversias en los contratos de construcción, que afectan directamente la productividad, el Instituto de la Construcción -a solicitud de la Cámara Chilena de la Construccióndecidió crear el Consejo Ampliado de Relaciones Contractuales, que integra a los distintos actores del área para trabajar en propuestas de mejora a la productividad, sostenibilidad, calidad y ejecución de los proyectos, incluyendo a toda la cadena de valor.

“El Consejo se ha creado a fin de aunar criterios, tanto para enfrentar la actual crisis del sector como para impulsar proyectos a futuro, que impacten en una mejor asignación y ejecución de los recursos públicos y privados”, comenta Catherine Cumming, secretaria ejecutiva del Consejo Ampliado Relaciones Contractuales IC y profesional de CyF Abogados.

Y su objetivo “es promover propuestas de carácter nacional, tanto en el ámbito público como privado que busquen mejorar las relaciones contractuales de todos aquellos que son parte de la cadena de valor en un contrato de construcción (mandantes, contratistas, subcontratistas, proveedores etc.)”, cuenta.

En ese sentido, “el Consejo no sólo busca cambios normativos, sino que también apunta a un cambio cultural que requiere tiempo y se logra de manera gradual”, de acuerdo con la profesional. De esta manera, “dicho cambio busca crear conciencia de la importancia de la colaboración en los contratos, dar a conocer los beneficios que tiene para toda la cadena de valor una relación basada en la buena fe, confianza, y, por ende, en la colaboración”, añade.

Hoy, este Consejo está conformado por representantes a nivel nacional del sector de la construcción: presidente del Instituto de la Construcción, vicepresidente de la Cámara Chilena de la Construcción, presidente del Colegio de Abogados de Chile, presidente de la Comisión Nacional de Evaluación y Productividad, presidente de Construye2025, vicepresidenta de la Sociedad Chilena del Derecho de la Construcción, director ejecutivo del Consejo de Políticas de Infraestructura (CPI), junto con destacados profesionales del área, como Jeannette Von Wolfersdorf, Gerhard Von Borries y Daniel Weinstein.

Además, como invitados al Consejo se encuentran los ministerios de Obras Públicas y de Vivienda y Urbanismo como mandantes públicos.

Como desafíos, este Consejo tiene el de incentivar la colaboración, transparencia y confianza entre las partes del contrato de construcción. “mediante propuestas que estén orientadas a promover el diseño y la implementación de políticas, tanto públicas como privadas, que mejoren la gestión contractual y productividad, promoviendo las buenas prácticas en la línea de la colaboración y el diálogo”, asegura la abogada.

Edificios certificados CES mandatados por la DA-MOP han mitigado 10.568 tCO2eq/año

Gracias a una medición que realizan desde 2018 la Dirección de Arquitectura del MOP y CES, se ha logrado establecer el ahorro en gasto de energía, así como la mitigación de CO2 que aportan al país los edificios certificados. 

La Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas, a través de Certificación Edificio Sustentable, ha logrado ahorrar 10.568 tCO2eq/año, desde 2018 a la fecha, sobre un universo medido de 38 proyectos. Lo anterior equivale al ahorro en gasto de energía de más de 20.000 viviendas en un año.

Esto ha hecho posible la mitigación de 10.568 tCO2eq/año, lo que en términos prácticos, equivale a carbono secuestrado de más de 5.000 hectáreas de bosque, según comenta Hernán Madrid, jefe de CES.

Este trabajo de medición incluye a todos los proyectos certificados y precertificados mandatados por la DA-MOP, y se hace a través de un levantamiento de los indicadores del sistema de certificación, incluyendo características como la demanda y consumo de energía. “Tenemos la información de reducción de consumo de energía en kWh/m2 al año comparada con la referencial. También el equivalente a nivel de emisiones y la mitigación en términos de porcentaje”, explica Madrid.

De esta manera, para la emisión de bonos verdes, se utilizan estos datos sobre los edificios ya certificados y, por lo tanto, en funcionamiento, por lo que “están mitigando, sumándose así las reducciones de CO2 equivalentes al año”, comenta el ingeniero.

Por ejemplo, la Reposición Instituto de Rehabilitación, Teletón Coquimbo, tiene una reducción de 65 toneladas de carbono equivalente al año. Si bien los proyectos precertificados se cuantifican también, no se consideran para el indicador de reducción de emisión, “pero sí hay una cuantificación del estimado para conocer cuántas toneladas va a mitigar cuando efectivamente se construya”, dice Madrid.

En total, los edificios certificados que han logrado ahorrar los 27.759.422 Kwh/año son los siguientes:

PROYECTO

ESTADO CES

AHORRO TOTAL ENERGÍA

kWh/m2 año

MITIGACIÓN

tCO2eq/año

MITIGACIÓN

%

Reposición Instituto de Rehabilitación, Teletón Coquimbo

Certificado

16

65

68%

Ampliación Escuela Formacion de Carabineros Grupo Ovalle

Certificado

68

138

78%

Liceo Alberto Gallardo Lorca Punitaqui

Certificado

36

84

40%

Reposición Escuela Collín Alto, Vilcún

Certificado

28

11

32%

Construcción Fiscalía Local de Pucón

Certificado

226

24

54%

Reposición Dirección Regional del IND Región del Maule

Certificado

29

13

73%

Reposición con Relocalización 2° Comisaría de Coronel, 2° Llamado

Certificado

34

26

56%

Reposición 5° Comisaría de Quirihue

Certificado

48

60

93%

Reposición Tenencia de Carabineros Pinto Ñuble

Certificado

41

15

89%

CONSTRUCCIÓN HOSPITAL BI PROVINCIAL QUILLOTA PETORCA

Certificado

77

2.894

41%

NORMALIZACIÓN HOSPITAL PROVINCIAL DE CURICÓ

Certificado

55

2.728

33%

CONSTRUCCIÓN HOSPITAL, ALTO HOSPICIO

Certificado

219

3.988

38%

 Fuente: CES

Comité de Economía Circular IC visita planta de valorización de residuos en construcción

Miembros del Comité de Economía Circular del Instituto de la Construcción visitaron las instalaciones de Greenrec Lepanto, empresa dedicada a la recuperación de pasivos ambientales, con una gestión sostenible que incluye la valorización de residuos de la construcción además de otros residuos industriales inertes.

Durante la visita, Pedro Pablo Larraín, gerente general en Greenrec, señaló que la planta recibe 1/3 de los residuos de construcción y demolición de la Región Metropolitana, lo que equivale a 60 mil toneladas al mes, sin embargo, el 90% de los residuos de la construcción no cumple con las exigencias básicas de la ley.

En este sentido indicó que a pesar de que en Chile hay iniciativas que fomentan la recuperación de materiales, no hay exigencias al respecto.

“Son múltiples los desafíos que se vienen por delante. Es necesario impulsar e incentivar prácticas de segregación y valorización, incentivar el reciclaje simplificado de materiales elegibles, el uso de materiales reciclados y la segregación en origen además de hacerlo en el destino”, agregó.

Durante el encuentro, Paola Molina, presidenta del Comité de Economía Circular IC, agradeció el recibimiento de parte de Greenrec, indicando que conocer el proceso que realiza esta empresa es de vital importancia para establecer las metas y acciones que se deben enfrentar a través de los 6 ejes de la Estrategia de Economía Circular en Construcción que está trabajando este comité.

Participantes

Además de recorrer las instalaciones de Greenrec, el grupo aprovechó la instancia para debatir la situación actual de los residuos en construcción, así como analizar las acciones que nuestra industria debe abordar en materia de sostenibilidad.

Maud Breyne, jefa de Proyecto Área de Sostenibilidad y Economía Circular de Eurochile destacó la visita ya que permite profundizar aun más una temática y focalizar la búsqueda de soluciones.

“A través de las conversaciones que tuvimos logramos abordar los 6 ejes de la Estrategia, y se levantaron las brechas del modelo de negocio que existe actualmente de manera de buscar soluciones. El desafío del comité es seguir identificando iniciativas similares y sus brechas y dificultades para ayudarles a prosperar y empujar a que más actores hagan lo mismo, pensando sobretodo en que esas acciones e iniciativas puedan repetirse también en regiones sabiendo que los contextos son distintos a lo largo de Chile”.

Por su parte, Cristián Garín, CEO & Founder de Construcción Circular, comentó que es interesante ver una empresa que cumple con estándares tan altos y que no es conocida en Chile. “Se ve que es una empresa super organizada, que tiene un planteamiento regenerativo. Lo que logramos ver de la valorización de los residuos me parece que es una oportunidad de desarrollar un territorio de innovación circular”.

En tanto, María José Cobo, coordinadora de proyectos de la Corporación de Desarrollo Tecnológico, CDT, señaló que para fortalecer la competencia en la reducción del impacto ambiental e impulsar la regeneración de los ecosistemas, se debe trabajar en conjunto con toda la cadena de valor donde se generen compromisos reales que se transformen en un vínculo permanente, transversal y sistémico.

“Debemos conectar con universidades, redes de investigación, centros tecnológicos, planificación urbana, dar pie al crecimiento de nuevos modelos de negocio que favorezcan la disminución de residuos en el ecosistema, articulando a todos los actores necesarios  para avanzar en innovación, incorporación de nuevas tecnologías, modernización y digitalización de la cadena de valor que optimice la valorización, buscar y canalizar su financiamiento a través de alianzas público-privadas y potenciar la rendición de cuentas en materias de sostenibilidad por parte del sector construcción”.

Finalmente, Arturo Harlen, encargado de comunicaciones del Instituto Chileno del Acero, ICHA, agregó que ”la visita fue bastante ilustrativa, quedé sorprendido de lo que se está haciendo, con una industria que está avanzando en el camino correcto para establecer la economía circular en Chile y que debe conocerse. La comunidad tiene que conocer lo que se está haciendo”.

Fuente: Instituto de la Construcción

 

CONSTRUCCIÓN INDUSTRIALIZADA EN EL CHILE DEL 2023: Oportunidad en la crisis habitacional 

Por PHD ©Pablo Pulgar R., docente del Departamento de Ciencias de la Construcción de la Universidad Tecnológica Metropolitana y colaborador del CCI.

La necesidad urgente de enfrentar un déficit habitacional que crece agresivamente desde el 2015, llegando hoy a afectar a unas 650.000 familias a nivel nacional, ha generado una respuesta institucionalizada desde el gobierno a través del “Plan de Emergencia habitacional”, política pública que finalmente se ha materializado en los llamados a concurso de “Viviendas industrializadas” en las comunas de Renca y Lo Espejo; sin embargo, dicha emergencia ya ha sido abordada anteriormente por la autoridad y el sector privado conjuntamente.

Una publicación de INVI del año 1996, del autor Luis Bravo Heitmann denominada “Vivienda social industrializada: La experiencia Chilena (1960- 1995)”, relata la historia “truncada” que inicia a fines de los 50 y que fue puesta en pausa entre los años 70 y 90 en nuestro país, el cual dejó hitos relevantes en nuestra historia, como el concepto de “Vivienda industrializada”, las “casas experimentales CORVI” (1962), la creación del “Centro Chileno de productividad” (1964), las “Obras demostrativas” (1965), donde se “demostró” empíricamente la interrelación entre la simplicidad del diseño y el aumento de productividad en la ejecución, las “Operaciones Sitio” (1968), donde se entregaban kits de “prefabricados” para “ensamblaje in situ”, en zonas periféricas y a principios de los años 70, con la planta KPD, donada por la URSS, post terremoto del año 1971, donde se producían soluciones prefabricadas en hormigón armado para 4 pisos sin ascensor, posteriormente en los años 80 y 90 cambia el foco de las políticas públicas y la industrialización pasa a segundo plano.

Sin duda alguna, los llamados hechos por el Minvu marcan el inicio de un proceso de transformación pendiente hace varios años en nuestro país y que pretende replicar los beneficios de la industrialización en la producción de viviendas, que varios países ya han sabido aprovechar (UK, USA, Japón, Singapur y Malasia, entre otros), algunos de estos son:

  • Control de gasto y disminución de los tiempos en obra
  • Reducción de instalaciones provisionales
  • Reducción de mano de obra in situ, tecnificación, mejora de competencias y salarios 
  • Reducción de accidentes de traslado e in situ
  • Incorporación del concepto de economía circular y sostenibilidad 

A pesar de lo “truncado” del proceso, la “industrialización del sector construcción” en nuestro país ha sido trabajado sistemáticamente en instancias como el Programa Estratégico Nacional Construye2025 y el Consejo de Construcción Industrializada (CCI), desde la década pasada, donde se han generado las instancias para lograr los consensos, gestionar el conocimiento, reconocer las buenas prácticas y posibilitar la estandarización y normalización, no es casualidad entonces que las empresas ganadores del concurso Minvu sean socias del CCI. 

Los próximos llamados deberían estar marcados por la sistematización y la precisión en cuanto a las métricas de evaluación para comparar a las empresas participantes de las licitaciones, potenciando la competencia privada en una cancha pareja y transparente para todos, probablemente deberán incorporarse conceptos como “Diseño edificable” y “Constructabilidad” con sus respectivos “principios”, jerarquizados y consensuados localmente, lo que permitirá la creación de indicadores respectivos, la sostenibilidad será un atributo básico, replicando así experiencias positivas como el indicador de “Constructabilidad de Singapur” que aumentó la productividad del sector en un 20% en cuatro años, donde se evalúa la productividad de las propuestas entre diseño y construcción, en la “Hoja de Ruta 2023 – 2025 del PEN C2025” aparece “Constructabilidad” como acción número 1 del eje industrialización, lo que acelerará el proceso de transformación hacia la construcción industrializada tan anhelada por todos, aprovechando la crisis de vivienda actual como una oportunidad.

Innovación en tiempos de crisis fue el foco del encuentro “Tenemos que innovar 2023”

Representantes de empresas socias de todo el país participaron este jueves 12 de enero de la segunda versión del “Tenemos que Innovar”, instancia que contó con la participación de la gerenta general de la CChC, Paula Urenda y el vicepresidente Alfredo Echavarría.

La actividad, organizada por la Gerencia de Sostenibilidad e Innovación de la Cámara Chilena de la Construcción, tuvo como objetivo reunir a empresas y actores relevantes del sector de la construcción para reflexionar sobre el rol de la innovación para mejorar los estándares, y con esto, su impacto en la calidad de vida de las personas.

El vicepresidente de la CChC, Alfredo Echavarría, señaló que “hoy, nuestra industria se encuentra ante una crisis que nos obliga a pensar en nuevas formas de abordar los desafíos que estamos viviendo y los que vendrán. Es por ello que el ‘Tenemos que Innovar’ se ha convertido en un lema para enfrentar la actual situación desde lo colaborativo”.

La jornada comenzó premiando a empresas socias que participaron activamente en las distintas iniciativas que impulsó la CChC el 2022, entre ellas, el Programa de Innovación y Transformación. También dieron a conocer el nuevo programa para este 2023.

Posteriormente, se realizó un panel de conversación moderado por la gerenta general de la CChC, Paula Urenda, y que tuvo como panelistas al vicepresidente Alfredo Echavarría; al presidente de la Fundación Chile, Pablo Zamora y a la economista especializada en transparencia y sostenibilidad, Jeannette von Wolfersdorff, para conversar sobre la importancia de la innovación para enfrentar la crisis que se vive hoy en el rubro de la construcción.

Jeannette Von Wolfersdorff aseguró que la innovación es un resultado, no una opción. “Debiese ser una necesidad para sobrevivir (…) Estamos con múltiples crisis y esas crisis son el momento de la disrupción creativa” señaló.

Por su parte, el presidente de la Fundación Chile, Pablo Zamora, cree que en la industria de la construcción hay diversas oportunidades de progresar. “Está lleno de oportunidades en este sector de innovar. Las compañías nuevas no tienen que ir a mejorar procesos de transacciones, hay que atacar los problemas profundos y ahí se realiza un cambio real. Hay que ser inteligente en identificar los problemas”.

La jornada finalizó con el lanzamiento del Mapa Contech, plataforma impulsada por la Cámara Chilena de la Construcción a través de su programa de innovación abierta “Construir Innovando” y “Construye 2025” de CORFO, que busca visibilizar las soluciones tecnológicas que están transformando el sector.

Para Conrad Von Igel, gerente de Innovación y Sostenibilidad de la CChC, el Mapa Contech es una oportunidad de incorporar nuevos talentos y acelerar el proceso de transformación cultural y adopción de innovaciones. “Los desafíos que el sector de la construcción enfrenta en Chile y el mundo son cada vez más complejos y relevantes, con potencial impacto directo en la viabilidad y legitimidad del negocio, por lo que se requiere enfrentarlos de manera innovadora y, en muchos casos, colaborativamente”.

Esta plataforma pretende llegar a todas aquellas empresas que deseen incorporar nuevas formas de tecnologías, pero también a aquellos inversionistas que quieran conocer las nuevas tendencias de la construcción.

Marcos Brito, gerente de Construye2025, aseguró que por la experiencia internacional de este tipo de proyectos las expectativas son altas. “Luego del éxito de este tipo de iniciativas en otros países y de la primera versión del Mapa Contech en Chile, esperamos que el Mapa se establezca como la plataforma que conecta a grandes empresas con startups, basadas en tecnologías totalmente preparadas para solucionar sus problemas, mejorar su productividad y ayudarles a ser más sustentables”.

Mapa Contech: Soluciones tecnológicas para transformar la construcción

La plataforma, que reúne más de 50 soluciones innovadoras para la construcción, cuenta con la validación de 14 instituciones especializadas en innovación, tecnología y construcción, permitiendo resolver diversas necesidades que actualmente tienen las empresas del rubro.

Seguir el avance de la obra en tiempo real, ser parte de un marketplace de maquinarias, utilizar la Realidad Virtual o la Inteligencia Artificial para el manejo de activos, son solo algunas de las novedades que forman parte del “Mapa Contech 2023”, una iniciativa impulsada por la Cámara Chilena de la Construcción a través de su programa de innovación abierta “Construir Innovando” y  “Construye2025”, programa impulsado por CORFO, que busca dar visibilidad a las soluciones tecnológicas que están transformando el sector.

Con más de 10 mil visitas en su primera edición, esta plataforma intuitiva que agrupa las soluciones en base a las necesidades que hoy tienen las empresas de la construcción, pretende superar la meta anterior disponiendo de un portafolio de herramientas validadas y listas para ser implementadas en las diferentes etapas del proceso constructivo (desarrollo, planificación, construcción, operación y usuario final).

El Mapa Contech pretende llegar a todas aquellas empresas que deseen incorporar nuevas formas de tecnologías, pero también a aquellos inversionistas que quieran conocer las nuevas tendencias de la construcción. Estos proyectos se basan en distintos tipos de tecnologías tales como: Gobierno de datos y analítica, gestión en la nube, digitalización de procesos, nuevos materiales, realidad aumentada, prefabricación y robótica, internet de las Cosas (IoT) y BIM.

Conrad Von Igel, gerente de Innovación y Sostenibilidad de la Cámara Chilena de la Construcción, asegura que el Mapa Contech es una oportunidad de incorporar nuevos talentos y acelerar el proceso de transformación cultural y adopción de innovaciones. “Los desafíos que el sector de la construcción enfrenta en Chile y el mundo son cada vez más complejos y relevantes, con potencial impacto directo en la viabilidad y legitimidad del negocio, por lo que se requiere enfrentarlos de manera innovadora y, en muchos casos, colaborativamente. En este sentido, el trabajo de actores establecidos de la industria con nuevas tecnologías y modelos de negocio, a través de la vinculación con startups y soluciones tecnológicas, es lo que precisamente facilita la plataforma” explica Von Igel.

En tanto, Marcos Brito, gerente de Construye2025, programa impulsado por Corfo y administrado por el Instituto de la Construcción, asegura que por la experiencia internacional de este tipo de proyectos las expectativas son altas. “Luego del éxito de este tipo de iniciativas en otros países y de la primera versión del Mapa Contech en Chile, esperamos que el Mapa se establezca como la plataforma que conecta a grandes empresas con startups, basadas en tecnologías totalmente preparadas para solucionar sus problemas, mejorar su productividad y ayudarles a ser más sustentables”, sostiene.

Los proyectos ganadores fueron seleccionadas por un jurado compuesto por: Brinca, Centro Tecnológico para la Innovación en la Construcción (CTeC), Centro Interdisciplinario para la Productividad y Construcción Sustentable (CIPYCS), Open Beauchef, Socialab, UDD Ventures, Construir Innovando Ventures (CIV), ProChile, CDT (Corporación de Desarrollo Tecnológico) , Instituto 3IE, Transforme Consultores, Bluebox México, Centro de Innovación UC Anacleto Angelini  (CIUC)  y StartUp Chile.

 

Conoce las más de 50 soluciones tecnológicas para la construcción en https://mapacontech.cl/

Construye2025 inicia su tercera etapa con importantes desafíos para la industria

En el último Consejo Directivo de 2022, el equipo de Construye2025 dio cuenta de los avances del año y también de los desafíos que se presentan en un escenario complejo para el sector. 

Como el primer Consejo Directivo presencial después de la pandemia, se realizó la reunión número 44 de los directores de Construye2025, el 2 de diciembre de 2022, como la última actividad oficial de su segundo trienio de implementación, del programa impulsado por Corfo y administrado por el Instituto de la Construcción.

En un escenario complejo para el sector, Pablo Ivelic, presidente de Construye2025, dio la bienvenida a los asistentes, recordándoles que están en calidad de consejeros, por lo que “me gustaría escuchar sus valiosas palabras que serán siempre bienvenidas y desde las instituciones que representan”. 

              

Marcos Brito, gerente del programa, destacó al inicio de su presentación que, desde 2016, cuando se inició la ruta de Construye2025, las discusiones se han ido dando en el Consejo Directivo prácticamente con las mismas instituciones y en muchos casos, con los mismos colaboradores, a quienes les agradeció por su constante participación. 

“Estamos justamente en un momento de inflexión del programa, porque estamos cerrando nuestra segunda etapa de implementación, y en un par de semanas partimos con la tercera etapa. Y se da en una situación compleja, con mucha incertidumbre, con un alza del dólar y, por lo tanto, de los materiales. Hay una serie de factores económicos, sociales y comerciales que han hecho un poco más difícil el mercado de la construcción”, reflexionó Brito.

Sin embargo, en este escenario, “nos dimos cuenta que fue un tipo de prueba, que las soluciones que hemos venido trabajando desde antes, tenían que ver no con prevenir esto, sino que con estar mejor preparados para enfrentar estas situaciones”, precisó.

Por otra parte, el gerente de Construye2025 se refirió al déficit habitacional cada vez más alto. “Hoy está el Plan de Emergencia Habitacional, que quiere hacer frente a esto con bastante intensidad, para poder construir todo lo que se debería haber estado construyendo hasta ahora. En esto, la industrialización ha cobrado un valor muy importante, siendo uno de los conceptos que este programa acuñó, trabajó y hasta el día de hoy sigue desarrollando, como un sistema para mejorar productividad, como un nuevo paradigma en el negocio de la construcción”, manifestó el profesional.

En ese contexto, Corfo aprobó el presupuesto trianual para el siguiente periodo de Construye2025, luego de presentar el plan de acción y la nueva hoja de ruta. “Es una de las aventuras de este programa y su hoja de ruta, que ha ido traspasando distintas administraciones, que han creído en nosotros y en este trabajo, por lo que podemos continuar así hasta el 2025. En este mismo esfuerzo, nos hemos reunido con varias instituciones para también pedirles apoyo en el financiamiento del programa, dado que es una exigencia de Corfo, que tengamos que cubrir por lo menos un 30% de nuestro presupuesto con aportes de terceros. Falta formalizar los convenios, pero todo indica que vamos a tener los recursos suficientes”, contó Brito.

Pablo Ivelic, por su parte, destacó las temáticas, los procesos y las conclusiones a las que ha llegado Construye2025 durante las primeras dos etapas, “y lo hace con un rol súper diversificado. En Chile no hay consideración sobre esto, así que quería felicitarlos, destacando la dedicación y el profesionalismo del equipo”.

Junto con ello, Ivelic evidenció que los desafíos planteados en 2016, hoy siguen igual de vigentes, “aunque orientados a que la industria de la construcción sea más productiva y sustentable”. 

“Cuando partes y concluyes el 2025 hablando de la industrialización, la industria de nuestro país no tenía internalizada esa función, por lo que fue una evangelización lo que se hizo. Nos damos cuenta hoy de ese camino recorrido y cuánto ha servido, porque el desafío es brutal, la meta de 260.000 casas en cuatro años nunca antes se ha hecho, y por eso se está adaptando a la industrialización y actualmente estamos mucho mejor preparados para estos temas que cuando se instauraron hace seis años”, reflexionó el directivo, quien señaló que una situación similar ocurre con la sustentabilidad, “porque tiene que ver con compromisos éticos, hoy hay una exigencia social más grande, pero cada vez más va a ser una obligación y queremos que Construye2025 sea la voz que impulse los cambios”.

Los cambios que se vienen

“Los temas que planteamos desde 2015 se fueron convirtiendo en ideas fuerza y seguimos avanzando hacia una etapa de expansión, en la cual todas estas ideas las hicimos más masivas, incorporamos más actores y medios de difusión. Esto le da una cierta credibilidad al programa y como se indica en la hoja de ruta, es producto de un gran grupo de personas que ha ido trabajando en ello”, cree Marcos Brito.

Pese a ello, mirando hacia la tercera etapa que comienza, también anunció que se realizarán cambios a los comités gestores, que forman parte de la gobernanza definida por Corfo. “Vamos a replantearnos estos comités gestores, para darles nuevas fuerzas, y rearticulando algunos de ellos, como el caso del de Capacitación, Certificación y Registro, quizás con nuevas instituciones, porque se vienen nuevos desafíos”, confirmó.

Esto obedece a que en esta tercera etapa de consolidación del programa es necesario alcanzar a un mayor número de empresas, sobre todo pymes. 

El ejecutivo destacó el apoyo de Corfo, al comentar que esta segunda etapa termina con más del 99%% de ejecución de su presupuesto trianual. Además, indicó que desde el inicio del programa, se ha movilizado más de $38.000MM desde Corfo para el sector. “Este financiamiento lo ha apalancado este programa, en todos estos años, siendo que antes de Construye2025, Corfo prácticamente no invertía en construcción”, expuso. 

A su juicio, de esta forma, “se visibilizó a Corfo como una institución que podía ayudar”. Esto conlleva ciertos aprendizajes y logros: “en economía circular nos faltaba infraestructura, sin eso no podíamos funcionar, la CChC tuvo cambios súper importantes. Edifica nos dejó sorprendidos a todos, puso en el centro de la temática la reutilización y la sustentabilidad. La industria se está transformando, tenemos que reconocer nuestras fortalezas, pero también nuestras dificultades y trabajar a diario en eso, para ver cómo podemos, a través de nuestra posición, mejorarlas”, sintetiza Brito.

Y agrega que son alrededor de 300 las instituciones con las que el programa se rodea en el día a día, “pero necesitamos avanzar con aún más instituciones hacia el mismo camino”, dijo.

Asimismo, el ejecutivo destaca el trabajo que se ha hecho en comunicaciones y los desafíos que se vienen. “Estamos enfrentando una nueva etapa, que tiene ahora cinco ejes: capital humano, que antiguamente era una iniciativa del programa e intentamos sacarlo adelante y en aquel momento no pudimos, pero ahora vamos a volver con nuevas fuerzas y con mayor foco para poder hacer cosas que movilicen”, precisó.

Por el lado de la construcción industrializada, donde el Consejo de Construcción Industrializada (CCI) es el bastión, “ya estamos trabajando en estas iniciativas y ojalá logremos construir el primer Código de Diseño de Constructibilidad”, reflexionó. En tanto, en sustentabilidad, “tenemos todo el material, ahora debemos lograr que se sumen más empresas. La innovación es un tema que no se habla mucho, pero en este concepto es donde está el secreto tal vez para poder cambiar el sector, y vamos a trabajar cosas todavía más puntuales que antes. En transformación digital seguiremos apoyando al Planbim, y tenemos en este mismo eje estratégico otros proyectos, como la Metabase, bastante ambiciosos y que también fueron parte de los aprendizajes del programa, pero ahora tenemos toda la fe de que vamos a llegar con un planteamiento al MOP”, analizó. 

Otro de los desafío relevantes para el nuevo trienio es el de la equidad de género en el sector, donde la Hoja de Ruta 2022-2025 de Construye2025 buscará también cerrar brechas para la construcción, “que es más reconocido por ser el sector de los hombres, pero eso está cambiando. Hay mucho que avanzar en la inclusión femenina”, concluyó Marcos Brito.

 

Ya está disponible curso que busca generar cambios culturales desde las bases en la gestión de residuos

Con más de 100 constructoras integradas al curso online “Gestión de Residuos en Obras de la Construcción”, IUS Latam y Reviste buscan cambiar la cultura del sector en torno a los residuos, a través de capacitaciones digitales que comenzarán a implementarse en enero de 2023. 

 Un innovador curso digital es el que lanzaron hace unos meses la agencia de innovación IUS Latam y Reviste, con el patrocinio de Construye2025 y el Instituto de la Construcción. Se trata del programa con código SENCE “Gestión de Residuos en Obras de la Construcción”, que está permitiendo a las empresas capacitar a sus equipos de obra para avanzar hacia la economía circular desde la gestión de los residuos de la construcción y la demolición (RCD). Con ello ahorrarán en recursos y, disminuirán el impacto ambiental de las obras, mejorando su productividad.

“Existe una brecha enorme en la cultura de gestión de residuos en el sector construcción y la pregunta que nos hacíamos era por dónde comenzar. La alta dirección ya ha iniciado conversaciones en torno a la economía circular y la red de proveedores está viendo una oportunidad e iniciando transformaciones. Pero a nivel de jornales y obreros, detectamos que hay muy pocos espacios de capacitación y formación de habilidades”, cuenta Joaquín Cuevas, CEO y cofundador de Reviste. 

Si bien hay programas presenciales, para Pedro Mancilla de IUS Latam, “ese es el punto más crítico, ya que el tiempo es clave en la construcción. De ahí surgió la solución de desarrollar un sistema de capacitación digital que se hiciera cargo de una fuerza laboral cada vez más tecnologizada y con disposición a aprender sobre la gestión de residuos”.

De esta manera, esta es una iniciativa que en pocos espacios de tiempo, basándose en pequeñas cápsulas de aprendizaje y en la gamificación, permite mover cambios culturales desde las bases, “y un punto relevante es que gracias a las franquicias SENCE es costo cero para las empresas”, añade Mancilla.

La importancia de este tipo de capacitaciones “está dada por una nueva serie de prácticas en una industria que históricamente ha estado orientada a una producción lineal y donde al final de su ciclo constructivo se observan toneladas de residuos que dan cuenta de ineficiencias en la toma de decisión a nivel de diseño y arquitectura, en los cálculos de compras de materiales y por consecuencia en impactos en productividad y costos”, cree Pedro Mancilla. 

“Capacitar al sector de la construcción y principalmente en áreas operativas, de primera línea frente a los residuos es de suma importancia. Es el paso que faltaba para llevar a la acción la gestión de residuos y ayudar a las empresas al cambio cultural hacia una economía circular. Si no contamos con una masa laboral capacitada para enfrentar los nuevos conocimientos y prácticas que se están desarrollando en la industria, no podremos generar cambios reales al interior de la obra”, advierte Cuevas.

Relación con perfiles de ChileValora

Como cuentan los creadores del curso digital, estas capacitaciones están desarrolladas por un equipo de expertos en la gestión de los residuos de construcción y demolición (RCD). Personas con años de experiencia en obra, que trabajan de cerca con jornales, carpinteros y supervisores, creando protocolos, metodologías de segregación y aplicando planes de gestión de residuos en obra.

“Es por esto que este curso ha sido pensado desde esa experiencia y desde esas observaciones levantadas desde la misma obra, entendiendo las necesidades particulares que surgen en cada puesto de trabajo, donde además de poner a disposición un conocimiento, propone un enfoque organizacional, considerando la gestión de los residuos, de manera jerárquica”, puntualiza Cuevas. 

Y Mancilla añade que “esta misma lógica es con la cual se desarrollan los perfiles ambientales para la construcción en ChileValora. Una lógica de entregar herramientas a las personas para que se desarrollen dentro de sus puestos de trabajo, utilizando la experiencia en obra para entender la forma más eficiente de funcionamiento dentro un proyecto en construcción”. Además, los perfiles se desarrollan bajo una metodología y una estructura particular, para entregar los conocimientos y esta es la misma que se considera en el desarrollo del curso, siempre de menos a más.

Por otra parte, para los organizadores es importante entender que estos conocimientos son considerados un cambio cultural dentro de la obra, y que la forma en que se comunican las diversas acciones, con enfoque en la gestión de residuos, tanto en los perfiles de ChileValora como en el curso, es una forma sencilla, cercana y amable al entendimiento de las personas que lo estudian, con la idea de que estos conocimientos sean rápidamente entendidos, pero que también provoquen cambios positivos en los hábitos en el funcionamiento logístico de la empresa.

Avances y desafíos

A la fecha, la iniciativa lleva dos años de desarrollo y a partir de 2022, han logrado diseñar, programar y tener operativo el curso de gestión de residuos en una plataforma digital a la cual pueden acceder los usuarios y realizar su proceso de aprendizaje. “Comenzamos en 2022 con las primeras experiencias piloto y lanzamos en “Edifica” la posibilidad de que las empresas interesadas se sumaran al desafío de capacitar a sus dotaciones, invitación a la cual se han integrado más de 100 constructoras y con quienes hemos estado trabajando en la preparación de las capacitaciones digitales para enero de 2023”, afirma Joaquín Cuevas.

De estas conversaciones, “las mismas empresas revelaron un alto porcentaje de trabajadores migrantes, especialmente desde Haití, los que nos llevó a desarrollar una versión del curso en lenguaje creole, ampliando el alcance del proceso de capacitación en las obras y generando un proceso mucho más inclusivo para todos los trabajadores y trabajadoras”, cuenta Pedro Mancilla.

Entre los desafíos que se vienen, están seguir avanzando en la introducción de la cultura digital para abrir espacios de desarrollo en las obras. “En ese sentido, el valor de la plataforma que hemos desarrollado es que admite gran diversidad de contenidos y con ello la posibilidad de que la industria de la construcción acceda a nuevos aprendizajes. También representa un salto en la forma de capacitar, sentando las bases de un nuevo estándar de capacitación que incluye la interacción digital y con ello, la capacidad de levantar datos en tiempo real, monitorear el proceso de capacitación lo que permite tomar mejores decisiones en ese ámbito”, precisan los profesionales. 

A corto plazo, ambos quieren ir sintonizando con la cultura de cada empresa, las necesidades de la industria y convertir al formato digital de aprendizaje, ampliando la oferta de capacitación para lograr introducir la economía circular en la industria.

Otro de los desafíos tiene que ver con el alcance de este proyecto. “Queremos lograr un curso de gran calidad en sus conocimientos y en la forma de comunicar estos, para que estos provoquen emoción en quienes lo estudian, que sea la nueva forma de generar cambios conductuales en las personas. De esta manera, poder traccionar y acelerar un cambio cultural dentro de las obras, que consideramos urgente”, comenta Mancilla, mientras que Cuevas cree que “debemos ser capaces de sembrar en tierra fértil la semilla de la sostenibilidad para que esta crezca fuerte, sana y se multiplique por todas las obras y hogares del país”.

Los hitos que marcaron a la construcción durante 2022

En el Consejo Directivo de diciembre, el equipo de Construye2025 dio cuenta de los avances propios y otros de la industria, que responden al trabajo realizado por los profesionales del sector, impulsados hace seis años.

El Consejo Directivo de Construye2025, que reúne a representantes de instituciones del sector público, privado y la academia, tuvo su reunión número 44 en diciembre de 2022. En la instancia, los consejeros asistentes pudieron atender la cuenta entregada por el equipo del programa impulsado por Corfo y administrado por el Instituto de la Construcción.

Las siguientes son las iniciativas más destacadas:

Lanzamiento Hoja de Ruta 2022-2025

En línea con las nuevas tendencias y las necesidades más urgentes del país, el programa estratégico de Corfo presentó en junio de 2022, la actualización del documento que incorpora a diversos actores que buscan acelerar la transformación de la construcción. Este está centrado en cinco ejes: industrialización, sustentabilidad, transformación digital, capital humano e innovación.

Para aumentar la productividad, articulando a diversos actores y considerando también a los usuarios de las edificaciones, Construye2025 se ha guiado por una serie de lineamientos que apuntan a transformar al sector construcción.

Desde su creación en 2016, año en que se fijaron los objetivos y focos de acción para un período de 10 años, el programa impulsado por Corfo cuenta con una hoja de ruta clara y certera. Este nuevo documento actualizado tras un trabajo colaborativo, incorporó diversas visiones de diferentes actores de la industria sobre brechas y oportunidades que se presentan en la construcción.

Proyecto de Norma de Construcción Industrializada (prNCh3744)

“Hemos tenido el apoyo fundamental del INN. Ya estamos llegando a un buen puerto y desde el Consejo de Construcción Industrializada (CCI), nos están apurando en sacar rápido la norma, para que podamos avanzar en todas las cosas que vienen después”, precisa Marcos Brito, gerente de Construye2025.

Relaciones contractuales

Como comenta Marcos Brito, la Cámara Chilena de la Construcción contaba con un Grupo de Relaciones Contractuales, en el cual Construye2025 ha estado participando a través de su Comité Gestor de Modernización de Relaciones Contractuales, y finalmente, se le solicitó al Instituto de la Construcción crear un Consejo Ampliado de Marcos Contractuales. “Fue una tremenda noticia para nosotros, porque vamos a poder concretar lo que tenemos cubierto ya hace cinco años por nuestro Comité. También a través de la CChC pueden llevarlo a algo más tangible, a acciones, que puedan permitir mejorar los marcos contractuales de la construcción. Es sabido que esta es una de las brechas importantes que causa problemas en la industria”, dice.

Desafío NetZero 2030

En noviembre se lanzó el Desafío NetZero 2030, que busca que las universidades, institutos profesionales y centros de formación técnica de Chile, se hagan parte de lo que se avecina en cuanto a reglas y preceptos profesionales para la construcción, tales como como economía circular, industrialización, net zero energía y net zero emisiones, de tal manera que trabajen desde equipos de estudiantes para que diseñen viviendas sociales, pero con los estándares que van a ser obligatorios de aquí al 2030. “Este es un ejercicio para que todos estos estudiantes, que van a ser los futuros profesionales, se enfrenten a las nuevas reglas que les van a tocar cuando salgan. Además, este concurso tiene dos etapas, donde se presentarán anteproyectos en la primera y en la segunda, los cinco equipos finalistas van a tener que aliarse con empresas profesionales de construcción u oficinas de arquitectos, para elaborar sus proyectos. Queremos construir por lo menos uno de ellos para así luego avanzar en otras etapas de pilotaje para estos nuevos diseños”, estima Brito.

Fondos Viraliza de Corfo

El programa se adjudicó dos fondos de $48.500.000 cada uno, para dar un foco en las regiones de la Araucanía y Biobío. “Ahí hemos estado trabajando muy de la mano con el Colegio de Arquitectos. Finalmente, vamos a dividir el trabajo en dos colegios: Colegio de Arquitectos de Chile, para apoyar las acciones en La Araucanía y el Colegio de Arquitectos de Concepción, que nos va a ayudar en Biobío”, precisa Marcos Brito.

Mapa CONTECH

Iniciativa hecha en conjunto con la Cámara Chilena de la Construcción, que tras haber cerrado un exitoso primer año de despliegue, va a ser lanzada en su segunda versión, el 12 de enero de 2023, en el marco del encuentro Anual de Innovación de la CChC.

Centros tecnológicos

Tras salir de la pandemia pudieron edificar sus estructuras. Asimismo, el CTeC se adjudicó un programa tecnológico Corfo, con un presupuesto bastante significativo, para poder desarrollar un paquete de proyectos tecnológicos en el contexto de un gran proyecto denominado Construye Cero. Por su parte, CIPYCS inauguró el edificio IMA lab, donde ya se encuentran empresas privadas testeando sus soluciones constructivas.

Consejo de Construcción Industrializada

El CCI sigue creciendo, llegando a cerca de 130 participantes. “Lo más importante es que tiene grupos de trabajo constantes, cada semana llegan todas las personas, se trabaja y se avanza. Así, es como el CCI ha logrado grandes avances, hoy estamos trabajando con Déficit Cero en poder hacer una iniciativa para el desarrollo de viviendas, estamos buscando también la internacionalización del CCI, trabajando con una asociación brasilera que nos invitó hace un par de meses a Brasil y también tratando de llegar a las entidades de Estados Unidos u otras instituciones afines que nos puedan acoger”, cuenta Brito. 

Planbim

“Continúa en operación y con buenos resultados. Prácticamente, más de 80% de las universidades han incorporado BIM en programas de estudio asociados a la construcción”, detalla el gerente del programa.

Edifica 2022

“En el último período, cada vez se ha ido aferrando de alguna forma, los distintos métodos de trabajo colaborativo entre el sector público y privado en la Academia. Por primera vez en una feria de Edifica, se visibilizan los impactos de la construcción, y también tuvieron presencia empresas que consideran la economía circular, que es interesante porque diversifica la oferta de materiales a partir del aprovechamiento de estos recursos”, sostiene Alejandra Tapia, coordinadora de Sustentabilidad de Construye2025. 

Reto de Economía Circular en Construcción

“Hay dos grandes esfuerzos por impulsar la economía circular y construcción, por este reto pasaron de ocho a siete finalistas, con varios materiales muy novedosos. Nunca pensamos que podía ser una solución la reutilización de residuos, y ya tenemos otro centro, uno en la región de Valparaíso y otro en Tiltil”, afirma Tapia.

Marco Regulatorio Integrado

“Buscamos seguir generando insumos orientados a la industria. Lanzamos hace poco una propuesta de Marco Regulatorio Integrado para la Valorización de los Residuos de la construcción y demolición, la organización y la condición. Vimos que necesitábamos levantar esta información como una orientación al sector público para aprender a mejorar la certeza, producto de este concepto de marco regulatorio integrado, que se refiere a un conjunto de normas de distinta relevancia, y que en el fondo, su objetivo es que sea ordenado y dé certeza a los distintos actores y sobre todo a las empresas, para que generen inversiones”, cuenta la arquitecta.

Valparaíso

Alejandra Tapia destaca el trabajo que se ha realizado en la región de Valparaíso, “que realmente se ha convertido en una instancia muy colaborativa, hay una mesa pública, que es donde yo participo, se han ido involucrando las municipalidades, todos en el fondo buscamos solución. Estamos participando también en Acuerdo de Producción Limpia Hacia un desarrollo sostenible de la industria de las ventanas y cerramientos de vidrio, liderado por Achival, y otro, un acuerdo interregional, liderado por la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), en las regiones de Antofagasta, Magallanes y Los Lagos.

Seminario Internacional “Arquitectura, Urbes y Territorios para una Economía Circular”

Organizado por la Universidad del Bío-Bío, “fue interesante porque esta universidad es parte de una red internacional sobre distintos temas de sustentabilidad, donde se firmó una carta de compromiso para avanzar en la economía circular”, cuenta Tapia.

Congreso Construyendo Chile

A fines de agosto, representantes del Gobierno, centros de investigación y de las principales empresas del sector construcción reflexionaron sobre los avances y desafíos que enfrenta nuestro país en el congreso “Construyendo Chile”. La industria de la construcción tiene por delante dos grandes desafíos. El primero es la productividad que, desde hace más de dos décadas, está estancada; el segundo, la sustentabilidad, cada día más urgente en medio de la crisis climática global. Estos retos fueron abordados en profundidad por speakers internacionales y nacionales, entre ellos, el ministro de Obras Públicas, Juan Carlos García; el ministro de Vivienda y Urbanismo, Carlos Montes y el vicepresidente ejecutivo de Corfo, José Miguel Benavente.

El 31 de agosto se llevó a cabo la 3° Ronda de Negocios Conectando Construcción, también organizada por el programa.

Los videos del Congreso y la Ronda de Negocio están disponibles en nuestro canal de YouTube.

Construye2025 difundió propuesta para un marco regulatorio integrado en residuos de la construcción

En un seminario online, el programa impulsado por Corfo presentó el estudio realizado por la consultora Moraga y Cía. Abogados, que incentiva el fomento y da orientaciones al sector público para promover la valorización de los RCD. La actividad contó con la participación de una invitada de España, que dio a conocer la experiencia del municipio de Miajadas en gestión de residuos.

En el contexto de la Hoja de Ruta RCD Economía Circular en Construcción 2035 y la Estrategia Economía Circular en Construcción 2025, Construye2025 organizó el webinar “De residuos a nuevos materiales – PROPUESTA PARA UN MARCO REGULATORIO INTEGRADO Y FOMENTO A LA VALORIZACIÓN DE LOS RESIDUOS DE LA CONSTRUCCIÓN Y DEMOLICIÓN, RCD”, que contó con la participación de la invitada internacional Sara Flores, del Ayuntamiento de Miajadas, España, y de Jorge Canals, socio líder del área de medio ambiente, energía y recursos naturales de Moraga y Cía. Abogados. 

En tanto, Alejandra Tapia, coordinadora de Sustentabilidad de Construye2025 y moderadora del encuentro, agradeció “a las asociaciones municipales, a las distintas municipalidades, universidades, empresas, a los representantes de los ministerios, a la Cámara Chilena de la Construcción y, en especial, a la Comisión Regional de Construcción Sustentable de la región de Valparaíso, a todos quienes colaboraron con su experiencia en este estudio, a través de su participación en mesas de trabajo, entrevistas y talleres”.

La arquitecta advirtió la alta demanda de viviendas y recursos, por ser un país en desarrollo, así como los efectos que ha dejado la pandemia en el sector construcción, lo que se ha traducido en alzas de materiales y empresas en crisis financieras. Entonces, “claramente tenemos una problemática de cómo hacer un uso más eficiente de los recursos. En ese sentido, somos un país que tiene una baja productividad, generamos el doble de residuos que Europa, que España particularmente, del orden de 0,26-0,30 m3/m2, frente a España y el resto de Europa, que tiene un estándar de alrededor de 0,14 m3/m2, por lo que nos enfrentamos a un alto nivel de desperdicio de materiales, que afecta en nuestra productividad y, por tanto, al uso eficiente de los recursos”, explicó Tapia.

También, “tenemos un marco regulatorio que es complejo, con muchos vacíos, aún no existe una definición jurídica de qué son los residuos de la construcción, tenemos un reglamento en desarrollo y se necesita esta coordinación pública y también necesitamos liderazgo en distintas escalas, desde las regiones, las comunas, porque ahí es donde cada uno de nosotros tiene un rol fundamental para poder avanzar”, sostuvo.

Si bien existe una problemática, también hay buenas noticias: “hoy somos el primer sector que tiene una hoja de ruta y una estrategia en economía circular, con un gran compromiso de los ministerios de Medio Ambiente, Obras Públicas, Vivienda y Urbanismo y también Corfo, en la implementación de la hoja de ruta. Luego, vino la estrategia liderada por la Cámara Chilena de la Construcción desde el sector privado, junto al Instituto de la Construcción y acompañados también por nuestro programa”, dijo la profesional. 

A ello se suman varios grupos de trabajo funcionando desde varias empresas y el fomento que ha venido desde Corfo, a través de concursos específicos para la economía circular en construcción, que implican financiamiento y acompañamiento para que las empresas generen productos y servicios.

En ese sentido, “queremos promover la economía circular a un nivel institucional, una instancia superior, a largo plazo”, contó Alejandra Tapia.

Contexto internacional 

En su exposición inicial, Jorge Canals hizo una introducción explicando el rol que juega el área de la construcción para el país, su aporte al PIB y el número de empleos que genera. Luego explicó que Chile genera 6,8 millones de toneladas de residuos anuales, 70% de ellos inertes y que es el país de la OCDE con menor nivel de productividad respecto del uso de éstos, utilizando no más del 6%. 

Para el 2023, según un documento del Ministerio de Medio Ambiente, se estiman 7.455.000 toneladas de RCD por construcción de viviendas, sin considerar la construcción de edificios públicos, infraestructura, demoliciones o escombros provocados por desastres naturales. De las 16 regiones de nuestro país, 9 no cuentan con lugares para la disposición de RCD y solo en la Región Metropolitana hay 73 vertederos ilegales de residuos sólidos.

“Falta una institucionalidad, regional, local o nacional que se encargue de la gestión de los residuos sólidos, incluyendo los residuos de la construcción y demolición,  en cada una de sus etapas”, señaló Canals comparando el caso de las comunidades autónomas de España con casos exitosos. “No se partiría de cero”, afirmó el abogado, destacando los avances que han significado la Estrategia Nacional de Construcción Sustentable (2013); la Hoja de Ruta RCD y Economía Circular en Construcción (2035); Hoja de Ruta para un Chile Circular (2040) y sistemas de certificación sustentables. Añadió que la tendencia global apunta hacia la aplicación de economía circular en las distintas categorías de residuos, sumados a la incorporación de compromisos climáticos y de medidas fiscales que la incentivan.

Canals explicó el caso de la Unión Europea y cómo ésta gestiona el reciclado de RCD, luego demostró cómo un marco normativo adecuado permite que todos los actores involucrados establezcan planes de gestión de residuos.

El caso español

Luego fue el turno de Sara Flores, encargada de Medio Ambiente de la Municipalidad de Miajadas, a cargo de la gestión de los residuos municipales y los residuos de la construcción y demolición. La profesional presentó una ponencia basada en la experiencia del Ayuntamiento tras entrar en marcha la Ordenanza Municipal Reguladora de los residuos hace varios años. Bajo el paraguas de la directiva de la UE existe un consenso sobre la necesidad de disponer de una normativa autonómica para Extremadura y basándose en la ley de residuos y suelos, crean un Plan Marco, incorporando la jerarquía en la gestión de los residuos, el fortalecimiento de las políticas de prevención, la incorporación de objetivos comunitarios y de sanciones por el abandono de residuos. 

Asimismo, Miajadas incluyó en su plan la recogida separada de los distintos materiales generados por las obras, garantizando la recogida selectiva de los residuos procedentes de RCD y el fomento del uso de materiales naturales excavados en la construcción de obras de tierra, en la restauración de espacios degradados y en obras de relleno, así como el fomento del uso de materiales procedentes de RCD.

En la presentación, Flores mostró las principales diferencias entre la Constitución española y lo que señala el Estatuto de Autonomía de Extremadura en referencia a la gestión de residuos y lo que le compete a la administración autonómica y los ayuntamientos en la materia.

Tras esa diferenciación, la especialista explicó la tipología de residuos y su clasificación, siendo los primeros de construcción, demolición y excavación. Brevemente, se refirió también al procedimiento administrativo que se utiliza en el municipio para gestionar los residuos, las exenciones y sanciones que se aplican de no acogerse. 

En un aspecto especialmente interesante de su presentación, la miajadeña comentó las formas de fomentar la prevención por parte de las administraciones públicas, junto con mostrar imágenes de plantas de transferencia y tratamiento. Concretamente en Miajadas, una empresa privada creó una planta de tratamiento de RCD, la que produce áridos reciclados que se utilizan para construcciones -en cuanto a su aplicación se mostraron imágenes de un estacionamiento y de un camino-.

Propuesta para un marco regulatorio integrado

En su segunda exposición, Jorge Canals presentó la propuesta de Marco regulatorio integrado (MRI) que fomente la valorización de los RCD. Los principios de este MRI incluyen la transparencia y trazabilidad; el principio de quién contamina, paga; la jerarquía en el manejo de residuos; control de residuos peligrosos; entre otros. Como mínimo establece que un MRI debe contener también una definición de tipología de residuos; de los actores, sus requisitos y atribuciones, gobernanza, definición de materiales de segregación y de valorización obligatorias (tierra, hormigón, cerámicas, metales); un régimen de fiscalización y sanción; entre otros.

Para finalizar, detalló cómo sería una Ley General de Residuos o una Ley Marco de Economía Circular para la Construcción.

El público presente en el webinar fue muy participativo e hizo llegar muchas preguntas a la moderadora. A Sara Flores le consultaron por la implementación de la Ordenanza en Miajadas. Comentó que ésta se demoró desde su idea a puesta en marcha por la falta de recursos y porque no estaba la planta. “También porque todo lo nuevo en materia de residuos, es algo que le toma tiempo de acostumbrarse al ciudadano. Requirió un proceso de concienciación bastante lento. No se puede ordenar una implementación en base a una ordenanza y hacerla cumplir de un día para otro sin que ese proceso de concienciación se haya hecho previamente, de información y aprendizaje”, concluyó Flores.

Al cierre del webinar se hizo hincapié en la necesidad de una política de infraestructura nacional, de fomentar la inversión, facilitar terrenos, dar subsidios y considerar que las alianzas público-privada son de gran importancia.

Nuevo trienio: La consolidación de los cambios impulsados desde 2015

Con una nueva hoja de ruta como guía, Construye2025 buscará en este nuevo y último trienio consolidar el trabajo realizado durante los últimos seis años a través de 13 iniciativas. Asimismo, deberá buscar el compromiso privado para un nuevo modelo de financiamiento. 

Construye2025 presentó en junio de 2022 su hoja de ruta 2.0, a la luz de los desafíos actuales para poder tener iniciativas y acciones que se correspondan al escenario actual. De esta manera, ésta regirá los próximos tres años, que marcan el cambio de trienio del programa impulsado por Corfo y administrado por el Instituto de la Construcción.

La primera hoja de ruta de Construye2025 fue desarrollada en 2015 e identificó brechas del sector que el programa ha venido trabajando desde entonces. En paralelo, el sector ha venido incorporando las temáticas planteadas en distintas instancias, lo que ha cambiado las condiciones de base para plantear los cambios necesarios hacia el año 2025. Asimismo, nuevos trabajos de diagnóstico sectorial, impulsados principalmente por la Comisión Nacional de Productividad (2020), aportaron antecedentes para el ajuste de las iniciativas.

Para consolidar la nueva hoja de ruta se realizaron diversas actividades con líderes de iniciativas, miembros de la gobernanza, presidente y los dos Past President (Vicente Domínguez y Alejandro Gutiérrez), para poder recoger los aprendizajes sobre el programa y la proyección de futuros temas a abordar en la hoja de ruta.

Alejandro Gutiérrez y Vicente Domínguez.

Para el desarrollo de la nueva versión de hoja de ruta, se ejecutó una metodología participativa con la gobernanza del programa. Primero se trabajó en torno al propósito, luego se priorizaron temáticas sectoriales, se propusieron iniciativas y colaboradores relevantes para la ejecución de acciones para el cierre de brechas.

Con el trabajo realizado en los talleres, se creó una estructura de ejes que agrupan temáticamente diversas iniciativas para abordar brechas de la industria de la construcción, a la que le van correspondiendo acciones. En sesiones realizadas en conjunto con el equipo ejecutivo de Construye2025 se realizó el trabajo de revisión y validación de iniciativas junto a las acciones, para posteriormente conformar las fichas técnicas de cada iniciativa, las cuales entregan mayor información del trabajo a realizar. Se propuso una estructura base de trabajo de temas para el período 2022 – 2025.

La hoja cuenta con 3 ejes estratégicos acorde a temas específicos como: industrialización, sustentabilidad y transformación digital y 2 ejes transversales de capital humano e innovación.

Último trienio

“La necesidad de transformar la industria de la construcción desde la productividad y la sostenibilidad ambiental es un trabajo que no se agota, puesto que los cambios radican en procesos de largo aliento”, explica Pablo Ivelic, presidente de Construye2025. Por lo mismo, “este trienio es de consolidación. Es tiempo de fortalecer y apoyar las iniciativas surgidas bajo el alero del Construye2025, de mantener y enriquecer la articulación de actores de nuestra industria, y de mantener posicionados los objetivos de productividad y sostenibilidad como necesidades urgentes”, señala.

Por su parte, Fernando Hentzschel, jefe de Capacidades Tecnológicas de Corfo, cree que “el paso a la tercera etapa del programa, sin duda, es una buena noticia y evidencia que sus avances son bien valorados. A lo largo de su implementación, Construye2025 se ha consolidado como un referente en el sector y se ha logrado posicionar en temas relevantes a nivel país, promoviendo que estos sean incorporados en el quehacer de distintas instituciones. Asimismo, durante su funcionamiento se han consolidado iniciativas claves que eran parte de su Hoja de Ruta 1.0 y que han permitido generar un ecosistema y condiciones habilitantes para avanzar en la transformación productiva del sector”.

Como informa el ejecutivo, “desde Corfo estamos desplegando múltiples iniciativas que buscan avanzar hacia un nuevo modelo de desarrollo más sustentable y que fortalezca una transición socioecológica justa y un desarrollo territorial equilibrado. Creemos que, para lograr una transformación productiva del sector construcción, se debe avanzar en ámbitos claves como la industrialización, sustentabilidad y transformación Digital, todos los cuales recoge Construye2025 en su hoja de ruta 2.0, de cara a esta nueva etapa, que busca la consolidación del programa”, concluye.

Para Ricardo Fernández, presidente del Instituto de la Construcción, esta nueva etapa será distinta: “Ya logramos introducir en la industria los conocimientos necesarios, gracias a estudios y diagnósticos, sabemos adonde ir y ahora debemos pasar a la acción. Tenemos un proyecto muy importante donde Construye2025 y el Instituto tienen sinergia en los planes de trabajo, como por ejemplo, la modernización de las relaciones contractuales en pos de la productividad; la implementación de la economía circular a través de distintos instrumentos en el mundo público y privado; proyectos de innovación como el Net Zero donde avanzamos a una construcción cero emisiones; entre muchos otros”.

Fernández cree que este “es un camino posible y trabajando colaborativamente estoy seguro de que tendremos éxito para lograr que la industria cambie su enfoque y vea los beneficios de trabajar con productividad, sostenibilidad e innovación”.

Ivelic también reflexiona sobre los desafíos de este período que surgen a partir de la hoja de ruta 2022-2025, los que, a su juicio, son variados, pero “me atrevo a relevar el desafío de adoptar un modelo de economía circular en el sector. Somos un rubro que carga con una responsabilidad muy grande en la generación de residuos y emisión de gases efecto invernadero, y la necesidad de cambio es urgente”, destaca.

En tanto, Fernández ve como un gran desafío que “hacia el futuro todas las iniciativas que se han desarrollado, perduren más allá del tercer trienio, de manera que logremos un cambio en la dinámica del sector y que se mantenga en el tiempo”.

Para ello, es clave “compartir toda la información y experiencia adquirida en estos años”, a juicio del presidente del IC, “es una tarea que debemos realizar de manera colaborativa para contribuir a todos quienes participan de la industria de la construcción en nuestro país”.

Desde Corfo, la implementación de las 13 iniciativas de la nueva hoja de ruta es ya un desafío, puesto que implica “movilizar a los actores y recursos para avanzar en temas como el desarrollo y promoción de proveedores de industrialización, implementar la hoja de ruta de economía circular del sector, macro-gestión basada en data, integración laboral femenina en la industria, el Desafío NetZero 2030, entre otras”.

En este sentido, “cobra especial relevancia la gobernanza del programa, toda vez que este es un espacio de articulación que vincula a los distintos actores e intereses en torno a las iniciativas estratégicas”, de acuerdo con Fernando Hentzschel.

Y de ello se desprende un segundo gran desafío, “que es el fortalecimiento de esta gobernanza en todos sus niveles, lo cual requiere evaluar su funcionamiento y composición, focalizar esfuerzos en mantener el compromiso de los actores y que estos sean protagonistas en el avance de las iniciativas estratégicas”, precisa el profesional de Corfo.

A ello se agrega como desafío la sostenibilidad del programa: “este es el último período de tres años en que Corfo entrega financiamiento bajo este mecanismo, por lo cual se debe contar con una propuesta de valor que permita mantener el espacio de articulación y coordinación que representa Construye2025 a través de otro modelo de financiamiento, que tenga un compromiso del sector privado”, adelanta Fernando Hentzschel.

Entidad gestora

A principios de diciembre de este 2022, Corfo confirmó al Instituto de la Construcción como entidad gestora del programa, por los próximos tres años. Para Ricardo Fernández, es un honor esta confirmación, porque “esto significa un reconocimiento al trabajo del Instituto donde hubo un correcto trabajo administrativo y cumplimiento del convenio que firmamos con Corfo y que marcó una diferencia. Para el IC significa que hemos contribuido en desarrollar la estrategia del Construye2025 para incentivar los ejes fundamentales que son la productividad, la sostenibilidad y la innovación en el sector de la construcción”, declara.

En tanto, Pablo Ivelic ve el rol del IC como entidad gestora del programa como un verdadero envión de energía adicional: “Trabajar bajo el alero de una institución que comparte nuestro propósito y está íntimamente ligada al rubro desde hace décadas es -sin duda- un aporte al quehacer del Construye”, afirma. 

En tanto, desde Corfo, Hentzschel cree que “el Instituto de la Construcción ha sido relevante en su rol de actor sectorial y como entidad gestora del programa; representa un aliado estratégico fundamental a la hora de consolidar la permanencia de iniciativas en el largo plazo, así como la propia sustentabilidad del Construye2025. Valoramos positivamente el compromiso y alto interés de sus directivos en el accionar del programa, así como la orientación técnica y capacidad de gestión administrativa que ha sido impecable”.

Incentivos para la industrialización de la construcción en Chile

Por Ricardo Carvajal G., jefe de la DITEC del Ministerio de Vivienda y Urbanismo.

En el marco del Plan de Emergencia Habitacional del Gobierno, que presentara el ministro de Vivienda y Urbanismo, Carlos Montes, y la subsecretaria Tatiana Rojas, al Presidente de la República, Gabriel Boric, se estableció dentro de las formas para diversificar el acceso a la vivienda la industrialización. Actualmente, estimamos que la producción de viviendas industrializadas en el país es de 7.000 unidades al año, lo que es insuficiente si queremos mejorar la productividad de la construcción en nuestro país, sobre todo la de las viviendas sociales.

Para hacer esto, como gobierno hemos ido dando pequeños pasos en distintos frentes. El primero de ellos fue actualizar el protocolo de inspección de las obras, dado que no tenía sentido que los inspectores pidieran desarmar la pieza prefabricada que llegaba a la obra que se armaba en la industrializadora. Ahora se inspecciona en la planta directamente.

Otro paso fue firmar convenios con industrializadoras para diseñar desde cero las viviendas sociales, considerando las exigencias de los programas del Minvu, los materiales y las máquinas con que cuentan las fábricas, para así poder llegar a precio. Los diseños de estas viviendas producto del convenio son de propiedad del Minvu, por lo que quedan a disposición de las constructoras que las quieran ocupar, por lo que el arquitecto que tiene que patrocinar el proyecto, pueda ocuparlo sin mayor costo.

Hicimos un concurso para vivienda industrializada en la Región Metropolitana, para las comunas de Renca y Lo Espejo, que se lo adjudicó la oficina Archiplan en conjunto con la industrializadora Tecnofast con edificios de madera. Este no fue un concurso de ideas, sino una adjudicación para la construcción, por lo que esperamos que se inicien las obras el 2023.

Un último paso que se dio como incentivo, es incorporar una glosa en la ley de presupuesto, la que exime a la vivienda tipo industrializada aprobada por la DITEC de tener permiso y recepción municipal, para no recargar a las direcciones de obras y acelerar el proceso de construcción y entrega para las familias.

Dado que es una copia casi textual de un artículo de la Ley General de Urbanismo y Construcción (LGUC) que señala que “no les serán aplicables las limitaciones ni autorizaciones establecidas en el artículo 55° de la misma ley” muchas personas interpretan esto como que vamos a expulsar a las familias al campo o que fomentaremos las parcelas de agrado. Eso no es posible con esta glosa, ya que no se puede generar loteos o subdivisiones a través de ella, simplemente es para la construcción de vivienda, por lo que esperamos con esto por dar solución a las miles de familias con sitio propio en área rural que tienen un subsidio sin poder ejecutar, ya sea porque son lugares muy remotos o no hay interés por parte de empresas dada las complicaciones logísticas para construir en un área remota en la zona rural.

Las alternativas que tenemos disponibles para las viviendas tipos industrializadas aprobadas por DITEC no están cerradas, todo lo contrario, extendemos la invitación para que las empresas, con sus arquitectos y calculistas, nos presenten nuevas alternativas las que pondremos a disposición de las familias para que puedan ser usadas como su solución habitacional. Los invitamos a consultar la página del Minvu para ver los pasos a seguir.

Sabemos que los cambios pueden generar temor, sobre todo si uno está acostumbrado a hacer las cosas de una manera, pero tenemos la convicción de que el trabajo público-privado nos dará las certezas para seguir adelante en este nuevo camino que se nos abre con la industrialización de la construcción.