Nuevamente con aportes del Gobierno Regional de Valparaíso, se realizó el lanzamiento del proyecto, que en esta fase buscará la conformación y activación del ecosistema regional de economía circular, así como las bases para el desarrollo de una hoja de ruta regional de economía circular.
Como una de las ocho propuestas que fueron adjudicadas en 2022 con recursos del Gobierno de Valparaíso, a través del Fondo de Innovación para la Competitividad de dicho año, se realizó el lanzamiento de la segunda fase de Valparaíso Industria Circular, con el proyecto denominado “Conformación y activación del ecosistema regional de economía circular y bases para una hoja de ruta regional”, código BIP 40049038.
“Es importante destacar que esta iniciativa es coherente con los ejes de la Estrategia Regional de Innovación y con los enfoques transversales vinculados en la Estrategia de Adaptación al Cambio Climático, el fomento de la mediana empresa e integración territorial”, comentó Macarena Erazo, representando a la División de Fomento e Industria (DIFOI) del Gobierno Regional de Valparaíso.
A través de un diagnóstico regional llevado a cabo por la Universidad de Valparaíso, entidad ejecutora de esta iniciativa, se da cuenta de un gran potencial de la región de Valparaíso para la economía circular y, en particular de la simbiosis industrial, es decir, el intercambio de recursos subutilizados entre empresas. Sin embargo, también identifica empresas que no han logrado mantenerse en el tiempo y barreras tecnológicas que han impedido guardar estas innovaciones. “Se ha observado que el esfuerzo de muchas empresas en la valoración y la sinergia no está alcanzando, no está escalando ni replicándose, ya sea por parte de la información, por los precios, los costes de transacción, la normativa, la reglamentación, opciones de insumos, materiales, entre otros”, precisó Erazo.
Por ello, en esta segunda fase, el objetivo de este proyecto serán las micro, pequeñas y medianas empresas que conforman la cadena de valorización de los residuos de sus productos industriales.
“Para el Gobierno Regional de Valparaíso, hay efectos de esta iniciativa que nos gustaría relevar primero, la intervención en cinco áreas territoriales para realizar el análisis de posibles redes y servicio industrial en función de las vocaciones productivas de los territorios; se considera el área metropolitana de Valparaíso, el Valle de Casablanca, la provincia de San Antonio y Rapa Nui”, precisó la representante del gobierno regional.
Por su parte, Hernán Ramírez, seremi de Medio Ambiente de Valparaíso, aseguró que la economía circular es de gran importancia para el ministerio, con una hoja de ruta nacional trazada al 2040, y que “este proyecto viene también a trabajar y a aportar en la concreción de la hoja de ruta regional, puesto que Valparaíso juega un rol fundamental”.
El seremi habló de las iniciativas que ya están en marcha en las industrias de envases y embalajes y neumáticos; sin embargo, hizo un llamado al sector de la construcción, que “aún está al debe, entonces el poder ir avanzando en esa área es algo fundamental y que la región de Valparaíso se destaque como proponente de políticas de orientaciones, indudablemente va a permitir tener ayuda adicional para enfrentar este problema que es una problemática desde Arica a Punta Arenas”.
Trabajo en conjunto
Desde la Universidad de Valparaíso, el decano de la Facultad de Ingeniería, Esteban Sefair, destacó la cantidad de organizaciones que apoyan esta iniciativa, lo que le hace ver que van por el camino correcto. “Quiero felicitar la convocatoria, porque podemos tener todas las plataformas, pero si no están las voluntades, las políticas y los mecanismos para que quienes generan residuos o subproductos se encuentren con mercados para valorizar, va a ser complicado”.
El lanzamiento de esta segunda fase de Valparaíso Industria Circular, se apalanca en el trabajo de varios años del equipo de la Plataforma Industria Circular, una herramienta digital para facilitar el componente de la simbiosis industrial de la economía circular, cuyo desarrollo ha estado liderado por la ingeniera y académica de la UV Patricia Martínez Ramírez.
La profesional coincidió con las autoridades, en que “estos problemas y desafíos que tenemos actualmente sólo los podemos resolver de manera conjunta”. Y es que como recordó: “estamos siendo bastante ineficientes en el consumo de los recursos que hoy empleamos para sostener nuestros sistemas de vida, lo que nos hace vulnerables en varios sentidos y esa vulnerabilidad la hemos recogido en distintos instrumentos que tenemos a nivel nacional e internacional”.
De hecho, Martínez mostró la evolución de la relación entre el PIB y el consumo interno de materiales en el país, concluyendo que “Chile consume 40 toneladas de recursos per cápita y la media de los países OCDE es de 14,6 toneladas per cápita, por lo tanto consumimos mucho más que los países con los que nos deberíamos estar comparando, y está ineficiencia ha ido aumentando en el tiempo”, explicó.
Y otro dato alarmante es que la productividad material de esos recursos extraídos permite que Chile genere por cada kilo de material extraído 0,6 dólares, mientras que el promedio de los países OCDE, se generan 4 dólares por cada kilo de material que extraen, “por lo tanto ahí tenemos dos indicadores que nos permiten ver de manera concreta cuán improductivos somos”, sostuvo.
En ese sentido, la investigadora de la UV señaló que “debemos salir de la economía lineal para avanzar no solo en el reciclaje, porque el reciclaje es una de las cosas que tenemos que abordar, sino que implementar de manera real lo que es la economía circular”.
En números, el Programa de Desarrollo Económico de la Comunidad Europea basado sólo en estrategias de ecología industrial y economía circular, ha establecido rendimientos económicos cercanos a los 320 millones de euros para el horizonte del 2025, es decir, “estamos en esto por los beneficios que podría generar la implementación de la economía circular. Pero, para avanzar necesitamos un cambio sistémico, lo que nos permitirá construir resiliencia de largo plazo, residencia territorial, por ende, impactos locales y generar oportunidades económicas y de negocios, proporcionando en el proceso beneficios ambientales y sociales”.
En este contexto, la directora de Valparaíso Industria Circular, comentó que el proyecto trabaja en el ámbito de la simbiosis industrial, equivalente a un enfoque colectivo para generar ventajas competitivas entre empresas y sectores productivos que intercambian recursos entre ellos: energía, agua, subproductos industriales, así como servicios o infraestructuras, contribuyendo, entonces, al principal desafío: la transición hacia la economía circular.
Para finalizar este lanzamiento de Valparaíso Industria Circular, se realizó el conversatorio “Colaboración y desafíos para la economía circular en la industria”, con la participación de Macarena Erazo, representando al Gobierno Regional de Valparaíso; Cristian Fuentes, representante de la Seremi de Medio Ambiente, Iván Lazo, director de la Dirección de Gestión Medioambiental (DIGEMA) de la Ilustre Municipalidad de Casablanca; Felipe Ahumada Barrales, coordinador del programa Territorio Circular de Corfo; Javier Torrejón, presidente de la Cámara Regional del Comercio de Valparaíso (CRCP) y Cristian Garín Stuardo, representante de la Cámara Chilena de la Construcción de Valparaíso.
Bajo el compromiso de llevar las actividades a los territorios, el lunes 6 de noviembre en el Centro El Canelo de Nos de San Bernardo, se llevó a cabo el encuentro en el que participaron empresas y emprendimientos de distintos puntos de la Región Metropolitana.
En el Centro El Canelo de Nos de San Bernardo se realizó un nuevo Taller de Facilitación de Sinergias de Santiago Industria Circular, iniciativa realizada por el Gobierno de Santiago en conjunto con la Universidad de Valparaíso y financiada a través del Fondo de Innovación para la Competitividad Regional. En la oportunidad, los énfasis estuvieron dirigidos a las comunas de San Bernardo, Buin y Puente Alto y el centro El Canelo de Nos fue el lugar preciso, ya que dicho centro busca contribuir a la construcción de una sociedad social y ambientalmente más sustentable, entendida ésta desde una visión integral.
Mijail Villagra, coordinador de Santiago Industria Circular, explicó que el “Taller de Facilitación de Sinergias” busca ser una plataforma de promoción y facilitación de simbiosis industrial para avanzar hacia la economía circular en la Región Metropolitana, permitiendo a los participantes interiorizarse en la Plataforma Industria Circular, conocer la experiencia de otras empresas y también hacer sinergias con ellas. Asimismo, presentó la tecnología y las realidades de las tres comunas, comentando los resultados de los talleres en otros sectores de la capital.
Comenzando con el caso de San Bernardo, Villagra mostró en el mapa que la comuna tiene una gran potencial sinergia industrial; concentrándose principalmente en las actividades de comercio (26%), servicios (22%), construcción e inmobiliario (16%). En la comuna hay 7.632 empresas registradas en el SII y de ellas, 160 empresas tienen declaración en el Registro de Emisiones y Transferencias de Contaminantes (RETC) por 47.404 toneladas. De las cuales se logró valorizar el 13%, pero solamente un 2% se hizo en la comuna, lo que corresponde a 6.211 toneladas.
Concluyendo que existe un potencial de sinergias y negocios en San Bernardo, tomando las 7.632 empresas en la comuna, al excluir aquellas empresas del rubro de servicios, comercio, almacenamiento y microempresas, se llega a 645 empresas. A este número se aplica el algoritmo de potenciales sinergias, detectando 11.702 casos. El economista continuó con el caso de Puente Alto, donde realizando el mismo ejercicio académico se detectaron 4.447 casos. Las relaciones con más casos son construcción-construcción, construcción-manufactura, suministro de agua y alcantarillado-transporte, y transporte-manufactura.
Por último, para el caso de Buin, se consideran 3.353 empresas y al excluir las de los rubros de servicios, comercio, almacenamiento y microempresas; se llega a 157 empresas, con 1.183 potenciales sinergias donde destacan las relaciones en construcción, transporte, manufactura y productos de alimentos.
Resultados del taller
Uno de los asistentes, el vecino de Buin Nelson Bizama, comentó el caso de su emprendimiento de desechos orgánicos Comercial Dellwi Oil, el cual le da valor al desecho orgánico de las ferias libres del sector, produciendo con éste humus de lombriz, bio fertilizante orgánico y aceite de lombriz, el cual tiene uso estético y terapéutico. Se han adjudicado financiamiento de Sercotec, como el Capital Semilla y Crece, así como Semilla Expande de Corfo. Además, fueron ganadores del “Premio Industria, Innovación e Infraestructura” de los Premios Iniciativas Sustentables 2022, que realiza el HUB Sustentabilidad de LT-PULSO. Pese a ello, Bizama se encuentra hace largo tiempo en la búsqueda sin éxito de un terreno a través del Gobierno de Santiago y Bienes Nacionales. En el taller obtuvo feedback de los organizadores y también de los asistentes. Asimismo, se le dieron contactos para avanzar con su cometido. En tanto, Patricia Martínez, directora de Plataforma Industria Circular, le entregó directrices, le agradeció que tocase el tema de los residuos orgánicos y aconsejó llevar la instancia a la oficina de residuos del Gobierno de Santiago.
Alejandra Tapia, coordinadora de Sustentabilidad de Construye2025, también se sumó a este caso y dio a conocer las Mesas Ejecutivas para Productividad, una instancia de coordinación del Ministerio de Economía. De esta manera, el caso de Comercial Dellwi Oil fue un ejemplo de lo que son estos talleres y lo que se puede aportar a los participantes. En ellos, se produce una vinculación entre las empresas y la exposición de casos transversales. Por ello, “Encontré mucho apoyo, me entregaron correos, vamos a tener reuniones. Me siento muy conforme”, compartió Bizama.
Por su parte, Virginia Pérez tiene un emprendimiento de transformación con telas de mezclilla en desuso y es de San Bernardo: “Me pareció muy interesante, porque me pude relacionar e informar de otras organizaciones. En este caso, voy aprendiendo hasta dónde puedo llegar con lo que realizo y el aporte que genero a la comunidad”, acotó.
Entre las empresas participantes se encontraba SKC representada por Osvaldo Pardo, ingeniero de desarrollo a cargo del proyecto de SKC Circular, el que distribuye maquinaria destinada a industrializar procesos de reciclaje y segregación. Pardo afirmó que se va del taller con muy buenos resultados y que le fue muy fructífero.
Igual fue el caso de Gestión Ambiental Pañiwe, representada por su director César Castro. Pañiwe es una empresa nacional que entrega soluciones integrales en gestión y valorización autorizada de residuos eléctricos y electrónicos. A su director le pareció muy interesante, sobre todo el poder interactuar con empresas, con el municipio y la diversidad que se dio en la ronda de negocios.
Y de la comuna anfitriona, Amalia Olmedo, encargada del Departamento de Desarrollo Local Sustentable, destacó lo interesante de la instancia, ya que en ella se generan muchas oportunidades, de gran valor, “en especial el hacer grupos en la rueda de negocio a través de la entrega de ejemplos concretos”.
Al finalizar, Alejandra Tapia, de Construye2025, aseguró que la instancia fue muy valiosa y permite llevar la economía circular a los distintos territorios, así como ver su potencial de desarrollo: “Hoy hemos conversado con gestores, con empresas proveedoras y de distintas escalas también y vemos cómo se pueden producir las conexiones, las colaboraciones y redes entre las distintas empresas para impulsar la economía circular”.
Al finalizar el taller, los asistentes firmaron actas para explotar las potenciales sinergias con las empresas participantes, así como también hacer uso de la Plataforma Industria Circular para la gestión de sus residuos.
Abordando los desafíos en innovación, medioambiente y productividad, la CChC de Valdivia organizó cinco días de charlas y actividades que contó con la participación de Alejandra Tapia y Christian Cancino.
La importancia de la economía circular y la gestión de residuos, el tránsito que se necesita realizar para consolidar empresas sostenibles y las sinergías que se requieren para lograrlo fueron algunos de los temas analizados durante la primera Semana de la Sostenibilidad, organizada por la Cámara Chilena de la Construcción sede Valdivia entre el lunes 16 y el viernes 20 de octubre.
Así, durante cinco días de charlas y actividades, representantes de empresas socias de la sede, de los sectores público y privado de la región de Los Ríos, académicos de casas de estudio locales, además de estudiantes de nivel superior y de liceos técnico profesionales, se reunieron para abordar desde diferentes miradas los retos que actualmente enfrenta el sector en materias medioambientales, de innovación y productividad.
El presidente de la Cámara Chilena de la Construcción sede Valdivia, Fernando Vásquez, señaló que “como rubro hemos vivido un par de años bastante complejos. Sin embargo, estamos convencidos de que los temas urgentes no nos deben hacer olvidar los importantes. Para nuestro gremio el desarrollo sostenible es clave, es por esto que tomamos la decisión de generar una semana completamente dedicada a analizar cómo mejora la industria regional desde la gestión en medioambiente, la relación con las comunidades y el desarrollo organizacional”.
Junto con ello, Vásquez hizo una invitación a no quedarse solo con esa semana, sino que es necesario que se apropien de este tema los integrantes de toda la cadena productiva, los líderes de las empresas socias de la CChC, sus trabajadores y el rubro en su totalidad. “Para nosotros es importante que lo que hacemos como gremio signifique un aporte para el desarrollo del territorio y para la mejora continua de toda la industria”, afirmó.
Cinco días
La Semana de la Sostenibilidad fue patrocinada por Inacap, la Universidad Austral de Chile, Construye2025, Fomento Los Ríos, ONG Canales y Compromiso Pro. La charla inaugural estuvo a cargo de la coordinadora de Sustentabilidad de Construye2025, Alejandra Tapia, quien habló sobre la economía circular en la construcción y los desafíos de adaptar y mitigar.
Además, participó la coordinadora de proyectos de la CDT de la CChC, María José Cobo, quien presentó el Manual de Gestión de Residuos de la Construcción y Demolición, documento generado por la Cámara como herramienta de apoyo a las empresas del sector.
Cobo explicó que “es necesario poner el tema en la mesa y aunar miradas entre distintos sectores. Es importante que todas las estrategias, planes de acción y desarrollos de nuevas iniciativas. contengan la mirada de todos los sectores desde etapas tempranas para que sean posibles de implementar”. El manual puede ser descargado desde el sitio web de la Estrategia Economía Circular en Construcción: https://www.economiacircularconstruccion.cl/biblioteca/
Durante la segunda jornada, el director de Fomento Los Ríos, Pablo Díaz, dictó la charla “¿Cómo Construir Empresas Sostenibles? Una Transición Necesaria”. Díaz recalcó que “es muy importante que podamos compartir visiones distintas. Cuando hablamos de sostenibilidad tenemos que encontrarnos con que los constructores y las empresas pongan su opinión sobre la mesa, pero también la sociología, la antropología, la biología y los ecosistemas. Estas semanas son muy importantes para compartir aquello”.
En los siguientes días se realizó una actividad exclusiva para socios de la Cámara Chilena de la Construcción denominada “Empresas y Territorios: Sinergias para el Desarrollo en Conjunto” y un conversatorio con estudiantes de los liceos técnicos Industrial de Valdivia, Instituto TP Llifén y Liceo People Help People de Pullinque, los que poseen especialidades ligadas al rubro.
En tanto, la última jornada contó con una presentación sobre Smart Building, a cargo Christian Cancino, coordinador de Capacidades Tecnológicas de Construye2025, y con un foro en el que académicos de Inacap y la Universidad Austral de Chile buscaron responder la pregunta ¿Cuáles son los desafíos de crear y adoptar nuevas tecnologías y materiales en el sector?
Vínculo con academia
Dentro de la semana, un foco importante estuvo puesto en la formación de los futuros profesionales y técnicos del área de la construcción. Por lo mismo, varias actividades tuvieron como público a estudiantes. El vicerrector de Inacap Valdivia, Francisco Wittwer, explicó que “la sustentabilidad y la innovación forman parte de nuestros valores institucionales y esta semana estuvo completamente alineada con ellos. Además, valoramos mucho esta instancia porque nos permitió vincularnos con la industria y que los estudiantes pudieran participar en charlas y aprender sobre lo que se está haciendo en la región y a nivel nacional en la materia”.
El director de Infraestructura y Servicios de la Universidad Austral de Chile, Jorge Alvial, expresó que “la Universidad Austral se caracteriza en su naturaleza por abordar temas de sustentabilidad en distintas dimensiones, ambientes y en todas las áreas que desarrolla. Nos parece muy importante atender a los futuros profesionales de la construcción para que tomen estas herramientas, ya que serán las que marcarán la construcción en los próximos años”.
Mientras que Gloria Cariman, directora regional de ONG Canales en Los Ríos, explicó que “como ONG estamos muy contentos de que se concreten este tipo de actividades porque hay una articulación púbico-privada que nos permite generar diálogos muy enriquecedores para la educación. Necesitamos apoyo y diálogo para que los estudiantes que están en enseñanza media puedan vincularse hacia un futuro que aporte a sus propias metas y también al desarrollo del país”.
Aporte al territorio
La alcaldesa de Valdivia, Carla Amtmann, fue una de las autoridades que estuvo presente durante el desarrollo de la jornada. Valoró que uno de los desafíos estratégicos del gremio sea poner en el centro la sostenibilidad y aseguró: “Como comuna tenemos un nuevo desafío, que es la revalorización de los residuos de la construcción. Hoy no contamos con un sistema formal para disponer de ellos y eso genera externalidades negativas. Por parte del municipio tenemos toda la voluntad de evaluar en una alianza público-privada que nos permita generar un espacio de revalorización que nos lleve a posicionarnos a nivel nacional como un ejemplo. Creemos que esta materia es clave para la sostenibilidad”.
Por su parte, la seremi de Obras Públicas, Nuvia Peralta, explicó que “para el MOP la sostenibilidad es muy importante a la hora de la planificación de obras y de nuestras ciudades. Felicitamos a la Cámara Chilena de la Construcción, gremio con el que hemos trabajado en conjunto sobre cómo planificamos nuestro territorio bajo esa condicionante”.
A través de un proceso de Design Thinking, la constructora decidió convertir un proyecto de demolición de veredas en uno que aportara valor a la comunidad, evitando que cerca de 300 m3 de residuos fueran al vertedero, así como ahorros asociados al pago del traslado y disposición de cerca de 2.000 m2 de veredas que fueron reutilizadas.
Tradicionalmente, un proyecto de reposición de aceras y veredas se ejecuta demoliendo los elementos y luego re pavimentando. Ante la oportunidad de un proyecto de este tipo en Punta Arenas – y como es habitual cada vez que inician un nuevo trabajo- en la empresa Desarrollos Constructivos Axis realizan reuniones de innovación bajo la metodología Design Thinking, para detectar desafíos, las que se llevan a cabo en cinco etapas: empatizar, definir, idear, prototipar y testear.
Y en este caso, evidenciaron grandes desafíos, como cuenta Mikel Fuentes, líder de Innovación y Economía Circular de la compañía. “Si ejecutábamos el proceso de manera tradicional, la demolición de veredas terminaría en un vertedero, junto con todos los problemas asociados a la ejecución, como ruido, polvo, maquinaria, camiones en tránsito y costos de disposición final. Junto con esto, detectamos que las viviendas colindantes al proyecto presentaban barro en sus entradas, debido a la falta de radier o pastelones en el patio de sus casas”, señala.
Es así como “considerando los ‘dolores’ detectados en la etapa de empatizar, nos planteamos el desafío de repensar el proceso de reposición de veredas para generar menos residuos y aportar valor en el entorno”, sostiene el profesional.
De esta manera, generaron ideas de manera colaborativa, con la participación de Gerencia, el área de Innovación de Axis y el equipo del proyecto. “Surgieron diversas ideas y una fue la ganadora: en vez de demoler, cortar las veredas para transformarlas en pastelones, útiles para los vecinos y para nuestras propias instalaciones”, dice Fuentes.
Fue así como “transformamos un residuo en un producto en el marco de la economía circular. Realizamos prototipos de los pastelones e involucramos a la comunidad, la que validó la solución y recibió estos pastelones, junto con un tríptico informativo sobre el cuidado del medioambiente y nuestro plan de gestión de residuos. Transformamos un proceso de demolición, que genera inconvenientes y malos ratos para los vecinos, en un proceso que aporta y entrega valor a la comunidad”, precisa el líder de Innovación y Economía Circular de Axis.
Beneficios para todos
Mikel Fuentes comenta que no tuvieron inconvenientes desde el punto de vista normativo, puesto que su idea estuvo enfocada en la R de Reusar, es decir, “darle un uso similar a las veredas, pero en formatos más pequeños y no como materia prima para otro proceso productivo (Reciclar)”.
Al ser consultado por los resultados, el constructor civil sostiene que en términos medioambientales, los beneficios son claros, ya que al cortar las veredas y reusarlas, evitaron que aproximadamente 300 m3 de residuos terminaran en un vertedero. “Esto equivale a cerca de 2.000 m2 de veredas reutilizadas. Lo anterior se traduce en menores costos para la empresa, pues evitamos el pago asociado al traslado y disposición de estos cerca de 300 m3 de residuo. Cabe destacar que el proceso fue pensado para que los pastelones fueran cortados cerca de los vecinos que finalmente recibirían el producto, por lo que los costos de traslado fueron prácticamente cero”, añade.
Sobre los beneficios sociales, a su juicio, éstos son más bien cualitativos, “pero todo se traduce en que nos transformamos en un buen vecino. Dimos solución a una necesidad en la comunidad y aprovechamos de generar conciencia en los trabajadores y los vecinos con respecto al cuidado del medioambiente, mediante un ejemplo concreto y práctico de economía circular. Además, si consideramos camiones de 8m3, disminuimos la circulación de cerca de 38 camiones por el barrio”.
Dado el éxito de esta idea y gracias al impulso de haber ganado el Premio Cero Basura 2022, en la categoría Cambio Cultural, la empresa ha replicado esta práctica en los nuevos proyectos que están construyendo. Por ejemplo, en Puerto Natales, en un proyecto de construcción de una plaza, “reutilizamos el pavimento existente en formatos de pastelones más grandes que los que ya habíamos utilizado, además de reusar cerca de 300 m2 de pasto sintético para la comunidad”, cuenta. Por su parte, en un proyecto que está comenzando en Puerto Varas, “estamos prototipando medidas aún más grandes, en formatos de 2x2m, para poder reutilizar el pavimento en nuestras instalaciones de faenas y en el entorno, creando un producto izable, montable y reutilizable, en el marco de la industrialización de nuestros procesos”, asegura Fuentes.
Y así, cada vez son más las iniciativas que Axis está desarrollando en la línea de economía circular, “ya que estamos convencidos de que es el camino”, declara el profesional. Por lo mismo, un hito importante en Axis fue crear el cargo “Profesional de Innovación y Economía Circular”, para poner foco e impulsar aún más la innovación y el trabajo colaborativo en torno a este importante tema. “Es así como seguimos desarrollando iniciativas que buscan transformar los residuos en recurso y agregar valor en la comunidad. Por ejemplo, en un proyecto que involucra el roce de árboles, transformaremos dichos residuos en compostaje”, añade.
La constructora pretende continuar por esta vía, puesto que “la economía circular nos invita a cuestionar y repensar los procesos tradicionales. Es una gran oportunidad para innovar y generar cambios que aporten al cuidado del medioambiente. Vivimos en un mundo donde los recursos son limitados, pero nuestra creatividad no. De manera colaborativa debemos avanzar para tener un futuro sostenible”, concluye.
En dos jornadas llenas de aprendizaje e inspiración, a través de distintas actividades, los asistentes al Seminario “Economía circular en el sector construcción” reflexionaron sobre cómo estamos construyendo nuestras ciudades actualmente y cómo la industria puede ser un gran aporte en la producción limpia y colaborativa.
Una verdadera oportunidad de colaboración y desarrollo se dio los días 5 y 6 de octubre en el Seminario “Economía circular en el sector de la construcción” organizado por la Estrategia Economía Circular en Construcción, impulsada por la Cámara Chilena de la Construcción, Construye2025, el Instituto de la Construcción y la CDT, más la Red ECoEICo del Cyted, el Centro de Innovación UC Anacleto Angelini, la Escuela de Construcción Civil UC, IUS Latam y Compromiso Pro.
Así, con más de 150 asistentes, con invitados internacionales y nacionales, además de talleres sobre la materia, se cumplió el objetivo de ayudar a descubrir cómo transformar la industria de la construcción en un aliado de la circularidad.
El Módulo 1 titulado “Iniciativas internacionales de Economía Circular”, se desarrolló en el Auditorio de Construcción Civil de la Universidad Católica, en el Campus San Joaquín. La bienvenida la dio Felipe Ossio, director de la Escuela de Construcción Civil UC, quien introdujo lo que sería la primera parte de la mañana, en la que se presentaron las ponencias de los invitados internacionales.
Invitados internacionales
El primero en exponer fue el Dr. Luis Braganca, de Ecoeico Portugal, quien presentó “Implementación de estrategias de economía circular en edificios: de la teoría a la práctica”, disertación en la que demostró cómo implementar una estrategia para una industria de construcción más sustentable y de economía circular. Asimismo, presentó el caso de un paso superior ferroviario 2006 en Lisboa y su aumento del paso de la luz, así como también el anteproyecto de rascacielos de 105 pisos, construido con madera, que fue presentado en Canadá y cuyo objetivo es desarrollar una obra que enfrente al cambio climático.
Tras él, siguió la brasileña Mayara Regina Munaro, de la Universidad de Sao Paulo, quien expuso sobre el Pasaporte de Materiales. “La reutilización y el reciclaje de materiales de construcción dependen de un conjunto eficiente de información y seguimiento, que se puede obtener mediante la herramienta pasaporte de materiales. Aunque el Pasaporte de Materiales introduce principios de economía circular y aporta beneficios ambientales, sociales y económicos, está poco explorado en el sector de la construcción”, afirmó la investigadora doctoral. Su exposición exploró la adopción de la herramienta en el sector para generar conciencia, identificando los principales desafíos y oportunidades para incrementar la implementación del pasaporte de materiales en el sector de la construcción.
Avances desde el Biobío
Luego, la académica DCC- FACD, investigadora CITEC-UBB de la Universidad del Bío-Bío, Claudia Muñoz presentó: “Herramienta ÁBACO CHILE, Ecoeficiencia en el ciclo de vida de los edificios”. ÁBACO CHILE es una plataforma web de gestión digital, pública, escalable y de libre acceso, en base a un banco de costos e indicadores medioambientales orientado a hacer más eficiente el proceso de postulación, evaluación y seguimiento de proyectos de construcción pública y privada en Chile, desde el punto de vista económico, social y ambiental.
Es el primer banco de datos paramétrico con integración de indicadores de eco-eficiencia (costos y sustentabilidad) para proyectos de construcción en Chile y considera bases de datos dinámicas con clasificación de recursos y actividades, campos para describir especificaciones técnicas y enlazar objetos BIM, parámetros ambientales y costo social, para dimensionar el impacto ambiental desde el diseño a la etapa constructiva de una edificación.
Muñoz señaló: “Para poder avanzar en la cuantificación de las huellas, tenemos que ponernos de acuerdo: tenemos que tener bases de datos que se validen a escalas nacionales. En el país no contábamos con esto. En 2014 nosotros tomamos este desafío, basados en EcoInvest”. En noviembre de 2015 fue desarrollado por el Grupo de Arquitectura y Construcción Sustentable del Centro de Investigación en Tecnologías de la Construcción CITEC-UBB, de la Universidad del Bío Bío – Chile y Co-ejecutado por la Universidad de Sevilla, España a través del Grupo de Investigación ARDITEC. Es un proyecto de Bienes Públicos para la competitividad del sector de la construcción, financiado por INNOVA CORFO y mandatado por el Ministerio de Obras Públicas – Dirección de Arquitectura (MOP-DA) y el Ministerio de Desarrollo Social (MDS).
La profesora cerró su presentación explicando los posibles alcances de la herramienta y que está abierta a seguir perfeccionándose.
Le siguió Rodrigo García, del departamento de Diseño y Teoría de la arquitectura de la Universidad del Bío-Bío, quien presentó “Desarrollo de la construcción Impresa 3d para la circularidad”. Su exposición demostró cómo está implementada la impresión 3D en las nuevas edificaciones acercándose a la circularidad, integrando mezclas recicladas y mejor desempeño energético a estas edificaciones, queriendo vincular las nuevas tecnologías que aportan a la productividad con la sustentabilidad, para poder construir también un buen desempeño ambiental para el futuro.
Luego, el arquitecto y miembro del Grupo Eje Normativo del Instituto de la Construcción (IC), Cristian Garin, expuso el documento “Análisis y Propuestas Eje Normativo” preparado por el Comité de Economía Circular del IC. Dicho documento se encuentra en el siguiente link y presenta el marco de política pública, legal y reglamentario que influye en la aplicación de Economía Circular en Construcción.
Su objetivo es levantar en un solo documento de fácil acceso, el marco legal, reglamentario y normativo que orienta las acciones circulares en la Construcción. Esto con el fin de conocer, entender y facilitar el cumplimiento de las metas de la Estrategia de Economía Circular en Construcción 2025, la Hoja de Ruta RCD y ECC 2035 y la Estrategia Climática de Largo Plazo.
Casos y experiencias de diseño
La segunda parte del Módulo 1 se centró en exposiciones sobre innovación en emprendimientos circulares. Comenzó con Felipe Ossio, quien reflexionó sobre el libro “Diseño circular de viviendas para Chile y ejemplos de inspiración”, del cual es autor junto a Anamaría León de la UC y a Waldo Galle y Jeroen Poppe, de la Universidad Vrije de Bruselas. En el texto se describen 16 cualidades de diseño circular que permiten una reutilización, reciclaje y renovación más eficaz de las edificaciones y sus componentes. Ossio describió a través de ejemplos nacionales, los conceptos principales de las 16 Cualidades de Diseño Circular y explicó cómo el texto entrega herramientas para comprender las generalidades de un diseño circular que incorpora la visión del tiempo, cambios y ciclos propios de nuestro entorno, contribuyendo a instalar en nuestra industria los principios sostenibles de la economía circular: mantener en circulación los recursos por el mayor tiempo, con su mayor calidad, dentro de la mayor cantidad de ciclos posibles. El escrito se encuentra disponible en este link.
Continuó la Profesora Ruby Mejía de Gutiérrez, de la Universidad de Cali y representante de Ecoeico Colombia. Ella habló sobre los retos y desafíos del uso de residuos en el sector de la construcción, presentando diversos ejemplos en Colombia, además de oportunidades y retos que el uso de los residuos sólidos dan en la construcción civil. En la ponencia, Mejía también mostró resultados que con su grupo de estudio han obtenido.
Luego fue el turno de Irma Mercante, de la Universidad Nacional de Cuyo en Mendoza y representante de Ecoeico Argentina. Ella presentó “Acciones hacia la circularidad en gestión de RCD e indicadores”, un estudio de caso en una fábrica de premoldeados de mortero y hormigón con énfasis en la gestión de residuos.
En ella, se identificaron estrategias posibles y evaluaron sus desempeños ambientales. La primera fue la sustitución de materia prima virgen por reciclada (PET por RSU), la segunda alternativa fue incorporar el reciclaje de residuos de la planta ex-situ y la tercera mejora fue comprar una pequeña trituradora. Se analizó el análisis del ciclo de vida (ACV); en una segunda fase se hizo un inventario del ciclo de vida e ICV: flujos cuantitativos de entrada-salida. En las fases o escenarios 3 y 4 se realizó el EICV-Interpretación de los datos.
Para cerrar la mañana, Cristina Engel de Alvarez, profesora titular de la Universidad Federal de Espírito Santo en Brasil y de Ecoeico, quien presentó “Ciudades Inteligentes y sostenibles”, afirmando que es urgente continuar luchando por la búsqueda del equilibrio ambiental, social y económico, y que temas como “la energía, la vivienda, el confort y la eficiencia, siempre estarán entre las preocupaciones de todos los que queremos hacer de nuestro planeta un lugar más sostenible para vivir”.
Reflexión sobre la acción climática
Durante la tarde, se desarrolló el Módulo 2 en el Centro de Innovación UC Anacleto Angelini, con el “Taller de Innovación y emprendimiento circular”. La bienvenida la dio Ramón Molina, director ejecutivo del Centro de Innovación UC. Le siguió Natalia Reyes, jefa de Sustentabilidad del CTEC, quién presentó el “Pasaporte de Materiales” de Chile. Cerró el bloque Joaquín Cuevas, de Obra Limpia, con un taller digital de RCD.
A continuación, se realizó el Taller Pensamiento Circular en la Construcción, oportunidades de prevención de residuos, dinámica que tuvo una gran participación de los asistentes. Si bien algunos tenían que tomar roles como el de líder, secretario, experto o comunicador, todos se vieron muy involucrados. La misión consistía en enfrentar una Amenaza Ambiental RCD en una zona de vulnerabilidad climática. Los grupos, entonces, tenían tareas de adaptación y mitigación en que tenían que fundamentar y presentar sus estrategias.
El monitor de dicho Taller fue Pedro Mancilla, quien trabaja en apoyar al ecosistema de innovación con herramientas del juego, lo que les permite encontrar y abrirse a nuevas oportunidades y respuestas. “Hemos conformado un grupo humano, que ha sido capaz de mirar y encontrar soluciones de mayor envergadura ecosistémica. Que no podemos solucionar desde una empresa, una persona o un Ministerio. Se necesitan del grupo”, señaló. Tras compartir los resultados, cerraron con una reflexión conformando un gran círculo entre los asistentes y de esta manera terminó la primera jornada.
Segunda jornada
La segunda jornada de este Seminario, se llevó a cabo el 6 de octubre, en la Cámara Chilena de la Construcción, con el módulo colaboración para la economía circular.
Felipe Ossio, director de la Escuela de Construcción Civil UC, abrió la jornada respondiendo la pregunta: ¿Cómo estamos construyendo hoy? Señaló que los RCD son un problema mundial, pues “estamos generando mucho más residuos, los que tienen una serie de externalidades, como terminar en sitios ilegales con graves impactos ambientales”.
Tan grande es el problema que mientras en China se generan 1.130 millones de toneladas de residuos al año, en Chile, se producen 7,4 millones de toneladas anualmente.
El académico precisó que la vulnerabilidad no sólo es ambiental, sino que también urbana, porque “estos vertederos terminan frente a las calles, a personas y están rodeadas de mafias de la basura, son foco de delincuencia”.
También estuvo presente Conrad Von Igel, gerente de Innovación y Sostenibilidad de la CChC, quien reflexionó sobre qué significa en la actualidad hacer empresas y a “quiénes estamos afectando cuando hacemos negocios”. Asimismo, presentó una propuesta colaborativa para abordar la sostenibilidad de forma concreta, señalando que el Compromiso Pro es la forma concreta de la CChC para impulsar la sostenibilidad y hacer un acompañamiento a las empresas socias en este camino.
Por su parte, María José Cobo, coordinadora de Proyectos de CDT, comentó que los residuos de la construcción y demolición pueden llegar a significar un 1,19% del presupuesto total de la obra.
Por ello, Cobo entregó datos claves como cuánto cuesta el valor del traslado del material a la obra, al sitio de disposición final y, luego, el valor de disponerlo, asociado a la cantidad de emisiones de CO2 que generan esos procesos. Así, sostuvo que un edificio de 16.000 m2 significa 243,6 millones de pesos en ineficiencias y 1.462.510 KgCO2eq. Para absorber estas emisiones generadas, se necesitan 9.750 árboles para absorberlas, equivalente a un terreno de 72 hectáreas, y a 243 millones de pesos, los que implican 4,2 viviendas sociales de 1.600 UF.
“Estamos consumiendo más de lo que tenemos y presentamos una baja productividad, hay un costo de inoportunidad, por no entregar nuevas oportunidades de empleos verdes para la economía circular”, precisó la profesional. Por ello, insistió en que “queremos apuntar hacia un cambio sistémico de mentalidad, y que los proyectos sean considerados en todo su ciclo de vida, desde cuando nacen hasta cuando mueren”.
Luego, Katherine Martínez, líder de Sostenibilidad Ambiental de la CDT, se refirió al eje de medioambiente de la Estrategia de Economía Circular en Construcción, mostrando cómo están abordando este punto de manera colaborativa, a través de los Acuerdos de Producción Limpia.
¿Qué pasa si avanzamos en conjunto? Se preguntó. “Hemos tratado de avanzar en el problema de los residuos con los Acuerdos de Producción Limpia, en conjunto con la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático, Construye2025, la academia y otros actores del sector”, dijo.
En esta instancia, los asistentes participaron del Taller Pensamiento Circular en la Construcción, oportunidades de prevención de residuos.
Al finalizar, con la firma de una carta de compromiso, se avanzó en este Seminario Economía Circular en el Sector Construcción: Una oportunidad de colaboración y desarrollo, a la que adhirieron Construye2025, CDT, CChC, Instituto de la Construcción, IUS Latam Ecoeico y la Escuela de Construcción Civil UC.
Seminario Economía Circular en Construcción, realizado el 5 y 6 de octubre de 2023
Centro de Innovación UC
Seminario Economía Circular en Construcción, realizado el 5 y 6 de octubre de 2023
Joaquín Cuevas Aldunate, Ingeniero de Diseño de Productos CEO & co-fundador Reviste – OBL
Seminario Economía Circular en Construcción, realizado el 5 y 6 de octubre de 2023
Prof. Ruby Mejía de Gutiérrez
Seminario Economía Circular en Construcción, realizado el 5 y 6 de octubre de 2023
Mayara Regina Munaro, São Paulo University, Brazil
Seminario Economía Circular en Construcción, realizado el 5 y 6 de octubre de 2023
María José Cobo y Felipe Ossio
Seminario Economía Circular en Construcción, realizado el 5 y 6 de octubre de 2023
Dra. Ing. Irma Mercante
Seminario Economía Circular en Construcción, realizado el 5 y 6 de octubre de 2023
Prof. Dr. Luís Bragança
Seminario Economía Circular en Construcción, realizado el 5 y 6 de octubre de 2023
Dra. Claudia Muñoz Sanguinetti, Profesora Asociada DCC- FARCODI Universidad del Bío-Bío
Seminario Economía Circular en Construcción, realizado el 5 y 6 de octubre de 2023
Dr. Rodrigo García Alvarado, Depto. Diseño y Teoría de la Arquitectura Universidad del Bío-Bío
Tanto CES como CVS incluyen dentro de sus metodologías exigencias relacionadas con la gestión de residuos de la construcción y demolición. Conoce cuáles son.
Sin duda, tras el lanzamiento de la Hoja de Ruta RCD y Economía Circular 2035 impulsada por los ministerios de Vivienda y Urbanismo, Medio Ambiente y Obras Públicas, Corfo y Construye2025, y de la Estrategia de Economía Circular en Construcción 2025, liderada por la Cámara Chilena de la Construcción, el Instituto de la Construcción y Construye2025, con la facilitación y coordinación de la CDT, se ha configurado un escenario diferente que ha permeado a las certificaciones locales, tanto de edificios como de viviendas.
Por ejemplo, a partir del lanzamiento de una actualización de su metodología, realizado en enero de este 2023, Certificación Edificio Sustentable (CES) habla de una evolución con respecto a la versión anterior, en la que los requerimientos se encontraban divididos en dos categorías ARQ.Residuos y CONST.Residuos, ambas relacionadas solo con el manejo de residuos, tanto en el diseño como en la construcción y operación del edificio.
En tanto, la versión 1.1 de CES une los requerimientos anteriores en una nueva categoría llamada ARQ. & CONST. Materiales y Residuos, contiene tres variables:
“Así, los proyectos tienen ahora la posibilidad de postular al requerimiento relacionado a la especificación de materiales con Declaración Ambiental de Productos (DAP) a través de dos opciones: la primera es entregando la información de materiales o productos para la construcción permanentemente instalados o declarando información de al menos un 20% del presupuesto total de materiales de la obra”, comenta Hernán Madrid, jefe de CES.
La Declaración Ambiental tipo III, Declaración Ambiental de Producto o DAP, proporciona datos ambientales cuantificados, utilizando parámetros predeterminados, basada en el análisis de ciclo de vida según la norma internacional ISO14025. En ese sentido, “para CES es muy relevante promover el uso de materiales que identifiquen y cuantifiquen su impacto ambiental, preparándonos y en miras a una futura versión 2.0 de CES, donde las DAP serán necesarias para la medición de huella de carbono en el ciclo completo de la edificación”, asegura.
En detalle, la variable 9.Gestión de Residuos en Operación contempla un requisito voluntario que debe ser considerado desde etapas tempranas del proyecto, donde el diseño del edificio considere espacio suficiente que permita el almacenamiento de residuos reciclables por separado y una acumulación de determinados días. Además, se debe considerar accesos que faciliten el depósito y el retiro adecuado, junto con presentar un plan que posibilite en un futuro a la administración del edificio poner en marcha el reciclaje de residuos en operación.
La variable 10.Gestión de Residuos en la construcción presenta dos requerimientos obligatorios: el 10R1 y 10 R2 y a diferencia de la versión anterior (v1), donde se solo se solicitaba demostrar con reportes mensuales de obra el cumplimiento del artículo 5.8.3 de la OGUC, la que incluye básicamente medidas con el objetivo de mitigar el impacto de las emisiones de polvo y material, la v1.1 de CES Edificios de Uso Público suma, además, la obligatoriedad de incorporar un plan de gestión de residuos durante la construcción, basado en la NCh3562 y la cuantificación de residuos de construcción incluyendo demolición y excavaciones.
Y de forma voluntaria, los proyectos pueden postular al requerimiento Gestión de Residuos: Separación, Control y Reciclaje, donde si bien se debe cumplir con un porcentaje mínimo de reciclaje de residuos para obtener puntaje, existe la posibilidad de visibilizar, tanto en los reportes finales que entrega el sistema de certificación como en el sitio web, independiente del resultado obtenido, el porcentaje de reciclaje final logrado.
Según Madrid, la modificación y ampliación del alcance de los requerimientos responden a dos motivos principales. “El requerimiento asociado a las DAP de materiales es una modificación en línea con promover de mejor manera y más amplia su uso en los proyectos de construcción, los requerimientos anteriores (energía y agua incorporada) no tuvieron el efecto esperado cuando se creó la certificación CES. Por otra parte, el requerimiento gestión de residuos durante la construcción corresponde a una respuesta a la evolución de la gestión de residuos en los últimos años, con la incorporación del plan de gestión de residuos en obra, y a la necesidad de levantar un indicador de generación de residuos para Chile”, analiza el profesional.
Las viviendas
Por su parte, Allan Ubilla, coordinador de Proyectos de CTEC, comenta que la Certificación Vivienda Sustentable (CVS) tiene los siguientes requerimientos de la Categoría 4 “Materiales y Residuos” que podrían relacionarse de alguna forma con la economía circular:
4.1.1.a. Declaración ambiental de productos de construcción.
4.1.2.a. Maderas con certificación de gestión sustentable.
4.1.3.a. Materiales nacionales o regionales.
4.1.4.a. Materiales con contenido reciclado.
4.1.6.a. Materiales de rápida renovación.
4.2.1.a. Optimización de materiales desde el diseño.
4.3.1.a. Infraestructura para gestión de residuos domiciliarios.
4.4.1.a. Gestión y monitoreo de residuos de construcción y demolición.
Como explica, “estos requerimientos se incorporaron desde el inicio de la CVS (lanzada en 2020) y se incluyeron porque eran parte de los Estándares de Construcción Sustentable para Viviendas, que es la base técnica de la CVS”.
Estos “evalúan, de alguna forma, la gestión del proceso de fabricación de materiales, del proceso de los residuos tanto domiciliarios como RCD y la incorporación de criterios del ciclo de vida de los materiales”, explica Ubilla.
Algunos de estos requerimientos son obligatorios, como 4.3.1.a. Infraestructura para gestión de residuos domiciliarios y 4.4.1.a. Gestión y monitoreo de residuos de construcción y demolición, “por lo que todos los proyectos certificados bajo el sistema CVS cumplen con estos 2 requerimientos”, dice el profesional del CTEC. En tanto, “del resto de requerimientos voluntarios, los más perseguidos son 4.1.3.a. Materiales nacionales o regionales, 4.1.4.a. Materiales con contenido reciclado y 4.1.6.a. Materiales de rápida renovación”, dice.
Y agrega: “En algún momento, en el Minvu se pensó replantear esta Categoría 4 de “Materiales y Residuos” hacia un enfoque más integral de la economía circular, pero actualmente no conozco la posición del Minvu al respecto”, precisa.