Carrera de Ingeniería en Construcción UVM lanza proyecto con financiamiento Corfo enfocado a las MiPES

Con el propósito de reimpulsar a las Micro y Pequeñas Empresas (MiPES), la Universidad Viña del Mar (UVM) hizo el lanzamiento oficial del programa “Transformando Construyo”, financiamiento proveniente de Corfo a través de la línea “Viraliza” y que cuenta con el apoyo de la Cámara Chilena de la Construcción, la Corporación de Desarrollo Tecnológico y el programa Construye 2025 de la misma entidad estatal.

Dicho proyecto que seleccionó a 100 emprendedores y empresas de la construcción a nivel nacional, con el objetivo de brindarles herramientas de aceleración en emprendimiento, innovación y digitalización.

Al respecto el director (s) de Corfo, Héctor Leiva, en la ceremonia de lanzamiento expuso que “estamos en una alianza público-privada y la academia, siendo esto una situación virtuosa porque vemos a la empresa por un lado, al Estado y sus entes públicos y la academia con su conocimiento buscando soluciones a los problemas que puedan aquejar a una determinada industria”.

Por su parte el rector de la UVM, Carlos Isaac, indicó que “hemos caminado poco a poco hacia fortalecer nuestra capacidad para vincularnos con nuestro entorno relevante, para generar conocimiento e innovación, y para apoyar la generación de emprendimiento desde la formación de profesionales hasta la vinculación con el territorio, entregando herramientas e instrumentos a emprendedores y emprendedoras de la Región de Valparaíso”, sostuvo.

 

Fuente: EMOL

Nuevos presidente y vicepresidenta comparten su visión del Consejo de Construcción Industrializada

Con Sebastián Fourcade a la cabeza y Tatiana Martínez como vicepresidenta, el CCI continuará impulsando el trabajo colaborativo para acortar las brechas en capital humano, tecnología y normativa, que ayudarán a las soluciones constructivas.

Apasionado por la construcción industrializada, Sebastián Fourcade, asumió feliz la presidencia del directorio del CCI, para hacer frente múltiples desafíos de corto y largo plazo. “Creo que la primera tarea era difundir correctamente lo que significa construcción industrializada. Esto educa y, además, siembra curiosidad por la innovación. Luego, habrá que preocuparse de asesorar y apoyar a todos aquellos que quieran sumarse. Pero, es importante que estos intentos no sean opacados por los fracasos (que siempre hay)”, dijo.

Y es que el proceso de industrialización no es binario, sino de una mejora constante, según el nuevo presidente del CCI. Además, Fourcade considera necesario crear las bases en el mercado, es decir, eliminar barreras preestablecidas para este tipo de construcciones, crear alianzas con instituciones educacionales, que ayuden a formar/capacitar, entre otras. Por último, aspira a generar las herramientas y/o índices que permitan validar cada mejora en el proceso de industrialización, lo cual facilita la claridad y alcance de los objetivos. 

En este sentido, en 2021 los comités continuarán trabajando en varios proyectos para resolver desafíos diversos. Asimismo, el CCI seguirá convocando socios motivados que se sientan desafiados a pensar “fuera de la caja” , tal como plantea el nuevo titular del Consejo.

Por su parte, Tatiana Martínez, recién electa vicepresidenta del CCI, aspira a fomentar la confianza para trabajar de forma colaborativa en equipos multidisciplinarios, con el fin de evolucionar en el ámbito constructivo. “Es indispensable pensar como equipo, para que todos quieran navegar por la zona de aprendizaje en nuevas metodologías de trabajo, gestión de proyectos, implementación de tecnología y que estén preparados para aprender sobre industrialización y desaprender algunas cosas”, dice.

A romper paradigmas

Según la vicepresidenta del CCI, la construcción industrializada en Chile tiene un gran potencial de crecimiento. No obstante, éste dependerá, principalmente, de quienes toman decisiones al interior de las empresas que construyen cualquier tipo de edificación o instituciones que licitan proyectos de infraestructura pública, vivienda u obras civiles; ya que para hacer que las cosas pasen, los líderes tienen la responsabilidad de romper viejos paradigmas, acortar las brechas, levantar restricciones y estar abiertos al cambio, visualizando siempre que el objetivo común es el desarrollo sostenible de las ciudades, para el bienestar de las personas que las habitan. “Creo que el CCI tiene mucho donde aportar”, comentó.

  En este contexto, Tatiana Martínez destacó el liderazgo, profesionalismo y la calidad humana de la presidenta saliente del CCI, Francisca Cruz, quien logró posicionar al Consejo en eventos nacionales e internacionales. “Sin duda, su forma de transmitir desde la experiencia en el desarrollo de proyectos, la importancia que tuvo la industrialización en el logro de mejores resultados en productividad; ayudó a evidenciar la necesidad de impulsar la implementación y medición de indicadores en obra que permitan visualizar las ventajas de realizar importantes cambios en la forma tradicional de construir. Participar en el directorio liderado por Francisca fue una experiencia muy enriquecedora en estos años y estamos muy agradecidos por la dedicación y el empuje que le dio al consejo en diversos ámbitos”, afirmó.

Para este año junto a los socios del CCI, la nueva vicepresidenta espera continuar trabajando en los grupos de técnicos y comités, donde la activa participación ha permitido avanzar en el posicionamiento de la industrialización en el sector construcción. “En muy poco tiempo ya pondremos a disposición los trabajos y la documentación que permitirá acortar las brechas que existen en normativa, desarrollo del capital humano, implementación de metodologías y también se podrá contar con indicadores de medición de soluciones constructivas industrializadas”, aseguró.

De esta manera, 2021 será un año para convocar a más profesionales de la construcción a participar de encuentros técnicos, seminarios y otras actividades que para interactuar, levantar inquietudes y analizar proyectos destacados por las soluciones utilizadas, mediante casos que sirvan de referencia en nuevos proyectos o inversiones futuras. “Es importante destacar el crecimiento que ha tenido el CCI en este último año, ya que se han asociado diversos profesionales y empresas de distintas regiones del país, que tanto individual como colectivamente son un gran aporte y ponen de manifiesto la necesidad de trabajar de forma colaborativa para co-construir un ecosistema que permita el desarrollo de la construcción industrializada en Chile”, concluyó Tatiana Martínez.

Medallas AOA 2021 fueron entregadas a profesionales destacados de la arquitectura nacional

Raimundo Lira, Cristián Izquierdo, la Dirección de Arquitectura de la Municipalidad de Santiago, José Rozas y el grupo Elemental fueron distinguidos con las Medallas AOA 2021, un reconocimiento bianual que destaca a profesionales, oficinas y entidades públicas o privadas que han sido relevantes para el desarrollo de la arquitectura nacional.

La ceremonia de entrega de los reconocimientos se realizó en el marco de la Asamblea Anual de la Asociación de Oficinas de Arquitectos, donde se proclamó a los nuevos directores e instancia en la cual la presidenta, Mónica Álvarez de Oro, realizó una cuenta de su primer año de mandato.

Medalla AOA al Arquitecto Joven Destacado: Cristián Izquierdo

Arquitecto titulado con Distinción Máxima en la Universidad Católica de Chile, recibiendo también el Premio Excelencia Académica y la distinción al Mejor Proyecto de Título de su promoción el año 2009. Máster en Diseño Arquitectónico Avanzado en la Universidad de Columbia, recibiendo el Honor Award for Excellence in Design y Lucille Smyser Lowenfish Memorial Prize el año 2014.

En 2010 obtuvo el primer lugar en el concurso para la Casa del Peregrino del Templo Votivo de Maipú. Desde ese año trabaja de manera independiente en proyectos de distintos tamaños y programas, públicos y privados. En 2012 se integró como tercer socio de Izquierdo Lehmann Arquitectos.

Destaca además el desarrollo de su carrera en el diseño y el uso de la madera, que comenzó como una búsqueda más bien estética y a la cual se fueron sumando otros motivos que lo fueron convenciendo aún más: la huella de carbono, la importancia de colaborar en el tema energético, la construcción seca, entre otros.

Sus proyectos han sido publicados y expuestos en Chile y el extranjero, entre ellos en el MoMA de Nueva York (Young Architect Program, 2015) y en la Exposición “Extra-Ordinary” del CFA de Nueva York (2016).

En 2015, su proyecto Casa en Futrono fue destacado en la XIX Bienal de Arquitectura de Chile.

En 2017, la Casa en Morrillos fue finalista del Architectural Review House Awards y galardonada como House of the Year por la revista Hise. Es profesor de teoría y proyectos en la Universidad Católica de Chile.

Agradeciendo la distinción, Izquierdo agregó que “es un honor y una responsabilidad ser distinguido por los colegas, lo asumo con alegría y con ganas de hacerme cargo de este desafío”. El arquitecto además tuvo palabras de gratitud para sus socios: “A quienes conozco desde que nací, por hacerme un espacio en su oficina y darme todas las oportunidades e incentivos para crecer como arquitecto, conversar con ellos o incluso disentir si fuera necesario. Su generosidad para mí no ha conocido límites”. Asimismo, dedicó un reconocimiento a sus colaboradores y a todos los miembros de la oficina, agregando que “lo mejor está por venir”.

Medalla AOA al Aporte Institucional a la Arquitectura: Dirección de Arquitectura de la Municipalidad de Santiago

Representada por su director, Miguel Saavedra, es una repartición pública que durante su larga vida ha sido dirigida con gran estabilidad por pocos Directores de Obras que han entregado un gran prestigio a la Institución.

Miguel Saavedra Arquitecto de la Universidad Católica de Chile y ha sido director de Obras por largos años en la Municipalidad de Santiago, imprimiéndole un sello de rigor y espíritu de servicio.

Su impronta se basa en su formación universitaria y en sus múltiples viajes de formación a Europa, y concretamente a Francia, en donde ha podido conocer la realidad de siglos en el manejo de las ciudades y las normas regulatorias. En París se ha relacionado con sus autoridades destacando sus contactos con Anne Hidalgo, hoy alcaldesa de la ciudad luz.

Todo este conocimiento y experiencia es lo que ha caracterizado su labor y su bajo perfil en la Municipalidad de Santiago a cargo de la Dirección de Obras que hoy destaca como un ejemplo de manejo profesional y abnegado trabajo en un servicio público, conformando un gran equipo junto a sus colaboradores.

“Con mucha satisfacción quiero agradecer, a nombre de todos mis colaboradores que por más de treinta años hemos trabajado en pro de una mejor ciudad, de un respeto y de una integración entre la arquitectura tradicional y las nuevas expresiones del arte”, señaló Miguel Saavedra al recibir el galardón, relevando la importancia de un premio para una labor, en general, poco reconocida.

Medalla AOA a la Trayectoria Académica: José Rosas

Arquitecto de la Pontificia Universidad Católica de Chile, cuenta con una maestría en Planificación Urbano Regional del Instituto de Estudios Urbanos en la misma casa de estudios y es doctor de la Escuela Técnica Superior de Barcelona en Universidad Politécnica de Cataluña.

Como arquitecto de libre ejercicio profesional, dirige diversos proyectos entre los que destacan Plan Regulador de Las Condes, Planes Reguladores del Alto Aconcagua, Plan Maestro del Zanjón de la Aguada, Plan Regulador Intercomunal de Copiapó.

Es profesor titular de la Escuela de Arquitectura y del Instituto de Estudios Urbanos y se ha desempeñado como director de la Escuela de Arquitectura de la PUC (1997 y 2000), director de la Escuela de Arquitectura de la Universidad Central de Venezuela (2000 y 2002), director de Extensión y Servicios Externos de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Estudios Urbanos de la PUC (2004 y 2005) y decano de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Estudios Urbanos de la PUC (2005-2012). Es director del programa de Doctorado en Arquitectura y Estudios Urbanos UC, desde el 2016 a la fecha.

Como investigador se ha estado centrado en problemas relacionados a la teoría y forma urbana y orientados al tema del proyecto. Entre ellas destacan las vinculadas al Centro de Santiago de Chile y su transformación durante el Siglo XX, y de diversos proyectos Fondecyt y Conicyt.

Recalcando lo emocionante para él que es este reconocimiento, Rosas comenzó agradeciendo a la presidenta de AOA y a todo el directorio y miembros de la asociación, agregando: “En particular siento una especial gratitud hacia mi alma mater, la Pontificia Universidad Católica de Chile, donde por más de cuarenta años he tenido el privilegio de enseñar a investigar, además de colaborar en la gestión académica. Gracias a todos los profesores, a los administrativos y muy especialmente a los estudiantes. Por supuesto también a mi familia, que siempre me ha regalado el tiempo para dedicarme a la universidad, que ha sido mi modo de vida”.

Medalla AOA a la Trayectoria Arquitectónica: Grupo Elemental

Elemental es un Do Tank creado en 2001, dirigido por el ganador del premio Pritzker Alejandro Aravena y sus socios, Gonzalo Arteaga, Juan Cerda, Victor Oddó y Diego Torres.

Su trabajo aborda proyectos que van desde las viviendas sociales al espacio público, desde objetos a edificios, cubriendo un amplio rango de intereses.

El trabajo de Elemental se ha exhibido en diferentes lugares del MoMA en 2010 (Small Scale, Big Change) a la Venice Architecture Biennale (2008, 2012, 2018) entre otros. Además, de ser Director de la 15° Exhibición Internacional de Arquitectura de la Bienal de Venecia (2016). En octubre de 2018 se inauguró una retrospectiva de Elemental en el Museo de Arte de Louisiana en Dinamarca. Su trabajo también forma parte de la colección permanente del Centro Pompidou.

La oficina ha recibido el León de Plata por los proyectos de vivienda social en la Bienal de Arquitectura de Venecia (2008), el Premio de la Corporación Marcus por trayectoria (2009), el Brit Insurance Design Awards en la categoría arquitectura (2010), Medalla de Plata por el PRES de Constitución en los Holcim Awards for Sustainable Construction (2011), el Primer Premio en los Zumtobel Group Award en la categoría Diseño Urbano (2014), el Diseño del Año por el London’s Design Museum (2015), y el Premio Gotemburgo por Desarrollo Sustentable (2017). En el año 2016, Elemental participó activamente en la curaduría de la XV Bienal de Arquitectura de Venecia.

Recibió el precio Alejandro Aravena, arquitecto de la PUC, quien en 2016 fue nombrado curador de la XV Bienal de Arquitectura de Venecia y recibió el Premio Pritzker de Arquitectura, en tanto que a partir de 2020 fue nombrado presidente del Jurado del Premio Pritzker.

Además de agradecer a nombre de todo el equipo por el reconocimiento, Alejandro Aravena relevó el particular momento que vive Chile, donde se están reescribiendo las reglas del juego que rigen la convivencia y es momento de repensar las ciudades y las viviendas no solo abordando la emergencia de los campamentos y allegados, sino también de aquella urbe que quedó obsoleta y que hoy es escenario de conflicto y fricción.

“La emergencia es la oportunidad para cambiar cosas que en circunstancias normales nunca se hubieran podido modificar, de dar golpes de innovación porque tenemos preguntas distintas y nuevas”, sostuvo, añadiendo que la urgencia entrega la ocasión de dar el ejemplo y lograr que personas de distintas procedencias antepongan el bien común al interés particular: “La ciudad, la vivienda, el territorio y la arquitectura son de los pocos ámbitos donde podríamos encontrar soluciones transversales para resolver conflictos mucho más profundos de la sociedad”.

Gran Medalla AOA: Raimundo Lira

Estudió arquitectura en la Universidad Católica de Valparaíso, diseño y luego arquitectura en la PUC. También tiene formación en la Escuela Moderna de Música.

Ha sido profesor en las Universidades Andrés Bello y Universidad Católica de Santiago en las carreras de Arquitectura y Diseño. Actualmente es socio director de Lira Arquitectos Asociados.

Ha trabajado asociado con diversos arquitectos como José Domingo Peñafiel, Antonia Lehmann, Luis Izquierdo y Tomás Fontecilla, en tanto se ha reunido en proyectos de Diseño con el Diseñador Alberto Dittborn.

Fue cofundador en 1998 de la Asociación de Oficinas de Arquitectos de la que ha sido director, vicepresidente y presidente, en tanto participó de la Revista AOA como director y miembro del comité editorial. Además, fue presidente de la Corporación para la protección del medio ambiente del Archipiélago de las Guaitecas o Isla Kent.

En el Colegio de Arquitectos, fue miembro del Tribunal de Apelaciones y del Tribunal de Ética y es asesor del Monasterio Benedictino Santísima Trinidad de Las Condes en Plan General de Área Verde, desde Abril de 2008 hasta la fecha.

Haciendo un repaso de su trayectoria en AOA, Lira resaltó el compromiso de los directorios y participantes de la asociación, junto con reconocer a la revista AOA como una carta de presentación a lo largo de su historia. Además, destacó: “Uno de los principales logros de la asociación, fue el de haber podido conocernos entre los arquitectos, apoyarnos y confiar entre nosotros, compartir experiencias, darnos soporte gremialmente y consolidar relaciones intergeneracionales”. Asimismo, dedicó un especial agradecimiento a los miembros de su oficina, a sus socios por haberle permitido dedicar tiempo y energía a la actividad gremial. “Fue un privilegio haber participado en el inicio de AOA, estoy orgulloso de quienes hoy la representan”, finalizó.

Fuente: AOA

Primeros avances de la futura Calificación Energética de Edificios de Uso Público

Con el Estudio 1, desarrollado el segundo semestre de 2020 por un equipo de la Universidad del Biobío, se avanzó en el estado del arte, propuestas de tipologías y de edificios de referencia, considerando las certificaciones y calificaciones ya existentes en el país.

Dos años después del Convenio de colaboración firmado entre el Ministerio de Energía, la Dirección de Arquitectura del MOP, el Instituto de la Construcción como Administradora de la Certificación Edificio Sustentable, se comienzan a ver los primeros frutos en esta línea de trabajo.

Entre 2019 y 2020, este convenio tuvo alcance en seis iniciativas: crear los Archivos climáticos (disponibles aquí); Actualización de CES (Manual CES 1.1, CES Edificios Existentes y nueva plataforma web); Monitoreo de edificios certificados; el Estudio 1 de Calificación energética de edificios de uso público; Huella de carbono (documentos disponibles aquí) y Lineamientos CES Net Zero.

Gracias a los buenos resultados de esta primera etapa, se decidió ampliar el trabajo durante 2021, para desarrollar acciones como el Monitoreo de edificios certificados; el Estudio 2 de Calificación energética de edificios de uso público, y en Huella de carbono, un piloto en edificio gestionado por la DA-MOP y certificado con CES.

La Ley de Eficiencia Energética establece, entre otras cosas, la obligatoriedad la Calificación Energética de Viviendas en dos años más y la Calificación Energética de Edificios de Uso Público, Comerciales y Oficinas en cuatro años a partir de su promulgación.

Actualmente, está operando en forma voluntaria la Calificación Energética para Viviendas, pero la de Edificios de Uso Público, Comerciales y Oficinas no existe, por lo que este convenio se modificó para considerar dos estudios de base para el desarrollo de esta Calificación Energética, siempre teniendo en cuenta la experiencia y sincronía con las certificaciones de sustentabilidad existentes en el país (CVS y CES).

Dado que la certificación de edificios de uso público (CES) ya lleva cinco años de funcionamiento, “tenemos la experiencia desde el trabajo con edificios de uso público, comerciales y de oficina que se ha traspasado al desarrollo de la calificación energética para este tipo de edificación”, precisó Hernán Madrid, jefe de CES.

Por ello, hoy el foco está puesto en que el área de energía de la futura Calificación Energética de Edificios de Uso Público, Comerciales y Oficinas se encuentre en sincronía con los requerimientos de energía de CES en futura versión 2.

Particularmente, el Estudio 1, que se centró en el estado del arte, tipologías y edificios de referencia, se desarrolló durante el segundo semestre de 2020, con un equipo consultor y de trabajo de la Universidad del Biobío, en el que participaron profesionales internacionales, que transmitieron experiencias relevantes de Alemania, Australia, España, Japón y Estados Unidos. A ello se suma la activa participación en el Comité Técnico de profesionales del Ministerio de Vivienda y Urbanismo que, como lo establece la Ley de Eficiencia Energética será el encargado de administrar la futura Calificación.

Por su parte, Bárbara Rodríguez, profesional de la Unidad Edificación y Ciudades de la División de Energías Sostenibles del Ministerio de Energía y contraparte técnica del convenio de colaboración, detalló los alcances de los tres estudios. El primero, como se mencionó antes, enfocado en el estado del arte, tipologías representativas y características del edificio de referencia y prospección de la línea base. En tanto, el segundo, está centrado en la metodología de cálculo y diseño de la herramienta de cálculo, y también hay un tercer estudio, contemplado para 2022, que permitirá el desarrollo de escalas de la calificación energética y el diseño de la etiqueta, que ejecutará directamente Minvu.

“Los tres estudios son muy importantes, porque esta es la primera vez que tendremos la obligatoriedad de una calificación energética en nuestro país, y específicamente con respecto a la edificación de uso público, porque hoy no lo tenemos dentro de nuestra Ordenanza, dado que la obligatoriedad ahora en términos de reglamentación térmica, es para viviendas”, aseguró la profesional de la cartera de Energía.

La profesional también agregó que “mientras no tengamos la actualización de la reglamentación térmica, no vamos a ver requisitos para edificación de uso público”, por lo que están frente a un desafío grande, porque a diferencia de lo que sucede en el ámbito de la vivienda, existe gran diversidad de tipologías arquitectónicas y energéticas. “No solo estamos hablando de edificios de oficinas, comerciales desde el ámbito público, sino que también de hospitales, centros de salud, colegios, entre otros”, especificó Rodríguez.

Estudio 1
Dado que no es posible contar con 100 tipologías o más, fue necesario encontrar una forma de caracterizar el parque nacional de edificios de uso público, comerciales y de oficinas, de forma estratégica. Al mismo tiempo, llegar a la prospección de una línea base.

“Para nosotros es sumamente relevante poder establecer este sistema de calificación en el mercado que ya tenemos de certificaciones y calificaciones en el país. Tenemos una capacidad instalada de más de 10 años, con trabajo en distintos comités e iniciativas, tanto en el sector público como privado”, señaló la profesional del Ministerio de Energía.

Caracterizar energéticamente el parque de edificios nuevos, dado que la ley establece su obligatoriedad solamente para la edificación nueva, es otro de los aspectos que Rodríguez destacó. En ese sentido, se estableció lo mínimo que se tiene que solicitar para caracterizar a estos edificios.

“Se evaluaron los atributos de la mayoría de los sistemas existentes a nivel mundial, que en su mayoría son obligatorios, y hubo elementos muy relevantes, como que la mayoría se caracteriza por tipología de uso, en el caso de la edificación no residencial, donde también hay un principio de evaluación justo”, resumió Rodríguez.

Y algo que, a su juicio, es muy importante de considerar tiene que ver con la gestión de la información, dado que en la mayoría de estos sistemas internacionales, especialmente en el de Australia y Estados Unidos, hay un sistema central relacionado con registrar la información y utilizarla para generar conocimiento sobre el mercado. “Y en este estudio la evaluación de los atributos de estos dos sistemas, tanto el australiano como el estadounidense, eran los más robustos en ese aspecto”, precisó.

La gobernanza, por su parte, también es relevante, ya que existen ejemplos muy importantes, como los directorios de CVS y CES, que son muy determinantes para la mejora continua.

Fuente: Certificación Edificio Sustentable

¿Qué tan industrializada está tu empresa? Primer estudio de indicadores en tierra derecha

Las empresas chilenas podrán medir el grado de industrialización con que trabajan, analizando costos y variables medioambientales y sociales para tomar mejores decisiones.

Con la finalidad de medir el grado de industrialización en la construcción, Construye2025, programa impulsado por Corfo y administrado por el Instituto de la Construcción, encomendó en 2020 a la Corporación de Desarrollo Tecnológico (CDT), un estudio para levantar indicadores clave de los proyectos que se desarrollan en Chile. Hoy en etapa de calibración, dicho trabajo será una herramienta para determinar qué tan industrializada está una empresa o sus proveedores.

Según el presidente del Consejo de Construcción Industrializada (CCI), Sebastián Fourcade, a lo largo del camino, fue posible establecer que una obra o un producto contiene muchas variables, por lo que el índice tenía que integrarlas. “Esta matriz nos entrega un coeficiente y una consultoría externa nos permitió ver cómo se aplicaba la fórmula en cada proyecto. Ahora, queda aterrizar esa calibración”, explica.

El índice se descompuso en las siguientes grandes variables: Costos, que es el indicador sobre el cual hay más información, porque incluye productividad y mano de obra, por ejemplo; otro más relacionado con el Medioambiente y, un tercero vinculado al tema Social. “Creemos que tener las variables en la mesa va a motivar a las empresas a medirse”, afirma Sebastián Fourcade.

Por qué medir

De esta manera, tal como sucede en Singapur, país donde cuentan con los edificios industrializados más altos del mundo, los planes reguladores podrían permitir, eventualmente, construir solo a las constructoras con una mayor calificación, al menos en ciertas zonas. “Eso puede suceder a medida que este índice se internalice. Por ahora, es importante que la mayoría de las empresas se auto midan, para saber dónde mejorar”, añade el presidente del CCI.

Asimismo, la subgerente de Gestión de Proyectos de la CDT, Carolina Tapia, cree que el estudio de indicadores de industrialización permitirá sentar una base para comparar proyectos con distinto grado de implementación de soluciones modulares o industrializadas. “En la medida que se pueda probar este indicador en la mayor cantidad de obras, se podrá ir calibrando para entregar un resultado que permita tomar decisiones como, por ejemplo, determinar cuánto incidirá en mis resultados, el hecho de industrializar mi proyecto”, argumentó.

En Construye2025, se espera que este índice sea de motivación para las empresas que valoren la nueva forma de construir y busquen mejorar sus procesos. En este sentido, el gerente de Construye2025, Marcos Brito, señala que “contar con una metodología de medición estándar, que permita comparar resultados de obras, de una misma empresa o bien contra promedios del sector entre distintas empresas, permitirá mejorar la competitividad del sector. Lo cierto es que podremos saber qué sistemas constructivos, qué aspectos de coordinación temprana y qué beneficios se puede obtener al industrializar partidas o proyectos completos de edificación. Con esto, buscamos evidenciar los beneficios de la industrialización y facilitar una herramienta que pueda ser utilizada para todo tipo de obras, privadas y públicas”. Así, una vez consolidado será posible desarrollar nuevas herramientas y manuales para que los constructores y personas que hacen productos para la industria puedan mejorar su productividad y la sustentabilidad de sus obras.

DOM en Línea: la transformación digital alcanza a las Direcciones de Obra Municipales

Más de 80 trámites simplificados le están diciendo “adiós” al trabajo análogo que se realizaba en las direcciones de obra, para dar paso a un nuevo ecosistema digital que hace más rápidos y sencillos los trámites.

Permisos de edificación, subdivisión, urbanización, regularizaciones y certificados, entre otros trámites podrán realizarse en forma remota gracias al trabajo mancomunado que comenzó hace poco más de dos años, para el desarrollo de DOM en Línea. “Ha sido una relación de trabajo colaborativo que ha sido importante para avanzar y terminar con la sensación de desamparo en algunas zonas. Podemos ser socios estratégicos para nuestro usuario en común”, comentó el ministro de Vivienda y Urbanismo, Felipe Ward, en el “Taller de Transformación Digital DOM en Línea”, realizado en marzo.

Estas instancias partieron en marzo, con encargados de DOM de cada municipio, ADOM y Colegio de Arquitectos, para actualizarlos de los avances de la pltaforma y su importancia de implementación en cada comuna, según cuenta Enrique Matuschka, jefe de la División de Desarrollo Urbano (DDU). “Nuestra meta es tener el segundo trimestre de este año, a lo menos 100 comunas adscritas. Los invito a todos a fortalecer este espacio y trabajar con el objetivo de mejorar la gestión en cada región, para juntos ir encaminados hacia la modernización del Estado y la reactivación económica”, señala el jefe de la DDU.

Desde enero de 2019, el avance ha sido sustancial, según la arquitecta Liliane Etcheberrigaray, coordinadora nacional de DOM en Línea, que ha liderado el desarrollo de una plataforma transparente y gratuita, al alcance de todas las municipalidades que deseen implementarla. Hoy, diversos módulos hacen posibles las integraciones con Clave Única, Pago en línea a través de Transbank y Tesorería General de la República, Firma Electrónica Avanzada de SEGPRES, seguimiento de solicitudes, gestión de plazos y derivación de trabajo al interior de las DOM.

“De los tres certificados iniciales, hemos potenciado la herramienta hasta contar con 80 trámites, en las fases de anteproyecto, permiso, modificación y recepción, los que actualmente se pueden solicitar por internet en las 92 comunas que se encuentran habilitadas”, explica la coordinadora nacional de DOM en Línea, quien detalla que este año se inició un plan de acompañamiento y capacitación nacional, que significó disponer de profesionales altamente capacitados en regiones. Éstos se encuentran trabajando para apoyar la implementación de esta importante herramienta, para contribuir a la realización de un diagnóstico nacional de la situación de las Direcciones de Obras Municipales en todo el país, de cara a una transformación digital y a un proceso de mejora de los servicios que actualmente se entregan a la ciudadanía.

  “Durante 2021 se planteó el desafío de llegar a la mayor cantidad de comunas, teniendo como meta implementar la plataforma en 100 comunas durante el primer semestre, capacitar a 3.000 funcionarios municipales en el uso de la plataforma y en temáticas relacionadas al urbanismo y la construcción, y seguir creciendo con las integraciones del sistema en sus trámites más complejos, en paralelo con la interoperabilidad de la plataforma con organismos del Estado en vías de digitalización, como SII, INE, MINECON; MTT y con municipalidades que cuenten con plataformas propias”, detalla Liliane Etcheberrigaray.

Reactivación económica

Lo anterior ha sido fruto de la alianza público-privada que se ha fortalecido para avanzar hacia la modernización estatal, agilizando procedimientos, evitando trámites presenciales y realizando el seguimiento en línea de los mismos. En este sentido, DOM en Línea es un proyecto de futuro. Así lo cree la coordinadora nacional de la plataforma, que espera que una vez que se encuentre implementado e interoperando con otros organismos, reduzca los plazos de tramitación de las solicitudes, otorgue certezas y contribuya a mejorar la productividad y fomentar la reactivación económica.

En los próximos dos años, la plataforma ya debería integrar tecnología BIM, disponer de herramientas de revisión, mejorar los estándares de aplicación normativa y, en definitiva, convertirse en la plataforma base, sobre la cual, se tramiten todos los permisos a nivel nacional. “Esta iniciativa, de origen público privado, gracias al apoyo de los socios de la Mesa Público Privada, se perfila como una herramienta clave, a través de la cual el Ministerio de Vivienda contribuye a la modernización del Estado, al fortalecimiento de los gobiernos locales y a la equidad territorial y digital”, concluye Liliane Etcheberrigaray.

Para realizar un trámite en DOM en Línea, simplemente, los usuarios deben ingresar su Clave Única, verificar que su municipio está utilizando este sistema y comenzar a vivir la experiencia de la transformación digital.

 

“Deconstrucción”: el proceso que da nueva vida a los materiales de demolición

Iniciativa pionera busca -en línea con los principios de la economía circular- lograr un retiro minucioso y óptimo de la mayor cantidad de los materiales que componen un inmueble, reduciendo residuos y emisiones de gases de efecto invernadero.

Reciclaje, reutilización, revalorización son conceptos que cada vez están más presentes en la sociedad y los distintos sectores de la economía, pues existe conciencia de que detrás de ello existe generación de valor económico y medioambiental.

Por ello, Demoliciones H y L decidió estar a la vanguardia, incorporando el concepto de deconstrucción a sus procesos, de manera de valorizar y dar trazabilidad a los residuos de una demolición. Todo con un objetivo claro: añadir una mirada verde a los procesos, para agregar valor al derribamiento de inmuebles.

“Con la guía de Nicolás Behar de Recylink, en Demoliciones H y L vimos una posibilidad de trabajar con una visión verde, en el sentido de realizar ciertas modificaciones en los procesos de demoliciones para incorporar conceptos de economía circular”, afirma Felipe Lira, ingeniero constructor y gerente Técnico y de Administración de Proyectos en Demoliciones H y L. 

Si bien la deconstrucción es un proceso que demora y encarece un poco la ejecución de demolición convencional, sus beneficios son claros: reutilizar la mayor cantidad de material posible (y certificar con Recylink, para así asociar a una reducción de CO2 y, con ello, el impacto ambiental), considerando que en Chile no existe una normativa que facilite la comercialización de escombros sólidos reciclados asociados al proceso de demolición.

Así, en la actualidad, el análisis de qué materiales son susceptibles de recuperar y reutilizar es “caso a caso”. En esta labor, la trazabilidad es clave, pues es la única forma de cuantificar dónde y qué tipo de residuos genera una demolición y en qué lugar serán dispuestos.

El proceso comienza con una auditoría de predemolición, que identifica qué componentes tiene un inmueble que se demolerá, lo que permite armar un plan de gestión ambiental. Para el éxito del proceso, explica Nicolás Behar, constructor civil asesor en este proyecto de Demoliciones H y L y CEO de Recylink, generaron una estrategia con cuatro aristas: una estructura de deconstrucción, un plan de gestión ambiental, procedimiento y programa de educación ambiental. “Todo debe ser firmado por las partes, porque establece objetivos, cómo se lograrán, quiénes estarán involucrados en cada parte del proceso”, comenta el especialista.

Este material –manuales, fichas técnicas hasta certificados de faenas y autorizaciones- son ingresados a una plataforma que guarda todo el historial del proyecto, lo que facilita encontrar la información y procesos a seguir, así como ver en gráficas los aportes de la deconstrucción.

Cómo opera

En un proyecto realizado en La Florida y que dio el “vamos” a esta nueva mirada, por ejemplo, un punto relevante era dar nueva vida a los árboles que estaban en los terrenos. Ello se logró gracias a una máquina chipeadora, que permite procesar material de diferentes diámetros, reduciendo los desechos y entregando como resultado chips de madera, los cuales fueron valorizados y reutilizados).

En este proyecto, cerca de 50 metros cúbicos de madera/ramas se convirtieron en 6 metros cúbicos de chips, que fueron entregados a un vivero de la comuna de La Reina para su reutilización en compost. Los troncos de pinos, en tanto, fueron cortados y entregados como insumos para la fabricación de tablas para piso. El mismo proceso se realizó con otros componentes como plástico, puertas, ventanas, fierro y cobre, que fueron entregados en distintos depósitos o bien, entregados directamente a personas para su reutilización.

Por ejemplo, las cerchas fueron entregadas a una persona que estaba ampliando su casa y las botellas plásticas a puntos de reciclaje específicos. “Así lo tratamos de hacer con todos aquellos materiales a los que se le pudiera dar una segunda vida. Lamentablemente, en Chile no está aún la tecnología ni la reglamentación para procesar los escombros inertes y haber obtenido un producto final comercializable nuevo, porque con eso, no me cabe la menor duda, de que del 100% de los escombros, se podría haber llegado a un 60% o 70% adicional al 20% que se valorizó”, agregó Felipe Lira.

Impacto en cifras

 

  • 82 camiones
  • 1.515 cubos
  • 102 toneladas
  • 20% reutilización

 

 

Lanzan el primer parque tecnológico para el sector de la construcción

El Parque de Innovación CTeC, iniciativa impulsada por Corfo, la U. de Chile y otras seis universidades nacionales, busca potenciar el desarrollo de innovaciones que promuevan tecnologías para mejorar la productividad del sector de la construcción.

¡Llegó el día! El Centro Tecnológico para la Innovación en la Construcción (CTeC) lanzó su Parque de Innovación CTeC en Laguna Carén, a tres años de iniciar oficialmente uno de los proyectos más ambiciosos de la Universidad de Chile. 

La iniciativa, que contó con una inversión de $530 millones y tendrá una extensión de 1,5 hectáreas, busca mejorar la productividad y sustentabilidad de la industria de la construcción nacional, a través de la incorporación de un laboratorio a escala real, único en Chile, donde las empresas podrán pilotear y desarrollar nuevos materiales, tecnologías y soluciones constructivas, bajo condiciones reales, antes de ser implementados en obra.

A juicio del rector Ennio Vivaldi, la entrada en funcionamiento del Parque de Innovación CTeC “se trata de un excelente ejemplo de lo que estamos impulsando como Universidad de Chile en el Parque Carén, porque apunta a resolver los desafíos del país en distintas áreas, en este caso la construcción, de forma transdisciplinaria y congregando a todos los protagonistas que queremos sean parte de esta iniciativa. Por una parte, la academia, a través de todas las universidades que integran esta Corporación, el Estado representado por Corfo, el sector privado a través las empresas y, por supuesto, organismos internacionales con su vasta experiencia.”

El parque está diseñado bajo la asesoría de BRE, centro de investigación del Reino Unido, y busca congregar a empresas del sector, así como también a startups, investigadores e instituciones públicas, convirtiéndose en una plataforma de encuentro, propiciando sinergias e instancias de colaboración e innovación, promoviendo tecnologías y metodologías disruptivas que aceleren el salto tecnológico que requiere la industria.

Antonio Errázuriz, presidente de la Cámara Chilena de la Construcción, indicó que “sin duda que el Parque de Innovación CTeC marcará un importante hito en el futuro de la construcción. Esta iniciativa permitirá llevar desde los laboratorios a las obras, las mejoras en la tarea de construir. Como gremio, buscamos potenciar el vínculo de nuestras empresas socias con espacios de desarrollo e innovación como el CTeC, por lo que esperamos que esta iniciativa potencie la sostenibilidad de nuestra industria”.

Mientras que para la directora ejecutiva de CTeC, Carolina Briones, el parque presenta una gran oportunidad para todas las empresas del sector. “Se trata de un espacio único, que permitirá testear y validar las distintas innovaciones, que requieren de una mirada externa antes de ser puestas en el mercado. Estamos convencidos de que este laboratorio a escala real, será una excelente oportunidad de integración para que las distintas soluciones se potencien a través de la colaboración de los actores. Además, significará una vitrina, tanto a nivel nacional como internacional, propiciando proyectos de alto impacto que trasformen positivamente a la industria y posicionado a nuestro país como un referente a nivel latinoamericano”, precisó.

A la fecha, el Parque cuenta con la participación de más de 20 empresas que se sumaron al desafío de la innovación y colaboraron con su puesta en marcha. Con ellos, ya se comenzarán los primeros trabajos de testeos y estudios. Por ejemplo, Urban Spark, empresa creadora de la baldosa que genera energía al pisarla, está monitoreando los parámetros relacionados al flujo y horarios de las pisadas y Timberecco, que recicla plástico de desechos y los transforma en un material funcionalmente parecido a la madera natural, se encuentra midiendo el desempeño de sus decks en zonas de mediano tráfico peatonal.

Dentro de los próximos desafíos, CTeC inaugurará dos nuevas estaciones de pilotaje en el norte y sur del país, a cargo de las Universidades de Antofagasta y de La Frontera, respectivamente, con el objetivo de responder a las necesidades de la industria a nivel nacional.

Como está conformado el CTeC

CTeC es un Centro Tecnológico difusor de tecnologías disruptivas e innovación abierta, que propicia sinergias y colaboración en el ecosistema de la construcción. A través de la digitalización, el prototipaje y pilotaje, los proyectos de I+D y la capacitación, busca mejorar la productividad, sustentabilidad y competitividad de las empresas y/o instituciones.

Conformado por una red de socios que aúnan conocimiento nacional y experticia global, CTeC cuenta con la participación de la Universidad de Chile, Universidad de Santiago, Universidad Tecnológica de Chile (INACAP), Universidad de La Serena, Universidad de Antofagasta, Universidad de La Frontera, Universidad de Concepción, Ministerio de Vivienda y Urbanismo, Instituto de la Construcción, Recylink, Construye 2025, BRE de UK, Tecnalia y Eurecat de España.

Además, CTeC forma parte del Parque Carén de la Universidad de Chile, iniciativa universitaria que se propone como un lugar de encuentro entre la academia, el sector público y privado, la comunidad y el territorio; un laboratorio sustentable que abre sus puertas a iniciativas nacionales y globales con el fin de fortalecer y facilitar la integración, creación de conocimiento y recreación de la innovación, la experimentación, la investigación de clase mundial y la vinculación territorial, teniendo como centro el respeto por el medio ambiente y la conservación.

En el Parque Carén de la Universidad de Chile se inaugurará también este semestre el Centro Tecnológico para la Innovación Alimentaria (CeTA) y próximamente se sumarán el Centro de Biotecnología y Producción de Vacunas, el Centro de Energías y Electromovilidad, el Centro de Tecnologías, entre otros.

Siete oportunidades para la construcción

  1. Espacio único para la transferencia de conocimiento y el fomento de la innovación.
  2. Trabajo colaborativo entre sector público, privado, academia y startups, fomentando la innovación abierta.
  3. Disminución de riesgos e incertidumbres de innovación anticipando pilotos en condiciones reales.
  4. Infraestructura flexible y adaptable a las necesidades del cliente.
  5. Detección continua de oportunidades de mejora.
  6. Validación y certificaciones por entidades neutrales.
  7. Posicionamiento de la marca en el ecosistema.
  8. Instancias para el networking.
  9. Conocimiento experto, tanto de socios nacionales como internacionales.

Campus e-learning

Para fortalecer el capital humano nació la plataforma de cursos e-learning (ver en https://ctecinnovacion.cl/cursos/), que busca mejorar las capacidades de técnicos profesionales y estudiantes. De esta manera, se busca avanzar hacia un modelo de innovación y mejora continua. 

En una actividad online en la que participaron especialistas de la oficina de arquitectura Zaha Hadid y de la empresa de ingeniería Arup, quedó en evidencia la importancia de las tecnologías y cómo la transferencia de conocimiento, la formación de capital humano y la colaboración temprana, resultan claves para lograr resultados exitosos.

La plataforma contará inicialmente con tres cursos asociados a la transformación digital con temáticas como: Gestión de la TD en empresas de la construcción, IoT y Sensorización, para posteriormente ampliar la oferta de cursos disponibles.

 

CIPYCS: Gran iniciativa e interesante desafío

Por Lorenzo Constans, presidente del Directorio del Centro Interdisciplinario para la Productividad y Construcción Sustentable (CIPYCS).

CIPYCS, Centro Interdisciplinario para la Productividad y Construcción Sustentable se formó el año 2017 con la participación, como fundadores, de las universidades Católica de Chile, del Bío-Bío, Católica del Norte y de Talca. A estas destacadas instituciones se incorporaron como socios la Universidad de Magallanes, Austral de Chile y Universidad Técnica Federico Santa María, Gepro, Sirve, Dictuc y DuocUC.

La participación de ellas y su trabajo en conjunto, permiten acceder a investigadores y profesionales diversos, además de acceder y firmar convenios con otras instituciones relacionadas a ellas mismas. Además, se cuenta con acuerdos con institutos, corporaciones del sector privado, nacionales como extranjeras y que permitirá aportar una mayor experiencia y variedad de conocimientos a empresas constructoras, industrias y fabricantes de materiales para la construcción.

CIPYCS busca que el sector de la construcción avance en la adopción de innovaciones tecnológicas y de procesos a través de entregar servicios I+D+i especializados para el diseño, desarrollo y validación de nuevas tecnologías, desarrollo de productos y servicios y educación continua teniendo como fin último mejorar la productividad y sustentabilidad de la construcción. CIPYCS está al servicio de las empresas del sector construcción y ofrece soluciones a sus desafíos, lo que hace un cambio claro de objetivo (según lo percibido por las empresas sobre las universidades), ya que consiste en solucionar problemas reales, a la medida de las empresas.

Lo destacable de esta iniciativa es que permite mirar con optimismo el aporte que se hace y hará, ya que está enfocada a unos de los desafíos permanentes que tiene la industria de la construcción, la cual es la mejora de la productividad y desarrollo de innovación aplicada.

El trabajo conjunto asociado de estas instituciones académicas potencia, sin lugar a dudas, a CIPYCS, ya que cuenta con visiones distintas y la posibilidad de acceder a una amplia variedad de conocimiento y complemento entre las mismas. Significación especial tiene la participación de instituciones con las cuales se cubre todo el territorio nacional, con lo cual, además de la ubicación geográfica, aporta una visión adicional de climas, uso de materiales locales, que sin lugar a dudas podrá incorporarse en el desarrollo aplicado de innovaciones técnicas.

Otro punto interesante es la participación directa de representantes del sector privado y público en el directorio, lo que complementa la calidad profesional y técnica con el mundo real de usuarios, lo que permite un contacto directo con los problemas y desafíos prácticos de la industria.

Hoy, con el apoyo e importante aporte de Corfo, y pese a las cuarentenas sanitarias, ha permitido estar próximos a entregar los laboratorios de Prototipado a Escala Piloto (PEP), y de Infraestructura Modular Adaptativa (IMA) que facilitarán, a la industria y empresas constructoras, la adopción de innovaciones, ya que al apoyar el diseño y validación de elementos y sistemas constructivos, en condiciones de laboratorio (PEP) y en condiciones reales (IMA), junto con el diseño del proceso de fabricación, se disminuye el riesgo de adoptarlas. Es por esto que las empresas se han mostrado interesadas en tan relevante iniciativa para mejorar la productividad y sustentabilidad del sector construcción, y el progreso del país en beneficio de sus habitantes.

Otro aspecto relevante es que ya está a disposición de las empresas el Laboratorio de Experiencias Virtuales Inmersivas, EVI, que permite mejorar la productividad, interacción colaborativa y el acceso a información relevante oportuna para la toma de decisiones, a través de herramientas basadas en la realidad virtual extendida inmersiva, aumentada y mixta y, el Observatorio VISTA que genera y provee información para el desarrollo sustentable del negocio inmobiliario. 

El aporte de cada una de las instituciones permitirá abarcar y compartir su propia expertise y de esta manera trabajar como un verdadero consorcio académico al servicio de las empresas y su innovación. Desde la investigación en energía solar aplicada a edificios, uso de energías renovables, prototipos para el desarrollo y construcción sustentable en madera, innovación en robótica, aplicación de tecnología en temas acústicos, habitabilidad en zonas climáticas extremas entre otras.

Finalmente, la recepción positiva de importantes empresas del sector, nos hace ser optimistas del aporte real que CIPYCS está entregando y entregará en el futuro.

Economía circular en construcción

Por Alejandra Tapia, coordinadora de Sustentabilidad de Construye2025

Iniciativas como el Proyecto de reglamento sanitario sobre manejo de residuos de actividades de la construcción y demolición, y el Comité Consultivo Público “RCD y Economía Circular en Construcción” van sentando las bases para una gestión responsable.

La economía circular “da valor a las cosas por el mayor tiempo posible”, a diferencia de una desechable, donde los productos están diseñados para perder su utilidad rápidamente, con el fin de ser reemplazados por nuevos. Claramente, es la lógica de nuestro sistema lineal que ha operado en forma miope, pasándose por alto los costos que deben absorber otros, sin considerar principios como “el que contamina paga”, definición base de las políticas públicas de la Unión Europea, ya su vez subestimando miles de oportunidades. Chile está en proceso de habilitar las condiciones necesarias para la economía circular. Un gran avance ha sido la Hoja de Ruta RCD y Economía Circular en Construcción 2035, en la que se sientan las bases para avanzar en una gestión sustentable de los residuos de la construcción y demolición (RCD), y economía circular en construcción, con metas como: “El país cuenta al 2035 con infraestructura para la valorización, plantas y estaciones de transferencias de RCD en todas sus regiones”. Sin embargo, esta meta cuenta con barreras como la falta de definiciones en cuerpos legales y una baja coordinación pública en los permisos para proyectos, su construcción y operación.

En ese sentido, se ha dado dos grandes pasos: la propuesta de “Proyecto de reglamento sanitario sobre manejo de residuos de actividades de la construcción y demolición”, en consulta pública, el cual se elaboró de acuerdo a las facultades que le entrega el Código Sanitario al Ministerio de Salud, en colaboración con la Subsecretaría de Desarrollo Regional y Administrativo, y el Comité Consultivo Público “RCD y Economía Circular en Construcción”, conformado por los Ministerios de Vivienda y Urbanismo, Obras Públicas y Medio Ambiente, Corfo y Construye2025. Y un segundo avance, relacionado a la gestión de los residuos en obra, a fines de 2020 la Dirección General de Obras Públicas del MOP dio instrucciones de incorporar planes en todas sus obras, considerando la norma NCh3562:2019, que entrega las directrices para su diseño y ejecución.

El reglamento sanitario define qué son los RCD, su manejo y las responsabilidades para todos los actores en la cadena, desde los mandantes, constructoras, transporte y gestores. Identifica a la autoridad sanitaria competente encargada de la autorización y fiscalización de las instalaciones de valorización y disposición final, que serían las Seremis de Salud. Define los requisitos para las instalaciones antes mencionadas, en cuanto a su diseño, construcción y operación, donde es fundamental el control de los tipos de residuos que se gestionan, y contar con personas capacitadas.

Es indispensable avanzar y dar valor a los residuos, permitiendo la diversificación del mercado de la construcción y crecimiento económico. Con el desarrollo de este sub-sector, se estima que solo la producción de áridos reciclados y gestión de RCD, podría generar ventas anuales por más de MM$14.000 y 2.000 empleos.

Fuente: La Tercera

Plan Nacional de Construcción Sustentable: cómo transformamos ideas en acciones

Por Paola Valencia, encargada de la Secretaría Ejecutiva de Construcción Sustentable del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu).

Desde que en 2012 el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) impulsara y liderara la firma del convenio interministerial de construcción sustentable —firmado en ese entonces por los ministerios de Obras Públicas, Vivienda y Urbanismo, Medioambiente y Energía— el avance en los objetivos planteados no se ha detenido. En la actualidad hemos actualizado el convenio sumando a nuevos actores, entre los que cuentan los ministerios de Desarrollo Social y de Economía, Fomento y Turismo; junto con ello creamos las 16 Comisiones Regionales de Construcción Sustentable (CORECS) para articular su Gobernanza.

En la última década se han generado incontables iniciativas que han contribuido a promover, difundir y fomentar la implementación de la construcción sustentable en el desarrollo de la edificación e infraestructura del país, y una de las centrales ha sido la Mesa Interministerial de Construcción Sustentable (MICS), cuyo producto central ha sido la Estrategia Nacional de Construcción Sustentable (ENCS), publicada en 2013 como una hoja de ruta para el desarrollo del trabajo en este ámbito, y que se configuró en uno de los 6 instrumentos de mitigación para el proceso de implementación y seguimiento a la Contribución Nacional Determinada de Chile en el Acuerdo de París (NDC).

Como el periodo de vigencia de esta estrategia venció en 2020, era necesaria una actualización, lo que nos ofrece la oportunidad de elevar su estatus a Plan Nacional de Construcción Sustentable 2050, con el mérito adicional de estar al alero de la Política Nacional de Desarrollo Urbano (PNDU), por ser un documento que entrega principios orientadores y lineamientos que guían hacia una evolución positiva y sustentable de las ciudades y centros poblados en el territorio.

Por lo anterior, ahora nuestra tarea debe abocarse a elaborar un plan que detalle cuáles deben ser los lineamientos estratégicos en materia de la edificación e infraestructura sustentable. De esta manera será posible identificar objetivos, líneas de acción, mecanismos, indicadores y responsables, para poder llevar a cabo políticas concretas de corto, mediano y largo plazo, las que, además, deberán estar alineadas con los compromisos nacionales e internacionales en sustentabilidad del ambiente construido.

El alcance de este plan será entregar lineamientos estratégicos y metas para la incorporación de la sustentabilidad en el ciclo completo de la edificación e infraestructura nacional. La meta que se propone para la nueva versión de esta estrategia es que el sector construcción nacional tienda a la neutralidad al 2050.

Entre los objetivos ambientales preliminares que se contemplan para dar inicio al proceso de elaboración están la reducción de uso de recursos naturales (agua, áridos, madera, terreno) y la minimización de los efectos ambientales (emisiones, residuos, contaminación) en ecosistemas y espacios naturales dados por las distintas etapas de la edificación, junto con otras consideraciones de mitigación y adaptación al Cambio Climático que estarán muy presentes en el diseño de este instrumento.

Junto con lo anterior, otro objetivo ambiental se relaciona con el mejoramiento de los estándares de habitabilidad de las personas y equidad territorial. En este sentido un elemento central en este plan será la instauración de la Certificación de Vivienda Sustentable (CVS) como instrumento capaz de medir la sustentabilidad en el ciclo de vida completo de los proyectos de vivienda, con lo que se promueve que cada una de las etapas tenga un bajo impacto ambiental, entre otros beneficios, con lo que se confirma el importante rol de las certificaciones de edificaciones sustentables, y su aporte a la disminución de huella de carbono de la industria.

La CVS es relevante, además, porque permite promover la oferta y demanda de viviendas sustentables, considerando que, tanto el mercado, como las personas, están mirando hacia la sustentabilidad como un camino hacia soluciones que ofrezcan reducción de costos de operación de la vivienda, lugares más confortables donde vivir, y la oportunidad de aportar a cuidar el medioambiente, que ciertamente es un factor que cada vez tienen más en cuenta las personas.

Actualmente, la actualización del Plan Nacional de Construcción Sustentable 2050 se encuentra en proceso de licitación para su desarrollo, y se espera que para inicios del segundo semestre de 2022 esté disponible el primer borrador para su revisión y aprobación por parte de los actores involucrados en la Mesa interministerial de Construcción Sustentable.

Fuente: CVS Chile

Construcción en madera: Desafío de industrialización para Chile

El programa estratégico nacional Construye2025, ha resaltado en su hoja de ruta (2015) la importancia de considerar a la madera como un material especialmente importante para la sustentabilidad del sector construcción. A la vez, este es un material que presenta desafíos en cuanto a las diversas alternativas y alcances que ofrece, siendo tal vez el más importante declarado en esta estrategia, el desarrollo de una industria para la madera como material de construcción.

Lee la columna completa de nuestro gerente Marcos Brito AQUÍ.

Corfo: Se hace necesario que Chile cuente con estrategia de economía circular que permita avanzar hacia un desarrollo sostenible

La Corporación de Fomento de la Producción (Corfo), es uno de los artífices de “Hoja de Ruta Nacional de Economía Circular para un Chile sin basura 2020-2040” que ha sentado un precedente en nuestro país al generar una política clara que busca instaurar una cultura de reciclaje y reaprovechamiento de los materiales para alcanzar la meta de no generar desechos. Para saber más de la visión de Corfo y su participación en esta propuesta, revista Negocio&Construcción conversó con Pablo Terrazas Lagos, vicepresidente ejecutivo de la Corporación.

Puedes leer la entrevista completa AQUÍ.

Ingeniería estructural: un eslabón importante en la cadena de valor

Por Ian Watt, presidente de la Asociación de Ingenieros Civiles Estructurales (AICE).

Si bien la ingeniería estructural hoy está visibilizada, tanto dentro como fuera de Chile y hemos dado grandes pasos en los últimos años, es necesario seguir trabajando en ello. Somos un eslabón importante dentro de la cadena de valor, al diseñar los proyectos que más tarde verán la luz y, en ese sentido, tenemos que ponernos en sintonía con las nuevas necesidades que va pidiendo el mercado y también las que van impulsando instancias en las que participamos, como el Construye2025, el Instituto de la Construcción, el Consejo de Construcción Industrializada y BIM Forum Chile.

Desde fuera de nuestro país somos destacados por el nivel de nuestra ingeniería. Pero si queremos mantener esa posición, necesitamos avanzar en temas tan relevantes como el diseño por desempeño, así como acelerar la periodicidad con que se revisa nuestra normativa. A más de 10 años de ocurrido el último gran terremoto en Chile, aún no contamos con la normativa actualizada, si bien se han hecho grandes esfuerzos con los decretos y otras normas.

Otro punto pendiente como país es dar un paso sostenido hacia la instrumentación de nuestros edificios, si contamos con un laboratorio natural, estamos desaprovechando información valiosísima que nos podría permitir mejorar cada vez más nuestros diseños y con ello, posicionarnos de una vez por todas, en Chile y el mundo, con el nivel que hemos trabajado por tener y que ha llevado a algunos grandes ingenieros nacionales a salir a otros países y continentes con su trabajo e ideas. 

Pero no podemos quedarnos en eso, tenemos que seguir apuntando a mejorar y para ello, solo la unión y el apoyo de todos los profesionales que estamos involucrados en la ingeniería estructural, podemos avanzar. 

De pandemia a proceso constituyente: los desafíos del 2021

Por Mónica Álvarez de Oro, presidenta de la Asociación de Oficinas de Arquitectos (AOA).

En marzo se cumplió un año desde que se detectó el primer caso de covid-19 en Chile, una pandemia que ha afectado nuestra forma de vivir, con cambios que serán permanentes en nuestros hogares, trabajos y ciudades.

Las viviendas se volvieron oficinas, colegios, comercios, además de acoger el diario vivir, mientras que a la luz de las cuarentenas, las ciudades se replegaron y vieron vacías sus calles. 

A futuro, las urbes se proyectarán diferentes, con más espacios públicos, mejor transporte y viviendas más amplias. El teletrabajo ha promovido la migración hacia lugares menos poblados, que permitan contactar con la naturaleza; las dimensiones de las oficinas se han reducido y la tendencia indica que serán cada día más eficientes, ya que el trabajo será flexible y los horarios, escalonados. La ciudad ya no será como antes y será nuestro trabajo aprender de lo que la pandemia ha dejado. 

Arquitectura chilena hacia el mundo

Durante la crisis, las tecnologías han ayudado trabajar en forma remota, optimizando el tiempo y los recursos, haciendo más competitiva nuestra labor. Las fronteras se han difuminado y es más sencillo generar asociaciones estratégicas con oficinas en otros países. Ya no son necesarios los viajes, las reuniones presenciales o estar en otra región para poder exportar servicios profesionales. 

La arquitectura chilena es exportable en su totalidad: es austera, racional, de gran belleza y elegancia, sin aspavientos ni elementos innecesarios.

El ser un país sísmico y con excelentes resultados en nuestra edificación para enfrentar terremotos, nos destaca a nivel mundial. Por otro lado, tenemos un territorio con una gran diversidad de climas y condiciones geográficas, por lo que entendemos y sabemos cómo enfrentar estos desafíos.

Chile es un mercado limitado para la arquitectura, por eso es importante buscar en el extranjero nuevos espacios, donde podamos llevar nuestra experiencia, generar nuevos ingresos y un nuevo y enriquecedor aprendizaje.

Cambios constitucionales

Para Chile y sus profesionales, el desafío no está solo en acoger esta nueva realidad. Con décadas proyectándose como un país seguro, políticamente estable, con gran desarrollo económico y atractivo para la inversión, desde el estallido social se ha hecho evidente una gran brecha social en la que es urgente trabajar. 

Los grandes desafíos naturales y problemas sociales, deben ser resueltos de la misma forma responsable como desarrollamos nuestras políticas internas, sin caer en demagogias. Sin duda, la resiliencia es un atributo país.

Hoy se acerca el proceso constituyente y todos los profesionales estamos llamados a participar, formulando propuestas y visibilizando la relevancia de la arquitectura y el urbanismo en la calidad de vida de las personas. 

 

Parque de Innovación CTeC, una ventana al futuro para la industria de la construcción

Comprometido con promover la transformación tecnológica, CTeC ya alista para el 28 de abril la inauguración del primer Parque de Innovación para el sector construcción. Ubicado en la Región Metropolitana, el parque consiste en un laboratorio a escala real, único en Chile, donde las empresas podrán pilotear, prototipar, monitorear y validar innovaciones, soluciones constructivas, materiales, tecnología, etc., permitiéndoles probar sus nuevos desarrollos bajo condiciones reales y de manera integrada, antes de ser implementados en obra.

Emplazado en 1.5 hectáreas en la comuna de Pudahuel, el parque fue diseñado bajo la asesoría de BRE de UK, por lo que próximamente se incorporará a la Red Global de Parques de esta destacada institución y líder mundial en el desarrollo de tecnologías sustentables.

A través de este parque, CTeC espera albergar tanto a grandes y pequeñas empresas, startups, investigadores y por supuesto al sector público, convirtiéndose en una plataforma de encuentro entre los diferentes actores de la industria, propiciando sinergias e instancias de colaboración e innovación abierta, promoviendo tecnologías y metodologías disruptivas que impulsen la competitividad, productividad y sustentabilidad de las empresas del sector.

En palabras de Verónica Oyarzún, gerente de Nuevos Negocios de CTeC: “En Chile existen muchas capacidades e ideas disruptivas interesantes, pero lamentablemente muy atomizadas y poco probadas aún, lo que dificulta su masificación y el impacto esperado en el mercado. Por eso, estamos convencidos de que este laboratorio a escala real, será una excelente vitrina y oportunidad de integración de soluciones de todo el ecosistema, difundiendo, tanto a nivel nacional como Latam, las capacidades con las que contamos en nuestro país, y de esta manera, propiciar nuevos proyectos de alto impacto que trasformen positivamente a la industria”.

A la fecha, el Parque cuenta con la participación de más de 20 empresas que se sumaron al desafío de la innovación, y con las cuales se comenzarán a realizar los primeros testeos y monitoreos para el comportamiento de sus nuevas soluciones.

Complementariamente a los servicios de prototipaje y pilotaje, el Parque busca tener un rol clave en el fortalecimiento de las capacidades de la fuerza laboral, tanto profesional como técnica, a través de entrenamientos en terreno. En palabras de Carolina Briones, directora de CTeC “durante el segundo semestre, esperamos realizar capacitaciones a equipos de diseño, construcción u operación. Según un reciente estudio publicado por Matrix para la CChC, sólo un 8% de los colaboradores del sector recibe capacitación de algún tipo, muy por debajo de países más desarrollados, por lo que creemos que resulta clave fortalecer este aspecto para mejorar la performance de nuestros profesionales y posicionar a Chile como un referente a nivel mundial”.

El lanzamiento contará con la participación de destacados expositores internacionales como Alejandro Gutiérrez, director en Arup de UK; Laura Tordera, líder de Innovación en Ferrovial Construcción España y Martin Ganley, director de Innovación de BRE de UK.

 

Fuente: CTeC

CEO de Echeverría Izquierdo asume presidencia del Consejo Directivo de Construye2025

El ingeniero civil estructural, Pablo Ivelic, que cuenta con vasta experiencia en los ámbitos público y privado, sucederá a Vicente Domínguez para continuar impulsando la productividad y la sustentabilidad de la industria de la construcción.

El empresario, dirigente gremial y consultor, Vicente Domínguez, será sucedido por el CEO de Echeverría Izquierdo, Pablo Ivelic, en el liderazgo del Consejo Directivo del Programa Estratégico Nacional en Productividad y Construcción Sustentable impulsado por Corfo, Construye2025, administrado por el Instituto de la Construcción.

El destacado ejecutivo de la construcción, seguirá transformando a la industria de la construcción para volverla más productiva, innovadora y sustentable, siguiendo la línea de trabajo de los últimos años. “Como industria tenemos varias brechas que cubrir. Estamos bastante atrás con respecto a otros rubros. Esta institución que aúna esfuerzos públicos y privados para pensar la construcción con una visión de futuro es valiosa y estoy feliz del llamado a aportar desde esa arista”, afirmó Pablo Ivelic, CEO de Echeverría Izquierdo.

Mejor rendimiento, mayor control, menores residuos y toma de decisiones más eficientes son objetivos que Ivelic ya ha venido persiguiendo desde el mundo privado, por lo que el desafío de articular esfuerzos de todos los actores involucrados en la industria de la construcción no será algo nuevo para para su rol como presidente de Construye2025. “Tenemos que asumir el desafío en forma conjunta. La construcción es un rubro muy fragmentado, tenemos que superar eso y abordar la productividad con innovación”, agregó.

Igual de contento, tras los avances alcanzados durante los años en que le tocó presidir el Consejo Directivo, se mostró Vicente Domínguez, quien cree que la productividad en el sector de la edificación ha ido adquiriendo la prioridad que debe tener, tanto en los organismos del Estado y académicos como en aquellos de representación gremial.

“También considero muy positivo que hayan cobrado vida activa los temas centrales de la industrialización, en particular con el trabajo de Consejo de Construcción Industrializada (CCI), la digitalización en la elaboración de proyectos y revisión de éstos con programas como Planbim y DOM en Línea y los temas de sustentabilidad relacionados con la economía circular y el manejo de los residuos. Asimismo, es muy valiosa la consolidación de un equipo de trabajo que no solo tienen la voluntad y mística necesarias, sino conocimiento y experiencia relevantes, con la seriedad que dan la Corfo y el Instituto de la Construcción”, comentó el presidente saliente.

En este contexto, Marcos Brito, gerente de Construye2025, valoró la impronta de Vicente Domínguez como artífice del programa. “En nombre del equipo, agradezco enormemente su compromiso y visión estratégica para nuestra hoja de ruta y sus iniciativas. Este cambio, esperamos que sea, sin embargo, una oportunidad para renovar nuestra visión, sumar nuevas fuerzas y llegar más profundo en los cimientos de la construcción misma, actividad que necesita ahora más que nunca antes una renovación en su paradigma productivo. Con todo, estamos muy entusiasmados con la llegada de Pablo Ivelic a la gobernanza de Construye2025”, dijo.

Asimismo, el presidente del Instituto de la Construcción, Miguel Pérez, destacó la “generosa dedicación” de Domínguez al desarrollo del programa. “El Instituto de la Construcción (IC) se ha comprometido con el programa Construye2025, no solo como entidad gestora, sino que además con el desarrollo, profundidad de los temas que en él se tratan y objetivos propuestos, todo esto con la finalidad de impulsar la innovación y la productividad en la industria de la construcción, misión que comparten el programa y el IC”, recordó.

Debido a lo anterior, Pérez explicó que era necesario buscar un candidato para la presidencia del programa que estuviera a la altura del Past President y que reuniera cualidades para seguir la ruta y profundizar el impacto que el programa ha tenido en nuestro sector. “Sin lugar a dudas, Pablo Ivelic es una persona que reúne todos los requisitos para liderar el camino que debe recorrer el programa Construye2025 en los próximos años. Lo anterior, no solo por la experiencia y conocimiento que tiene Pablo sobre la industria de la construcción, sino que además por su permanente preocupación en materias de productividad e innovación”, detalló.

“Desde Corfo, estamos confiados en que Pablo Ivelic continuará la senda iniciada por Vicente Domínguez, en el impulso a la productividad y sustentabilidad que se ha dado al sector desde Construye2025. Le agradecemos a Vicente y, a través de Pablo, invitamos con más fuerza al sector privado a sumarse a la innovación y los cambios que necesita el sector”, sostuvo Pablo Terrazas, vicepresidente ejecutivo de Corfo.

De esta manera, Construye2025, junto a Corfo y el Instituto de la Construcción continuarán trabajando colaborativa y coordinadamente en estrategias orientadas a lograr una industria más sustentable, productiva y digitalizada, cuyo aporte al desarrollo económico, social y medioambiental del país, sea reconocido en Chile y el mundo.

La desafiante agenda que enfrenta la nueva presidencia del Consejo Directivo de Construye2025

Con el desarrollo de una serie de temas, se actualizará la hoja de ruta que el organismo definió en 2015. De esta forma, se buscará seguir articulando los esfuerzos públicos y privados para mejorar la sustentabilidad y productividad de la industria de la construcción y su cadena de valor.

Incorporar a la industria de la construcción con aún más fuerza los conceptos y alcances de la industrialización y de la economía circular, el lanzamiento del Mapa Constructec, que dará cuenta de las 50 mejores empresas y startup tecnológicos de la construcción, y la realización de talleres de networking, son algunos de los desafíos que este año enfrentará Pablo Ivelic, quien liderará el Consejo Directivo de Construye2025, Programa Estratégico Nacional en Productividad y Construcción Sustentable impulsado por Corfo y administrado por el Instituto de la Construcción. 

El ingeniero civil UC con mención en ingeniería estructural y que hoy es CEO del holding Echeverría Izquierdo reemplaza en la presidencia de la iniciativa de Corfo a Vicente Domínguez, director ejecutivo de la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios (ADI), con el objetivo de seguir impulsando la sustentabilidad y productividad de la industria de la construcción.

“Estoy convencido de la necesidad de trabajar para sacar a nuestro rubro del status quo, de la situación de sueño en el que se encontraba. Tenemos grandes brechas para avanzar y situarnos en la posición que tienen otras industrias y desde ese punto de vista, para mí es un honor participar en un programa que busca movilizar las fronteras del rubro de la construcción”, afirmó Ivelic.

Domínguez, a su vez, destacó el esfuerzo público-privado mancomunado que ha permitido no solo consolidar la iniciativa Construye2025, sino también el nacimiento de nuevos proyectos que han fortalecido y dinamizado el programa, al cual “se han incorporado muchas más instituciones y personas, detrás del esfuerzo por mejorar la productividad en la edificación”.

Los ejes 2021

En este nuevo período, la directiva de Construye2025 buscará generar las condiciones para que cada vez más empresas del sector incorporen a su quehacer la innovación. En este sentido, una de las iniciativas apunta a desarrollar una herramienta que permita a las compañías definir sus posibilidades de innovar, pero también entregar directrices sobre las áreas en que es posible incorporar nuevas soluciones.

Y en un mundo donde el cuidado del medio ambiente es condición sine qua non para funcionar, la sustentabilidad en la construcción tampoco puede quedar fuera. Por ello, Construye2025 buscará impulsar una propuesta de marco regulatorio integrado y de fomento para la valorización de residuos de construcción y demolición, a través de la coordinación y trabajo colaborativo entre distintos actores públicos y privados

El tema cobra relevancia, pues el manejo sustentable de los residuos impacta tanto en términos de productividad como de la eficiencia de los recursos, dado que medir es primordial para evitar el despilfarro de materiales.

Este ámbito se enmarca en el interés de que la industria internalice los beneficios de la economía circular, que en el exterior ya ha permeado con fuerza al sector. Construye2025 se encuentra coordinando mesas de trabajo con distintos actores de la cadena de valor, con el fin de eliminar las barreras que existen en diferentes ámbitos.

En este contexto, Marcos Brito, gerente de Construye2025, agregó que el Comité Gestor de Marcos Contractuales está trabajando con el grupo de Relaciones Contractuales Justas y Equilibradas de la CChC, para aunar esfuerzos para desarrollar un marco de buenas prácticas, donde la confianza y colaboración guíen el accionar de quienes participan en estos procesos, para evitar que haya un impacto negativo en la cadena de valor del sector, que termine afectando la productividad y la sostenibilidad de la industria.

Además, entre los desafíos de este año está la actualización de la hoja de ruta, que Construye 2025 desarrolló hace 10 años, de modo de ir incorporando diagnósticos y nuevos insumos obtenidos del trabajo con otros organismos, para “construir una sola gran estrategia que nos permita seguir avanzando”. En este sentido, se reforzará el diagnóstico de brechas y oportunidades y todos los aprendizajes que el sector ha adquirido como consecuencia de la pandemia.

Finalmente, Vicente Domínguez también instó a buscar el camino para articular el trabajo entre los distintos programas que han surgido bajo el alero de Corfo y que, por distintos motivos, han tomado distintos rumbos. La idea –dijo- es lograr una relación “orgánica”.

“La construcción es un sector bastante grande, que tiene distintas componentes e identidades que participan y nosotros como programa tenemos tres hélices (lo privado, lo público y la academia) y tal vez nuestro origen público es el que nos ha permitido abrir puertas y avanzar. Eso lo tenemos que saber conjugar y potenciar en los futuros pasos también y recogemos tu sabio consejo de ver qué es lo que ha pasado con los otros programas y cómo nos seguimos relacionando con nuestra iniciativa consolidada”, aseveró Marcos Brito, en la sesión de Consejo Directivo de marzo, invitando a todos a empujar el carro de la tecnología, la innovación y la sustentabilidad.

Estrategia Economía Circular entra en su mes decisivo

Con sesiones en las distintas macrozonas de Chile, para identificar frutos tempranos en regiones, se culminará el trabajo de la Estrategia que se espera esté terminada a finales de abril.

La Estrategia de Economía Circular en Construcción nació como un compromiso conjunto entre la Cámara Chilena de la Construcción, el Instituto de la Construcción y el Construye2025, programa impulsado por Corfo, facilitada por la Corporación de Desarrollo Tecnológico, para realizar una bajada sectorial en el corto plazo, mostrando frutos tempranos al año 2025, el marco de la Hoja de Ruta Nacional de Economía Circular 2040, y en línea con la Hoja de Ruta RCD Economía Circular en Construcción 2035. 

Con la visión de “establecer en Chile la cultura de construcción circular, que permita el desarrollo sostenible de la industria”, la Estrategia tuvo su puntapié inicial en noviembre de 2020, cuando distintos representantes de las instituciones líderes y autoridades nacionales invitaron a adherir.

Con el lanzamiento de la visión se dio inicio al proceso participativo, cuyo objetivo fue identificar y priorizar las principales oportunidades de la industria relacionadas a economía circular, junto con proponer distintas iniciativas que permitieran avanzar en el cumplimiento de la visión al año 2025.

Así, durante diciembre 2020 y enero 2021 se desarrolló un ciclo de charlas de inspiración sobre economía circular en construcción, que buscaban mostrar experiencias y hacer un llamado a la acción. Posterior a las charlas, se realizaron talleres de co-construcción de la estrategia, en las que participaron más de 50 actores de la industria, representantes de la cadena de valor y ecosistema. 

“Desde el diagnóstico realizado en octubre, hasta el ciclo de charlas y talleres, el proceso participativo ha convocado a más de 1.000 personas del sector construcción nacional que ven en la economía circular interesantes oportunidades de innovación”, comenta Katherine Martínez, subgerente de Desarrollo de la CDT.

El ciclo de talleres tuvo como resultado la propuesta de 11 iniciativas estratégicas y más de 30 acciones, distribuidas en seis ejes temáticos principales, a saber: 1. Conocimiento y formación; 2. Marco normativo; 3. Benchmarking y difusión; 4. Innovación; 5. Incentivos; y 6. Colaboración. La Estrategia, además, ha sido acompañada por un plan de comunicaciones que consiste en distintas publicaciones de interés en redes sociales.

Actualmente, “los resultados del proceso participativo se encuentran en revisión por parte del Comité Directivo, además del Comité Ejecutivo y el Comité Consultivo Público que apoyan la Estrategia. Durante abril, se realizarán sesiones en las distintas macrozonas del país para identificar frutos tempranos que surjan en regiones, relacionados a cada uno de los ejes”, cuenta Martínez. 

Finalmente, se espera tener una versión final de la Estrategia a fines de abril de 2021, la que será socializada a través de la realización de un seminario sobre economía circular en la construcción.

Más información en https://economiacircularconstruccion.cl/

Primer Acuerdo de Producción Limpia hará de Valparaíso la región de la economía circular

CChC Valparaíso lanzó el proyecto de Diagnóstico sectorial y propuesta de Acuerdo de Producción Limpia (APL) y consiguió la adhesión de empresas y emprendedores locales que, a través de esta herramienta de la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático de Corfo, tienen la posibilidad de hacer un aporte sustantivo al desarrollo sustentable, ganar en productividad y además acceder a una importante oportunidad de negocios. De esta manera, la Región de Valparaíso se transforma en pionera en el país en avanzar hacia la Economía Circular del sector construcción.

“Impulsar la transición del sector construcción de la Región de Valparaíso desde el modelo de gestión lineal de residuos de construcción y demolición, hacia la Economía Circular”. Este es el objetivo del proyecto de Acuerdo de Producción Limpia impulsado por la Cámara Chilena de la Construcción Valparaíso y la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático de Corfo, el primero del rubro en el país que pone foco en avanzar hacia la Economía Circular, y cuya etapa de diagnóstico fue presentada hoy en un taller de difusión, en el que participaron socios del gremio, empresarios, emprendedores, profesionales y representantes del mundo público y la academia.

“Es un hito trascendente para nuestro gremio, la Región de Valparaíso y para la comunidad. Como presidenta de la Cámara regional no puedo más que valorar el esfuerzo de nuestros socios por enfrentar este inmenso desafío que es la gestión de los residuos de la construcción. Y más aún por hacerlo desde una visión de largo plazo que apunta hacia la sostenibilidad de nuestra industria y que busca avanzar hacia una Economía Circular, que es una misión que nos hemos impuesto como gremio”, expresó la presidenta de la CChC Valparaíso, Marisol Cortez.

Para el presidente de la Comisión Desarrollo Sustentable de la CChC regional, Christian Morales, es necesario un compromiso del sector. “Como constructores hemos llegado al convencimiento de que lo que hagamos o dejemos de hacer hoy para tener una actividad sustentable, será determinante para el futuro de nuestra región, nuestro entorno y las personas. Por eso nos hemos comprometido; porque entendemos que esta acción es clave para la sostenibilidad del desarrollo de la industria de la construcción”, sostuvo.

Verónica Baquedano, encargada regional de la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático de Corfo, destacó que “este trabajo conjunto es un hito muy relevante porque este es uno de los sectores neurálgicos para el avance de la economía circular en el país, dado que el 35% de los residuos sólidos proviene de la construcción y la demolición. Valoramos el interés de los constructores de Valparaíso en este nuevo modelo económico que puede aportar a la eficiencia productiva de las empresas, reducir los impactos ambientales y avanzar desde un modelo de gestión lineal de los RDC hacia la circularidad”.

Felipe Smith de Acción Empresas, en tanto, destacó los beneficios directos de sumarse al APL, para constructores de la región: “Acceden a una reducción de costos; se adelantan a los cambios regulatorios; logran diferenciación; optan a reconocimientos (sellos y certificaciones); y reducen emisiones de gases de efecto invernadero”.

Por su parte Cristián Garín, socio CChC Valparaíso y asesor regional de la Corporación de Desarrollo Tecnológico (CDT), explicó que “el sector construcción ha operado históricamente bajo un modelo lineal que se basa en grandes cantidades de materia prima y energía de bajo costo y fácil acceso. Al mismo tiempo, es una industria altamente ineficiente en términos de uso de recursos”.

“La Economía Circular aparece como una alternativa viable, donde se re-usa todo lo que sea posible y donde los productos son diseñados para ser usados y reutilizados, utilizando energía renovable. Estos principios aplicados a la industria de la construcción traen consigo una serie de beneficios costo-eficientes, con implicancias muy significativas en términos económicos y ambientales como, por ejemplo, ahorros en energía, disminución en costos de disposición final y reducción de emisiones, por mencionar algunos”, agregó el arquitecto especialista en desarrollo sostenible.

Trabajo colaborativo por la sostenibilidad

Finalmente, Katherine Martínez, representante de la CDT, informó que el objetivo el diagnóstico es “Identificar y levantar las motivaciones, prácticas, conocimiento e indicadores de las empresas y/o entidades impulsoras, que permita identificar y resolver las brechas a través de un Acuerdo de Producción Limpia”. Y añadió que la etapa de diagnóstico ya comenzó y se extenderá hasta la primera semana de mayo.

También relevó que el proyecto se inscribe en un gran movimiento nacional a favor de la sustentabilidad y en la Hoja de Ruta de Economía Circular al 2040, impulsada por el Ministerio de Medioambiente.

Junto con ello realizó una convocatoria a los presentes para participar del proceso.  “Este APL que se inicia en la Región de Valparaíso es la instancia de participación para las empresas. Aquí es donde entran todas las empresas a ser parte de este Ecosistema de trabajo y se insertan en esta política a nivel nacional (…) Este diagnóstico nos va a permitir conocer cuál es la situación de la región. Y a partir de eso, nos posibilitará establecer las metas y los alcances del APL”, concluyó.

Cabe destacar que este proyecto de APL se ha trabajado desde 2020 de manera colaborativa entre socios de la Comisión Desarrollo Sustentable y profesionales de la CChC Valparaíso, liderados por el consejero regional Christian Morales, y organismos privados y públicos especializados como la Corporación de Desarrollo Tecnológico, la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático y el Programa Construye 2025 de Corfo.

Proyecta Circular: Herramienta digital para promover la simbiosis industrial

Por Macarena Guajardo Mavroski, arquitecta, fundadora y directora ejecutiva de Fundación Basura

Al igual que la industria de la construcción, Chile es líder -a nivel latinoamericano- en generación de residuos. Para atacar este problema, las primeras iniciativas de las que hemos escuchado, tanto a nivel político como cultural, han girado en torno al reciclaje de residuos, una iniciativa fundamental, sin duda, pero que, sin embargo, pone los énfasis en el final de la jerarquía. Lo más importante y eficiente es y seguirá siendo la prevención. 

Pero, ¿cómo evitar la generación de residuos en una industria que crece constantemente?, ¿cómo evitar que todos estos residuos tengan el impacto negativo que tienen en la ciudad y sus barrios, a través de la generación de microbasurales y vertederos de escombros? Desafortunadamente, personas y seres vivos que no tuvieron nada que ver con esa seguidilla de sucesos, sufren las consecuencias del síndrome del patio trasero (NIMBY – not in my back yard). 

El estallido social y la pandemia del COVID-19 han dejado marcas, reflexiones y cuestionamientos que espero puedan quedarse por largo tiempo en nuestra retina. La detención total del mundo podría significar un atisbo de esperanza a la realidad tragicómica que vivimos, donde buscamos la felicidad a través de objetos que no necesitamos para impresionar a personas que no conocemos, donde construimos guetos verticales en barrios de casas de un piso, con planes reguladores precarios, generando beneficios económicos para algunos y tacos de ascensor para otras personas. Edificios cuyos residuos -desde su fabricación, uso y demolición- atentan contra nuestra propia salud, bienestar y calidad de vida. Esto se refleja en las ciudades, en la arquitectura, en la manera de habitar, en la manera de pensar, de hablar y de votar.

Frente a esta realidad es que hemos creado una alianza entre Fundación Basura y la Facultad de Arquitectura de la Pontificia Universidad Católica, para dar origen a Proyecta Circular, una plataforma de información y apoyo para arquitectos y equipos de profesionales en el proceso de proyecto, permitiéndoles diferenciar los atributos de circularidad de manera homogénea, considerando materiales y componentes que a menudo no los explicitan en sus especificaciones o lo hacen de manera desigual, como sucede desde siempre, hasta en los empaques de los alimentos que compramos en el supermercado. 

Proyecta Circular busca ser una nueva manera de cambiar la competencia por la colaboración, el crecimiento indiscriminado por bien común, la linealidad por circularidad en una de las industrias que más lo necesita: la arquitectura & construcción.

Y ustedes, ¿están listos para la construcción circular?

Profesionales podrán tomar mejores decisiones con nuevo set de “archivos climáticos”

Gracias al trabajo colaborativo entre Certificación Edificio Sustentable y los ministerios de Energía y Obras Públicas, hoy está disponible la información climática de diversos lugares en los que podría emplazarse un edificio. 

El convenio de colaboración entre Certificación Edificio Sustentable y los ministerios de Energía y Obras Públicas 2019 – 2021, hizo posible llevar adelante una iniciativa que permitirá diseñar las estrategias de eficiencia energética de manera más precisa en la construcción de edificios. “Los archivos climáticos entregan información del clima del lugar donde se va a ubicar un edificio. Si quieres evaluar uno en Arica, Santiago o Punta Arenas, por ejemplo, se deben incorporar en el modelo de simulación las condiciones climáticas necesarias para estimar adecuadamente el consumo de energía”, explica el jefe de CES, Hernán Madrid. 

Y es que no es lo mismo hacer un edificio en Arica que uno en Valparaíso, porque las características climáticas de cada zona son muy distintas. Hasta la fecha se utilizan como información únicamente archivos basados en mediciones históricas de algunas estaciones meteorológicas, en ciudades que habían levantado datos o se utilizaban herramientas de aproximación, lo cuál no representa adecuadamente la realidad climática. 

Ahora, gracias a las mediciones tomadas por estaciones ubicadas en diferentes lugares de Chile, con información climática real y actualizada, fue posible generar archivos que contienen datos tremendamente relevantes para el diseño de edificios. Algunos de ellos son: temperatura, humedad, velocidad del viento y nivel de radiación solar. Además de otras secundarias como nivel de nubosidad o temperatura del suelo. 

“Para generar un archivo climático, las características de la información deben ser robustas, hacerse por año continúo, con mediciones hora a hora y al menos por una década. Por eso, aún no podemos tener archivos climáticos de todos los lugares donde hay estaciones meteorológicas, pero ya hay al menos 21 localidades representativas de ocho zonas climáticas en el país. Hay archivos para comunas como Antofagasta, Arica, Pudahuel, Curicó, Chillán, Concepción, Puerto Montt, Valdivia, Temuco, Osorno, Futaleufú, entre otras”, detalla Hernán Madrid. 

Dada la dificultad de contar con información completa y por 10 años es que se elaboraron dos tipos de archivos, los primeros denominados “completos” en los que se cuenta con 10 o más años de medición y los denominados de “transición” que cuentan con entre 7 a 9 años de medición, y que con el paso del tiempo podremos actualizar.

Gracias a este trabajo colaborativo, la estimación de consumos de energía será más precisa, lo cual será de gran utilidad tanto para los Asesores CES, como para los de la CVS y otros dedicados a mejorar el diseño y la gestión energética de los edificios.

Los archivos están disponibles en Otros Documentos de la sección Documentos del sitio web de CES.

CEO de Echeverría Izquierdo asume presidencia del Consejo Directivo de Construye2025

El ingeniero civil estructural, Pablo Ivelic, que cuenta con vasta experiencia en los ámbitos público y privado, sucederá a Vicente Domínguez para continuar impulsando la productividad y la sustentabilidad de la industria de la construcción.

Luego de una prolífica gestión de parte del empresario, dirigente gremial y consultor, Vicente Domínguez, el CEO de Echeverría Izquierdo, Pablo Ivelic, será quien encabece el Consejo Directivo del Programa Estratégico Nacional en Productividad y Construcción Sustentable impulsado por Corfo, Construye2025, administrado por el Instituto de la Construcción. 

El ingeniero civil tendrá la misión de continuar transformando a la industria de la construcción para volverla más productiva, innovadora y sustentable. “Como industria tenemos varias brechas que cubrir. Estamos bastante atrás con respecto a otros rubros. Esta institución que aúna esfuerzos públicos y privados para pensar la construcción con una visión de futuro es valiosa y estoy feliz del llamado a aportar desde esa arista”, afirmó Pablo Ivelic, CEO de Echeverría Izquierdo. 

Mejor rendimiento, mayor control, menores residuos y toma de decisiones más eficientes son objetivos que Ivelic ya ha venido persiguiendo desde el mundo privado, por lo que el desafío de articular esfuerzos de todos los actores involucrados en la industria de la construcción no será algo nuevo para para su rol como presidente de Construye2025. “Tenemos que asumir el desafío en forma conjunta. La construcción es un rubro muy fragmentado, tenemos que superar eso y abordar la productividad con innovación”, agregó. 

Igual de contento, tras los avances alcanzados durante los años en que le tocó presidir el Consejo Directivo, se mostró Vicente Domínguez, quien cree que la productividad en el sector de la edificación ha ido adquiriendo la prioridad que debe tener, tanto en los organismos del Estado y académicos como en aquellos de  representación gremial.

“También considero muy positivo que hayan cobrado vida activa los temas centrales de la industrialización, en particular con el trabajo de Consejo de Construcción Industrializada (CCI), la digitalización en la elaboración de proyectos y revisión de estos  con programas como Planbim y DOM en Línea y los temas de sustentabilidad relacionados con la economía circular y el manejo de los residuos. Asimismo, es muy valiosa la consolidación de un equipo de trabajo que no solo tienen la voluntad y mística necesarias, sino conocimiento y experiencia relevantes, con la seriedad que dan la Corfo y el Instituto de la Construcción”, comentó el presidente saliente.

En este contexto, Marcos Brito, gerente de Construye2025, valoró la impronta de Vicente Domínguez como artífice del programa. “En nombre del equipo, agradezco enormemente su compromiso y visión estratégica para nuestra hoja de ruta y sus iniciativas. Este cambio, esperamos que sea, sin embargo, una oportunidad para renovar nuestra visión, sumar nuevas fuerzas y llegar más profundo en los cimientos de la construcción misma, actividad que necesita ahora más que nunca antes una renovación en su paradigma productivo. Con todo, estamos muy entusiasmados con la llegada de Pablo Ivelic a la gobernanza de Construye2025”, dijo.

Asimismo, el presidente del Instituto de la Construcción, Miguel Pérez, destacó la “generosa dedicación” de Domínguez al desarrollo del programa. “El Instituto de la Construcción (IC) se ha comprometido con el programa Construye2025, no solo como entidad gestora, sino que además con el desarrollo, profundidad de los temas que en él se tratan y objetivos propuestos, todo esto con la finalidad de impulsar la innovación y la productividad en la industria de la construcción, misión que comparten el programa y el IC”, recordó. 

Debido a lo anterior, Pérez explicó que era necesario buscar un candidato para la presidencia del programa que estuviera a la altura del Past President y que reuniera cualidades para seguir la ruta y profundizar el impacto que el programa ha tenido en nuestro sector. “Sin lugar a dudas, Pablo Ivelic es una persona que reúne todos los requisitos para liderar el camino que debe recorrer el programa Construye2025 en los próximos años. Lo anterior, no solo por la experiencia y conocimiento que tiene Pablo sobre la industria de la construcción, sino que además por su permanente preocupación en materias de productividad e innovación”, detalló. 

“Desde Corfo, estamos confiados en que Pablo Ivelic continuará la senda iniciada por Vicente Domínguez, en el impulso a la productividad y sustentabilidad que se ha dado al sector desde Construye2025. Le agradecemos a Vicente y, a través de Pablo, invitamos con más fuerza al sector privado a sumarse a la innovación y los cambios que necesita el sector”, sostuvo Pablo Terrazas, vicepresidente ejecutivo de Corfo.

De esta manera, Construye2025, junto a Corfo y el Instituto de la Construcción seguirán coordinándose, trabajando en estrategias orientadas a lograr una industria más sustentable, productiva y digitalizada, cuyo aporte al desarrollo económico, social y medioambiental del país, sea reconocido en Chile y el mundo. 

Día del obrero constructor: un pilar esencial para la industria

Por Raúl Letelier Rubio, director nacional de Simoc Chile, integrante del Consejo Directivo de Construye2025

Esta celebración es una oportunidad más para agradecer el compromiso que tienen los “viejitos” en cada obra a lo largo y ancho de Chile, para aportar al desarrollo y bienestar de nuestro país.

Hoy, que la industria enfrenta momentos complicados por efectos de la pandemia, debemos reforzar nuestro autocuidado, para enfrentar la jornada diaria y cumplir con los protocolos sanitarios que cada empresa lleva a cabo en las distintas obras del país, ya que los trabajadores somos un pilar esencial para la industria. 

Pese a ello, necesitamos seguir impulsando la certificación para los maestros de la construcción, ya que debido al bajo porcentaje de maestros certificados, hoy no es un beneficio a la hora de emplearse. Aún hay desconocimiento de las empresas sobre el sistema de capacitación y evaluación de competencias laborales y, en especial, de la ley 20.267 que es la que crea y da forma al sistema.

El trabajador certificado tiene la satisfacción de saber que el trabajo que está desempeñando lo sabe hacer y lo hace bien. Pero por ahora no existe ninguna trazabilidad para identificar si con ese conocimiento tendrá más movilidad laboral, mejores expectativas económicas y, por último, saber si es más productivo o no. Todas estas interrogantes las tenemos a casi nueve años de instalado el sistema.

Si avanzamos hacia la implementación de un sistema de formación basado en la certificación, los nuevos trabajadores contarían con conocimientos adquiridos en seguridad, materiales y maquinarias usadas en los diferentes perfiles ocupacionales. De esta manera, los tiempos de inducción y adaptación en obra serían mucho más acotados, más simples y la capacitación sería más técnica y dirigida, solo para marcar y cerrar brechas de conocimientos.

Para llegar a esto, es importante identificar cuál es el mejor proceso de aprendizaje, hoy en día se han perdido los oficios de la construcción, en especial los de edificación que se aprendían en obras y, por lo general, eran transmitidos en forma verbal por los padres a hijos y familiares, o algún maestro con años de experiencia, así el trabajador aprendía lo bueno y lo malo de estos clanes o cuadrilla en las cuales le tocaba trabajar. Los oficios aún se aprenden en obra, aunque ya no de forma tan familiar. También existen Centros de Formación Técnica e Institutos Profesionales que imparten carreras relacionadas a la construcción, pero no vemos los cursos básicos como carpinteros, enfierradores y albañiles, que a pesar de los avances tecnológicos, nunca dejarán de existir en el rubro. Es difícil visualizar que a través de una formación en aula, podremos sacar a un maestro competente y listo para una obra hoy en día, por las diferentes condiciones y variables que tienen las diferentes obras o faenas.

Con un sistema de certificación, esperamos que los maestros obtengan lo que sugiere la ley, mayor movilidad, dignidad y, con ello, una mejora en sus remuneraciones, y la seguridad de mejorar la productividad del sector. La sistematización en un futuro nos permitirá contar con trabajadores capacitados y tecnificados de acuerdo a los nuevos tiempos y tecnologías que ya están apareciendo en el mercado, es decir, el paradigma de la construcción de ladrillo sobre ladrillo ya está en retirada y, para eso hay que adecuar la forma en que hoy se imparte la capacitación y enfocarse en la nueva materialidad y trabajabilidad de los mismos.

Debemos destacar que todo esfuerzo que se haga a favor de los obreros en capacitación y certificación es gratificante y que reconozcan tu trabajo nos devuelve la dignidad y así nosotros podemos entregar un trabajo de calidad a la primera. Como organización sindical estamos seguros de que este es el camino a seguir, para dar a nuestro trabajo la dignidad y reconocimiento que merecemos como parte integral del rubro construcción.

El llamado es a aunar esfuerzos para certificar al “viejito” que ya está en obra, pero que aún son jóvenes; aquellos que ya tienen familia y les quedan largos 35 años para jubilar, ahí hay que meter las fichas como dicen los viejos de la “constru”, porque ellos ya están cautivos y ninguno ha recibido formación para el trabajo y mucho menos una certificación. Y si los hay, son los menos. 

Asimismo, no podemos olvidar al trabajador migrante, un desafío no menor, porque se están incorporando masivamente a la industria y debemos garantizarles la seguridad laboral y el respeto de los derechos de estos nuevos trabajadores, generando una cultura inclusiva entre todos los actores de la industria de la construcción. Con ello, evitamos la discriminación salarial y el trato que se les da a los trabajadores foráneos y extender a ellos la posibilidad de capacitación y certificación de sus habilidades y destrezas, para que sean también un real aporte al mundo laboral.

Productividad: Cuatro grandes ámbitos para mejorar

En la columna del mes anterior en revista Negocio&Construcción, Marcos Brito, gerente de Construye2025, se refirió al diagnóstico del potencial de crecimiento de McKinsey (2007), que señala cuatro grandes ámbitos para concentrar acciones de mejora. “A pesar de su antigüedad, veamos cómo poder traerlos a valor presente. La discusión está abierta”, dice.

Puedes ver cuáles son los cuatro ámbitos AQUÍ.

Paso a paso con la economía circular en construcción

Alejandra Tapia Soto, coordinadora de Sustentabilidad de Construye2025, compartió con la revista Negocio&Construcción una columna sobre la economía circular en la construcción, los desafíos que tiene y cómo cualquier cambio debe ser implementado desde nuestra cultura.

Puedes leerla completa AQUÍ.

Se construye en Viña del Mar centro de valorización de residuos de la construcción

La iniciativa, que considera los ODS de la ONU y metas nacionales para frenar el cambio climático, está semifinalista en un concurso de innovación en sostenibilidad de Caja Los Andes.

Una iniciativa inédita se está proyectando en la Región de Valparaíso para darle una nueva vida a los residuos que genera la construcción. Se trata del Centro de Valorización de RCD, que está desarrollando la empresa Revaloriza, que también es parte de Plataforma Industria Circular de la Universidad de Valparaíso.

Para tener una idea de la importancia de este proyecto, el 35% del total de residuos que se generan en Chile corresponde a los residuos de construcción y demolición (RCD), en tanto que siete regiones no poseen sitios autorizados para su depósito legal.

Dado que, a la fecha, no existen centros que promuevan la economía circular de estos materiales este megaproyecto viene a suplir esa falencia.

El centro que hoy ya está siendo construido en sector industrial de Viña del Mar, considera los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU, así como metas nacionales para frenar el cambio climático y disminuir los impactos socioambientales generados en la región, producto de los basurales, incendios y remociones en masa que han afectado a varias comunas.

Además, hoy la iniciativa está semifinalista en un concurso de innovación en sostenibilidad de Caja Los Andes en donde pueden apoyar el proyecto, registrándose y votando en el siguiente link: https://www.cajalosandes.cl/tecla-votacion por REVALORIZA, IMPULSO A LA ECONOMIA CIRCULAR | TECLA – Caja Los Andes.

Beneficios de la industrialización de los procesos constructivos

Por Lucio Ricke G., presidente de AICE.

Desde hace tiempo, se ha estado discutiendo en relación con los bajos índices de productividad que tiene la industria de la construcción en Chile, a lo cual se suman las complejidades operacionales que ha traído esta pandemia y, en ambos sentidos, la idea de industrializar los procesos constructivos parece una buena solución, considerando que se asume que tiene virtudes como optimización de procesos y uso de recursos, aumento de calidad y disminución de plazos.

Pasos importantes se han dado con el surgimiento del hormigón premezclado, las armaduras fabricadas en maestranzas, entre otros, todos procesos que han aumentado la productividad y también la calidad de las obras, porque tienen mayores controles de fabricación, considerando la normativa de cada material utilizado.

Pero cuando hoy hablamos de industrialización de la construcción, estamos pensando en el proceso completo, desde su diseño hasta el término de la obra, y para ello se requiere avanzar en planificación temprana de las obras, incorporando a todos los profesionales que intervienen en el proyecto, en capacitación de mano de obra y en definición de protocolos y normativa que establezca estándares mínimos para toda la cadena productiva que interviene en el proceso y así alcanzar la eficiencia que se está buscando.

Por ello, es muy importante la incorporación de las tecnologías BIM en la administración de los proyectos, pero aquí también es necesario avanzar en normativa que estandarice su uso y definiciones, para lograr mayor transversalidad y amplitud de aplicación.

En este sentido, es muy importante el trabajo que se está realizando en el Instituto de la Construcción, a solicitud del Minvu, en el comité que está desarrollando el “Anteproyecto de norma industrialización – Principios y definiciones generales”, donde participa una amplia gama de instituciones que aportan sus distintas miradas en la redacción de un documento que establecerá los conceptos mínimos que requiere una innovación tan importante como esta para nuestra industria.

Ahora, en nuestro caso, de manera muy especial, se requiere la incorporación del ingeniero estructural en las etapas de anteproyecto, para que desde el principio pueda aportar soluciones estructurales acordes a las demandas propias de la naturaleza de nuestro entorno y que sean eficientes en el proceso industrial de construcción.

Adicionalmente, cuando la industrialización de la construcción también alcanza elementos estructurales de una obra, se requiere que dichos elementos tengan comportamiento sísmico certificado y compatible con los requerimientos de la estructura y que sus patentes comerciales permitan al ingeniero responsable y al revisor independiente de cálculo, si es que corresponde, validar estos elementos de acuerdo a las responsabilidades que la ley exige al ingeniero estructural responsable, temas que también deben ser parte del desarrollo normativo pendiente.

En este sentido, es una muy buena noticia que recientemente el MOP oficializara la norma NCh 3417 Requisitos para Proyectos de Cálculo Estructural, que define los alcances y complejidades de los servicios profesionales de cálculo estructural, la estandarización de los procesos para quienes ejercen la profesión, indicando el estándar de servicio y la forma en que se relacionan las distintas subespecialidades o áreas de especialización del cálculo estructural, e incluye expresamente los conceptos de elementos estructurales con ingeniería previa, que serían todos los elementos que una industria externa puede proveer a la estructura resistente.

Desde la ingeniería estructural, consideramos que las estructuras en Chile han tenido un muy buen comportamiento frente a los requerimientos de sus usuarios y la naturaleza, y eso se debe a buenos procedimientos de diseño y construcción, lo cual debemos cuidar y avanzar en productividad y eficiencia, sin sacrificar en lo más mínimo la calidad y respuesta dúctil de las estructuras.

Fuente: Instituto de la Construcción

Minvu convoca al 1º proceso 2021 para acreditación de evaluadores energéticos de la Calificación Energética de Viviendas

Arquitectos, ingenieros y constructores civiles interesados pueden inscribirse en el sitio http://www.calificacionenergetica.cl desde el 4 de marzo hasta el 5 de abril de 2021.

El Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) abrió la convocatoria para postular al llamado nacional de profesionales interesados en acreditarse como evaluadores energéticos de la Calificación Energética de Viviendas (CEV), instrumento impulsado por esta cartera de Estado junto al Ministerio de Energía.

Para participar en el proceso, los interesados deberán cumplir los requisitos definidos por el Minvu en la Resolución Exenta Minvu N°162 del 12 de febrero de 2021 y completar el formulario de inscripción disponible en el siguiente enlace: http://calificacionenergetica.minvu.cl/proceso-de-acreditacion-de-evaluadores/.

El llamado de acreditación está dirigido a arquitectos, ingenieros y constructores civiles, que cumplan con los requisitos descritos en la resolución N° 162. Los postulantes debidamente inscritos serán seleccionados para rendir una prueba de conocimientos mínimos habilitante para el siguiente paso del proceso. El resultado de la etapa de inscripción se publicará el 9 de abril de 2021 en la página web de la Calificación Energética de Viviendas (http://www.calificacionenergetica.cl).

Calificación Energética de Viviendas

La Calificación Energética de Viviendas (CEV) es un instrumento disponible para uso voluntario desde el año 2012, que permite realizar una evaluación objetiva y estandarizada para estimar y clasificar el requerimiento energético de casas y departamentos para lograr una temperatura considerada como apropiada para sus usuarios.

La CEV evalúa la eficiencia energética de las viviendas en su etapa de uso considerando el desempeño de su envolvente, el aporte de energías renovables y el consumo de energía para obtener agua caliente sanitaria, iluminación y calefacción. El resultado de dicha evaluación se materializa en una etiqueta que muestra el porcentaje de ahorro en la demanda de energía y la cantidad de energía necesaria para calefacción y enfriamiento.

Nueva Ley de Eficiencia Energética: Más calidad para las viviendas

Respecto de este instrumento de medición, el ministro de Vivienda y Urbanismo, Felipe Ward, expresó que: “como Ministerio, estamos incorporando criterios de eficiencia energética en nuestros programas y proyectos, porque estamos convencidos de que este tipo de iniciativas, junto con disminuir el consumo energético de las viviendas, permiten optimizar la temperatura en el interior y dar una mejor calidad de vida a las familias. Con esto, reducimos al mismo tiempo la emisión de gases de efecto invernadero, lo que va en la línea de lo que estamos impulsando en el Minvu: estándares de construcción más sustentables y comprometidos con el medio ambiente”.

Por su parte, Erwin Navarrete, jefe de la División Técnica de Estudio y Fomento Habitacional (Ditec) del Minvu, añadió que: “La información que proporciona la CEV es relevante en muchos sentidos, pero, por sobre todo, para los usuarios finales, ya que una vivienda energéticamente eficiente, no sólo involucra un menor gasto energético, sino también tiene un impacto directo en la calidad de vida de las familias y en la vida útil y plusvalía de la vivienda”.

Asimismo, relevó que: “La CEV fomenta la edificación de viviendas más eficientes, aportando en la introducción de un gran cambio en la forma en que se diseñan y construyen las viviendas en nuestro país, al concebir las medidas de sustentabilidad desde la génesis de los proyectos y no como elementos anexos” y agregó que  estamos trabajando para que la eficiencia energética sea un atributo que influya al momento de adquirir una vivienda, ya que no solo mejora la calidad de vida de las familias que viven en ellas, sino que también es un importante atributo de calidad que las hace más competitivas, tal como ocurre en mercados más desarrollados. En esta tarea es fundamental el rol de evaluadores energéticos, que son los profesionales acreditados para aplicar la calificación; por esta razón abrimos una nueva convocatoria para sumar nuevos evaluadores a los 1.051 que ya operan a lo largo del país”.

“Un hito crucial en este ámbito se relaciona con la reciente promulgación de la Ley de Eficiencia Energética –agregó Erwin Navarrete–, que hace obligatorio mostrar la CEV en toda publicidad de proyectos inmobiliarios y la recepción municipal definitiva de viviendas desde el 2023. Este nuevo escenario generará un alza en la demanda de evaluaciones, la que requerirá una mayor masa crítica de evaluadores energéticos de los ya existentes, por lo cual seguimos trabajando en mejorar los procesos de acreditación de nuevos evaluadores”, precisó.

Las principales fechas del primer proceso de acreditación de 2021 son las siguientes:

 

Hito Fechas 1er proceso 2021
Inscripción en formulario web Desde 4/3/2021 hasta 5/4/2021
Formulación consultas Desde 1/3/2021 hasta 26/3/2021
Publicación de inscritos correctamente 9/4/2021
Envío instrucciones prueba conocimientos mínimos (PCM) 19/4/2021
Realización PCM 20/4/2021
Publicación resultados PCM 23/4/2021
Realización prueba de acreditación (PA) 17/6/2021
Publicación resultados PA 24/6/2021

Avances en la Calificación Energética de Viviendas

La calificación energética está vigente desde 2012. Al 31 de diciembre de 2020, y a lo largo de todo el país, se han realizado más de 76 mil evaluaciones y se han acreditado como evaluadores energéticos de la CEV 1.051 profesionales.

En 2015 ya se había logrado un gran avance en la instalación de capacidades para el uso masivo de la CEV, lo que permitió recoger la experiencia de distintos actores de los sectores académico, industrial y gubernamental, además de la retroalimentación que aportaron los evaluadores energéticos de distintas regiones a lo largo del país. A partir de esta información se desarrolló la actualización de la CEV que entró en vigencia el 21 de abril de 2018, y que afina el proceso de cálculo, incorporando nuevas variables que incluyen los cambios introducidos en la reglamentación térmica (4.1.10 Bis de la OGUC), y entrega resultados más detallados y útiles, tales como la demanda de enfriamiento y horas fuera de la temperatura confortable.

En los primeros años de operación fue necesario realizar importantes esfuerzos para instalar capacidades a lo largo del país y comunicar los atributos de la CEV a los mandantes de proyectos. Este trabajo se puede ver en el progreso de las evaluaciones de viviendas desarrolladas por inmobiliarias privadas, que, al principio, fue discreta, pero que en 2019 mostró una evolución muy significativa, sobrepasando el volumen de evaluaciones anuales históricas realizadas a viviendas sociales (ver gráfico).

Corfo abre seis programas para incentivar la innovación en emprendedores

Los programas buscan mejorar la productividad y competitividad en las pymes, potenciando la innovación y la Investigación y Desarrollo (I+D)., entre ellos Súmate a la Economía Circular.

Resolver problemas o desafíos de productividad y competitividad, desarrollando nuevos o mejorados productos, procesos y servicios al interior de una empresa, de la mano de la innovación e I+D, y apoyando su validación comercial, son algunas de las prioridades de los instrumentos que Corfo abre hoy a las 17:00 horas en su sitio web.

“En tiempos difíciles como los actuales, innovar se alza como la mejor alternativa para el crecimiento y desarrollo de las empresas. Corfo, a través de los programas que pondrá a disposición de emprendedoras y emprendedores a partir de hoy, busca que sean muchos más quienes se sumen a este camino, para que con nuestro apoyo puedan desarrollar desde innovaciones simples hasta las más sofisticadas, para luego validarlas comercialmente e impulsar su expansión en mercados nacionales e internacionales”, destaca Pablo Terrazas, Vicepresidente Ejecutivo de Corfo, quien añade que uno de ellos, “Súmate a Innovar”, incorporará un interesante foco en Economía Circular.

Estos son los seis programas que están disponibles : 

Súmate a la Economía Circular:

Programa que apunta a resolver problemas o desafíos de productividad y competitividad al interior de las empresas de la mano de la innovación, bajo el marco de la Economía Circular, entregando un cofinanciamiento de hasta 10 millones de pesos. Cierre: 23-03-2021

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Consolida y Expande:

Programa que apunta a apoyar escalamientos de nuevos productos, procesos y servicios que tengan un componente de I+D+i. Otorgará un subsidio máximo de hasta 40 millones de pesos y su cofinanciamiento dependerá del tamaño de la empresa postulante. 

Cierre: 24-03-2021

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Crea y Valida Rápida Implementación:

Enfocado en apoyar el desarrollo de nuevos o mejorados productos, procesos y servicios de base tecnológica, desde un prototipo hasta su validación técnico comercial. Este llamado tiene un cofinanciamiento de hasta 30 millones de pesos. 

Cierre: 25-03-2021

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Crea y Valida I+D+i Colaborativo y Empresarial:

Con estos dos programas se quiere apoyar el desarrollo de nuevos o mejorados productos, procesos y servicios de base tecnológica, desde un prototipo hasta su validación técnico comercial para buscar solución a problemas y/o desafíos del sector productivo o aborden una oportunidad de mercado, a través de Investigación y Desarrollo (I+D+i).

Este llamado entrega un cofinanciamiento que se diferencia según sus categorías: Proyecto de I+D+i empresarial: $100.000.000 y Proyecto de I+D+i colaborativo: $120.000.000.

Cierre: 30-03-2021

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Innova Región:

Este programa apoyará el desarrollo de nuevos o mejorados productos, procesos  y/o servicios desde la fase de prototipo hasta su validación comercial, y deben tener, al menos, un alcance regional. Se entregará un cofinanciamiento de hasta $30 millones de pesos distribuidos en dos etapas: la primera para la construcción del prototipo, y la segunda para la validación de dicho prototipo. 

Cierre: 31-03-2021

Más información aquí.

Fuente: Diario Sustentable

El futuro de la construcción será circular

Por Felipe Ossio, académico de la Escuela de Construcción Civil de la Universidad Católica.
El reciente Circularity Gap Report 2021 (https://www.circularity-gap.world/2021) nos muestra que la economía mundial es un 8,6% circular siendo necesario duplicar la circularidad a 17% para vivir en un mundo próspero y habitable.

Para lograr tan ambiciosa meta la industria de la construcción es fundamental.

Según la Fundación Ellen MacArthur, la industria de la construcción representa alrededor de un tercio del consumo mundial de materiales y la generación de residuos. Esto puede ser contrarrestado implementando nuevas técnicas de construcción que estén en línea con los principios de la economía circular, motivo por el cual es considerada uno de los cinco sectores claves para una efectiva transición a la economía circular.

En vista de ello, iniciativas como el desarrollo de la Estrategia de Economía Circular en Construcción lanzada por el Instituto de la Construcción, junto con la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) y el programa Construye2025 de Corfo, y con la facilitación técnica de la Corporación de Desarrollo Tecnológico (CDT), que pretende establecer en nuestro país una cultura de construcción circular, que permita el desarrollo sostenible, social, ambiental y económico de la industria, son fundamentales.

Pero, para aplicar los principios de la economía circular en la construcción, hay que tener en consideración tres grandes ejes:

El primero es el diseño y construcción de proyectos con atributos circulares, es decir, proyectos capaces de adaptarse a las necesidades, demandas y condiciones en constante cambio de los usuarios. Asimismo, son proyectos con la posibilidad de extender la vida útil mediante la fácil reparación y/o sustitución de componentes debido a la capacidad de desmontaje del producto y la fácil valorización mediante la deconstrucción.

El segundo es la utilización de materiales disponibles en edificios existentes, conocido usualmente como Urban Mining, con dos grandes etapas. La primera es la adecuada gestión de residuos de construcción y demolición en obra; y la otra etapa tiene relación con considerar que la infraestructura existente es una cantera de materiales, no es necesario utilizar materiales vírgenes si podemos deconstruir los edificios y reutilizar y reciclar los elementos que salgan de ellos.

Finalmente, el tercer eje es el desarrollo de nuevos modelos de negocios que permitan crear valor agregado a lo largo del ciclo de vida dentro de ciclos cerrados de materiales.

Sin duda, el futuro de la industria de la construcción será circular y no nos podemos quedar debajo de este desafío.

Fuente: Instituto de la Construcción

El 38% de la cartera de proyectos certificados por Chile en 2021 por el Climate Bond Initiative (CBI) fue validado con CES

La certificación de estos proyectos por el CBI contribuyó a la segunda emisión de Bonos Verdes Soberanos por el país, y fue promovida por la Dirección de Arquitectura del MOP.

El 18 de enero Chile realizó la segunda emisión de bonos verdes soberanos en una operación por un monto aproximado de USD$1.180 millones (euros y dólar), que consideró la cartera de proyectos recientemente certificados por el Climate Bond Initiative (CBI), a los que se le suman el remanente de proyectos certificados en 2019 y 2020 que no fueron incluidos en la primera emisión de bonos verdes.

La cartera de proyectos 2021, por un total de US$369 millones aproximadamente, incluye iniciativas relacionadas con transporte limpio, que aportaron un 56% del total; proyectos de energía renovable en sectores vulnerables (Ministerio de Vivienda) con un 6% del total; y proyectos dependientes del Ministerio de Obras Públicas, entre los que se cuentan iniciativas de Movilidad Sustentable (7%) y Edificios Verdes cuya Unidad Técnica es la Dirección de Arquitectura, que representan un 38% de la cartera y que cuales utilizaron CES como herramienta de validación de reducción de consumos de energía y emisiones.

Esta excelente noticia para Chile tiene muy contentas a las autoridades del Ministerio de Obras Públicas, especialmente de la Dirección de Arquitectura y de la Secretaría de Medio Ambiente y Territorio (SEMAT) y, por supuesto, al Directorio de la Certificación Edificio Sustentable (CES), administrada por el Instituto de la Construcción. “Es una alegría tremenda que hayamos podido colaborar como herramienta de medición en los proyectos de la Dirección de Arquitectura MOP, lo que permitió el aporte de 38% de estos proyectos”, afirmó el jefe de CES, Hernán Madrid.

Los bonos verdes son aquellos donde existe el compromiso del emisor de destinar un monto equivalente a lo recaudado en proyectos con características verdes. El chequeo de esta condición lo hacen entidades externas, las cuales verifican la alineación a los estándares internacionales, así como el beneficio climático de cada uno. En este sentido, los proyectos verdes chilenos recibieron la certificación de la ONG internacional CBI (Climate Bond Initiative).

Desafíos de la certificación

Lograr que CES fuera reconocido como una herramienta válida para cuantificar la reducción de emisiones requirió de un arduo trabajo llevado adelante por el Ministerio de Hacienda, la Dirección de Arquitectura MOP y la Administración de CES, en la que se debió superar un proceso de auditoría llevado a cabo por la agencia francesa Vigeo Eiris para validar las metodologías técnicas incorporadas en la herramienta.

Por ello, la certificación por Climate Bond Initiative y la emisión de bonos verdes soberanos viene a ratificar el enorme trabajo que ha realizado la Dirección de Arquitectura MOP, incorporando la exigencia de Precertificación (diseño) y Certificación (obra) del sistema nacional Certificación Edificio Sustentable (CES) en los términos de referencia de las licitaciones públicas. 

“Este resultado es de gran valor para la Dirección de Arquitectura del MOP, a nivel regional y central, donde hubo un destacado trabajo con la SEMAT y CES. Gracias a la gestión integrada, realmente constituimos un equipo interdisciplinario de trabajo”, afirmó la vicepresidenta del Comité Directivo de CES y jefa del Departamento de Construcción Sustentable de la Dirección de Arquitectura del MOP, Margarita Cordaro. 

¿El siguiente paso? La Directora General de Obras Públicas, Mariana Concha, adelanta que Chile ya está avanzando en la certificación de proyectos en los aeropuertos, que tienen características de edificación pública. “Esperamos que todos ellos se certifiquen, esa va a ser una línea de desarrollo muy importante en los próximos años. Pero también quisiéramos que haya una certificación en sustentabilidad para otro tipo de obras, no solamente para las de edificación y ahí tenemos que pensar con el Instituto de la Construcción en una para obras civiles”, dijo. 

En paralelo, la DGOP, que lidera Mariana Concha, continúa buscando la economía circular, adecuando todos los proyectos de diseño desde el inicio, con criterios de reutilización de los residuos de la construcción. Además, Chile está apostando por la minimización de los insumos naturales como material granular o combustible, en definitiva, que el proceso de diseño contemple la minimización de todos los insumos y de todos los consumos energéticos.

¿Por qué mejorar la productividad en la construcción?

Por Marcos Brito, gerente de Construye2025

“La productividad no es todo, pero en el largo plazo, es casi todo”, señala el Nobel de Economía Paul Krugman, en una de sus célebres frases. El concepto de productividad, como ha sido definido por la Comisión Nacional de Productividad (CNP), es una medida de cuántos bienes y servicios se producen con un número determinado de factores productivos, por ejemplo, trabajo y capital. En consecuencia, si existe aumento de la productividad es porque se han producido más bienes o servicios con los mismos recursos. Una mayor productividad del capital, asimismo, aumenta los incentivos a invertir, lo que trae consigo una elevación de las remuneraciones del trabajo. Al final, el resultado es crecimiento económico y equidad.

En términos generales, el crecimiento significativo de la productividad en Chile, ya es un hecho pasado, pues hoy asistimos a una baja relevante de los índices de crecimiento de la productividad en un buen número de sectores, por lo que se requiere entrar en un nuevo impulso, si realmente se desea llegar a los niveles de los países desarrollados.

Según McKinsey & Co., el potencial de crecimiento de nuestro país se sustenta, principalmente, en productividad, participación y población. Así, en los años 90 crecíamos a una tasa promedio de 6,3%, donde 4,2% se debía a mejoras en productividad. Hoy, la productividad ya no avanza de la misma forma (ya no supera el 2% de crecimiento) y, en el caso de la construcción, ha estado estancada por ya muchos años.

“No hay una bala de plata, mejorar la productividad depende de muchos factores”, señalaba en 2019 Raphael Bergoeing, presidente de la CNP. En consecuencia, la misma organización -por mandato presidencial- desarrolló un completo estudio de productividad para el sector de la construcción (tras haberlo hecho también exitosamente para la minería), que además fue complementado por otro diagnóstico realizado por Matrix Consulting (por encargo de la CChC). La lista de tareas es vasta y compleja, pero junto a la hoja de ruta de Construye2025, la misión está declarada: si queremos crecer y desarrollarnos, hay que mejorar la productividad.

Anterior a estos estudios, McKinsey, en su diagnóstico de potencial de crecimiento (2007), señalaba al menos cuatro grandes ámbitos para concentrar acciones de mejora, que me parece vale la pena recordar y desempolvar:

  1. Desarrollar una visión de país: definiendo un nivel de ambición nacional y estrategias sectoriales.
  2. Impulsar la excelencia operacional: mejorando y estandarizando los procesos productivos; potenciando métodos avanzados de gestión; y fortaleciendo las capacidades técnicas y conocimientos operacionales.
  3. Regulación sectorial y laboral: desarrollando regulaciones con foco en productividad, reduciendo barreras administrativas y facilitando una justa competencia; y flexibilizando el mercado laboral.
  4. Cambio cultural: aumentando el nivel de aspiración; rompiendo paradigmas limitantes como la falta de confianza y colaboración; acelerando la integración al mundo y el dominio de otros idiomas; aumentando la valoración del emprendimiento y reduciendo el costo social de los emprendimientos no exitosos.

¿Queremos ser una industria (y un país) plenamente desarrollados? Bueno, los análisis ya están y contamos con hojas de ruta estratégicas para hacernos cargo de estos desafíos. La productividad, en el largo plazo, será la que nos lleve a un mayor progreso, que, si se plantea y desarrolla de manera adecuada, nos brindará crecimiento económico y esa tan anhelada equidad que soñamos.

Esta columna fue publicada en la Revista Negocio&Construcción, en su edición de febrero 2021, disponible AQUÍ.

Digitalización de procesos: no es solo tomar las mejores decisiones, es tomarlas a tiempo

Ricardo Flores, integrante del Comité Gestor I+D de Construye2025, entregó su visión a Revista Negocio&Construcción sobre cómo la digitalización de los procesos es el inicio de la transformación digital nos va a permitir automatizar decisiones a partir de los datos.

La columna completa está disponible AQUÍ.

El camino para medir los beneficios de la industrialización

El secreto para posicionar la nueva forma de construir estaría en los datos, ya que éstos facilitarían el camino a la generación de un grupo de indicadores de calidad.

Construye2025, programa estratégico de Corfo, preocupado de visibilizar las ventajas de industrializar, encomendó a la CDT una consultoría que apoyará el desarrollo de un set de indicadores. “La recolección de un índice implica tener datos de obras terminadas y datos tanto de costos como de dotaciones, de improductividades, errores de calidad, también tener datos de gestión de residuos. Lamentablemente, por la forma en que trabajamos las constructoras tenemos todo disperso. Entonces, es un esfuerzo gigante recopilar esa data”, explicó la subgerente de Gestión de Proyectos de la CDT, Carolina Tapia.

Según la ejecutiva, se ha avanzado muy rápido en la etapa de fabricación y construcción del índice y aunque no ha sido fácil, hay interés de las empresas por participar. “A nosotros nos serviría mucho que las constructoras que participaron del estudio y llenaron los formularios que requirió la matriz, nos podrían fácilmente reasignar estos datos y nosotros mezclarlos para transformar el indicador. Lamentablemente, como la entrega de datos de obras de las constructoras para el indicador o para el estudio de productividad se hizo bajo acuerdos de confidencialidad, no podemos como CCI acceder a los datos”, precisó.

Para el CCI, contar con el acceso a la información significaría ganar tiempo, por lo que se hizo una solicitud a la Cámara Chilena de la Construcción, para acceder a la data innominada. Pero, más allá de eso, Carolina Tapia explicó que es igualmente útil que constructoras y proveedoras del CCI que tienen proyectos con algún grado de industrialización faciliten el acceso a los datos.

“Estaríamos súper agradecidos si quienes han llenado fichas de datos para otros estudios nos las reasignan bajo confidencialidad, firmamos todos los acuerdos que se necesiten para usarlos para balancear el indicador. Estamos en la etapa de que el indicador está creado y nos falta balancearlo para poder emitir y cerrar la asesoría, porque esta asesoría ha tenido una duración de 75 días que se está terminando”, comentó la subgerente de Gestión de Proyectos de la CDT.

Fuente: CCI

Anteproyecto de norma para la industrialización en tierra derecha

Este tema, prioritario para el Ministerio de Vivienda y Urbanismo, ya presenta un 95% de avance por lo que pronto podría ser ingresado al Instituto Nacional de Normalización.

En 2020, se creó un comité de anteproyecto de norma, para definir el concepto de industrialización. Para la realización de este trabajo, se conformó un comité que contó con la participación del arquitecto de la Universidad de Chile y director del Instituto de la Construcción Francis Pfenniger, como presidente; Sebastián Lüders de Baumax; Oscar Zaccarelli del Colegio Arquitectos de Chile; Ítalo Sepúlveda de la Universidad Autónoma; José Luis Mena de la Constructora Bravo Izquierdo; y Yasmila Herrera del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, entre otros profesionales.

El documento del anteproyecto se encuentra al 95% de avance aproximadamente, con solo un par de definiciones pendientes, las que se están trabajando en conjunto con otros integrantes del CCI. Durante este primer trimestre, se pondrá el pie en el acelerador, para tener el documento en su totalidad.

“Estamos muy contentos con el compromiso, participación, calidad y entrega de los profesionales que participan en este comité, los cuales durante sus reuniones en 2020 han tenido un gran interés de participar, a pesar de lo especial y difícil que fue el trabajo durante la pandemia. El compromiso y aporte de los integrantes ha sido fundamental para el éxito del trabajo, que esperamos concluya durante estos próximos meses”, afirma Yasmila Herrera profesional de la Ditec del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu).

Actualmente, la Ditec está elaborando el Plan de Trabajo 2021 con el Instituto Nacional de Normalización (INN), ya que la norma de industrialización es una prioridad para la cartera, según Yasmila Herrera. “Por lo mismo, una vez terminado el anteproyecto de norma, este será ingresado al INN para inicio del proceso de consulta pública y conformación del comité técnico que discutirá las observaciones y alcances de la norma hasta consensuar el documento final: la primera norma chilena de industrialización. Concluido el proceso en INN iniciaremos el proceso interno para la oficialización”, detalla.

El camino recorrido

Para Francis Pfenniger, director del CCI y presidente del Comité de Anteproyecto de la Norma de Construcción Industrializada, el camino ha sido fructífero. “El Comité de Anteproyecto de la Norma de Construcción Industrializada sesionó a partir del segundo semestre de 2020 con una gran participación de profesionales, lo que demuestra el interés y la importancia que el sector le otorga a este tema”, dice.

Los primeros acuerdos -destacados por el arquitecto- fueron la definición del objetivo y alcance de la norma, es decir, “establecer un lenguaje común respecto a términos y definiciones de diseño y construcción industrializada, de forma que todos puedan hablar bajo los mismos conceptos consensuados”, acordando que puedan ser aplicados en diseño y construcción de obras de construcción, edificación, obras complementarias y obras civiles o infraestructura.

“Entre las primeras acciones, se hizo una encuesta a los participantes para que indicaran los conceptos que -a su juicio- deberían incluirse en la norma. Se recibieron más de 30 respuestas y se consolidaron 92 conceptos a definir e incluir en la norma. Dicho listado fue sometido a una nueva encuesta para validar la pertinencia de cada uno, filtrándose los conceptos en los que había un consenso se aprobación mínima de 75% de las respuestas. Los conceptos excluidos fueron revisados en las sesiones siguientes”, explicó Francis Pfenniger.

Tras establecerse un cronograma de sesiones semanales, a poco andar, se modificó la metodología y frecuencia de trabajo, dada la complejidad que significaba avanzar y cumplir con el cronograma propuesto de terminar con el anteproyecto a fines de 2020, debido a la amplitud de la muestra y el interés de los participantes. Por eso, nacieron el Comité de Redacción y el Comité Ejecutivo de la Norma, presidido por Pfenniger, los que en conjunto pudieron hacer un trabajo más detallado para su discusión y ratificación.

Dicho esquema aceleró el ritmo, hasta lograrse el objetivo de contar con un total de 30 conceptos con su respectiva definición consensuada por el Comité ampliado en los últimos días de diciembre de 2020, quedando pendiente exclusivamente un concepto que se espera consensuar con los resultados de otros comités de trabajo del CCI (específicamente el de KPI).

La próxima reunión ampliada del Comité de Anteproyecto de Norma de Construcción Industrializada se realizará en marzo, para validar la redacción final y los diseños de cuadros complementarios a incluir en el Anexo de la Norma. “No puedo menos que agradecer el interés, trabajo y apoyo de todos los integrantes del Comité y saludar especialmente a los integrantes del Comité de Redacción por el esfuerzo, la discusión y los acuerdos logrados”, comenta Pfenniger.

La auspiciosa mirada del CCI radica en la transversalidad de los participantes, que aseguró una gran representatividad de todos los actores del sector público y el privado, y, por cierto, también del mundo académico.

Fuente: CCI

El positivo balance 2020 del Consejo de Construcción Industrializada

En el plenario de enero, se destacaron los principales logros de 2020 en ámbitos como la normativa, la relación con la academia, la investigación y la comunicación del quehacer del CCI.

Con un positivo balance del año comenzó la sesión plenaria número 18 del Consejo de Construcción Industrializada (CCI), impulsado por Construye2025 de Corfo, que ya reúne a más de 300 profesionales. En la jornada del 14 de enero, la secretaria ejecutiva del CCI, Katherine Martínez, valoró la incorporación de empresas proveedoras de distintos productos, como materiales, sistemas industrializados y prefabricados; así como constructoras, inmobiliarias, empresas de cálculo e ingeniería, empresas de software y sistemas tecnológicos.

La coordinadora de Proyectos de la Corporación de Desarrollo Tecnológico (CDT), Mariela Muñoz, destacó a las 167 unidades académicas adheridas al CCI, de las carreras del área de ingeniería civil, construcción civil, arquitectura, también carreras técnicas y de institutos profesionales. “Hay otras 45 que están en proceso de adhesión, hay procesos más lentos y depende de la organización que tenga cada casa de estudio, pero estamos muy contentos con la cantidad de incorporaciones que tenemos y el apoyo que nos han ido presentando”, explicó.

La ejecutiva destacó también el encuentro Construcción Academia, que logró 917 estudiantes presentes; y el programa de prácticas profesionales, donde se inscriben las empresas para ofrecer sus vacantes. “Nosotros somos la vitrina para que podamos trabajar y bajo ese paraguas mostrar lo que está haciendo el CCI, qué busca y qué espera”, afirmó Mariela Muñoz.

Avances técnicos

A continuación, la secretaria ejecutiva del CCI, recordó el rol de los grupos técnicos: el KPI de soluciones constructivas especializadas; el de brechas normativas y regulación para la construcción industrializada; el de educación y sensibilización e investigación sobre construcción industrializada; y el de estandarización BIM.

Posteriormente, el arquitecto Francis Pfenniger, profesional destacado de la industria, comentó el trabajo del comité de normas en el que han participado muchas personas. “Agradecer especialmente a todos los que han participado, han colaborado, a todas las buenas ideas que hemos tenido y también a la paciencia, porque ha sido un trabajo bastante intenso para lograr reducir un listado inicial de 98 términos a un grupo relativamente más acotado de alrededor de 30 o 35 términos y lograr construir un consenso”, detalló.

Además, en el CCI han estado estudiando metodologías para industrialización en el sector construcción, trabajando en guías para la toma de decisiones en la construcción industrializada, metodologías de evaluación y algunas soluciones técnicas para construcción industrializada. “Hemos tenido afortunadamente bastante éxito en conseguir proyectos piloto, vamos a estar experimentando, desarrollar instrumentos y metodologías, aplicarlas, ir aprendiendo, y volver aplicarlas hasta que refinemos los métodos. Hoy día tenemos, yo creo que, entre seis y ocho proyectos en los cuales vamos a estar trabajando, sobre todo desde la etapa de diseño”, explicó Luis Fernando Alarcón, director del Centro Interdisciplinario para la Productividad y la Construcción Sustentable (CIPYCS).

Difusión 

Otro de los elementos destacados durante el encuentro del CCI, fue el seminario internacional que reunió a más de 300 participantes, donde el trabajo a distancia facilitó la convocatoria para los encuentros técnicos. “Hemos tenido personas conectadas desde Perú, desde distintos lugares de Latinoamérica que están viendo un trabajo muy interesante en torno a la industrialización, así que esperamos poder continuar con este avance, impactando a más personas en torno a la industrialización. La comunidad ha ido creciendo, la cantidad de socios se ha ido multiplicando, estamos muy contentos de ver que se suman nuevas empresas”, dijo Katherine Martínez.

Por el lado del relacionamiento, la presidenta del CCI, Francisca Cruz, recordó las reuniones con los ministerios. “Nos reunimos prácticamente con todas las direcciones generadoras de proyectos para promover la industrialización. Yo diría que hubo unas más llanas a las propuestas, otras más reacias, con incluso, más brechas y más asimetrías de información y, ahí creo que el aporte que hemos tenido de varios de ustedes en generar una mesa más chica con ese ministerio ha sido tremendamente útil, para derribar varios paradigmas que finalmente dificultan la incorporación de industrialización”, indicó.

Respecto al futuro, el CCI se propuso, mes por medio, organizar un encuentro con organismos internacionales de Australia, Nueva Zelanda, Estados Unidos y Reino Unido, para intercambiar experiencias y fortalecer la relación uno a uno. “Tenemos un año por delante con muchos desafíos, con muchas actividades, así que invitarlos a continuar participando súper activamente”, cerró la secretaria ejecutiva del CCI, Katherine Martínez.

Fuente: CCI

Instituto de la Construcción: 24 años articulando proyectos para el crecimiento de la industria

Durante el 2020, el instituto tuvo importantes hitos en el fomento de normativas y mejores prácticas para la industria, gracias a la permanente colaboración de entidades público y privadas.

El Instituto de la Construcción (IC) está cumpliendo 24 años coordinando y articulando esfuerzos públicos y privados para el desarrollo de la sustentabilidad, calidad y productividad de la construcción.

“Durante este año, el instituto ha tenido importantes hitos en el fomento de normativas y mejores prácticas para la industria, siempre con una mirada amplia, que contribuya al crecimiento no solo de nuestra industria, sino también de las personas. Gracias a la colaboración de entidades público y privadas, que conforman la institución, tenemos una amplia diversidad de ideas, opiniones y enfoques, que nos permiten impulsar estrategias para lograr una industria innovadora, industrializada y sustentable”, señala Miguel Pérez, presidente del Instituto de la Construcción.

En este sentido, cabe destacar que el IC está cumpliendo, ahora en diciembre, 1 año como Entidad Gestora del Programa Estratégico de Corfo Construye2025, colaborando en el desarrollo del programa, participando en la planificación estratégica, en la elaboración de los planes de acción, y en mejoras organizacionales y de gestión.

“Dentro de los logros de este año, cabe destacar el lanzamiento de la hoja de ruta de residuos de construcción y demolición, y economía circular; la creación de un Comité Gestor de Investigación y Desarrollo; y el acuerdo de entendimiento para la Estrategia de Economía Circular”, señala Gustavo Cortés, jefe de Proyecto Construye2025.

En el ámbito normativo, el Instituto de la Construcción ha formado varios comités de anteproyectos de norma que han tenido importantes avances. Uno de ellos es el comité “Anteproyecto de norma industrialización” que tiene como misión establecer una mirada común respecto a los términos y definiciones de construcción industrializada, de manera de contar con estándares mínimos para el funcionamiento de los sistemas constructivos.

Otro comité es el de “Anteproyecto de Norma de Requisitos y Ensayos EIFS”, cuyo objetivo es estandarizar procedimientos, métodos, técnicas de ensayos y componentes del sistema EIFS (por sus siglas en inglés Exterior Insulation and Finishing System), estableciendo los requisitos de prestaciones mínimas tanto en sus propiedades físicas, como por ejemplo hermeticidad, conductividad térmica y envejecimiento, así como en sus propiedades mecánicas tales como adherencia y resistencia al impacto.

A lo anterior se suma el comité “Anteproyecto de Norma de Requisitos y Ensayos Planchas de Yeso con Fibras”, que tiene la misión de regular y normar la fabricación de estos productos que se han comenzado a utilizar masivamente en nuestro país, y poder unificar criterios técnicos de evaluación de los tres fabricantes nacionales de este producto, ya que hoy se trabaja bajo diferentes normas.

Por otra parte, junto al Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio presentamos la nueva norma chilena para la intervención estructural en construcciones de valor patrimonial y edificios existentes (NCh3389), -desarrollada por nuestra Comisión de Construcción Patrimonial- que establece requisitos, procedimientos y parámetros mínimos sobre cómo actuar y enfrentar un proyecto de intervención estructural en construcciones patrimoniales y edificios existentes.

“Esta norma es resultado de un trabajo largo y complejo dado que reunifica materiales tan diversos como albañilería, acero, hormigón y madera, lo que hace que la tarea de reunificarlos en una sola especificación no sea simple”, señala Sergio Contreras, presidente de la Comisión de Construcción Patrimonial.

En otro ámbito, el Instituto de la Construcción ejerce la secretaría general del Código Modelo Sísmico para América Latina y el Caribe, cuyo objetivo es establecer los contenidos mínimos que debe tener un documento técnico práctico para el diseño estructural ante las diferentes amenazas sísmicas a nivel regional.

En el plano organizacional, se ha avanzado a una iniciativa con un robusto esqueleto organizacional, representatividad de organismos oficiales y mucho compromiso por parte de sus miembros que suman 24 instituciones de 16 países. Asimismo, se ha avanzado en los contenidos del borrador del documento y se ha elaborado un documento sobre Objetivos de Desempeño, que busca avanzar en promover esta metodología del diseño por desempeño en el Código Modelo.

Finalmente, junto a la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) y el programa Construye2025 de Corfo, y con la facilitación técnica de la Corporación de Desarrollo Tecnológico (CDT), iniciamos el proceso colaborativo para la co-creación de la Estrategia de Economía Circular en Construcción que busca generar un plan de acción público-privado al 2025, como continuidad de la Hoja de Ruta RCD Economía Circular al 2035 y en el marco de la Hoja de Ruta nacional de Economía Circular al 2040.

“Realizar esta estrategia es, sin duda, un tremendo desafío que nos convoca a todos quienes formamos parte de la cadena de valor de la industria. El Instituto de la Construcción es una entidad que está constituida por los principales actores públicos y privados del país, por ello nuestro desafío es y será integrar a todos para que contribuyan con una amplia diversidad de ideas, opiniones y enfoques, que nos permitan finalmente pasar de una economía lineal a una economía circular”, señala el presidente del Instituto de la Construcción, Miguel Pérez.

La Dirección de Arquitectura del MOP cumplió 146 años

Autoridades del ministerio saludaron a los funcionarios que se dedican a proveer y conservar la edificación pública, para favorecer la competitividad y el mejoramiento de la calidad de vida en Chile.

El 25 de enero de 1875 nació la Oficina de Arquitectos Civiles, que luego pasó a ser la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas. En sus 146 años, las principales autoridades del MOP, saludaron a sus más de 400 funcionarios que dedican su trabajo a la construcción de edificios públicos de alto estándar. La directora general de Obras Públicas, Mariana Concha, fue una de ellas: “Quiero darles las gracias porque nos acercan a la comunidad, porque hacen obras hermosas que tienen sentido para la gente”, dijo.
Lo mismo hicieron el director de Obras Hidráulicas, Claudio Darrigrandi; la directora nacional de Aeropuertos, Claudia Carvallo; el director nacional de Vialidad, Jaime Retamal; y algunas autoridades regionales que quisieron expresar su reconocimiento por la gran labor que realizan los funcionarios, tanto en la conservación como en la edificación de infraestructura pública.

Acá te dejamos el video.

Campus CTeC y su aporte al capital humano, un factor clave para el desarrollo del sector construcción

Una productividad estancada por más de tres décadas, bajos niveles de digitalización, alta fragmentación en las diferentes etapas del proyecto, un bajo nivel de especialización de sus trabajadores, son algunas de las problemáticas que enfrenta la industria de la construcción en la actualidad.

De acuerdo al artículo “The next normal in construction: how disruption is reshaping the world’s largest ecosystem”, desarrollado por McKinsey & Company en junio de 2020, la crisis del COVID-19 está acelerando la transformación del sector, por lo que se hace necesario innovar y buscar alternativas que permitan desarrollar proyectos más eficientes, sustentables y productivos.

Según el reciente estudio publicado por la consultora Matrix “Impulsar la productividad de la industria de la Construcción en Chile a estándares mundiales”, las industrias más digitalizadas y con mayor grado de industrialización son más productivas. Por lo que la transformación digital y la construcción fuera de sitio parecen ser el camino por el cual se debe transitar.

A partir de lo anterior, es que hoy la construcción tiene la necesidad de mejorar la gestión de plazos, costos y calidad de los proyectos, fomentar el desarrollo de entornos más controlados y con mayores medidas de seguridad, disminuir riesgos y externalidades y por sobre todo, fortalecer la fuerza laboral, a través de una mejor formación, educación y capacitación de sus colaboradores, esto último alineado con las nuevas metodologías y tecnologías emergentes.

Para ello, es crucial entender que el cambio no se puede lograr sin invertir en la reestructuración de una fuerza laboral, que por cierto año a año se va volviendo más escaza y longeva (menos del 10 por ciento de la fuerza laboral actual tiene menos de 25 años, Emily Peiffer “El principal desafío de la fuerza laboral de la industria de la construcción y 3 posibles soluciones”, Construction Dive , 12 de octubre de 2016). Por lo que, tanto las empresas como los programas de estudios, deben enfocarse en desarrollar nuevas competencias y habilidades para los desafíos que conlleva la construcción 4.0, que permitan a los profesionales utilizar la tecnología a su favor, reconvirtiendo la actual forma de trabajar a un nuevo modelo, con una actitud de apertura hacia el cambio, la innovación y la mejora continua.

Con el propósito de contribuir en esa transición, CTeC lanzará el próximo 11 de marzo “Campus CTeC”, plataforma de cursos e-learning, que busca fortalecer las capacidades de profesionales y estudiantes en áreas como la industrialización, la sustentabilidad y la transformación digital, aspectos claves para transitar de un proyecto tradicional a uno construtech.

El lanzamiento consistirá una actividad online, que contará con la participación de destacados expertos de Zaha Hadid, importante oficina de arquitectura de carácter mundial y Arup, una de las más destacadas empresas de ingeniería, quienes expondrán la importancia de incorporar en los proyectos tecnologías y cómo la transferencia de conocimiento, la formación de capital humano y la colaboración temprana, resultan claves para lograr resultados exitosos.

La plataforma contará inicialmente con tres cursos, los cuales fueron desarrollados junto a Eurecat, asociados a la transformación digital con temáticas como: Gestión de la TD en empresas de la construcción, IoT y Sensorización, para posteriormente ampliar la oferta de cursos disponibles.

La industrialización, es otra línea de trabajo en la cual CTeC está centrando sus esfuerzos. Para ello, el Centro participa de forma activa en el subcomité de “Educación, sensibilización e investigación sobre construcción industrializada de Capital Humano”, liderado por el Consejo de Construcción Industrializada (CCI), a través del cual se encuentran desarrollando una matriz de roles que busca definir las capacidades teóricas y técnicas sobre industrialización, las que se suman a las competencias de cada disciplina (arquitectura, construcción e ingeniería). Esta matriz, permitirá:

  • Guiar a las empresas a instituciones en comprender las competencias sobre industrialización que requieren sus equipos de trabajo, para introducir soluciones de componente industrializados en el diseño temprano de sus proyectos.
  • Guiar a las instituciones académicas, para introducir nuevos contenidos en sus mallas, crear nuevos programas y actualizar los ya existentes.

Si bien la industria de la construcción se ha visto muy afectada a partir de la crisis sanitaria, también es cierto que permitió acelerar el proceso de transformación del sector, donde la adopción de tecnología nunca ha sido más fuerte y necesaria. Hoy se hace imprescindible correr la frontera de lo posible, donde el sector de la construcción tiene el beneficio de aprender de muchas otras industrias que ya han experimentado esa transición, aumentando su ventaja competitiva, lo que sin duda debe ir acompañado con el desarrollo de nuevas capacidades y estructuras organizativas dispuestas a “pensar fuera de la caja” asumiendo riesgos de innovación.

Fuente: CTeC

Innovación: Una palanca para la reactivación económica

Por Conrad von Igel, gerente de Innovación de la Cámara Chilena de la Construcción

Tras un 2020 en el que todos los sectores productivos, incluido la construcción, se vieron desafiados para dar continuidad a su operación, se prevé que 2021 sea un año en el que, además de los esfuerzos por controlar la pandemia, se den los primeros pasos hacia la reactivación y la generación de empleo.

Como gremio de la construcción velaremos porque la reactivación sea segura para nuestros trabajadores, previniendo los contagios, y también que profundice la transformación de las grandes, medianas y pequeñas empresas que integran el sector apostando por la búsqueda permanente de mejores procesos, prácticas y uso de tecnología, todo de una manera eficiente y optimizando el uso de los recursos disponibles. 

Es en este espacio donde vemos que la innovación debe ser una palanca protagónica de la reactivación, pues para volver a poner en marcha al país debemos avanzar en nuevos estándares y capacidades, manteniendo la flexibilidad para adaptarnos ante los permanentes desafíos que se nos presentan.

Innovación es crear valor económico, social y ambiental. Y el valor lo determina “el otro”, usuarios, clientes o la sociedad. Innovación es también una actitud, una forma de enfrentar la vida, viendo siempre como resolver desafíos y convertirlos en oportunidad. Permite aproximarse a los desafíos desde una visión diferente, buscar nuevas herramientas para abordarlos y tomar las oportunidades que tanto el desarrollo tecnológico como las nuevas formas de organización y modelos de negocio entregan. 

El año pasado nos dejó como aprendizaje la resiliencia y la adaptación y debemos verlo como un impulso para tomar conciencia de que las cosas no siempre se deben hacer igual a como las veníamos haciendo. De hecho, son estas transformaciones las que nos hacen más productivos, más sostenibles y nos permiten aumentar el impacto positivo en la calidad de vida de las personas.

Este cambio de visión también considera que el error es parte del aprendizaje. Muchas veces vamos a frustrarnos y sentir que estamos equivocando el camino. Pero solo el entrenamiento constante de las capacidades de los equipos para innovar, junto a un portafolio diversificado de proyectos, nos podrá garantizar buenos resultados.

En la Cámara Chilena de la Construcción estamos empujando la innovación entre nuestros socios como parte de la transformación cultural hacia el desarrollo empresarial sostenible. Hemos apoyado la transferencia de conocimiento y también la articulación de redes que fomenten procesos y productos innovadores. 

En esta línea, en 2020 participamos del primer estudio nacional sobre productividad en la construcción, el que evidenció la brecha actual en digitalización, industrialización, adopción tecnológica y sostenibilidad. Por ello es urgente potenciar la innovación en el sector, incorporando múltiples dimensiones como la necesaria colaboración entre actores públicos, la academia, los privados y distintas sinergias con actores internacionales, así como la interconexión de todos quienes forman la cadena de valor del proceso constructivo.

De cara a 2021, nos hemos comprometido a seguir implementando medidas concretas para avanzar en una reactivación segura que se haga de la mano con la innovación. 

Para ello, trabajaremos en la consolidación del programa Construir Innovando, que busca crear una vinculación permanente entre empresas y startups, así como también aportaremos a mejorar los procesos de digitalización, industrialización y trazabilidad en la construcción para medir oportunamente la productividad en las empresas y en el sector. También seguiremos avanzando en una hoja de ruta con foco en la economía circular y seremos protagonistas de la transformación que la construcción está llevando a cabo para ser una industria más sostenible y que entregue soluciones concretas a los problemas diarios de las personas, mejorando su calidad de vida.

Como gremio, reafirmamos nuestro compromiso con la innovación colaborativa, asociativa y abierta entre distintos actores de la sociedad, pues creemos que es el camino para construir un mejor país.

El plan del MOP para mejorar la trazabilidad de los residuos de construcción

Para dar cumplimiento a los compromisos establecidos en la hoja de ruta que llevará a la industria a gestionar sus residuos en forma eficiente, el Ministerio de Obras Públicas incluirá un plan de gestión en todas las obras.

El MOP, a través de la Dirección General de Obras Públicas (DGOP), dio el puntapié inicial para la implementación de los compromisos establecidos en la Hoja de Ruta RCD y Economía Circular en Construcción 2035, que la Dirección General de Obras Públicas (DGOP) del MOP ha impulsado fuertemente. “Este plan de gestión, además de ser una herramienta para conocer de manera sistematizada los residuos que generan nuestras obras, nos permitirá -en el corto plazo- conocer datos respecto de los residuos generados por cada tipo de obra ejecutada por este ministerio, conociendo la trazabilidad y destino final de éstos”, explica Mariana Concha, directora general de Obras Públicas del MOP.

Dicha información será fundamental para futuras metas de reducción, reutilización e incluso para abrir nuevos mercados de productos derivados de los residuos que se generan en la industria. “Como DGOP esperamos que esta información sea un gran aporte para la innovación y la reutilización de materiales en las obras públicas y para cambiar el paradigma. Residuo no es igual a desecho”, añade la autoridad del MOP.

La incorporación del plan de gestión de residuos en los Términos de Referencia y Bases de Licitación del MOP nació de un proceso participativo derivado de la creación de la Mesa MOP de Economía Circular impulsada por la DGOP, en 2019. Una de las primeras metas trazadas en esa instancia fue contar con el plan, que fue trabajado y consensuado con todas las direcciones operativas del MOP. “Este proceso contó con la colaboración permanente del programa Construye 2025, entregando directrices y ejemplos de otros países en estas materias”, comentó Mariana Concha.

La incorporación del plan será paulatina. Sin embargo, se ha comprometido la exigencia en más del 80 % de los nuevos contratos de este año. “Para 2022, en el 100% de los contratos nuevos se estarán implementando. No se contemplan salvedades o excepciones, sólo que la exigencia regirá para contratos nuevos”, aclara la directora general de Obras Públicas.

El plan de gestión considera medidas y procesos sistematizados para el adecuado manejo y la trazabilidad de residuos, en cumplimiento con la normativa ambiental vigente y apunta a favorecer su reducción, reutilización o reciclaje. Antes del plan se imponía la disposición en sitios autorizados, pero sin incentivos a la reducción o revalorización.

 En este sentido, Mariana Concha, valora contar con una línea base de información de los residuos generados por tipo de obra y por región, pensado en la economía circular. Además, mejorando la trazabilidad de los residuos se evitará la eventual disposición ilegal de estos materiales, dice Mariana Concha.

El rol de la SEMAT

La Secretaría de Medio Ambiente y Territorio de la DGOP juega un gran papel en la implementación de esta nueva instrucción. Ella entrega lineamientos y asesoría que facilitan la gestión en materias ambientales y de asuntos indígenas a las direcciones, a las seremi y a las autoridades superiores del Ministerio de Obras Públicas. Éstos son replicados a nivel regional por las Unidades de Gestión Ambiental y Territorial (UGAT).

Asimismo, la SEMAT ha tenido un rol clave en la participación del convenio interministerial que construyó la Hoja de ruta RCD y Economía Circular en Construcción 2035, razón por la cual lidera su implementación en el MOP, lo que no hubiera sido posible sin el compromiso de la DGOP y sus departamentos.

Los desafíos

Disponer de la información en línea y de forma oportuna es uno de los retos por delante. Por eso, la directora explica que se trabajará con los profesionales a cargo del Libro de Obra Digital (LOD) de las obras MOP, trabajo que también es desarrollado por la DGOP como parte del plan de mejora de la gestión, digitalización y transparencia que impulsa la dirección general. De todas maneras, en las actuales fiscalizaciones que realiza la DGOP, tanto de contratos como ambientales, se verifica el cumplimiento de todas las exigencias y estándares.

Para los ejecutores de proyectos (contratistas) el desafío será conocer la nueva normativa y adaptarse al cambio y seguimiento de los residuos. En tanto, las empresas de diseño tendrán que incorporar nuevos materiales; mientras que otras empresas podrán desarrollar oportunidades de negocios aprovechando los residuos generados. “Sin duda, este es también un cambio cultural, ya que significa empezar a ver a los residuos como subproductos o insumos en el ciclo de economía circular de la construcción y, para eso, debemos cambiar las filosofías de diseño y constructivas”, argumenta Mariana Concha.

Finalmente, otro de los grandes retos para la implementación de la Hoja de Ruta RCD y Economía Circular en Construcción 2035 es avanzar hacia la creación de incentivos en las licitaciones de obras, para los contratistas que cuenten con criterios sustentables como, por ejemplo, reutilización de material, cálculo de huella de carbono, compromisos con la comunidad y/o certificaciones. Esto sumado a la promoción de la innovación y los nuevos acuerdos de producción limpia (APL).

“Unos de los ejes de la Hoja de Ruta RCD es desarrollar estándares para el diseño y metodologías de la evaluación de proyectos públicos que incorporen criterios de economía circular, reparación, reutilización, remanufactura, entre otros, incorporando nuevos pilotos y ensayos con materiales reciclados en las obras públicas para fomentar su utilización, incluyendo estas alternativas en nuestro manual de carreteras y/o trabajando en las modificaciones normativas que corresponda. Para esto existe un gran compromiso de los Departamentos de la DGOP, donde destacan la SEMAT y SIT (Secretaría de Innovación Tecnológica)”, puntualiza la directora.

  Ya en este camino, la aspiración de las autoridades del MOP es que iniciativas como ésta se repliquen y masifiquen para seguir avanzando hacia obras que se ejecuten con criterios de economía circular.

 

El impacto de la Ley de Eficiencia Energética en el sector construcción

Chile contará con un gran incentivo para mejorar la eficiencia de los edificios públicos y privados, el que también dará más rentabilidad a los actores del rubro inmobiliario con foco en el reacondicionamiento térmico.

Luego de dos años de tramitación en el Congreso, el proyecto de Ley de Eficiencia Energética, al fin es una realidad. Dicha iniciativa promueve el uso racional y eficiente de los recursos energéticos, lo que contribuiría a mejorar la productividad, la competitividad y la calidad de vida de las personas. De aplicarse adecuadamente las medidas contempladas a 2030, el biministro de Energía y Minería, Juan Carlos Jobet, estima una reducción de intensidad energética del 10%, un ahorro acumulado de US$15.200 millones y una reducción de 28,6 millones Ton CO2.

Pero, además, la nueva ley afectará a la industria de la construcción tanto de manera directa como indirecta, según el director ejecutivo de la Agencia de Sostenibilidad Energética (AgenciaSE), Ignacio Santelices. “De manera directa, estableciendo que todas las edificaciones nuevas: viviendas, departamentos, oficinas, etc., deberán contar con una calificación energética, salvo algunas excepciones que establece la ley”, detalla.

En este contexto, los consumidores podrán acceder a edificaciones nuevas de manera más informada respecto de su consumo de energía, lo que está muy relacionado con la forma en que se construyen las edificaciones. En tanto, las inmobiliarias tendrán el incentivo de construir con mayores estándares de eficiencia energética y así contar con una etiqueta más eficiente al momento de la venta, destaca Santelices.

Ahora, indirectamente, la Ley de Eficiencia Energética establece que todas las empresas intensivas en el consumo de energía tienen que implementar Sistemas de Gestión de Energía e impone la obligatoriedad a todos los servicios públicos de contar con gestores energéticos capacitados y medir el consumo de sus edificaciones. “Esperamos que con esto se genere un incentivo importante para mejorar la eficiencia energética de los edificios públicos y también de los privados y así se genere una mayor actividad económica en el sector inmobiliario con foco en temas como el reacondicionamiento térmico”, señala el director ejecutivo de la AgenciaSE.

La meta que establece el proyecto de ley es generar un 10% de reducción de la intensidad energética a 2030 y, además, se estima que esta nueva Ley de Eficiencia Energética podría contribuir en más de un 7% a la meta de carbono neutralidad a 2050. 

Calificación energética de edificaciones

  • Las viviendas consumen casi un 15% de la energía total del país, y parte importante de esta se destina a calefacción, según el Balance Nacional de Energía del Ministerio de Energía.
  • La cantidad de energía destinada a calefaccionar un hogar u edificio depende en gran medida de la aislación térmica de estos.
  • El proyecto de ley establece que las edificaciones (viviendas y edificios), deberán contar con una Calificación Energética (Etiquetado) para obtener la recepción final o definitiva.

Foto de Leonardo Cardozo Galves en Pexels

El año de la investigación, desarrollo e innovación en Chile

Más encuentros uno a uno, más innovación y más tecnología allanarán el camino hacia la productividad de una industria que poco a poco comienza a cambiar su cultura y visión de futuro.

En tiempos de incertidumbre, la masificación de la cultura de la innovación es más que necesaria. El Ranking C* de Creatividad e Innovación -elaborado por la consultora Brinca y la Universidad del Desarrollo- reveló que la innovación cobra cada vez mayor interés en las organizaciones.

Asimismo, a fines de 2020 se creó el Comité Gestor I+D, que impulsa Construye2025, el cual se propuso hacer un calendario para promover el I+D en la construcción durante 2021, especialmente a través de la Ley I+D, administrada por Corfo. “Estamos convencidos de que Construye2025 es un espacio ideal, ya que tenemos una triada potente: la participación de Corfo, la Gerencia de Innovación de la Cámara Chilena de la Construcción y los centros tecnológicos de construcción”, explica Ignacio Peña, quien lidera este comité al interior del programa.

Aunque el año pasado fue incierto, debido a la pandemia, la industria pudo adaptarse y comenzó a evaluar nuevas opciones de tecnología e innovación para ser más productiva. El director de I+D+i de Brinca Global Consultores, Andrés Blake, explica que, en 2020, hubo investigación y desarrollo, pero de manera incipiente. Sin embargo, dice que hay un amplio espacio para crecer en el futuro.

“Transformación digital, innovación, el BIM como metodología de trabajo y Data Science, van a ir permeando la industria. Es una necesidad clara incorporar más data a la gestión de las empresas para obtener mejor resultado y mayor productividad por hora trabajada. Va a ser un primer paso”, señala Andrés Blake. No obstante, habrá que dar un segundo paso que es cultural. “La gestión de empresas aún sigue siendo un poco ochentera. No se ha incorporado del todo la visión de innovación. Pero, esto debiera consolidarse, girar hacia nuevas formas de trabajar”, comenta.

De hecho, en eso trabaja Brinca, midiendo la cultura de innovación y tomándole la temperatura al grado de madurez, para que a partir de ese diagnóstico puedan definirse indicadores de gestión para adoptar esto desde su mindset. Así, será posible evolucionar hacia un trabajo vinculado a la innovación y la transformación digital, elementos que son cruciales para lograr una empresa más productiva. “El Ránking de Creatividad e Innovación lleva ocho versiones con la UDD. Ahí se muestra en qué etapa está la industria. Hacemos un benchmark. Las mayores debilidades están relacionadas con el uso de la tecnología y todo lo que tiene que ver con cultura, como instalar procesos de innovación”, señala Andrés Blake.

En este sentido, Ignacio Peña, de Construye 2025, afirma que 2021 será un año en el que Chile contará con tecnologías habilitantes para testear probar y monitorear tecnologías y abrirse a un nuevo campo de innovación en I+D. “Nosotros estaremos enfocados en ofrecer talleres a distintos gremios para mejorar la tasa de aceptación de los proyectos. Además, articularemos a los actores mediante actividades de networking, para que los nuevos desarrollos tecnológicos y de innovación puedan responder a los desafíos del sector”, concluye.

Nuevamente, el MOP convoca a privados a tomar desafíos de innovación en construcción de obra pública 

Propuestas en economía circular, reforestación e inspección de obras podrán acceder a campos de prueba y apoyo del MOP para desarrollar sus prototipos.

En un entorno colaborativo, el Ministerio de Obras Públicas está convocando, por segunda vez en menos de seis meses, al ecosistema innovador del país para que presente propuestas en la construcción que hayan ideado nuevas soluciones para los desafíos que hoy enfrenta la industria. Los seleccionados podrán acceder a una serie de facilidades que les permitirán prototipar sus soluciones.

“En febrero, queremos presentar tres problemáticas. Una está relacionada con economía circular, que incluye, por ejemplo, reutilización de materiales de construcción, gestión de los desechos de la construcción, recuperación de espacios destinados a vertederos de desechos de construcción, etc. Todo eso lo estamos redactando y detallando para que el ecosistema los conozca y nos ofrezca soluciones”, explica el jefe de la Secretaría Ejecutiva de Innovación Tecnológica de la Dirección General de Obras Públicas (DGOP) del MOP, Reynaldo Cabezas.

Otra necesidad es la de reforestar los entornos de infraestructuras que hace el MOP, incluso en las laderas de los embalses o en un nudo vial, no sólo para hermosear sino porque se requiere hacer compensación de vegetación nativa reforestando. “No es sólo por un tema estético, sino además normativo”, señala el especialista en innovación.

Finalmente, para el MOP es relevante el reto de utilizar tecnología para hacer inspección de avance de obras de manera remota y lograr que con la información que se captura se optimicen los procesos del MOP. “Cuando lanzamos los desafíos lo que ofrecemos como ministerio es campos de prueba. A veces hay startup que no han podido probar su tecnología. En este proceso voluntario, el MOP colabora con los campos de prueba y los profesionales”, detalla Reynaldo Cabezas.

De esta manera, el MOP espera impulsar la innovación para hacer obras que favorezcan el desarrollo integral de la comunidad. El llamado se realizará las primeras semanas de febrero, en los canales del ministerio.

Con piloto RCD, UACh marca tendencia en manejo sustentable de residuos de la construcción y demolición

Con la gestión de residuos plásticos, madera, metales, vidrios, papeles y cartones entre otros materiales, se espera minimizar al máximo la generación de residuos, bajar las emisiones de C02 y contribuir al desarrollo sostenible. En este desafío la UACh se alinea con “Hoja de Ruta RCD y Economía Circular en Construcción 2035”, estrategia multisectorial implementada a nivel país.

Se estima que un tercio del total de los residuos generados en Chile corresponde a residuos de construcción y demolición, tendencia que también se aprecia a nivel mundial, posicionando a la industria de la construcción como una de las más contaminantes del planeta donde impera el modelo de economía lineal de “extraer, usar y botar”.

Exigir a las constructoras que gestionen sus residuos es un tema que recién se está impulsando en el país y que muy pocas empresas constructoras —en su mayoría de Santiago— han adoptado implementando acciones de manejo de residuos de obra en la actualidad.

Publicada en junio de 2019, la Norma Chilena 3562 establece una clasificación para residuos de construcción y demolición (RCD), contempla las consideraciones mínimas para la gestión de RCD no peligrosos que se generan en obras de construcción y demolición y los contenidos de un plan de gestión de RCD.

Adelantándose a estos lineamientos regulatorios generales la Dirección de Infraestructura y Desarrollo Físico (DIDF) de la UACh exige a los contratistas el manejo de los residuos desde el año 2017, buenas prácticas que decidió incrementar en un plan piloto a partir del 2020. “Uno de los problemas que existe en Chile y el mundo en el manejo de los residuos en la construcción es la falta de implementación; falta llevarlo a la práctica, por lo que como Universidad y como mandantes decidimos dar el primer paso desarrollando un plan más exhaustivo y ambicioso para cooperar con nuestra sociedad y el planeta que tanto lo necesita”, dice Wilson Aravena, director de la DIDF.

Con visión de futuro, la estrategia de la UACh es un enorme paso para avanzar de manera efectiva hacia una economía circular al mejorar la gestión de los residuos de construcción y demolición (RCD), mediante un uso más eficiente de recursos donde prima la reducción de los elementos. “Este modelo apunta a minimizar la producción al mínimo indispensable, y cuando es necesario hacer uso de un producto, priorizar la reutilización de los elementos que por sus propiedades no pueden volver al medio ambiente”, explica.

Pero esta iniciativa va aún más allá en la búsqueda de una sociedad más sostenible. En esa dirección aspira a contribuir en la formación de los estudiantes desde una perspectiva más vivencial. “Las instituciones de educación superior también necesitan mucha infraestructura, lo bueno es que nuestros estudiantes pueden ver el esfuerzo que se realiza por liderar estos cambios. La teoría se aplica y pueden verlo in situ, complementando el trabajo que realiza la Unidad de Gestión Ambiental con fuerte participación en la academia y en el área operativa”, indica Aravena destacando los fundamentos de la Política de Sustentabilidad que guían a esta institución.

RCD en las bases técnicas de licitación

“Que mejor que liderar el cambio desde la perspectiva del mandante”, sostiene Wilson Aravena, convencido de que estas acciones irán permeando gradualmente en la sociedad. Con ese norte, los profesionales de esta Dirección diseñaron un modelo que, plasmado en el primer Plan de Residuos de la Construcción y Demolición (RCD), se incorporó a las bases técnicas de licitación que deben cumplir las empresas constructoras.

Para llevar a la práctica el Plan RCD fue elegido el Proyecto Pabellón Docente, edificio que está construyéndose en el Campus Isla Teja desde noviembre del 2020. Esta infraestructura fue sometida a altos estándares de sustentabilidad y espera obtener la certificación CES (Certificación Edificio Sustentable), tanto en diseño como en construcción.

“La implementación de la gestión y manejo sustentable de los RCD en el Pabellón Docente, Campus Isla Teja, marca un tremendo hito en los casos a nivel nacional al ser un ejemplo para las distintas instituciones educacionales y otras, en cuanto a implementar políticas de sustentabilidad”, indica Alejandra Tapia, coordinadora de Sustentabilidad de Construye2025.

“Esta iniciativa liderara por la Dirección de Infraestructura y Desarrollo Físico de la UACh, implica un gran esfuerzo para salir de la zona de confort, y de la inercia de cómo se hacen habitualmente las cosas, a través del cambio hacia una cultura sostenible en la forma de construir y en el impacto que esto conlleva. Lo más difícil es generar el cambio, y el mandante, tiene un inmenso potencial para realizarlo”, destaca Alejandra Tapia.

Refiriéndose a los beneficios de implementar planes RCD, fue enfática en señalar que éstos no solo son ambientales. “A corto plazo, las constructoras se dan cuenta que al medir y controlar sus residuos comienzan también a ver beneficios económicos al disminuir el volumen a disponer y las pérdidas de materiales, así como también mejoran la seguridad de los trabajadores”, señala.

Acota que “sin duda, la gestión de este proyecto ha generado un sinnúmero de aprendizajes, tanto para la constructora como para el mandante, este último a través de la gestión del conocimiento, podrá enriquecer los aprendizajes de los propios estudiantes a partir de su experiencia”.

Uso eficiente de recursos

Fiel a los procedimientos del Plan RCD y al modelo de economía circular, los materiales que se consideraban residuos (o desperdicios de un proceso) y se destinaban a vertedero, ahora son valorizados a través de la reutilización y/o el reciclaje. Ver video Economía Circular en Construcción 

Comprender este nuevo paradigma no es fácil y su aplicación es de largo aliento, tiempo precioso si se piensa en la emergencia climática y en las problemáticas sociales que estamos viviendo. “Todos sabemos que los cambios son difíciles y a las empresas les cuesta tomar iniciativas sin conocer resultados, por ende, es mejor que la RCD sea parte de las exigencias del mandante, de las bases especiales de licitación y del contrato”, precisó Aravena.

¿Pero cómo llevar a terreno estos conceptos? “Como es algo cultural del día a día en las obras, lo mejor es tener a un experto a tiempo completo junto a equipos multidisciplinarios que entreguen conocimiento y luego fiscalicen el cambio. Como son temáticas nuevas a nivel mundial se debe ser un evangelizador para el éxito de estas buenas prácticas” indica.

Para tal efecto, Luis Romero, ingeniero civil ambiental de la empresa constructora que ejecuta la construcción del Edificio Pabellón Docente trabaja desde el inicio de esta obra implementando acciones orientadas a la reducción de residuos que contempla el Manual informativo y de procedimientos de gestión de residuos de la construcción y demolición desarrollado por la Dirección de Infraestructura y Desarrollo Físico de la UACh, junto a la NCh 3562:2019.

La separación o segregación de los residuos es una medida fundamental, por eso la disposición de contenedores es uno de los primeros cambios en el “paisaje de la obra”. Para fierros y metales, por ejemplo, la gestión de residuos tiene un reporte económico favorable para la constructora y para el mandante.

Al respecto, Romero describe el procedimiento, “internamente en la obra hay punto de acopio para metales en general y otro para fierros y latas; acopiamos chatarra, despuntes de fierro, alambres de cobre, restos de tubos de aluminio y de lo que se encontró en el terreno antes de empezar la obra de construcción.  Los retira una empresa que se encarga de reciclar materiales metálicos y los valoriza de acuerdo con el tipo de metal”.

Con una dinámica parecida son tratados los residuos de madera, plástico, papel y cartón, botellas plásticas y de vidrio, escombros de hormigón y residuos orgánicos de origen vegetal. Datos preliminares indican que hasta mediados del mes de enero se habían manejado 109 kilos de plásticos; 66 kg de papel y cartón; 405 kg de madera y 3 kg de orgánicos, por citar algunos.

“Estas cifras nos tienen muy contentos como Universidad, ya que aun cuando son cantidades menores, podemos ver que el plan de RCD ha tenido efectos importantes en la obra, reduciendo al máximo los residuos generados”, dice el director de la DIDF. Como bajar los impactos ambientales es uno de los principales objetivos, actualmente se trabaja en los indicadores locales que permitirán organizar una potente base de datos para enfrentar proyectos en el futuro.

Cabe señalar que el plan piloto de la UACh también tiene una dimensión social que considera a los trabajadores como beneficiarios directos de ciertas acciones que van más allá de aumentar las plazas de trabajo en la región, ya que muchos materiales son donados para que puedan ser usados en sus propias viviendas y reciben capacitación en forma constante.

Hoja de Ruta RCD

Con objetivos similares avanza a nivel país “Hoja de Ruta RCD y Economía Circular en Construcción 2035”, iniciativa multisectorial que lidera el Comité Consultivo de la Estrategia RCD, conformado por los ministerios de Vivienda, Medio Ambiente y Obras Públicas, más Corfo y su programa Construye2025.

El documento, presentado en agosto de 2020, busca fomentar y promover la gestión sustentable de los residuos de construcción y demolición, bajo el foco de Economía Circular. “Una de sus grandes fortalezas es la articulación del sector público, privado y la academia y en ese contexto plantea metas compartidas, que dependen de la coordinación y compromiso de diferentes actores. Es en este punto donde destaca el compromiso de la Universidad Austral de Chile, ya que es imposible cumplir las metas en forma individual, por ejemplo, alcanzar al menos el 70% de valorización de los RCD al 2035”, dice la coordinadora de Sustentabilidad de Construye2025.

Asimismo, valora el interés por avanzar en la inserción de la sustentabilidad en el currículum. Al respecto dijo, “existen enormes desafíos, en cómo incorporar la economía circular en las mallas curriculares, y desde el diseño de los proyectos -integrando a arquitectos, ingenieros, diseñadores, ingenieros constructores, entre otras especialidades- disminuir los residuos, desarrollar y utilizar sistemas constructivos y materiales más sustentables”.

“Existen muchas oportunidades en investigación, desarrollo e innovación para explorar en nuevos proyectos, y comenzar por la gestión sustentable de los residuos, es un gran paso”, afirma la profesional.

CNP: “Hay varios aspectos en que sabíamos los problemas, pero no su magnitud actual”

En noviembre de 2020 fue presentado el “Informe productividad en el sector de la Construcción”, que fue solicitado por el Gobierno de Chile para analizar y determinar los principales frenos a la productividad del sector y mandató a la Comisión Nacional de Productividad (CNP), quienes junto a la consultora Matrix realizaron el estudio. Para profundizar en sus resultados conversamos con Esteban Rojas, vocero de la CNP, quien entrego los detalles y algunas proyecciones de este.

Puedes leer la entrevista completa de Negocio&Construcción AQUÍ.

Nuevas normas para planificar la vida útil de los edificios

En seminario del Instituto Nacional de Normalización se conocieron los avances en regulación que buscan lograr una construcción más sostenible, considerando todo el ciclo de vida de los edificios.

El seminario “Marco normativo para la planificación de la vida útil en edificaciones” fue la primera actividad de difusión del proyecto “Innova – CORFO: herramientas normativas para la planificación de la vida útil en edificaciones, método de cálculo y planificación”. Ejecutado por el Instituto Nacional de Normalización y Chile GBC y respaldado por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu), el estudio dio origen a ocho nuevas normas que buscan determinar la vida útil de elementos y componentes de edificaciones, para facilitar el desarrollo de edificaciones sostenibles a partir de la comprensión de su ciclo de vida.

En la apertura de la jornada, Emilio Rojas, profesional de la División de Normas del INN recordó que el sector construcción es responsable del 34% de la generación de residuos sólidos y de, al menos, el 33% de las emisiones de gases efecto invernadero. En este sentido, afirmó que pequeños cambios pueden generar una mejora significativa, siempre y cuando haya una concientización de todos los actores relevantes de la cadena productiva. 

“Es una primera ganancia sentar las bases, hablar de una terminología común y establecer cuáles son los lineamientos generales para comenzar a hablar de la vida útil de las edificaciones”, afirmó el especialista del INN. Asimismo, Emilio Rojas comentó que al hablar de la vida útil, muchas veces no se consideraba la parte de diseño, porque “probablemente, algunos pensaban que las edificaciones son eternas y que jamás se iba a terminar su periodo de vida útil”, argumentó. 

Además, el profesional sostuvo que no se consideraba que los materiales pudieran tener su desempeño completo durante cierta cantidad de tiempo o se pensaba que siempre iba a ser así: “que el material se iba a comportar de la misma manera frente a distintos ambientes”, dijo. 

Sin embargo, según Emilio Rojas, el proyecto que ejecutan el INN y Chile GBC podría disminuir las brechas e identificar en el Programa Estratégico Nacional de Productividad y Construcción Sustentable de Construye2025 un marco de normas técnicas que especifiquen una metodología para la determinación de la vida útil de elementos y componentes de edificaciones, lo cual permita facilitar el desarrollo de edificaciones sostenibles a partir de la comprensión de su ciclo de vida. 

El impacto de las nuevas normas

“Tuvimos ocho normas que las podemos identificar en tres aspectos. Una norma general que es la norma NCh 3447 parte 1, que establece los principios generales y un marco de trabajo para la estimación de la vida útil de las edificaciones; todos aquellos documentos que son fuentes de datos o entregan la manera de poder estimar estos datos y una evaluación de desempeño; la parte tres que son las auditoría y análisis de desempeño; y la parte cuatro que es planificación de la vida útil utilizando BIM”, comentó el profesional del INN.

 Las otras normas establecen los procedimientos y la metodología, el cálculo para el costo del ciclo de vida, la vida útil de referencia y su estimación. “Hemos identificado que existe la planificación, luego la fase de diseño, después la de construcción, la de gestión del activo, la de rehabilitación y la fase de fin de la vida útil. Asimismo, tenemos la identificación de las etapas por cada una de las fases”, explicó Emilio Rojas. 

Posteriormente, la secretaria ejecutiva de Construcción Sustentable y profesional de la Ditec-Minvu, Paola Valencia, expuso sobre la “Hoja de ruta para la estrategia nacional de huella de carbono del sector construcción”, cuyo primer primer pilar es la educación, para desarrollar estándares, normas y contenido que defina qué es sustentabilidad en la construcción. Igualmente, la especialista destacó el eje de habitabilidad y bienestar, que vela por la calidad de vida de las personas y del ecosistema. Junto con eso, valoró la innovación y la competitividad, en relación con la gobernanza multinivel e intersectorial que el Estado ha estado promoviendo. 

“El cálculo de la huella de carbono en la edificación tiene que ser de ciclo completo y, particularmente, necesitamos definir y ojalá tender a que la industria de la construcción vele por una vida útil que nos asegure una menor huella de carbono y promover construcciones de mayor durabilidad. Esta normativa que estamos trabajando acá, nosotros la apoyamos y la impulsamos porque nos interesa introducirla a las metodologías y en el trabajo de la mesa de huella de carbono”, acotó Paola Valencia. 

Además, recordó que con el apoyo del Construye2025 se ha impulsado la “Hoja de Ruta RCD Economía Circular en Construcción”, con un enfoque de economía circular; y el plan de adaptación al cambio climático de ciudades donde participan diez instituciones lideradas por el Minvu. Finalmente, la secretaria ejecutiva de Construcción Sustentable, destacó la Calificación Energética de Viviendas y la Certificación Edificio Sustentable (CES), que nació en 2014, administrada por el Instituto de la Construcción con el apoyo del Ministerio de Obras Públicas, el Colegio de Arquitectos y la Cámara Chilena de la Construcción. 

“Con respecto a la huella de carbono, tenemos una mesa que nace el 2018 en el Ministerio de Vivienda, instalada en el Instituto de la Construcción (IC) donde participan muchas instituciones, pero las mandantes son de carácter público y gremiales, principalmente”, comentó Paola Valencia. En este aspecto, recordó que en 2016 se empezaron a armar los lineamientos de trabajo para la metodología de monitoreo, reporte y verificación de huella de carbono para el ciclo de vida completo; levantamiento de base de datos; y calculadoras de huellas de carbono.

Enseguida, Gabriela Sabadini, jefa del Área Técnica de Proyectos y Estudios de Chile Green Building Council, explicó que también es importante apoyar la formación profesional. “Tenemos un equipo técnico con bastante conocimiento y experiencia y tenemos una serie de capacitaciones, no solamente asociadas a sistemas de certificación, sino que nos hemos ido moviendo un poquito más allá, implementando estrategias como por ejemplo en economía circular, manejo de residuos, salud y bienestar; incorporando no solamente el concepto de la edificación, sino el por qué este mandante o este dueño de este edificio decidió implementar alguna estrategia de sustentabilidad o certificar un edificio”, acotó.

En este contexto, la especialista de Chile GBC puso énfasis en la visión holística de los impactos del sector construcción y sus emisiones. “La gran mayoría de las emisiones que conocemos son las asociadas a las emisiones operacionales, esto es, durante el periodo de uso del edificio. Sin embargo, éstas representan no más del 20% de las emisiones totales del ciclo completo de esta edificación, no se hace cargo de todo lo que tiene que ver con la distribución del material, la fabricación del mismo y qué hago cuando este edificio llega a su fin de uso o se transforma”, dijo. 

El rol de Construye2025

Al cierre del seminario, la coordinadora de Sustentabilidad de Construye2025, Alejandra Tapia, destacó las oportunidades en economía circular, tanto en la construcción como en la vida útil de un edificio. “Como programa tenemos distintos grupos de trabajo. Uno es el comité gestor de RCD y economía circular; y, en conjunto y bajo la visión estratégica de los ministerios, se formó un comité consultivo público que dio lugar a una hoja de ruta sobre economía circular en construcción. Partimos de la visión del uso eficiente de los recursos en el ciclo de vida de los proyectos, tanto de edificación como infraestructura, involucrando a toda la cadena de valor con el objetivo de alcanzar una gestión ambientalmente racional de los residuos e impactar en forma positiva en lo social, ambiental y económico”, detalló.

En este contexto, Alejandra Tapia presentó los 5 ejes estratégicos de Construye2025, valorando el de planificación territorial con enfoque circular y el de la coordinación pública que fomenta licitaciones con una buena gestión de recursos y residuos y que busca que en se apliquen herramientas y metodologías para implementar criterios de economía circular a partir del año 2035.

En cuanto a ecosistema y cadena de valor, la especialista en sustentabilidad enfatizó en la necesidad de desarrollar una industria de proveedores, pero también en la investigación, el desarrollo, la innovación y en la importancia de la colaboración de la academia para formular proyectos, para nuevos materiales, para generar información que nos sirva para la implementación de la economía circular. 

“La economía circular tiene tres principios que tienen que ver con preservar y mejorar el capital natural controlado por existencia finita y equilibrando los flujos de los recursos naturales o renovables, optimizar los rendimientos y recursos haciendo recircular los componentes y materiales, y fomentar la efectividad del sistema diseñando la externalidades negativas, eliminando por ejemplo, la toxicidad de materiales y todo esto”, afirmó Alejandra Tapia. 

En este aspecto, la coordinadora de Sustentabilidad de Construye2025 reiteró que hay mucho que hacer en capacitación y regulación de mantenciones preventivas para alargar la vida útil de nuestras edificaciones. “Mil millones de dólares al año se gastan solamente en mantenciones, por lo que hay enormes oportunidades para las empresas; por parte del Estado también hay gastos considerables, ya sea por daño, por obsolescencia de bienes públicos”, indicó.

Asimismo, Alejandra Tapia destacó las oportunidades que se abren al proyectar a partir del diseño, al considerar cuánto va a durar cada una de las capas de los componentes de los materiales para, luego, renovarlos o reutilizarlos; y también valoró los espacios que se abren para las pymes en la reparación de componentes, de elementos constructivos y de revestimiento, entre otros. “Si no puedes cambiarlo, tenemos que cambiar la forma de pensarlo”, concluyó.

El Seminario completo está disponible AQUÍ.

Chile avanza en su estrategia de huella de carbono para la construcción

Gracias al trabajo público-privado, el país contará con lineamientos, metas, responsables e indicadores de seguimiento para fomentar el uso sustentable de los recursos, a lo largo de todo el ciclo de vida de los proyectos.

Debido al impacto que genera la construcción y operación de las edificaciones en el medioambiente, el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) y el Instituto de Cemento y Hormigón de Chile (ICH) formaron, en 2018, una mesa público- privada que buscaba definir metodologías de levantamiento de monitoreo reporte y verificación, bases de datos y calculadoras para promover la gestión y reducción de Huella de Carbono en la Construcción.

Con este fin, el Minvu –a través de la Secretaría ejecutiva de Construcción Sustentable de la Ditec- convocó a 10 instituciones del sector construcción, entre ellos, los ministerios de Medio Ambiente, Obras Públicas y Energía, el Instituto de Cemento y Hormigón de Chile (ICH), el Instituto Chileno del Acero (ICHA), Madera21 de Corma y el Instituto de la Construcción, con la participación de Hernán Madrid, jefe de CES, como representante.

El primer año se dedicó a nivelar conocimiento y gestionar acuerdos. Luego, se acordó formalizar una mesa técnica, cuyo fin era definir una visión estratégica y plan de trabajo a mediano plazo, asociado a actividades, productos y estrategia de financiamiento. Así fue como, a mediados de 2019, en el Instituto de la Construcción, se consolidó el Comité de Huella de Carbono del Sector Construcción, como una de las iniciativas del programa de trabajo del Convenio entre el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) y el IC, en el que también participó el jefe de CES.

Uno de los logros de este comité fue el estudio “Estado del arte nacional e internacional de alternativas metodológicas para levantamiento de datos, monitoreo, reporte y verificación y calculadoras de Huella de Carbono”, que permitió conocer el estado del arte nacional e internacional y hoy están disponibles en el sitio web de CES. Como segunda etapa, se definieron objetivos y hoja de ruta para los próximos tres años, lo que llevó a pensar en la implementación de una estrategia a largo plazo para la gestión de la huella de carbono del sector.

Hoy, se desarrolla la “Estrategia Nacional de Huella de Carbono Sector Construcción, Chile”, que establecerá lineamientos, metas, responsables e indicadores de seguimiento para fomentar el uso sustentable de los recursos, a través de la gestión eficiente de la huella de carbono del sector a lo largo de todo el ciclo de vida, es decir, incluyendo tanto el carbono incorporado como el carbono operacional.

Los documentos de la estrategia ya están disponibles para consulta en el sitio web de Certificación Edificio Sustentable.

Descarga aquí la Estrategia Nacional Huella de Carbono y la presentación del Minvu.

Crean plataforma de valorización e intercambio de subproductos industriales en Valparaíso

Marketplace ofrece materiales, subproductos y residuos no peligrosos que pueden valorizarse, para fomentar la economía circular en la industria.

“Mercado Residuo@Recurso” es la nueva plataforma creada por Plataforma Industria Cicular, que impulsará la economía circular en la Región de Valparaíso. En ella, empresas, transportistas, asesores y todos quienes se registren podrán ofrecer y encontrar subproductos y residuos no peligrosos que puedan valorizarse. “La región tiene el potencial de ser un territorio líder en economía circular, en particular en su sector industrial”, afirmó José Tomás Videla, coordinador del proyecto ejecutado por la Universidad de Valparaíso y cofinanciado por el Gobierno Regional de Valparaíso.

Según el investigador, una economía variada y exportadora con ubicación y servicios estratégicos, además de patrones de distribución y coexistencia de diversas industrias favorece la reutilización de materiales, energía e información. Por eso, Plataforma Industria Circular diseñó una plataforma de facilitación y seguimiento de iniciativas de apoyo mutuo, “entendiendo esto como transacciones y reutilización de residuos y subproductos industriales no peligrosos, entre empresas de la región”, señaló por su parte Patricia Martínez, directora del proyecto.

El marketplace permitirá conocer la valorización potencial de subproductos y residuos no peligrosos, y visualizar la oferta y demanda de los mismos, entre otras funcionalidades. Esta iniciativa se integra a su vez al portal plataforma-industria-circular.cl, que cuenta con un directorio de empresas, gestores, asesores y transportistas; y un módulo información, que permite el seguimiento y difusión de información relevante para las empresas e instituciones. “Esperamos que esta herramienta funcione como un bien público para potenciar la simbiosis empresarial y bajar las barreras de la economía circular que hay en la región”, agregó José Tomás Videla.

Junto con generar las condiciones de vinculación y transacción de residuos y recursos, “Mercado Residuo@Recurso” permite generar indicadores de desempeño de triple base y reportes con información relevante para las empresas, impulsando un mercado formal de materiales, subproductos y residuos no peligrosos valorizables.

Para ser parte de esta red de sinergia y potenciar la economía circular de la región, solo hay que registrarse en: http://plataforma-residuo-recurso.uv.cl/

Estrategias de Diseño Circular se presentaron en la segunda charla de inspiración en Economía Circular en Construcción

Cerca de 100 profesionales del sector se conectaron a esta instancia técnica con el objetivo de conocer y conceptualizar de qué forma concebir los proyectos de construcción con una mirada puesta en la sostenibilidad desde su diseño. 

El interés por el desarrollo de proyectos cada vez más responsables con el entorno y con las generaciones futuras, provocó que cerca de 100 profesionales del sector construcción se reunieran de manera virtual en la segunda charla abierta de inspiración sobre Estrategias de Diseño Circular que se realizó el pasado martes 5 de enero, como parte de los objetivos de la Estrategia Economía Circular en Construcción, iniciativa promovida por la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), el Instituto de la Construcción (IC) y el programa Construye2025 de Corfo, y que cuenta la facilitación técnica de la Corporación de Desarrollo Tecnológico, CDT.

Mirada arquitectónica

La jornada comenzó con la presentación de Ignacio Hernández, Past President de la Asociación de Oficinas de Arquitectos, AOA, quien realizó una introducción respecto de la relevancia de cambiar el paradigma actual y migrar hacia uno más circular. “Toda la evidencia nos dice que este modelo de economía de extracción, producción y desecho está agotado y tenemos que modificarlo, incorporando al ecosistema dentro de nuestra ecuación industrial”, señaló.

Junto con ello, invitó a centrar la mirada en las nuevas generaciones, pues todo lo que hoy se desarrolle, repercutirá en ellos. “El desarrollo que satisface las necesidades del presente, no puede ni debe comprometer la habilidad de las generaciones futuras de satisfacer sus propias necesidades. Y esto que parece de Perogrullo, no lo estamos haciendo. Está creciendo esta conciencia, pero a una velocidad mucho menor de lo que aumenta el deterioro de nuestro ambiente”, comentó.

Finalmente, destacó el rol que cumple la digitalización y la industrialización en el desarrollo de proyectos con una mirada de circularidad, modelos que poco a poco se van asimilando en el sector, pero que requiere un convencimiento del profesional. “Es la conciencia del diseñador la que puede hacer la gran diferencia en cómo disponemos y esta estrategia tiene que ver con lo factible, con lo viable, lo deseable y  especialmente con lo sostenible. Tenemos que extraer menos, construir menos y reciclar más y eso nos va a facilitar y permitir alcanzar un equilibrio, pues hoy estamos trabajando en desequilibrio”, concluyó.

No más basura

Luego, fue el turno de Macarena Guajardo, directora ejecutiva de Fundación Basura, quien comentó la experiencia de su institución en relación al tratamiento de los residuos y cómo desarrollar proyectos que consideren  cero residuos. “Partimos de la premisa de que ‘la basura no existe’ y es que el ser humano decidió crear el concepto de basura, de algo que no sirve, que no quiero tener más en mi cercanía y lo voy alejar lo más posible de mí y no me voy a preocupar de que pasará después con eso. Es uno de los acuerdos sociales más grandes que hemos tomado como humanidad. Y si nos damos cuenta que no existe realmente, tenemos todas las oportunidades para dejar de generarla”, explicó.

De este modo, desarrollan su iniciativa “Basura Cero”, “un paradigma sociopolítico que entiende que todos los actores de la sociedad tienen una responsabilidad compartida en cuanto a residuos se refiere. Y apunta a no seguir con las metas de reciclaje, sino que a no generar más basura. ¡Llegar a basura cero! No es necesario quemarla, por ejemplo, sino que desde el inicio, desde las políticas públicas, empezar a regular, establecer las políticas que permitan que  el sector productivo deje de comercializar basura, o generar productos que no se pueden reciclar o compostar”, comentó Macarena Guajardo.

Finalmente, la ejecutiva invitó a estrechar mucho más los lazos de cooperación en esta materia, pues, a su juicio, sería el único modo de dar pasos concretos. “Hay una cantidad de estrategias para avanzar hacia la economía circular, pero tenemos que hacerlo con pasos seguros y de manera conjunta. Y eso es lo que nos ha demostrado el proceso social que estamos viviendo hoy en Chile y este tipo de espacios que nos permiten conocernos y poder fortalecer lazos, porque solos, solas, no vamos a lograr ningún tipo de solución impactante”, argumentó.

Próxima charla

El programa de Charlas de inspiración de la Estrategia Economía Circular en Construcción concluirá el próximo 12 de enero de 2021, con el tema: “residuos como recursos”. Ambas instancias se realizarán de manera virtual a través de ZOOM. Las inscripciones se pueden realizar en el siguiente link: http://bit.ly/3oqaTem

 Para más información e inscripciones a este ciclo de charlas, contactarse a economiacircular@cdt.cl  /  www.economiacircularconstruccion.cl

2020: El año de la industrialización

Para el próximo año, en el CCI esperamos lograr mayor coordinación temprana, con mejor planificación, mano de obra tecnificada, más tecnología, partidas off-site y más innovación para una industria más competitiva.

Dicen que toda crisis ofrece una oportunidad y, aunque el coronavirus puso al mundo de cabeza, para la construcción industrializada así ha sido, pues, ahora más que nunca, es reconocida por su rol en el aumento de la productividad y en la disminución de los aforos en obra. “Todo esto hace pensar que este año marcará un impulso significativo para la construcción industrializada, la que, sin duda, asumirá un rol preponderante en los próximos años. En este sentido, el 2020 es un año a ser evaluado positivamente”, dice el director del CCI y gerente de estudios de Icafal Ingeniería y Construcción, Fernando Moreno.

En este sentido, el gerente general de la Corporación de Desarrollo Tecnológico de la Cámara Chilena de la Construcción, Juan Carlos León, cree que todo lo relacionado con la prefabricación de partes y piezas, se ha convertido en tendencia frente a la necesidad del sector de mejorar la productividad y, sobre todo, de cara a las nuevas condiciones laborales que la pandemia ha establecido. “Esta situación ha sido el gran gatillante para impulsar el interés por parte de las empresas de la construcción”, afirma.

Asimismo, el gerente de Construye2025, Marcos Brito, reconoce que durante 2020 se valoró aún más la productividad, no solo porque nos permite ejecutar de manera más eficiente las obras, sino porque “dadas las condiciones altamente restringidas de producción, había que aprovechar al máximo las horas con las que se contó para trabajar en obra”. Por eso, invita a cambiar de paradigma, aprendiendo a trabajar de manera mucho más eficiente y sostenible, con mayor coordinación temprana, con mejor planificación, con mano de obra tecnificada, incorporando tecnología, partidas off-site y buscando siempre innovar para ser más competitivos.

Según Priscila Becerra, líder de Innovación de Echeverría Izquierdo (EI), uno de los logros más destacados en industrialización y productividad, fue la conformación de tres comités de trabajo con focos en KPIS de soluciones industrializadas, normativas-regulación y educación. En este contexto, la secretaria ejecutiva del CCI, Katherine Martínez, destaca el trabajo colaborativo de más de 200 profesionales en torno a distintas líneas de trabajo para promover la industrialización. “Muy pronto pondremos a disposición del mercado un Índice de industrialización, con indicadores que permitirán medir aspectos relacionados a plazos, productividad, sustentabilidad, entre otros”, detalla.

Asimismo, desde el CCI se impulsó la creación de un lenguaje común, que irá de la mano de un anteproyecto de norma de industrialización con definiciones y términos generales, guiado por el Instituto de la Construcción, con el apoyo del Ministerio de Vivienda y Urbanismo. Esto, sumado a una matriz de roles de industrialización, que permitirá orientar a las empresas respecto al capital humano que requieren para sus proyectos y, al mismo tiempo, informar a las entidades educacionales sobre los perfiles, competencias y habilidades requeridas por el mercado para la formación de futuros profesionales y técnicos. “Adicionalmente, se está trabajando en metodologías de industrialización, que permitan acercar los conceptos a la práctica en proyectos de construcción. Y por último, un trabajo coordinado con BIM Forum Chile, para abordar BIM y estandarización para la industrialización”, complementa Katherine Martínez.

Otro hito clave fue la invitación hecha a la presidenta del CCI, Francisca Cruz, a ser parte del panel de expertos, junto al presidente CChC y al presidente de la CNP, del lanzamiento del Estudio Nacional de Productividad en la construcción, donde su llamado fue enfático: “no hipotequemos el avance en industrialización y en productividad, sin tener una etapa de diseño colaborativo que la habilite”.

Asimismo, Priscila Becerra, valora las líneas de trabajo definidas y los recursos asociados para implementación. “Además de levantar las redes sociales y generar tracción más allá de la Región Metropolitana, llegando a distintas regiones del país”, añade. Como complemento, la secretaria ejecutiva destaca que migrar todas las actividades a formato online permitió dar continuidad al plan de trabajo propuesto para el año y facilitar la participación activa de todos los socios a nivel nacional.

“Esta pandemia ha dejado de manifiesto que la construcción industrializada no es solo una tendencia sino una necesidad imperiosa en nuestro rubro para hacer frente a los desafíos del futuro. Con esta logramos estandarizar procesos y otorgar un mayor nivel de certeza a los procesos constructivos. Sin duda, un rubro más industrializado; disminuiría el nivel de exposición de los trabajadores de la construcción a contagios, ya que entre otros, promueve la prefabricación, la cual permite trasladar la mayor cantidad de partidas desde una obra a una fábrica, que es un ambiente más controlado para el personal”, afirma la presidenta del CCI, Francisca Cruz.

Y es que la industrialización permite subir el estándar del rubro, no solo a los clientes sino también a los trabajadores. “A su vez, sería un tremendo aporte poder contar con un rubro de la construcción industrializada más desarrollado en nuestro país, lo cual nos permitiría poder contar con construcciones para estas emergencias en menor tiempo, estar mejor preparados y tener mejor capacidad de respuesta, lo cual es tan necesario en países como Chile donde sabemos de emergencias cada cierto tiempo”, concluye la presidenta del CCI.

Los planes 2021

Acciones concretas para el levantamiento de brechas y propuestas de tres comités son parte de los deberes que se impuso el CCI para el próximo año. “En el caso de KPIs de soluciones industrializadas, y, por ejemplo, publicar los acuerdos tomados respecto a los criterios en cuanto a indicadores de construcción industrializada y con ello generar un portal donde recopilar data del sector, con la cual las empresas puedan tomar mejores decisiones en sus proyectos desde etapa temprana”, señala Priscila Becerra, líder de Innovación EI.

En el caso del comité de normativa, la apuesta es iniciar el año con el anteproyecto de norma de Industrialización, que permitirá contar con un lenguaje común y consensuado. Asimismo, uno de los grandes desafíos es iniciar una serie de talleres y capacitaciones que permitan fortalecer los conocimientos de profesionales y técnicos a nivel nacional, de la mano con universidades y centros de formación técnica, complementa Katherine Martínez, secretaria ejecutiva CCI.

“Esperamos un 2021 con nuevos socios con el deseo de liderar la transformación de la industria hacia una más tecnológica e industrializada. Además, esperamos contar logros en nuestras tres líneas de acción, pudiendo difundir soluciones y resultados de las implementaciones de acuerdo a los distintos actores de la cadena de valor”, comenta Priscila Becerra. 

En tanto, Katherine Martínez aspira a que la construcción en Chile de un gran salto en innovación, productividad y sustentabilidad, a través de la industrialización. “Creemos que seguir trabajando de forma colaborativa nos permitirá alcanzar ese sueño, y ver que una disrupción como la pandemia puede ser catalizador de cambios positivos y duraderos para el sector construcción”, argumenta.

Fuente: CCI

2021 abre con un hito en economía circular: así será la primera planta de valorización de residuos de la construcción en Chile

La empresa Revaloriza marcará un hito en la industria cuando este año inaugure el primer centro tratamiento y valorización de RCD del país. Proyectada en el sector industrial de Viña del Mar, la estructura pretende reciclar y valorizar 120.000 toneladas de residuos de la construcción y demolición procedentes de la Región de Valparaíso al año 2023. El proyecto -gracias al cual Revaloriza se adjudicó recientemente el Reconocimiento en Innovación Ambiental, otorgado por la Cámara Chileno-Británica de Comercio- tendrá tecnología del Reino Unido y se alinea con las metas de la Hoja de Ruta RCD de Economía Circular en la Construcción. La empresa, de esta manera, brinda una respuesta a la meta de tener infraestructura sostenible para procesar RCD en todas las regiones del país a 2035.

El año que recién acabó no fue pródigo en buenaventuras, pero al menos la empresa Revaloriza le supo sacar partido, ya que pudo focalizar los esfuerzos en su proyecto estrella: la primera planta de tratamiento y valorización de los residuos de la construcción y demolición (RCD) en Chile y en la Región de Valparaíso, que dará impulso a la economía circular en un área industrial que, se calcula, genera siete millones de toneladas de residuos anuales en nuestro país y representa el 35% de los residuos producidos a nivel mundial.

La pyme Revaloriza -cuyo objetivo es gestionar de forma sustentable los residuos inertes que producen las obras de construcción, para fomentar la economía circular en esa región (ver video promocional aquí)– pretende terminar de construir y echar a andar esta pionera planta el presente 2021, supeditado, por cierto, al contexto de incertidumbre que se vive por el alza de contagios por el covid-19.

Por de pronto, Revaloriza adquirió un terreno de 21.115 metros cuadrados en un lugar estratégico del sector industrial de Viña del Mar para edificar la planta. “Como empresa nosotros estudiamos las ciudades que más residuos generan dentro de la región y las que más pasivos ambientales generan: son Viña y Concón. Los RCD quedan dispuestos en quebradas y son un peligro por el tema de las remociones en masa”, explica Karen Aguilera, ingeniera ambiental y gerenta general de Revaloriza.

El objetivo, a futuro, es implementar un Plan de Cambio Climático con la Municipalidad de Viña del Mar, cuya finalidad será disminuir en conjunto los pasivos ambientales que provoca la industria de la construcción y, de paso, contribuir al triple impacto social, económico y ambiental. Una vez suscrito el convenio, dicen en la empresa, la meta es revalorizar el 40 por ciento de los RCD generados en la Ciudad Jardín.

Sin perjuicio de ello, la planta no solo abarcará los RCD generados en Viña, sino que en toda la Región de Valparaíso. Es más, dentro de las métricas por alcanzar de Revaloriza, se incluye la meta de reciclar y valorizar 120.000 toneladas de residuos de la construcción al año 2023 en todo el territorio regional.

A Aguilera le sirvió sobremanera conocer las experiencias de otras plantas de valorización de RCD en una gira que la llevó a Europa. De hecho, el centro que comenzará a operar en Viña del Mar tendrá tecnología procedente del Reino Unido porque “tiene que ser lo suficientemente robusta para este tipo de residuos” y también buscará financiamiento a través de las políticas del Reino Unido. “En Europa llevan 60 años reciclando los residuos de la construcción”, agrega.

“A través de la Cámara Chileno-Británica de Comercio estamos buscando más nexos con empresas del Reino Unido porque vimos que esto requería esfuerzos privados. Hay una posibilidad de ver opciones de financiamiento de políticas que el RU tiene y Chile no. En nuestro país hablar con un banco sobre una planta de valorización es muy extraño, porque hablas de algo que aún no existe. Si al banco le hablas de otro negocio, no hay problema”, comenta, algo perpleja, Karen Aguilera.

La operación de la planta y un premio

Dentro de los objetivos específicos del centro de valorización se cuenta unir a todos los actores de la cadena para que el proyecto sea exitoso: transportistas, constructoras, recicladores y recicladores de base y la academia. Solo de esta manera se creará un ecosistema circular que responderá a los objetivos planteados por la organización sobre reducir los impactos ambientales que la industria genera.

En rigor, la planta, en una primera parte, separará los materiales contenidos en los RCD hasta llegar al hormigón, transformarlo en árido reciclado y reinsertarlo en un nuevo ciclo constructivo “no en la estructura en sí, sino como base estabilizada o en infraestructura donde no se necesita gran resistencia como el mobiliario urbano”, aclara Aguilera.

Otra sección de la obra se encargará de separar el plástico, el cartón y los metales de los RCD. Con la madera se genera una trituración para que sea reincorporada a otros ciclos productivos. Para Karen Aguilera, hacer el proceso completo a nivel regional permitirá disminuir “los incendios, microbasurales clandestinos y remociones en masa que se producen por la mala disposición de los residuos de la construcción”.

Para la gerenta general de Revaloriza, el proyecto de la planta cobra sentido porque viene a llenar un vacío de infraestructura sostenible en Chile. Aguilera percibe una contradicción entre, por ejemplo, el proyecto de modificación del Reglamento Sanitario sobre Manejo de Residuos Peligrosos, coordinado por el Ministerio de Salud, y la falta de infraestructura para procesar esos residuos. “Si bien es un borrador, habla de fomentar la valorización a través de plantas, pero no existen en Chile. Tenemos una autoridad que dice ‘valoricemos’, pero ¿cómo vamos a valorizar si no hay infraestructura”, se pregunta Aguilera, cuya empresa pretende sumar a 25 constructoras al proceso en 2022.

Aparte de dar cumplimiento a siete de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de la ONU, este proyecto le granjeó a Revaloriza un prestigioso premio: la empresa fue una de las dos galardonadas en la categoría pyme de la novena versión del Reconocimiento en Innovación Ambiental, otorgado por el Comité de Sustentabilidad de la Cámara Chileno-Británica de Comercio (Britcham), institución que se ha convertido en una provechosa aliada para Revaloriza. La otra empresa que se adjudicó el premio en categoría pyme fue O2 Company. En la categoría grandes empresas los ganadores fueron dos proyectos: uno de Colbún y otro de Esval.

“Si bien en un principio el foco del premio era huella de carbono, y luego agua y energía, nos invitaron a participar como gestor de residuos. Para nosotros es muy importante: nos da visibilidad y nos sirve para generar redes”, opina al respecto Karen Aguilera.

La concordancia con la Hoja de Ruta RCD

La importancia del proyecto radica en que brinda respuesta a los ejes reseñados en la Hoja de Ruta RCD Economía Circular en Construcción, un documento presentado en agosto de 2020 y que procura ser una especie de guía hacia la sustentabilidad en la industria de la construcción. Liderada por el Comité Consultivo de la Estrategia RCD -conformado por los ministerios de Vivienda, Medio Ambiente y Obras Públicas, más Corfo y su programa Construye2025-, el informe traza metas a cumplir con el horizonte en 2025 y 2035.

“Tener un centro de valorización de RCD era un sueño desde un principio. Estamos muy contentos porque es un proyecto que apunta a cerrar muchas brechas que se identificaron y muchas soluciones que identifica la Hoja de Ruta”, cuenta la coordinadora de Sustentabilidad de Construye2025, Alejandra Tapia, quien participó de la gira a Europa para chequear las experiencias de otras plantas de valorización de RCD.

Una de las metas más relevantes que contribuye a cumplir el proyecto, según Tapia, tiene que ver con el eje 1: allí se menciona que, al año 2035, “el país cuenta con infraestructura para la valorización, plantas y estaciones de transferencia de RCD en todas sus regiones”.

“Es un gran hito. En la Quinta Región se ha desarrollado un ecosistema circular muy interesante que será pionero en este tema. Esto es consecuencia del trabajo colaborativo. Revaloriza es un actor muy importante en incorporar materias primas secundarias en nuevos ciclos productivos”, añade Alejandra Tapia.

Sobre el trabajo colaborativo e intersectorial, otro de los objetivos específicos del proyecto de planta de Revaloriza se alinea con algunas metas del eje 3 de la Hoja de Ruta RCD. La meta planteada por el documento indica que “al menos 40% de las universidades del país tienen programas de investigación de economía circular en construcción”. Revaloriza propone avanzar al respecto una vez que la planta sea inaugurada: promete trabajar con al menos tres de las principales universidades de la región en el desarrollo de nuevos productos reciclados a partir de RCD.

Del mismo modo, Revaloriza apuesta a “desarrollar progresivamente al 2030 nuevos puestos de trabajo basados en la segregación y reciclaje de RCD que impulsen la creación e innovación de nuevas actividades que promuevan el trabajo de hombres, mujeres, jóvenes y personas”. Esto se ensambla con uno de los principios del eje 2 de la Hoja de Ruta, que a 2025 aspira a la existencia de “instrumentos e iniciativas públicas para la creación de nuevos empleos e inclusión, relacionados a la economía circular y gestión de RCD”.

Entre los objetivos de Revaloriza está el fomento de áridos reciclados para la construcción para evitar que grandes masas de terreno sean removidas y pongan en peligro a la población por las crecidas de los ríos. En eso entra a tallar Construye2025, ya que una de sus tareas es traccionar la demanda de áridos reciclados para una gestión sustentable de residuos en obras públicas.

Alejandra Tapia dice que estos pasos sustantivos que está dando Revaloriza en torno a su planta ayuda a cumplir una de las metas más ambiciosas planteadas en el eje 2 de la Hoja de Ruta: que todas las licitaciones públicas de edificación e infraestructura nueva, aplica herramientas y metodologías para la implementación de criterios de economía circular y gestión sustentable de los recursos en la etapa de diseño de los proyectos.

De cualquier forma, Revaloriza piensa seguir creciendo y estima que hay una necesidad de construir unas cinco plantas para cubrir todos los requerimientos de la Región de Valparaíso, debido a la construcción del megapuerto en San Antonio. Y con respecto a otras plantas en la región, Karen Aguilera cree que “la primera planta es lo que más ha costado, ha sido difícil, pero pienso que la segunda y la tercera deberían estar listas dos años después de la primera”.

 

Fuente: País Circular

Certificación de Vivienda Sustentable lanza campaña de registro gratuito desde el 4 al 15 de enero

Como una forma de incentivar el desarrollo de proyectos sustentables en beneficio de la comunidad, la Certificación de Vivienda Sustentable (CVS) liderada por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) y administrada por el Centro Tecnológico para la Innovación en la Construcción (CTeC), lanzó este lunes 4 de enero y hasta el 15 del mismo mes, una campaña que invita a los desarrolladores inmobiliarios a registrar de forma gratuita sus proyectos e iniciar el proceso para obtener la certificación CVS.

¿Quiénes pueden postular?

Todos aquellos proyectos que incorporen en su desarrollo criterios de sustentabilidad, considerando características como: alto desempeño ambiental y energético, como calidad del aire; temperatura confortable; iluminación natural; sistemas de climatización eficientes; sellos contra infiltraciones; artefactos sanitarios eficientes; sistemas de riego; relación con el medio ambiente; uso eficiente de los materiales; manejo de los residuos generados por la construcción; manejo de los residuos generados por los usuarios; conectividad con transporte y servicios, entre muchas otras variables.

El proceso de precertificación y/o certificación consta de 6 pasos:

  1. Elección de un asesor (https://cvschile.cl/#/register)
  2. Registro del Proyecto
  3. Recopilación de Documentación
  4. Entrega de Documentación
  5. Revisión de Documentación
  6. Entrega de Precertificación y/o Certificación

Más información sobre el proceso de certificación: https://cvschile.cl/#/certification

¿Qué es la CVS?

La Certificación de Vivienda Sustentable CVS es un sistema voluntario de certificación ambiental que evalúa el desempeño de los proyectos residenciales a nivel nacional. Es aplicable a cualquier tipo de vivienda nueva, ya sea pública o privada, y busca incentivar la mejora de la calidad, a través de la verificación de la correcta implementación de buenas prácticas de diseño y construcción, que permiten, entre otras ventajas, reducir los costos de operación y mantenimiento de los hogares, cuidar el medio ambiente, y mejorar la calidad de vida de las personas.

La aplicación de la certificación ayuda a reducir los costos de operación y mantención de las viviendas, particularmente en temas de consumo energético y de agua. Por otro lado, permite reducir los impactos ambientales relacionados con el cambio climático.

La CVS es liderada por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo, con apoyo de los ministerios de Energía y del Medio Ambiente, además de la colaboración del Colegio de Arquitectos, la Asociación de Oficinas de Arquitectura, el Instituto de la Construcción, la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios, la Corporación de Desarrollo Tecnológico, la Cámara Chilena de la Construcción y el Centro Tecnológico para la Innovación en la Construcción, entre otras entidades públicas y privadas.

Instituto de la Construcción: un año de sinergias y colaboración

Construye2025 ha logrado importantes avances al lado de la entidad gestora que respalda Corfo, en una modalidad de trabajo fluida y coordinada que apunta a un gran objetivo común: mejorar la productividad y sostenibilidad de la industria.

Como un año de importantes avances califica el director ejecutivo del Instituto de la Construcción (IC), José Pedro Campos, los primeros 12 meses junto al programa Construye2025 impulsado por Corfo. Aunque la pandemia quiso frenar algunos planes, el rol del IC como entidad gestora y la experiencia de Gustavo Cortés, que ejerce la jefatura de proyecto, han sido un aporte que va más allá de lo administrativo, según Campos.

Además, el director ejecutivo del IC, valora las reuniones que están realizando los equipos del Construye2025 y del Instituto de la Construcción (IC), las que han permitido profundizar el conocimiento de los programas de trabajo de ambas instituciones e ir identificando oportunidades de colaboración y de coordinación, con el fin de optimizar los recursos.

“Creo que hemos podido aportar nuestra experiencia de trabajo de colaboración transversal y nuestra visión sobre oportunidades con los diferentes actores, ya que llevamos trabajando con ellos varios años. Asimismo, creo que hemos aportado en ámbitos de gobernanza y organización, dado que somos una institución que debe cumplir con ciertas formalidades en dichos ámbitos, con ya cuatro reformas a los estatutos, que han sido avances importantes en mejorar y modernizar la institución, particularmente, perfeccionando la representación y participación de nuestros socios en la corporación”, afirma José Pedro Campos.

  Al mismo tiempo, el ejecutivo destaca la mirada fresca y ambiciosa sobre algunos temas relevantes para el sector, como la presencia en los medios de comunicación que, según dice, el programa ha logrado de manera sobresaliente, y las conversaciones sectoriales que han marcado la pauta, como es el caso de la Gestión de Residuos de Construcción y Demolición. “Ya no son tres o siete, sino diez personas mirando lo que hace el programa y lo que hace el Instituto, aprovechando experiencias y capacidades”, puntualiza.

  En este sentido, la sectorialista de Construcción y Economía Circular de la Gerencia de Capacidades Tecnológicas de Corfo, Helen Ipinza, considera un gran acierto que el IC asumiera como entidad gestora del programa estratégico Construye2025, ya que junto a su labor en términos administrativos y financieros, ha sido un aporte en términos técnicos y también en redes sectoriales. “El Instituto ha aportado con apalancamiento de recursos, con capacidades técnicas y con el posicionamiento del programa y de sus temas. Se observa un gran compromiso del Instituto y de sus socios en relación a Construye2025”, señala.

Una mirada al futuro

  Para el segundo año de trabajo conjunto, Helen Ipinza, cree que la relación debiera perfeccionarse y aumentar las sinergias en temas de industrialización, economía circular, innovación y transformación digital. “Así también debiera intensificarse la capacidad de apalancamiento de recursos pecuniarios, para poder avanzar más rápido en los ejes señalados, en favor de la competitividad, mejorándose la productividad tan rezagada que todos reconocemos”, dice.

En este contexto, la ejecutiva de la Gerencia de Capacidades Tecnológicas de Corfo espera ver, en 2021, una estrategia de economía circular del sector construcción definida y, por ende, otro espacio de máxima sinergia, de cara al desarrollo sostenible, asumiendo el desafío de la carbono neutralidad para 2050. “Se ha generado una alianza muy potente entre Construye2025, Corfo y el Instituto de la Construcción, juntos podemos realmente hacer la transformación del sector construcción y lograr, con menos recursos, hacer más infraestructura y edificaciones para generar mayor bienestar a nuestra ciudadanía”, afirma.

Por su parte, el director ejecutivo del Instituto de la Construcción, José Pedro Campos, espera seguir fortaleciendo la colaboración y coordinación entre ambos equipos para continuar avanzando como uno solo, que trabaja fluida y coordinadamente. “Esto conlleva, por ejemplo, profundizar oportunidades de colaboración técnica, como lo son aportar en la elaboración de anteproyectos de normas o reglamentos, como lo estamos ya haciendo hoy, y también ahora en la gobernanza, que es un tema sobre el cual nos comprometimos”, comenta.

  Finalmente, Campos destaca la voluntad, la generosidad y el compromiso de Marcos Brito, Alejandra Tapia e Ignacio Peña, para abordar las acciones de colaboración y coordinación con el equipo del IC. “Lo agradezco y valoro enormemente”, concluye.

Estancamiento de la productividad: ahora más que antes, una situación por resolver

Por Marcos Brito A., gerente de Construye2025

Durante las últimas semanas de 2020, tuvo lugar la Semana de la Productividad, en la que se presentaron públicamente los resultados de dos contundentes diagnósticos, elaborados por la Comisión Nacional de Productividad (CNP) y Matrix Consulting, por encargo de Presidencia y la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), respectivamente. Ambos coincidentes en su diagnóstico y muy alineados en cuanto a sus recomendaciones, que, además, vienen a ratificar y reforzar lo ya desarrollado en 2015, en el marco de la construcción de la hoja de ruta de Construye2025.

El lado amargo es que todos los diagnósticos, incluyendo otros anteriores de McKinsey, UAI y Clapes-UC, coinciden en que hay estancamiento de productividad, desde hace unos 25 años, lo que fue recientemente cuantificado por Matrix Consulting: Si lográramos el potencial pleno de productividad laboral en la construcción chilena, podríamos generar U$13 billones adicionales de PIB para el país, de los que U$7.500 millones corresponderían a edificación (en base al PIB de construcción 2019, de U$19.760 millones). Hoy, esto se vincula al impacto de la masiva paralización de obras, que se ha proyectado en un déficit de inversión de U$3.680 millones (CChC, 2020), la mitad de dicho potencial en edificación, bajo condiciones productivas normales. ¡Lo que nos estamos perdiendo es enorme!

La gran pregunta es cómo salir de este estancamiento y lograr el tan ansiado PIB adicional, que podría dar valiosas cifras de crecimiento para un país que ansía salir de las vías del desarrollo para lograr ser un país desarrollado. No hay una receta única.

La hoja de ruta de Construye2025 constituyó un esfuerzo sin precedentes en plantearnos una estrategia de largo plazo (10 años) para lograr mejoras en la competitividad sectorial, por medio de mejorar su productividad y sustentabilidad. Se indicaron inicialmente 15 iniciativas, diversas entre sí, para lograr metas que hoy sabemos fueron ambiciosas, pero eran las que teníamos que plantearnos. Hoy, estas son la base de las recomendaciones que los diagnósticos de CNP y Matrix nos ratifican y refuerzan, ya con bastantes más datos e información de referencia nacional e internacional.

El lado bueno es que somos varios organismos colaborando en la articulación de iniciativas que reviertan esta situación y nos ayuden a crecer. Construye2025 ha sido un referente en plantear temas críticos a resolver, pero hay instituciones que, hoy más que nunca, están llamadas a generar los cambios: CChC, CDT, Instituto de la Construcción, Minvu, MOP, Planbim, ICHA, ICH, Madera21, CTeC, Cipycs y tantos otros… Durante 2021, la misión de Construye2025 incluirá revisar su hoja de ruta e incorporar estos importantes nuevos diagnósticos, para así seguir sumando esfuerzos desde los privados, el Estado y la academia.

Finalmente, la industrialización del sector y sus procesos productivos, la masificación de tecnología digital (encabezado por el BIM), la consolidación de la innovación para la competitividad, el fortalecimiento del capital humano a todo nivel, el cambio de paradigma hacia la economía circular, el desarrollo de modelos contractuales integrados y la optimización de los procesos de licitación pública, parecen encabezar como las principales vías a revertir esta larga situación de estancamiento. No obstante, son bastante más las iniciativas que hace falta llevar a cabo. 

Por lo mismo, es tarea de muchos (o todos) trabajar y colaborar en la transformación de este importante sector, por el bien de todos y el de un Chile que necesita -con urgencia- crecer y lograr una mejor calidad de vida en pos de una mayor equidad.

El optimista balance anual del Consejo Directivo de Construye2025

La conversación giró en torno al diagnóstico sobre la productividad, que lideraron la CNP y la CChC, y las proyecciones a medida que surjan cambios a nivel tecnológico y regulatorio.

El pasado viernes 11 de diciembre se realizó el Consejo Directivo número 35 de Construye2025, en el que participaron los diversos actores que buscan una industria de la construcción más tecnológica, productiva y sustentable, entre ellos, Jadille Baza Apud, nueva presidenta del Colegio de Arquitectos.

“Pese a las dificultades de este 2020, el año ha abierto muchas oportunidades de innovación y nuevas formas de trabajo, incremento a la digitalización en todos los procesos, en prefabricación, diseño con BIM, etc.”, comentó Vicente Domínguez, presidente del Consejo Directivo de Construye2025, al abrir la jornada. 

En la sesión, la secretaria ejecutiva del Consejo de Construcción Industrializada (CCI), Katherine Martínez, dio cuenta de los avances del año, tanto en las actividades desarrolladas como por parte de los grupos de trabajo internos que han ido avanzando para fortalecer los ejes estratégicos del programa.

Asimismo, la directora ejecutiva de Planbim, Carolina Soto, destacó la incorporación de BIM en los permisos de edificación. “Hay dos proyectos de subsidios DS19 que salieron con el Minvu, para más de 500 viviendas, donde la incorporación de BIM fue un requisito voluntario para los proveedores. Allí, el 95% de las propuestas incorporaron el BIM”, explicó.

Asimismo, la ejecutiva valoró las 1.137 viviendas de la Villa Panamericana. Este proyecto y los dos anteriores lograron abarcar el 18% de las viviendas en terreno Serviu de este año. “En la Dirección de Arquitectura MOP, hemos tenido un aumento en el requerimiento de BIM, que hoy se pide en el 19% de los proyectos. En la etapa de diseño, que es donde se recomienda comenzar con BIM, el 38% de los proyectos salieron con BIM, pero si hablamos de la inversión es el 53%”, comentó Carolina Soto.

  A continuación el profesional de apoyo de Construye2025, Ignacio Peña, detalló el trabajo del Comité Gestor de I+D y la participación del programa en Construye Innovando; Construye Futuro; Inacap; y Chile Creativo, con el que se hizo un evento que abordó tecnologías como la realidad virtual y aumentada. “El I+D es una de las puertas importantes por abrir. Por eso se creó el comité que ya va en su séptima reunión, en el que participan los centros tecnológicos Cipycs y CTeC; el IDIEM, el Centro de Innovación en Madera; Brinca, que ha realizado proyectos I+D en construcción; Corfo Conecta; y la Dirección General de Obras Públicas del MOP”, detalló el ejecutivo.

  Dicho comité logró diagnosticar a 360 proyectos, identificando a los actores relevantes, los desafíos y en qué regiones se hace más I+D, lo que ha permitido elaborar un plan de trabajo para aumentar el I+D en la construcción. Asimismo, en el encuentro del Consejo Directivo se presentaron los avances del Cipycs en la construcción de laboratorios, donde se han tenido que considerar las restricciones producto de la pandemia. En este aspecto, la gerente del Cipycs, Tania Romero, destacó el impacto de las experiencias virtuales en la generación de herramientas que usan la realidad virtual para mejorar la productividad.

Plan de Trabajo 2021

Adelantándose al futuro, el gerente de Construye2025, Marcos Brito, rescató la revisión de los diagnósticos de la Comisión Nacional de Productividad y Matrix Consulting, que permitieron detectar qué falta por hacer y ver cómo aquello se incorpora a la hoja de ruta. “El próximo año queremos contar con una nueva consultoría para actualizar nuestra hoja de ruta. No queremos impactar en indicadores de productividad porque sí, sino porque esto mueve grandes cifras de ingreso para el país, lo que hoy es más importante que nunca”, enfatizó.

  Posteriormente, expusieron Juan Domingo Pau, Sebastián Valenzuela y Javier Bosch del equipo de Matrix Consulting, para profundizar sobre los resultados del estudio que se realizó junto a la Cámara de la Construcción y que se lanzó en la Semana de la Productividad. (Ver nota relacionada).

  Según Marcos Brito, en este ámbito, hay mucho que estudiar, entender y adoptar, mientras que Yves Besançon, past president de la Asociación de Oficinas de Arquitectos (AOA) y representante en el Consejo Directivo de Construye2025, valoró la existencia de un estudio que permita orientar las decisiones. “El I+D está faltando para que las empresas se direccionen y vean la mejor forma de aplicar la tecnología. Eso es lo que hoy está haciendo el Consejo de Construcción Industrializada. Hay que educar a las personas”, dijo.

  Finalmente, el gerente de Construye2025, invitó a los asistentes a seguir aprendiendo y a hacerse cargo de los desafíos, trabajando para lograr la productividad deseada para Chile.

Nuevas herramientas para mejorar las condiciones sanitarias de la construcción en ExpoSoluciones

Productos, servicios y tecnologías, además de charlas, talleres y ruedas de negocios fueron parte del encuentro que expuso las tendencias y experiencias relacionadas con la pandemia.

Durante tres días, los asistentes a ExpoSoluciones 2020 pudieron conocer instrumentos de testeo y facilitación de procesos de trazabilidad, además de elementos para sanitización de materiales y equipos. La feria virtual de acceso gratuito, impulsada por la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), contó con el apoyo de Construye2025, Corfo, la Corporación de Desarrollo Tecnológico (CDT) y también de la Mutual de Seguridad, iF Chile, Start-Up Chile, la Asociación de Municipalidades de Chile, SociaLab y Caja Los Andes.

“Esta feria se suma al conjunto de herramientas, que están transformando nuestra industria para el bienestar, especialmente, de los trabajadores y son fundamentales para que la construcción siga siendo una industria segura y reactivadora”, comentó el presidente de la Cámara Chilena de la Construcción, Antonio Errázuriz.

Asimismo, Fernando Hentzschel, gerente de Capacidades Tecnológicas de Corfo, valoró el rol de las tecnologías para una reactivación económica sostenible y responsable, que permita retomar las obras de construcción, con todas las medidas necesarias para resguardar la salud de los trabajadores.

“Este evento es una gran alternativa para las empresas, negocios y emprendedores que pronto deberán reforzar sus condiciones sanitarias ante un inminente segundo brote de coronavirus en Chile. Hoy más que nunca la salud y la seguridad de los trabajadores y sus familias son imperantes para cualquier tipo de industria, sobre todo en una con la necesaria asistencia a espacios físicos como ocurre en la construcción”, dijo Alejandra Mustakis, presidenta de la Asociación de Emprendedores de Chile (Asech) y socia fundadora de iF Chile.

En la ExpoSoluciones, distintas ruedas de negocios, charlas y workshops contribuyeron a la generación y fortalecimiento de redes, a fomentar las reflexiones sobre el actual contexto sanitario y a generar nuevos espacios para reactivar la economía. “Mientras el desempleo sube y la competitividad se hace más compleja, debemos plantearnos dónde poner el foco del fomento productivo. En Start-Up Chile estamos convencidos de que una alternativa es potenciar a empresas innovadoras con potencial de crecimiento acelerado”, señaló María de los Ángeles Romo, gerente Start-Up Chile. Asimismo, la ejecutiva destacó el papel de las startups en la resolución de problemáticas locales y globales y la generación de empleo.

En total, en ExpoSoluciones se presentaron 50 stands con productos y servicios disponibles para la gestión sanitaria, en un espacio 100% virtual y gratuito.

CorfoConecta: el evento que impulsa el desarrollo tecnológico en la construcción

Construye2025 fue parte de la jornada en la que representantes de la industria se reunieron con startups que buscan llevar a cabo ideas destinadas a mejorar el desempeño de la industria.

A mediados de diciembre se realizó uno de los encuentros más valorados por emprendedores y fundadores de startups vinculados al I+D en la construcción, como antesala a las rondas bilaterales entre empresas y representantes de la industria. Con expositores del Centro de Tecnologías de la Innovación (CTeC), del Centro Interdisciplinario para la Productividad y Construcción Sustentable (Cipycs), del Centro de Innovación e Madera (CIM-UC), de Corfo y del Ministerio de Vivienda se realizó el evento CorfoConecta “Innovando en el Sector de la Construcción”.

Dicha actividad buscó tanto propiciar y generar redes, como aumentar los niveles de conocimiento y adquisición de herramientas para aumentar las probabilidades de éxito de los proyectos. Para Corfo, organizar este tipo de reuniones entre partners y beneficiarios es una tarea constante, debido al impacto que las vinculaciones generan en los emprendimientos.

La transformación digital fue una de las temáticas clave del encuentro en el que participó Ignacio Peña, coordinador de I+D de Construye2025, quien se refirió a los desafíos y tendencias que está abordando el programa. El director de programas estratégicos de Corfo, Carlos Ladrix, dio la bienvenida a la jornada destacando el foco de nuestra industria  hacia la industrialización, la digitalización y la sustentabilidad.

Al menos cuatro son los desafíos en los que se centran empresas de base tecnológica para potenciar a la industria:

1. Construcción digital: hacia una industria basada en datos

Mejoramiento de la capacidad de levantamiento, gestión, predicción y gobernanza de datos en la industria, digitalización e interconectividad de áreas y procesos, e implementación de tecnologías existentes.

2. Nuevas tecnologías para la industrialización

Tecnologías para mejorar la colaboración entre áreas de diseño, arquitectura, inmobiliaria y proveedores, reducción de tiempo y costo a lo largo de la cadena de valor de la industria.

3. Construcción sostenible: futuro y evolución

Soluciones que permitan medir, impulsar y adoptar el uso de nuevos materiales que disminuyan el impacto ambiental, mejoramiento de la gestión de residuos y la visibilización de indicadores de impacto ambiental y ciclo de vida del producto.

4. La construcción como motor de desarrollo social

Soluciones que reduzcan el impacto en las comunidades (ruidos, polvo, residuos) y nuevos mecanismos de medición de impacto social – ambiental.

Herramientas normativas para la planificación de la vida útil en edificaciones – Método de cálculo y planificación

El Instituto Nacional de Normalización (INN), en conjunto con el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (MINVU) y el Chile Green Building Council (Chile GBC) han desarrollado el proyecto INNOVA-CORFO Herramientas normativas para la planificación de la vida útil en edificaciones – Método de cálculo y planificación’ (18BPE-93896). El proyecto, que se inició el segundo semestre del año 2018 y tuvo como resultado la elaboración de 8 normas técnicas orientadas a proporcionar un marco de normas técnicas que especifiquen una metodología para la determinación de la vida útil de elementos y componentes de edificaciones, lo cual permita facilitar el desarrollo de edificaciones sostenibles a partir de la comprensión de su ciclo de vida.

La industria de la construcción es un sector que contribuye al crecimiento de la economía y un importante pilar de desarrollo. Según el Informe de Productividad en el Sector de la Construcción (Comisión Nacional de Productividad, CNP), el sector de la construcción representa cerca de un 7% del PIB de la economía (2019), alcanzando 19.500 millones de dólares, distribuyéndose en servicios anexos (31%), obras de ingeniería (34%) y edificación (35%). En términos de empleo corresponde a un 8,3%

La construcción es el mayor consumidor de materias primas y otros recursos, utilizando alrededor del 50% de la producción mundial de acero y más de 3 mil millones de toneladas de materias primas. Por otra parte, se desperdician millones de toneladas de residuos de la construcción año a año, en el caso de Chile para el año 2023, se proyecta que la generación de residuos sea de 7.455.602 toneladas anuales, sólo considerando vivienda (Minvu 2019)

Por lo anterior, la industria de la construcción está basada en un marcado concepto de economía lineal, en la que se extrae, fabrica y construye; luego se desecha y demuele. Sin embargo, los nuevos desafíos globales vinculados a la disponibilidad de materias primas, agua y energía, movilizan a las empresas hacia un cambio de paradigma, en el que la economía circular es una clara oportunidad de creación de valor. Este enfoque de circularidad y la incorporación de estrategias de sostenibilidad en los distintos procesos vinculados a la construcción es fundamental si se desea abordar en forma eficiente, tanto los desafíos ambientales que enfrenta el planeta, como contribuir al desarrollo de las comunidades en lo social y lo económico a través de una visión orientada hacia bienestar de las personas y al cuidado del entorno.

En Chile, a partir de los acuerdos y compromisos logrados en el marco de la Estrategia Nacional de Construcción Sustentable, se han desarrollado e implementado una serie de iniciativas, con el objetivo de reducir los impactos generados por la construcción y sus procesos, mejorando la productividad del sector; fomentando el desarrollo sostenible de nuestro país además de fortalecer el marco regulatorio que ha sido una de las brechas detectadas como parte de los procesos de levantamiento del Programa Estratégico de CORFO CONSTRUYE 2025.

En respuesta a las brechas detectadas por el Programa Estratégico de CORFO, CONSTRUYE 2025, diversos proyectos se han originado, es en este contexto que en el año 2018 el Instituto Nacional de Normalización, en conjunto con el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (MINVU) y Chile Green Building Council (ChileGBC), el primero en calidad de ‘Beneficiario’ y los dos últimos en calidad de ‘Mandante’ y ‘Coejecutor’, respectivamente, postularon a la línea de financiamiento de CORFO ‘Bienes Públicos Para la Competitividad’, siendo adjudicado el financiamiento, para la elaboración de normativa técnica para un set de normas técnicas que definan la directrices para una metodología para la determinación de la vida útil de elementos y componentes de edificaciones, como aspecto relevante para el desarrollo de edificaciones sostenibles a partir de la comprensión de su ciclo de vida, impactos y desempeños.

Este proyecto INNOVA-CORFO, viene a dar continuidad al Proyecto Herramientas Normativas para el desarrollo de la evaluación de la sostenibilidad en la construcción’ (15BP-45415), desarrollado entre los años 2015 al 2017 y que tuvo como resultado la elaboración de 6 normas técnicas orientados a proporcionar y definir los principios generales y pautas de indicadores de sostenibilidad relacionados con obras de construcción, elementos y componentes (Ver Tabla 1).

En el actual proyecto ‘Herramientas normativas para la planificación de la vida útil en edificaciones – Método de cálculo y planificación’ (18BPE-93896)’ se desarrollaron normas que promueven el uso del concepto de planificación de la vida útil a lo largo del ciclo de vida, con el objetivo de entregar mayor certeza que la vida útil estimada cumplirá o excederá la vida útil de diseño. Esta serie de normas, basadas en la serie de normas ISO15686, enfatiza el principio de transparencia mediante procedimientos estandarizados para el uso, captura y verificación de datos e información disponible de la vida útil, registros de desempeño de elementos y componentes. Esta serie de normas son de particular relevancia para evaluar y gestionar la sostenibilidad en las obras de construcción a través de sus materiales, dado que genera entradas para establecer vida útil de referencia y vida útil estimadas, requeridos en el análisis de ciclo de vida de productos, según ISO21930. Por lo anterior, este proyecto deja a disposición las herramientas metodológicas para la declaración del desempeño técnico y funcional de los productos de construcción.

En la Tabla 2, se entrega un breve detalle de cada una de las normas.

Finalmente con este proyecto, se pone a disposición un lenguaje común y metodología estandarizada, que con el esfuerzo colectivo de los distintos actores de la cadena de valor de la industria de la construcción permita avanzar en introducir criterios de sostenibilidad y a fortalecer la infraestructura de la calidad en el ámbito de la normalización.

Fuente: El Mercurio

Charla de inspiración en Economía Circular en Construcción mostró casos de modelos de negocios circulares 

Más de 90 profesionales del sector participaron de esta instancia en la que se presentaron tres experiencias de emprendimiento e intraemprendimiento que emplean un modelo circular en sus negocios. 

Con el objetivo de mostrar casos de éxito en la aplicación de modelos de economía circular en la industria, se desarrolló el pasado 15 de diciembre, la primera Charla abierta de inspiración sobre Modelos de Negocios Circulares, de la Estrategia Economía Circular en Construcción, iniciativa promovida por la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), el Instituto de la Construcción (IC) y el programa Construye2025 de Corfo, que cuenta la facilitación técnica de la Corporación de Desarrollo Tecnológico, CDT.

De este modo, más de 90 profesionales del sector se reunieron de manera telemática para escuchar las experiencias de tres empresas del sector construcción que han aplicado modelos de economía circular en sus negocios. La colaboración, la innovación y el convencimiento de ser un agente activo del cambio, son elementos clave para el desarrollo de estas iniciativas, afirmaron. 

Modelo sobre la base de la gestión de residuos

La primera charla de inspiración estuvo a cargo de Nicolás Behar, cofundador y director ejecutivo de RECYLINK, emprendimiento que funciona a través de una plataforma tecnológica, que surgió como respuesta a la necesidad de muchas organizaciones que requerían gestores de residuos, junto con responder así, a la actual necesidad medioambiental de controlar los desechos que están generando.

Hoy RECYLINK trabaja con más de 130 empresas, con 35 generadores de residuos, 50 valorizadores, 49 transportistas. Llevan a la fecha más de 10 mil toneladas tratadas y más de 1.700 operaciones en 3 años. “Esto ha significado, 745 toneladas valorizadas y hemos ayudado al planeta a disminuir más de 1.573 toneladas de CO2 equivalentes. Eso nos llena de orgullo, son muchas las empresas que están disminuyendo su impacto ambiental”, comentó Behar.

Junto con ello, también mostró el primer caso de deconstrucción de una demolición 100% registrada. “Esto significa que asesoramos el proceso de lo que podríamos llamar una demolición verde, donde ayudamos a la empresa constructora y de demolición, a valorizar la mayor cantidad de residuos durante el proceso de demolición. Valorizamos casi un 20% de lo que estaba en el terreno. Esto es algo nuevo, experimental. Conocíamos experiencia fuera de Chile y nos dijimos, si se hace afuera por qué no lo podemos hacer nosotros y nos lanzamos. Logramos valorizar 8 residuos diferentes, el 20% del volumen. Todo esto fue gracias a una experimentación y colaboración entre todos los actores involucrados”, explicó.

 

 

Modelo sobre la base de la innovación

Tras la primera presentación, fue el turno de conocer experiencias desde las empresas constructoras. Para ello, Marisol Saavedra, subgerente de Gestión de Innovación y Calidad de AXIS DC, expuso el caso de éxito de “Reaxiona” proyecto de gestión de residuos que nació como iniciativa de AxisOpenLab, un proceso de innovación interna de la empresa. “A partir de los desafíos que nos planteamos en AxisOpenLab, generamos un plan de gestión de residuos en nuestras obras. Hicimos un plan de acción, un trabajo colaborativo entre todos los administradores de obra y los profesionales de la zona sur, y empezamos a hacer un plan de gestión que probamos en dos obras. Comenzamos con un entrenamiento, porque había que hacer un cambio cultural. Acá nos apoyó la CDT con su programa CONSentido, que fue muy bueno. En concientizar a los trabajadores que el residuo no es basura, sino que puede ser un producto”, comentó Marisol Saavedra. 

Respeto de los resultados de la experiencia, la profesional destacó que han ido modificando su modelo de negocio a través de la industrialización y gestión de residuos en sus obras obteniendo importantes beneficios. “Hemos obtenido mayor productividad, menores pérdidas, ahorro en traslado de residuos, prefabricación de elementos, mayor seguridad, compromiso de todo el equipo. Se sienten muy comprometidos porque ven los resultados rápidamente”, afirmó. 

Así, por ejemplo, añadió Saavedra, “en una obra normal de 5.950 m2 construidos, se generarían 1.544,4 m3 de residuos (0,26 m3/m2). Nosotros generamos, 288,4 m3 de residuos (0,049 m3/m2).  Fue un tremendo ahorro. Además reciclamos más del 50% de los residuos. La economía circular nos ha traído puros beneficios”, concluyó.

 

Modelo sobre la base del reciclaje

Finalmente, Carlos Santibáñez, gerente de Operaciones y Socio Fundador de Poliestirec, presentó su caso de innovación y emprendimiento. Se trata de Poliestirec, una empresa que nació como una iniciativa de AxisOpenLab, modelo de negocio que desarrolla  pinturas a partir de residuos de poliestireno expandido (EPS). “Nace de una invitación a atreverse a cambiar la realidad que vive la construcción hoy, de una forma responsable, innovadora y sostenible, donde se nos brindó un espacio colectivo y fraterno para poder cambiar el mundo de la construcción. Reciclar de forma industrializada y competitiva, permite romper un prejuicio muy importante que es que el reciclaje es algo artesanal y a pequeña escala. Nosotros queríamos demostrar, que se puede a gran escala y con gran calidad”, comentó Santibáñez. 

Durante el desarrollo del proyecto, sus responsables notaron que el EPS se podía diluir, lo que representó una importante oportunidad para ellos. “Nos permitió tratar a gran escala un pasivo industrial que daña al medioambiente.  Así obtuvimos una gran materia prima”, comentó el profesional. 

“Hay que tener en cuenta que en el poliestireno expandido, solo el 2% es materia prima y el otro 98% es aire. Esto nos llevó a tomar el volumen de 1 m3 de este material a un 7%, una vez tratado. Es decir que de cada 1.000 litros, nosotros transformamos eso en 60 litros cuando lo reciclamos. 

Esta resina es muy versátil nos daba muchas opciones de análisis para llevarla a un producto. Es por ello que nos pareció que la pintura nos presentaba una buena perspectiva comercial, para generar un producto masivo y de una calidad cuantificable y que se hace cargo de grandes volúmenes de residuos”. 

Respecto de los resultados que han obtenido, Carlos Santibáñez comentó que su planta tiene la capacidad de producir 40.000 litros de pintura al mes, equivalente a 4.500 kg de EPS o 225 m3, disminuyendo la huella de carbono en más de 14 mil toneladas de CO2 equivalente al mes. “Respecto de la gestión, contamos con la capacidad de gestionar 280 m3 EPS al mes, equivalente a 480 camiones al año, 5,7 toneladas de EPS y 18,05 toneladas de carbono equivalente restadas de la huella de carbono, solo en la gestión del residuo”, concluyó.

De este modo, finalizó esta primera charla de inspiración en Economía Circular, con casos de éxito que dan cuenta que el pensar circular es posible y se pueden hacer negocios de una manera responsable, cambiando los paradigmas. 

Talleres

A continuación de la charla de inspiración, 35 representantes de la cadena de valor se reunieron en una jornada de colaboración e inteligencia colectiva para generar las primeras propuestas de iniciativas que darán forma a la “Estrategia de Economía Circular en Construcción”.

Próximas Fechas

El programa de Charlas de inspiración de la Estrategia Economía Circular en Construcción considera dos jornadas más que se realizarán el próximo 05 y 12 de enero de 2021, revisando “las estrategias de diseño circular” y los “residuos como recursos”. Ambas instancias se realizarán de manera virtual a través de ZOOM.

Para la Segunda Charla del próximo 05 de enero, las inscripciones se pueden realizar en el siguiente link: http://bit.ly/3nJi9BJ 

Para más información e inscripciones a este ciclo de charlas, contactarse a economiacircular@cdt.cl 

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Sobre la Estrategia Economía Circular en Construcción

La Estrategia de Economía Circular en la Construcción, es una iniciativa promovida por la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), el Instituto de la Construcción (IC) y el programa Construye2025 de Corfo, que cuenta la facilitación técnica de la Corporación de Desarrollo Tecnológico, CDT y pretende establecer en Chile la cultura de construcción circular, viéndola como un desafío y al mismo tiempo como una oportunidad que permita el desarrollo sostenible, social, ambiental y económico de la industria, a través del incentivo de iniciativas coordinadas entre el sector público, privado, academia y  la validación ciudadana.

Este proyecto es de carácter nacional  y busca impulsar medidas que disminuyan la demanda de recursos, lograr menor impacto ambiental, la regeneración del medio ambiente y protección del patrimonio ambiental, junto con la mejora de la  calidad de vida de las personas. Sumado a esto, también instala la oportunidad de innovación y nuevos modelos de negocio circulares, para generar una reactivación económica verde posterior al escenario de pandemia por Coronavirus al que nos hemos enfrentado este 2020.

La Estrategia contará con diferentes pilares de acción,  buscando potenciar la colaboración entre los diferentes actores de la cadena de valor del sector construcción, fortaleciendo alianzas que permitan co-crear la estrategia de Economía Circular en Construcción y ponerla en práctica.

Construcción impresa-3D en la Universidad del Bío-Bío: oportunidad única de innovación

Por Dr. Rodrigo García Alvarado, depto. Arquitectura, Universidad del Bío-Bío.

La construcción impresa-3D es una avanzada tecnología que permite realizar elementos constructivos sin moldajes y con gran rapidez, reduciendo drásticamente los plazos y costos. Al disminuir accesorios y faenas, permite reducir también el transporte y los residuos, mejorando la sustentabilidad y seguridad de las obras. Además, otorga un completo control digital del diseño y la ejecución, y la introducción de nuevos materiales y componentes, lo que ayuda a realizar formas y soluciones muy variadas.

En distintas partes del mundo se están ejecutando viviendas y edificios completos para probar esta tecnología, pero aún hay bastante que experimentar. En Chile tenemos importantes desafíos de productividad e industrialización en la construcción que se pueden impulsar con esta tecnología, y liderar su introducción en Latinoamérica, para exportar nuevos servicios y productos.

En la Universidad del Bío-Bío, en Concepción, a través de la iniciativa CIPYCS, se está instalando un gran robot industrial de 2,5 m de alcance, con un riel de siete metros y bomba de hormigonado para promover la construcción impresa-3D en Chile, y otras tecnologías de automatización en la edificación. Con el apoyo de CBB (Cementos Bio-Bío) y SIKA, un equipo multidisciplinario de la UBB, bajo la dirección de la Dra. Claudia Muñoz del Depto. Ciencias de la Construcción, ha logrado, primeramente, elaborar un diseño de mezclas cementicias para imprimir, que ya cuenta con registro de invención y protección intelectual, por lo que se puede utilizar en diferentes aplicaciones. También se están realizando pruebas de arrecifes artificiales, en colaboración con el Programa de Ecología Marina de la UCSC, debido a la necesidad de instalar en las costas de elementos de formas variadas para el asentamiento de especies oceánicas. Y se está avanzando en pruebas de impresión de muros con enfierraduras integradas para lograr capacidades resistentes sísmicas, que es un desafío esencial para construir en Chile, y no se ha desarrollado todavía en el mundo.

Asimismo, se ha experimentado con impresión en tierra, en colaboración con especialistas del área, para aprovechar la capacidad de esta tecnología de usar materiales locales, y actualmente se prepara un proyecto internacional con la U. Plymouth, Reino Unido, sobre este tema.

Un avance sustancial se ha realizado también en la modelación BIM de elementos impresos, a través del Laboratorio de Diseño Integrado que lidera el Dr. Eric Forcael de la Facultad de Ingeniería, para gestionar soluciones optimizadas y controlar la impresión directamente, con el fin de evaluar anticipadamente los diseños y retroalimentar en tiempo real la planificación de obra, maquinarias e insumos durante el proceso de construcción, desarrollando la programación de diferentes formas arquitectónicas, que han sido verificadas con muestras impresas a escala y en tamaño real. Como también, se están preparando análisis térmicos de muros y viviendas impresas, para impulsar un desempeño sustentable de esta nueva tecnología mediante ensayes los laboratorios certificados de la U. del Bío-Bío, para la definición de materiales y diseños con menor impacto ambiental, mejor habitabilidad y mayor recuperación en su ciclo de vida.

La instalación del robot para construcción impresa-3D en la Universidad del Bío-Bío, en Concepción, constituye una oportunidad única de innovación y desarrollo de una tecnología avanzada para desarrollar nuevos sistemas constructivos y soluciones arquitectónicas ecoeficientes y sustentables, estando disponible para colaboraciones industriales, desarrollo de tesis e investigaciones universitarias, como para también para emprendimientos en nuevos productos o servicios para la construcción.

2020: Un año convulsionado que nos dejó muchas lecciones

Durante las 12 ediciones de la revista Negocio&Construcción, entregamos contenido, compartiendo las últimas novedades de la industria y en esta oportunidad en que finaliza el año, la publicación conversó con nuestro gerente Marcos Brito, quien compartió su visión de este 2020, lo que se viene para el 2021 y hasta le escribió una carta al viejito pascuero.

“El 2021 será un año en que revisaremos nuestra hoja de ruta, construida en 2015, a la luz del Informe de Productividad en Construcción de la Comisión Nacional de Productividad y el informe preparado por Matrix a la CChC”, señaló Brito.

Puedes leer la entrevista completa AQUÍ.

Inicia ciclo de Charlas de inspiración en Economía Circular en Construcción

El próximo 15 de diciembre se realizará la primera jornada de esta iniciativa que se enmarca en el programa sectorial para incentivar un cambio de paradigma en la industria. 

Con un análisis de diversas experiencias relacionadas con modelos de negocios circulares, iniciará el ciclo de charlas de inspiración que se enmarcan en la propuesta programática de la Estrategia Economía Circular en Construcción, iniciativa promovida por la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), el Instituto de la Construcción (IC) y el programa Construye2025 de Corfo, que cuenta la facilitación técnica de la Corporación de Desarrollo Tecnológico, CDT.

De este modo, el próximo 15 de diciembre, a través de la plataforma ZOOM, se realizará esta primera charla de inspiración que contará con las experiencias de Marisol Saavedra, subgerente de Gestión de Innovación y Calidad de AXIS DC; Nicolás Behar, cofundador y director ejecutivo de RECYLINK y Carlos Santibáñez, gerente de Operaciones y socio fundador de Poliestirec.

Así, a partir de las 09:30 horas, este primer encuentro abordará experiencias de emprendimiento e intraemprendimiento en Economía Circular en la industria de la construcción, con el objetivo de inspirar a la industria para incentivar un nuevo paradigma que permita explorar modelos de negocio innovadores que tengan como objetivo el desarrollo circular. 

Para Katherine Martínez, jefa de proyecto de la Estrategia Economía Circular en Construcción, el objetivo de esta iniciativa es “mostrar las oportunidades que ofrece la economía circular para el desarrollo sostenible de la industria, motivando e invitando a empresas y emprendedores a ser parte activa del cambio”. 

Tras las exposiciones, se realizará el primer taller de capacitación y profundización de estas materias con un grupo focalizado de actores.

Próximas fechas

El programa de Charlas de inspiración de la Estrategia Economía Circular en Construcción considera dos jornadas más que se realizarán el próximo 05 y 12 de enero de 2021, revisando “las estrategias de diseño circular” y los “residuos como recursos”. Ambas instancias se realizarán de manera virtual a través de ZOOM.

Para más información e inscripciones a este ciclo de charlas, contactarse a economiacircular@cdt.cl 

Feria virtual gratuita reúne a proveedores de nuevas herramientas sanitarias para la construcción

  • En ExpoSoluciones es posible encontrar innovadores productos, servicios y tecnologías para seguir mejorando las condiciones sanitarias en la industria de la construcción.
  • Además, se puede acceder a workshop, charlas y ruedas de negocios para conocer las tendencias y experiencias de uso de los productos disponibles.

Santiago, 9 de diciembre de 2020. Desde herramientas para hacer testeo y facilitar los procesos de trazabilidad hasta elementos para sanitización de materiales y equipos se podrán encontrar desde hoy y hasta el 11 de diciembre en ExpoSoluciones (exposoluciones.cl).

Esta es una feria virtual de acceso gratuito impulsada por la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) donde las empresas del sector tendrán la oportunidad de acceder a una completa oferta de nuevos productos, servicios y tecnologías para seguir mejorando las condiciones sanitarias en sus obras y así reforzar su compromiso con el cuidado de los trabajadores, sus familias y la comunidad.

La iniciativa cuenta además con el apoyo de organizaciones como Caja Los Andes, CDT, Mutual de Seguridad, CORFO, ASECH, Construye 2025, iF Chile, Start-Up Chile, Asociación de Municipalidades de Chile y SociaLab.

El presidente de la Cámara Chilena de la Construcción, Antonio Errázuriz, señaló que “desde que llegó la pandemia hemos impulsado una serie de iniciativas para enfrentar el covid-19, desde la elaboración de un Protocolo Sanitario para Obras de Construcción hasta un completo sistema de monitoreo y seguimiento. Esta feria se suma a este conjunto de herramientas, que están transformando nuestra industria para el bienestar especialmente de los trabajadores y son fundamentales para que la construcción siga siendo una industria segura y reactivadora”.

Por su parte, Fernando Hentzschel, Gerente de Capacidades Tecnológicas de Corfo, señala “la relevancia del desarrollo tecnológico en sintonía con los desafíos de Chile y el mundo. En medio de la crisis sanitaria es fundamental colocar las tecnologías al servicio de una reactivación económica sostenible, de manera responsable, para retomar las obras del sector construcción, con todas las medidas necesarias que aseguren la salud de los trabajadores”.

Alejandra Mustakis, presidenta de la Asociación de Emprendedores de Chile (Asech) y socia fundadora de iF Chile, agregó que “la oportunidad que brinda la Cámara Chilena de la Construcción con este evento es una gran alternativa para las empresas, negocios y emprendedores que pronto deberán reforzar sus condiciones sanitarias ante un inminente segundo brote de coronavirus en Chile. Hoy más que nunca la salud y la seguridad de los trabajadores y sus familias son imperantes para cualquier tipo de industria, sobre todo en una con la necesaria asistencia a espacios físicos como ocurre en la construcción. Por otro lado, la posibilidad de participar en ruedas de negocios, charlas y workshops, es un gran incentivo para generar y fortalecer redes, fomentar análisis y reflexiones sobre el actual contexto sanitario de este rubro, como también la oportunidad de cerrar nuevos negocios, además de generar nuevos espacios capaces de reactivar la economía del sector y brindar acceso general y gratuito que puede conectar a distintos protagonistas de todo el país”.

María de los Ángeles Romo, gerente Start-Up Chile explicó que “la crisis sanitaria y económica actual plantea nuevos desafíos, nuevas miradas y nuevas formas de hacer las cosas. Mientras el desempleo sube y la competitividad se hace más compleja, debemos plantearnos dónde poner el foco del fomento productivo. En Start-Up Chile estamos convencidos que una alternativa es potenciar a empresas innovadoras con potencial de crecimiento acelerado. Las startups son empresas que, con un uso intensivo de tecnología e innovación, resuelven problemáticas locales y globales, tienen un modelo de negocio escalable y un alto potencial de crecimiento. Pero, por sobre todo lo anterior, son capaces de generar nuevo empleo de forma muy rápida, especialmente sensible en una industria como la construcción”.

Y Nelson Rojas, gerente general Caja Los Andes dijo al respecto “estamos muy contentos y orgullosos de poder apoyar una iniciativa que invita a la colaboración, que genera valor e innovación y que es tremendamente importante en los procesos de transformación. Además el poder reunir el emprendimiento con la empresa tradicional para buscar soluciones es parte de lo que nos guía e inspira”.

Además del recorrido por los 50 stands con productos y servicios disponibles para la gestión sanitaria, quienes ingresen a este espacio virtual podrán participar en workshops, charlas y ruedas de negocios para conocer tendencias y experiencias de uso de la oferta disponible.

PROGRAMA DIARIO

Miércoles 9 de diciembre

  • 10:00 horas:  Inauguración ExpoSoluciones y panel de conversación.
  • 18:00 horas: Workshop testeo y trazabilidad.

Jueves 10 de diciembre

  • 09:00 horas: Workshop seguimiento y medidas sanitarias.
  • 18:00 horas: Workshop apoyo y servicios.

Viernes 11 de diciembre

  • 09:00 horas: Workshop sanitización.

Economía circular y proyectos viales en Chile: un camino que se comienza a recorrer

Por: Pablo Ibáñez González, Departamento de Medio Ambiente y Territorio Dirección de Vialidad

La economía circular es un modelo de gestión que tiene por objetivo reducir tanto la utilización de materiales vírgenes, como la producción de desechos.

Artículo publicado en Revista Obras PúblicasN° 54 Octubre – Noviembre – Diciembre 2020

Introducción 

El término “economía circular” se utilizó por primera vez por Pearce y Turner (1990), en su libro “Economics of Natural Resources and the Environment”, para describir un sistema cerrado de interacciones entre economía y medio ambiente. 

En algunos países como Alemania y Japón, la interpretación de la economía circular está basada en el manejo de los residuos a través de la Reducción, Reutilización y Reciclaje (3R), pero usualmente el modelo va más allá de eso y se establece como la contraparte a la denominada economía lineal, donde el flujo de materiales relaciona recursos-producto-residuo. 

De esta manera, el modelo aboga por utilizar la mayor parte posible de materiales biodegradables en la fabricación de bienes de consumo, los cuales son catalogados como “nutrientes biológicos” y cuyo fin es que estos materiales puedan volver a la naturaleza sin causar daños medioambientales al agotar su vida útil. 

Asimismo, para el caso que no sea posible utilizar materiales eco-amigables, la idea es utilizar “nutrientes técnicos”, vale decir, componentes que faciliten su reutilización o reciclaje, reincorporándolos al ciclo de producción o la elaboración de nuevos elementos. 

En Chile, a partir de la creación del Ministerio de Medio Ambiente, se profundiza la idea de desarrollo sustentable, elaborándose una serie de políticas públicas y regulaciones, dentro de las cuales se cuenta el D.S. N° 1/2013 MMA, que establece la economía circular es un modelo de gestión que tiene por objetivo reducir tanto la utilización de materiales vírgenes, como la producción de desechos. entre otros aspectos, el reporte de información y generación de residuos peligrosos y no peligrosos, la Ley 20.920/2016, que establece el marco para la gestión de residuos, la responsabilidad extendida del productor y el fomento al reciclaje y la Norma Chilena 3562/19 que establece la clasificación y la gestión de Residuos de Construcción y Demolición (RCD). 

Debe mencionarse que en estos se encuentra tramitando una modificación a la NCh 163 “Áridos para morteros y hormigones”, que incorporará los áridos reciclados. De esta manera, la legislación chilena ha ido incorporando nuevos aspectos a considerar en la producción de bienes y servicios y en el manejo de los residuos que se generan producto de la realización de éstos. 

En sintonía con lo anterior, el Ministerio de Obras Públicas ha elaborado lineamientos y políticas específicas, tendientes a incorporar los principios de la economía circular en sus proyectos, dentro de los cuales destaca la Política de Sustentabilidad Ambiental del MOP (2016) y la participación en la “Hoja de Ruta RCD Economía Circular en Construcción, 2035”. 

La Dirección de Vialidad no se encuentra ajena a este proceso y a partir del año 2017, se encuentra en un proceso de actualización del Vol. 9 del Manual de Carreteras que incorporará la sustentabilidad y establecerá criterios de economía circular en el desarrollo de las obras, ya sea como buenas prácticas o a través de requisitos normativos. 

Uno de los lineamientos que se incorporará a la nueva versión del MCV9, corresponde a la “Reducción de Residuos”, para lo cual se contempla como primer paso, conocer cuáles serán los residuos que se generarán, sus cantidades y los sitios específicos dónde éstos se producirán, con el fin de aplicar medidas de minimización y gestión, determinando el costo de las mismas. Lo anterior tiene relación con la reducción en origen y es parte de la denominada “tecnología limpia”. 

Adicionalmente, el MC solicitará implementar medidas de recuperación, reutilización y/o reciclaje, con lo cual se pretende lograr una reducción de los residuos y generar obras más amigables con el medio ambiente. Lo indicado en el Manual de Carreteras, se traducirá en requerimientos a los contratistas y se incluirá en las Bases de Licitación de las Obras. 

Asimismo, se espera que a partir del año 2021, todas las obras MOP incorporen un Plan de Manejo para RCD, de acuerdo a la NCh 3562.

Insumos y Residuos en Proyectos Viales 

Para la ejecución de un proyecto vial se requiere de una serie de insumos de construcción, los cuales dependerán de la tipología del proyecto. Los insumos directos, son fácilmente identificables a través del análisis de las partidas que conforman los requisitos y cubicaciones expuestas en las Bases de Licitación o en los proyectos de conservación. 

Uno de los principales insumos de la construcción vial corresponde a los áridos, los cuales representan aproximadamente el 80% del hormigón y el 95% de los morteros y aglomerados asfálticos. En general en Chile, gran parte de los áridos utilizados para la construcción de obras viales, corresponden a áridos vírgenes, lo que implica la habilitación de pozos o extracción desde cursos de agua. 

Otros insumos necesarios para la realización de proyectos viales, corresponden a imprimantes, asfalto, cemento, acero, estructuras prefabricadas, tubos de acero corrugado, HPDE, alambre, madera, pintura, señales, tachas, geotextil, etc. 

Debe mencionarse que muchas veces, los materiales poseen embalajes, lo que determina la llegada a la obra de cartón, plumavit, poliestileno, madera, plástico, metal y otros tipos de envases. Por otro lado, dentro de los insumos necesarios para la ejecución de un proyecto, se cuentan todos los elementos propios del proceso constructivo, vale decir los materiales y elementos que permiten el funcionamiento de la maquinaria (aceite, petróleo, baterías, neumáticos, filtros, etc.) y el trabajo de operarios, administrativos y profesionales (comida, ropa de trabajo, EPP, agua, papel, etc.), los cuales también, en muchos casos, llegan con embalajes específicos. 

Teniendo a la vista lo anterior, se entiende que se generarán excedentes de los insumos, además elementos de embalaje, que eventualmente pueden transformarse en Residuos de Construcción y Demolición (RCD). 

De acuerdo a la NCh 3562:2019, los RCD provienen de la construcción de nuevos proyectos, de la rehabilitación, reparación y reacondicionamiento de obras existentes, de los procesos de preparación de terrenos y de la demolición de obras que han perdido su valor de uso o demoliciones que se generan por situaciones de catástrofe. Para el caso de los proyectos viales, el listado de residuos dependerá del tipo de obra y de sus características, atendiendo además si se trata de un proyecto de construcción, ampliación, mejoramiento o conservación. En general, las partidas relacionadas con la remoción de elementos, tendrán como resultado una serie de residuos de los materiales específicos que componen dichos elementos (cercos, defensas, aceras, obras de arte, señalización, etc.). 

Asimismo, otras partidas como despeje y limpieza de faja, la excavación de escarpe, remoción de material inadecuado, excavación TNC, excavación en roca, etc., tienen como resultado principal, materiales inertes naturales y rastrojos vegetales, entre otros. Adicionalmente a lo indicado, se encuentran todos aquellos residuos, que derivan del proceso de construcción mismo, vale decir embalajes, despuntes de madera y metal, basura doméstica, baterías, neumáticos, hormigón, aceites, telas, geotextiles, restos de asfalto, etc. 

La clasificación y codificación de los residuos de construcción y demolición, puede observarse en el Anexo A de la Norma Chilena NCh3562. De acuerdo a dicha clasificación y a las características de los proyectos viales, puede visualizarse que muchos de estos residuos, son elementos que pueden ser revalorados con tecnologías disponibles y que no requieren demasiado trabajo para ello, siendo fundamental la selección y clasificación para su posterior recolección y uso. 

Lineamientos para la implementación de la Economía Circular en la Dirección de Vialidad 

Teniendo a la vista que la economía circular nace como una alternativa al sistema lineal de producción y se plantea como una forma de atacar los problemas de una manera económicamente viable, se reconoce que la aplicación de ésta, generará nuevas dinámicas sociales y técnicas, desarrollando una producción y consumo responsable. De esta manera el sistema conserva y optimiza el uso de los recursos utilizados en cada proceso y cada etapa de vida del material (Fundación Basura 2017). 

De acuerdo a la Fundación Hellen MacArthur (citada en CORFO, 2020), existen tres principios en la Economía Circular. 

Principio 1:         Preservar y mejorar el capital natural, controlando las existencias finitas y equilibrando los flujos de recursos renovables.

Principio 2:         Optimizar los rendimientos de los recursos, haciendo circular productos, componentes y materiales en uso con la mayor utilidad en todo momento, tanto en ciclos técnicos como biológicos. 

Principio 3:         Fomentar la efectividad del sistema al revelar y diseñar externalidades negativas, al agua, el aire, el suelo y la contaminación acústica, cambio climático, toxinas congestión, y efectos negativos para la salud relacionados con el uso de recursos. 

Estos principios generales de la economía circular, pueden resumirse en dos grandes lineamientos tendientes a la incorporación de la economía circular en los proyectos de la Dirección de Vialidad. 

1. Diseño ecoeficiente: Corresponde al diseño del proyecto propiamente tal, el cual puede incorporar desde su concepción, materias primas recicladas (pavimento, acero, neumáticos, etc.) además de trazados que minimicen la necesidad de áridos u otros elementos.

2. Gestión de Residuos: Conocer y cuantificar los insumos y residuos que generará un proyecto, permitiendo minimizar los insumos y embalajes o clasificarlos de manera efectiva, segregando los que pueden ser reutilizados en la obra y seleccionando los que pueden ser reciclados para otros usos. 

Estos dos grandes lineamientos engloban una serie de actividades pre-constructivas (diseño) y constructivas, estableciendo aspectos a considerar en el desarrollo de éstas, lo que implica la incorporación de requisitos de sustentabilidad en las bases de concurso y bases de licitación de los contratos. 

Debe mencionarse que el año 2020, se publicó la “Hoja de Ruta RCD Economía Circular en Construcción, 2035”, la cual establece una serie de Ejes Estratégicos, dentro de los cuales se cuenta el Eje 2, que pretende Fomentar en Licitaciones Públicas la Gestión Sustentable de los RCD con foco en Economía Circular en Construcción. 

Específicamente dentro de las acciones de dicho eje estratégico se cuenta la acción 6, que promueve el “uso de áridos reciclados en obras viales rurales y urbanas, así como en infraestructura y edificación.” Cabe destacar que las técnicas de reciclaje de pavimentos (asfalto espumado, pavimentos con caucho reciclado y RAP), se encuentran incorporadas dentro del Manual de Carreteras desde los años 2002, 2015 y 2017, respectivamente, por lo que son técnicas validadas técnicamente en estos momentos. 

De acuerdo a lo indicado, en la actualidad se encuentran los elementos necesarios, para comenzar un trabajo sistemático que permita desarrollar diseños más amigables y gestionar adecuadamente los residuos de las obras. 

Esto permitirá realizar un esfuerzo guiado y coordinado, pasando desde los proyectos piloto y buenas prácticas, generadas hasta la fecha, a un trabajo sistemático, tendiente a generar proyectos más sustentables. 

Ejemplo de Buenas Prácticas 

A continuación se presentan algunos proyectos desarrollados por la Dirección de Vialidad, donde se han implementado medidas asociadas a Economía Circular. Si bien a la fecha el reciclaje de pavimento y embalajes, la reutilización de elementos en desuso y otras medidas propias de la economía circular, no forman parte aún de una política nacional de la Dirección de Vialidad que privilegie esta visión, en los siguientes ejemplos se demuestra cómo a través de diversas iniciativas (proyectos piloto, gestiones internas, proyectos de conservación e iniciativas de contratistas, entre otras), se han logrado implementar soluciones innovadoras, que han mejorado la gestión ambiental y disminuido la generación de RCD. 

a)       Reciclaje de Pavimento Diversas obras de la Dirección de Vialidad han efectuado reciclaje de pavimento (pavimento espumado, mejoramiento de base). 

En la Región de Antofagasta el año 2011 se efectuó la reposición de la Ruta 5 entre los Km. 1.059 al 1.307, mediante reciclado del pavimento existente con asfalto espumado y una nueva carpeta de asfalto. 

En la Región de Valparaíso, el año 2019 se reutilizaron materiales de los procesos de conservación de la Ruta 68, en la pavimentación de caminos secundarios. Otros proyectos de conservación donde se ha efectuado reciclaje de mezcla asfáltica y estabilización con asfalto espumado, son los siguientes: 

● Conservación Camino Básico Ruta A-31 Km. 25 al Km. 47, por Sectores, Provincia de Arica, Región de Arica y Parinacota, 2020 (en desarrollo)

● Conservación Camino Básico Ruta A-31 Km. 47 al Km. 77, por Sectores, Provincia de Arica, Región de Arica y Parinacota 2020 (en desarrollo)

Conservación Red Vial, Conservación Periódica Ruta A-27, Sector San Miguel de Azapa Punta de Cabuza, por sectores, Provincia de Arica, Región de Arica y Parinacota (2018) 

● Conservación de la Red Vial Comunal Ruta 90 por Sectores, Comuna de Marchigue, Provincia de Cardenal Caro, Región de O’Higgins. (2018) 

● Conservación de la Red Vial Comunal Ruta I-62-G, Por Sectores Comuna de Litueche, Provincia de Cardenal Caro, Región de O’Higgins. (2018) 

● Conservación Ruta A-665, Sector la Huayca -Pica, Dm. 30,000 al Dm. 53,330, Provincia del Tamarugal, Región de Tarapacá. (2017) 

Para el caso de mezclas asfálticas que incorporan RAP (pavimento de asfalto reciclado), se cuentan los siguientes proyectos asesorados por el LNV: 

● Mantenimiento de Pavimentos Concesión Camino Santiago – Colina – Los Andes 

● Concesión Américo Vespucio Oriente, Tramo: Avda. El Salto – Príncipe de Gales 

● Concesión Sistema Oriente Poniente – Prolongación Costanera Norte, entre Puente La Dehesa y calle Padre Arteaga (Obra PLD-PA) – Etapa 2 del Programa Santiago Centro Oriente. 

b)      Uso de neumáticos en desuso (caucho) en Mezclas Asfálticas 

En algunas obras de la Dirección de Vialidad se han incorporado tramos de prueba de 500 m, para observar el comportamiento de las mezclas asfálticas con caucho. 

● Reposición RUTA G-184, sector el Noviciado, tramo Km. 0,007 al Km. 5,400 Comuna de Pudahuel, Provincia de Santiago, Región Metropolitana.

● Mejoramiento Ruta F-50, Lo Orozco Quilpué, Km 17.578 al Km 29.498, Región de Valparaíso 

● Reposición Ruta E-46, Catapilco – La Laguna, Región de Valparaíso 

c)       Uso de barreras metálicas y prefabricadas de hormigón en desuso para la construcción de muros de contención 

Esta iniciativa desarrollada por la Dirección de Vialidad de la Región de Valparaíso, consistió en evaluar los materiales en desuso y buscarle nuevas alternativas de uso, con lo cual pudieron efectuarse una serie de obras que redujeron significativamente los costos de inversión. De esta manera, las defensas camineras metálicas y de hormigón, fueron utilizadas para fines distintos a los originales, manteniendo un funcionamiento adecuado. 

d)      Reciclaje de Cartones (embalajes) 

En el contrato “Diseño y Construcción Puente Chacao” actualmente en ejecución, el Contratista (Consorcio Puente Chacao) ha implementado un procedimiento de selección de los cartones de embalaje de diferentes materiales de construcción, de oficina y alimentos, con el fin de reducir la generación de residuos y sus efectos ambientales. 

En este caso, los cartones son entregados a una empresa dedicada al reciclaje, que cuenta con resolución sanitaria y cuya misión es reducir la cantidad de residuos y reutilizar dichos materiales.

e)      Reciclaje de acero 

En la Región de Los Lagos, en el año 2007, durante la reposición del Puente Pilmaiquén, se efectuó la demolición del antiguo puente ferroviario, el cual incluyó el rescate de las enfierraduras y su posterior venta. Por su parte en el contrato “Diseño y Construcción Puente Chacao”, el contratista efectúa la recolección de los despuntes de acero, señales en mal estado, alambres, etc., los cuales son tratados como chatarra y ofrecidos a recicladores de la zona. Con esto se dinamiza la economía, se disminuyen los RCD y se obtienen beneficios económicos del manejo adecuado de los Residuos. 

f)        Alternativas Pavimentos en Estudios de Ingeniería Para los Estudios de Ingeniería que se refieren a reposición de pavimento y que no implican cambios de trazados importantes, en varios casos se ha efectuado un análisis de alternativas de pavimento que incluye el reciclado de éstos. Si bien esta medida, no se efectúa para todos los proyectos, en los casos donde se ha visto la posibilidad de realizar un rescate de los áridos o pavimentos, se ha solicitado a los consultores, efectuar los análisis respectivos. 

Conclusiones 

Actualmente, la Dirección de Vialidad se encuentra avanzando hacia la incorporación de la Economía Circular en sus obras, para lo cual ha implementado una serie de iniciativas, las cuales han tenido buenos resultados y han contribuido con un adecuado manejo ambiental. Buena parte de estas iniciativas provienen del mundo de la Conservación, lo cual ha permitido a esta área de vialidad, avanzar de manera más rápida que otras, implementando innovaciones tendientes al reciclaje de pavimentos y áridos. 

Por otra parte, para el caso de los proyectos de construcción, los avances se han centrados en la realización de tramos piloto y en las condiciones operativas de la ejecución de las obras, vale decir en la reducción y manejo adecuado de los residuos de construcción y demolición. 

De esta manera se establece, que si bien la Dirección de Vialidad ha avanzado en la incorporación de los conceptos de Economía Circular en sus proyectos, esto aún no se transforma en una política nacional que abarque la totalidad del ciclo de vida de los proyectos. 

Se espera que con la nueva versión del MCV9 y Bases de Licitación, esta temática pueda transformarse en un esfuerzo sistemático, que asegure el adecuado manejo de los RCD y contribuya a la generación de proyectos más sustentables. 

Esto permitirá favorecer la implementación de técnicas de reciclaje ya incluidas en las actuales versiones del MC, permitiendo su incorporación a las diferentes fases del ciclo de vida de los proyectos viales. 

Fuente: Revista Obras Públicas

Jadille Baza Apud es la nueva presidenta nacional del Colegio de Arquitectos de Chile

El martes 1 de diciembre de 2020 en la Sesión Constitutiva del nuevo Directorio Nacional elegido por nuestros colegiados y colegiadas en las Elecciones CA 2020, se eligió la nueva Mesa Directiva y la composición de los cargos del Colegio de Arquitectos de Chile para el periodo 2020-2022.

El Directorio Nacional eligió a Jadille Baza Apud como nueva presidenta nacional del Colegio de Arquitectos de Chile; a Francisco Herrera Muñoz  como vicepresidente de Asuntos Internos; a Fernando Miranda Monsalve como vicepresidente de Asuntos Nacionales; a Lorena Estai Hidalgo como secretaria general; y a Luis Viada Ovalle como tesorero.

En tanto, Humberto Eliash Díaz, quien se desempeñó como Presidente Nacional entre 2018 y 2020, pasa a integrar el nuevo Directorio como Past President.

Por otra parte, la totalidad del Directorio Nacional quedó compuesto por Juan Sabbagh Pisano como Director de Desarrollo; Loreto Lyon Nuño como Directora de Actividades; y Mario Terán Pardo como Director de Beneficios.

Todos los anteriores cargos electos fueron proclamados en la Asamblea General Ordinaria del pasado 23 de noviembre de 2020.

Jadille Baza Apud, nueva Presidenta Nacional del Colegio de Arquitectos de Chile, se convierte en la cuarta mujer en liderar a los arquitectos y arquitectas de Chile luego de Eliana Caraball (1986-1988)Isabel Tuca (2000-2002) y Pilar Urrejola (2015-2017).

Jadille Baza Apud

Arquitecta de la Universidad de Chile. Tiene estudios en Planificación y Administración de la Educación en Chile, México y Francia. Diplomado en Políticas Públicas, Eficiencia Energética y Energía Solar Térmica en Edificación Pública de la Universidad de Chile.

Ingresó al Ministerio de Educación en 1976, en donde se desempeñó como jefa del Departamento de Infraestructura y Equipamiento Educacional hasta mayo de 2020. Se desempeñó como jefa de la componente de Infraestructura del proyecto MECE del Banco Mundial y como coordinadora técnica nacional del proyecto conjunto del Ministerio de Educación y Unesco para el mejoramiento de la inversión en infraestructura educacional.

En el Colegio de Arquitectos de Chile fue Vicepresidenta Nacional en el período 2002-2004. Actualmente es Consultora internacional y Asesora de la Dirección de Educación Pública, dependiente del Ministerio de Educación de Chile.

Mesa Directiva

 Jadille Baza Apud — Presidenta Nacional

Francisco Herrera Muñoz — Vicepresidente de Asuntos Internos

Fernando Miranda Monsalve — Vicepresidente de Asuntos Nacionales

Lorena Estai Hidalgo — Secretaria General

Luis Viada Ovalle — Tesorero

Humberto Eliash Díaz — Past President

 

Directores

Juan Sabbagh Pisano —Director de Desarrollo

Loreto Lyon Nuño — Directora de Actividades

Mario Terán Pardo — Director de Beneficios

 

Fuente: Colegio de Arquitectos

Estudio propone 73 medidas para elevar la productividad de la construcción

Para el rubro -que aporta el 10% del empleo es Chile- la eficiencia es un punto crítico. Por eso, la Comisión Nacional de Productividad identificó las brechas y las nueve palancas necesarias para que el país pueda dar el salto que necesita.

A nivel mundial, la productividad en la industria de la construcción exhibe un rezago respecto al resto de la economía en general y Chile no está ajeno a esa realidad. Entre 2000 y 2018 el incremento de la productividad laboral de nuestra economía país aumentó en un 20%, mientras que la de la construcción prácticamente no experimentó variación. Con esa premisa, la Comisión Nacional de Productividad (CNP) asumió uno de los mayores estudios de productividad nacional, con el apoyo de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) y Matrix Consulting.

La investigación -que se presentó a fines de noviembre en la “Semana de la Productividad”- expuso la trascendencia que tiene la productividad en la industria como vía de crecimiento sostenido, tanto para la industria como para sus trabajadores. “La construcción es importante porque representa cerca del 7% del PIB y el 10% del empleo”, afirmó Rodrigo Krell, secretario ejecutivo de la CNP al exponer los resultados.

La meta para dar un primer paso y alcanzar a países referentes sería multiplicar la productividad agregada del sector por 1,65 veces, es decir, dar un salto desde los US$19.760 millones a US$32.600 millones en el PIB de la industria. Una meta ambiciosa que requiere de la articulación de toda la industria, para impulsar la adopción de tecnologías y desarrollar a proveedores de alto estándar, junto con generar un marco que entregue sostenibilidad de largo plazo, según el estudio.

Además, la investigación apunta a un esfuerzo coordinado por involucrarse en la formación técnica y profesional de modo que puedan desarrollarse las competencias requeridas por el sector. En las iniciativas a nivel país, la industria considera necesaria la formación de capital humano de excelencia y los mecanismos para su capacitación. Por último, el documento propone mejoras para alinear a la institucionalidad y contar con una regulación, que sea realmente aliada de la productividad.

Para el presidente de la CNP, Raphael Bergoeing, la construcción juega un rol fundamental en las recuperaciones económicas. “Es cuantitativamente relevante porque tiene un rol fundamental en el empleo”, argumentó. Por eso, se hicieron más de 400 reuniones con actores públicos y privados nacionales y extranjeros, en el contexto del estudio, que ayudaron en la identificación de procesos críticos para el desarrollo de obras. Esto, teniendo en cuenta que el rubro de la construcción es el sexto empleador a nivel nacional, con 728 mil ocupados y que concentra el 63% de la inversión nacional. Por ello, ocuparse de la productividad del sector es sumamente relevante.

El potencial de la productividad

“Lo que no se mide, no se gestiona. Necesitamos tener KPIs que se midan de forma estándar en la industria, de productividad, de sostenibilidad, de plazos, etc”, señaló la presidenta del Consejo de Construcción Industrializada (CCI), Francisca Cruz, sobre este documento. En ese sentido, su llamado fue enfático: “no hipotequemos el avance en industrialización y en productividad, sin tener una etapa de diseño colaborativo que la habilite”, dijo.

Asimismo, el presidente de la CChC, se refirió a la necesidad de generar un impacto en el corto plazo para generar un cambio. Para ello, mencionó elementos como “la excelencia en la cadena de valor, la formación de capital humano y la confianza”.

Si se proyecta un escenario de productividad media alta en la construcción, tal como ocurre en Alemania, Reino Unido y Estados Unidos, Chile podría aumentar su PIB en US$12.850 millones adicionales a los US$19.760 millones actuales, aproximadamente, según estimaciones de la OCDE y el Banco Central. Este crecimiento podría generar un impacto significativo para la calidad de vida de los chilenos, ya que, utilizando los mismos recursos que la construcción emplea actualmente, sería como construir adicionalmente más de 52 mil viviendas para 155 mil personas y 1.500 km de rutas pavimentadas por año.

Pero, para dar el salto, una sola medida sería insuficiente. Por eso, el diagnóstico propone 73 medidas, que se sostienen en 9 palancas: excelencia en la cadena de valor, integración y colaboración, digitalización, industrialización, adopción de tecnologías y desarrollo de proveedores, marco para la sostenibilidad, desarrollo de competencias claves, formación de capital humano de excelencia e institucionalidad alineada más regulación eficiente.

Alineamiento con Construye2025

Desde Construye2025, se analiza que, sin duda, este trabajo que se ha hecho público y será entregado a la Presidencia, viene a respaldar y complementar el trabajo que por más de cinco años ha venido desarrollando el programa impulsado por Corfo. La hoja de ruta que el programa ha venido implementando desde 2015 identificó previamente más de 40 brechas del subsector de la edificación, que debían ser cerradas para lograr mejoras sustanciales en productividad y sustentabilidad en el sector.

Por ello, para Marcos Brito, gerente de Construye2025, “el informe de la CNP y Matrix, es un hito esencial en el camino para transformar definitivamente el sector de la construcción hacia una industria más productiva, eficiente y sustentable. Nos estamos jugando gran parte del potencial de crecimiento del país en esto y nuestra propia calidad de vida, al lograr edificaciones más confortables, y con menor impacto al entorno en sus procesos de desarrollo. Desde Construye2025, seguiremos trabajando en articular iniciativas que incorporen nuestra hoja de ruta con las recomendaciones aquí señaladas”.

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Profesionales del MOP ampliaron sus conocimientos y experiencias en economía circular en construcción

Jornada de trabajo encabezada por la directora general de Obras Públicas, Mariana Concha, repasó los nuevos modelos de negocio y los alcances de la recién lanzada “Hoja de Ruta RCD y Economía Circular en Construcción”, de la cual el ministerio tuvo un importante rol.

Para introducir a los profesionales del Ministerio de Obras Públicas (MOP), sus distintas direcciones, en los conceptos de economía circular y avanzar en planes de acción para implementar la “Hoja de Ruta RCD Economía Circular en Construcción” y sus ejes, impulsada por Construye2025, se realizó el workshop “Introducción de la economía circular en obras MOP”.

La jornada de trabajo la abrió la directora general de Obras Públicas del MOP, Mariana Concha, quien destacó el lanzamiento de dicho documento, el cual presenta importantes desafíos para los gestores de la construcción, y, en general, a quienes participan del mundo de la infraestructura pública. “Si no avanzamos como entes públicos en la ‘economía circular’, difícilmente el sector privado va a poder hacerlo, por un tema de escala y de mercado. Nosotros tenemos que generar las redes logísticas y la tecnología a través de la demanda”, señaló.

En este ámbito, la autoridad del MOP, explicó que la demanda impulsará al sector privado a utilizar los servicios que se crean en torno a la economía circular de la construcción. “Nuestro foco final es que no hablemos de residuos, sino que de insumos intermedios”, afirmó.

Posteriormente, el académico de la Escuela de Construcción Civil de la Universidad Católica Felipe Ossio, compartió una serie de conceptos vinculados a la economía circular en construcción que, según dijo, se contrapone a los orígenes de la industria, cuya operación ha sido tradicionalmente lineal. Sin embargo, su visión apunta a nuevos modelos de negocio.

“Cuando construyen un colegio o un hospital no compran una grúa y la botan; la arriendan y el propietario quiere que esa grúa tenga todas sus mantenciones al día para tenerla el mayor tiempo posible. La economía circular tiende a los servicios y nuevos modelos de negocios, porque a ti no te interesa tener una ampolleta sino la iluminación”, explicó Ossio.

Incentivo en el sector público

Enseguida, la jefa de la Unidad de Gestión Ambiental de la Secretaría Ejecutiva de Medio Ambiente y Territorio (SEMAT), Evelyn Galdames, detalló los alcances de la “Hoja de ruta RCD y Economía Circular en Construcción y compromisos MOP”. “Como ministerio nos toca incentivar los mercados en los programas públicos, que fomenten el uso de materiales de origen valorizado. El país cuenta con plataformas de trazabilidad en materiales y residuos para la economía circular”, afirmó.

Enseguida, expuso la coordinadora de Construye2025, Alejandra Tapia, quien se refirió a la problemática lineal y los impactos RCD, pero también a la importancia de contar con un plan de gestión de residuos, que se traduce en generar un tratamiento, diseñar un proceso, clasificar por tipo, disponer, trazar y establecer responsabilidades. “En las obras hacemos pretratamiento, que tiene que ver con operaciones como la separación el desembalaje la compactación, empaque, trituración para reducir el volumen del residuo, lo que nos puede generar ahorros económicos”, señaló Alejandra Tapia, quien cerró su presentación con un didáctico video sobre las ineficiencias en obras.

Finalmente, el jefe del Departamento de Medio Ambiente de la Constructora Viconsa, Joaquín Cuevas, se refirió a la importancia de generar conciencia y trabajar en conjunto por la sustentabilidad. Enseguida, compartió su experiencia gestionando residuos en obra. “Sin el apoyo de la gerencia, de los dueños de la empresa esto no es posible. Las cabezas que dirigen los trabajos tienen que estar convencidas porque el paso que viene a continuación es aumentar la productividad. A mayor cantidad de residuos, menos productividad”, aseguró.

Al cierre del workshop, el secretario ejecutivo de Medio Ambiente y Territorio del MOP, Mauricio Lavín, recordó que el Ministerio de Obras Públicas es parte del ciclo en el que busca colaborar y agradeció tanto a los participantes como a quienes hicieron posible su realización. “Como ministerio tenemos un plan de gestión que vamos a incorporar en las licitaciones, basado siempre en la norma, donde se va a poder ver -en los contratos nuevos- la solicitud de un plan de gestión”, afirmó.

Industrialización: el giro sustentable y tecnológico de la construcción

Especialistas internacionales y representantes locales de la industria abordaron los disruptivos cambios de la construcción en el “4º Seminario Internacional de Construcción Industrializada”, organizado por el Consejo de Construcción Industrializada y Construye2025 de Corfo.

Con el apoyo de la Corporación de Desarrollo Tecnológico (CDT) se realizó la cuarta versión del “Seminario Internacional de Construcción Industrializada: industrialización en tiempos de reactivación”, que tradicionalmente han organizado el Consejo de Construcción Industrializada (CCI) y el programa Construye2025 de Corfo.

En formato virtual, debido a la contingencia sanitaria, el encuentro fue inaugurado por el vicepresidente de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), Carlos Zeppelin, quien se refirió a los desafíos sanitarios, económicos, sociales y ambientales que enfrenta la industria y el rol que juega la industrialización frente a ellos. “La construcción industrializada es una muy buena herramienta, que reduce impactos en obra y minimiza los residuos de la construcción. La invitación es a que las acciones se implementen ya, buscando la eficiencia y los mejores estándares, a confiar y construir confianza, trabajando en equipo”, afirmó.

En ese contexto, el gerente de Construye2025, Marcos Brito, llamó a ampliar la mirada sobre la industrialización, la que va mucho más allá de prefabricar. “Es un concepto mucho más amplio, que involucra la coordinación temprana de actores y el secuenciamiento de procesos productivos  y con ello, una manera de producir mucho más eficiente”, señaló.

Por su parte, la presidenta del CCI, Francisca Cruz, hizo hincapié en lo complejo que ha sido el año para un rubro “tremendamente expuesto a la mano de obra in situ, que ha tenido dificultades muy grandes para poder mantener la continuidad operacional”. Por eso, es que la industrialización -según dijo- no es solo una tendencia, sino una necesidad. “Cuando el ambiente es más controlado, hay más certidumbre y seguridad”, acotó.

Pero la industrialización también responde a la necesidad de reducir los residuos, un punto al que las empresas están poniendo cada vez más atención. Asimismo, la presidenta del CCI, valoró el rol de la innovación y la digitalización en la oferta y la estrategia de negocios.

Las tendencias mundiales

Una de las invitadas al seminario fue la socia de McKinsey & Company en Madrid, Maria Joao Ribeirinho, quien reafirmó el enfoque industrial que está tomando la industria en un escenario en que los requisitos de sostenibilidad son cada vez más amplios. En este ámbito, las tendencias de futuro son, al menos, tres, en su opinión: la industrialización, la digitalización y la entrada de nuevos actores.

“En diferentes lugares del mundo hablamos de industrialización: unidades individuales, a veces paneles; unidades volumétricas; o estructuras completas. Podemos tener diferentes constructos para lo que es modular y aunque el término módulo es cada vez más popular, no hay una sola solución para todos los proyectos. Pero, lo más importante es que estamos viendo una mentalidad más modular en la industria: paneles 2D, 3D o estructuras modulares completas”, afirmó.

Según la especialista de McKinsey & Company, lo importante es pensar con una “mentalidad modular”, para poder dividir el producto en componentes. “Una construcción modular puede ayudarnos a disminuir tiempos y tiene menor variabilidad en los resultados, que son competitivos y sustentables, porque el proceso genera menos contaminación y menos materiales sobrantes”, indicó.

 En este sentido, el camino apuntaría a aumentar la escala y sofisticar la fabricación de módulos, hacer modelamiento 3D, gestionar la colaboración digital aumentada y mejorar la programación de los proyectos y la ejecución offsite. “Las herramientas digitales nos pueden ayudar con la eficiencia en la gestión de la mano de obra”, argumentó Maria Joao Ribeirinho.

Respecto a la irrupción de nuevos actores, la invitada internacional comentó que, en el espacio modular, ya existen muchas empresas que hacen la estandarización en la producción de módulos y otras que se mueven en el e-commerce. “Esto genera mucha más competencia y transparencia de los precios”, afirmó.

Finalmente, compartieron sus puntos de vista Scott Fisher, CEO de PrefabNZ en Nueva Zelandia; y Johann Betz, fundador de Offsite Design. Este último, puso énfasis en el desafío de construir viviendas asequibles y de buena calidad; mientras que el primero aseguró que el Lean Manufacturing debiera ser la piedra angular de la industria, ya que la construcción offsite está por sobre esta base. “La producción limpia sin desperdicios debiera ser un requerimiento fundamental”, señaló Fisher.

Estrategia de economía circular en la construcción: cambiando el paradigma

Tras el lanzamiento de la “Hoja de Ruta RCD y Economía Circular en Construcción”, y la “Hoja de Ruta Nacional de Economía Circular”, en desarrollo, la industria se comprometió a realizar acciones concretas para cambiar la forma en que desarrolla nuevos negocios.

La Cámara Chilena de la Construcción (CChC), el Instituto de la Construcción (IC) y el programa Construye2025, impulsado por Corfo, con la facilitación técnica de la Corporación de Desarrollo Tecnológico (CDT), iniciaron su proceso colaborativo para generar un plan de acción público-privado. Con miras a 2025, se lanzó la “Estrategia de Economía Circular en Construcción” que busca dar continuidad a la “Hoja de Ruta RCD  y Economía Circular en Construcción 2035” y en concordancia con la “Hoja de Ruta Nacional de Economía Circular 2040” liderada por el Ministerio de Medio Ambiente.

  En una jornada a la que asistió la ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt, los principales actores de la industria hicieron hincapié en el trabajo articulado y colaborativo para impulsar medidas orientadas a disminuir el uso de recursos, minimizar el impacto ambiental y proteger el patrimonio natural. “A nivel global, la industria de la construcción genera prácticamente el 40% de los gases de efecto invernadero y el 40% de los consumos de materia prima”, recordó Juan Carlos León, director del proyecto de Estrategia Economía Circular y gerente de la CDT.

  Por eso, al abrir el encuentro, el ejecutivo destacó la necesidad de hacerse cargo de los impactos que genera la industria. “La pandemia ha significado tener que llevar adelante algunas iniciativas de cambio como la transformación digital, pero también tenemos que pensar cómo vamos a recuperarnos y cuál va a ser la nueva economía que vamos a desarrollar. La resiliencia va a estar muy ligada a la economía circular”, dijo.

En agosto de este año Construye2025 junto a los ministerios de Medio Ambiente, Vivienda y Urbanismo, Obras Públicas y Corfo, lanzó la “Hoja de Ruta RCD y Economía Circular en Construcción”, sin embargo se hacía necesaria una bajada específica para iniciativas aún más concretas desde el sector privado. “Queremos ser el primer sector económico que -de manera potente y con un compromiso completo- pueda avanzar en la manera de pensar la forma en que desarrolla nuevos negocios”, añadió Juan Carlos León.

Un compromiso de todos

Por su parte, el vicepresidente de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), Carlos Zeppelin, llamó a avanzar rápido y con fuerza por una cultura de construcción circular, que permita nuestro desarrollo sostenible en la industria a largo plazo. “Esa es la razón porque estamos impulsando en conjunto esta iniciativa multisectorial que establece nuestro compromiso como industria de articularnos frente a un desafío común y transformador, que implica construir pensando futuro, aumentar la productividad del sector, reducir la dependencia de los recursos naturales, controlar la cantidad de residuos generados y generar mayor crecimiento en la economía, así como también en los ámbitos social y ambiental”, explicó.

Esta tarea de largo aliento requiere de una colaboración permanente y de la articulación de los esfuerzos de la cadena de valor, en torno a una estrategia sectorial de economía circular en nuestra industria. “Es fundamental cambiar el paradigma de cómo construimos. Buscamos poder visualizar oportunidades y desafíos, consensuar una visión compartida para crear acciones y difundir e inspirar el compromiso de todos: sector público, sector privado, academia y ciudadanía”, comentó Zeppelin.

En tanto, el presidente del Instituto de la Construcción (IC), Miguel Pérez, hizo hincapié en que esta fue la primera actividad que hace público el trabajo que están realizando el Instituto de la Construcción, la Cámara Chilena de la Construcción y el programa Construye2025. “Realizar una estrategia sectorial de economía circular en construcción es, sin duda, un tremendo desafío que convoca a todos quienes formamos parte de la cadena de valor de la industria”, afirmó.

En este sentido, el titular del IC, recalcó la importante misión que significa coordinar y articular esfuerzos públicos y privados para colaborar en el desarrollo de la sustentabilidad, calidad y productividad de la construcción, fomentando políticas, normas y mejores prácticas. “Nuestro desafío es que todos contribuyan con una amplia diversidad de ideas, opiniones y enfoques que nos permitan pasar de una economía lineal a una economía circular. Estableciendo así el carácter colaborativo y global que implica esta propuesta de economía circular en la que cada sector es importante para la materialización de un desarrollo sustentable efectivo”, argumentó.

Derribando mitos

Durante el encuentro, la ministra del Medio Ambiente, Carolina Schmidt, celebró que la construcción sea la primera industria en generar una estrategia sectorial en el marco de la “Hoja de Ruta Nacional”. Según la autoridad medioambiental, el gobierno ha buscado derribar el mito de que el cuidado del medioambiente y el crecimiento económico se oponen. “Esto no es así: un desarrollo sustentable e inclusivo potencia nuestro crecimiento y abre enormes oportunidades para el desarrollo de nuestro país y desde el ministerio estamos trabajando para que, en conjunto con el sector privado, podamos avanzar hacia la economía circular”, puntualizó.

El sector de la construcción no es solo el principal consumidor de materias primas a nivel global, sino que genera más del 35% de los residuos que actualmente se producen en nuestro país. “Se estima que, en Chile, se generan pérdidas del orden de US$315 millones anuales por mermas en materiales. Estos residuos son altamente aprovechables pero terminan en residuos o escombros”, afirmó la ministra Schmidt. 

En este contexto, con la incorporación de la economía circular en el mundo de la construcción se abrirían innumerables posibilidades para la optimización y el ahorro de recursos, así como también para la innovación y el emprendimiento. “Por ello, en conjunto con los ministerios de Obras Públicas y de Vivienda y el programa Construye2025, presentamos la ‘Hoja de Ruta RCD y Economía Circular en Construcción’, que fue desarrollada con una amplia participación ciudadana. Este documento será la guía para desarrollar las políticas, acciones y metas hacia un desarrollo circular y sostenible”, recordó la secretaria de Estado.

A continuación, la coordinadora de Sustentabilidad del Programa Construye2025 de Corfo, Alejandra Tapia, llamó a las personas a liderar el cambio, empujando e implementando acciones que nos ayuden a avanzar hacia una construcción más circular y sostenible. Finalmente, el presidente de la CChC de Punta Arenas, Carlos Braun, invitó a los actores clave de la industria a trabajar de forma colaborativa y responder a las preguntas más complejas sobre nuestro futuro, abriendo un proceso histórico de innovación para la industria.

“Esta estrategia es la oportunidad que tiene la construcción para inspirar al país y a otras industrias, asumiendo un compromiso basado en la acción. Esta invitación es a ser parte de la reinvención de nuestra industria, dejando un legado que enorgullezca a Chile”, indicó Braun. Para cerrar, el representante del gremio en la ciudad más austral de Chile, se refirió a la nueva estrategia de economía circular en la construcción como una oportunidad para generar una reactivación económica verde posterior al COVID-19 y también para cuidar las bases de nuestro desarrollo.

Diseño y selección adecuada del project delivery system: una decisión racional para el éxito de los proyectos

Por Harrison Mesa, académico Escuela Construcción Civil Pontificia Universidad Católica de Chile y miembro del Comité Gestor de Modernización de Marcos Contractuales de Construye2025.

El sector de la arquitectura, ingeniería y construcción (AIC) atraviesa por un cambio en la cultura de cómo desarrollar sus proyectos. Mientras que el project delivery system (método de desarrollo) de Diseño – Licitación – Construcción continúa siendo la alternativa más común; en la que el mandante primero contrata a una empresa de arquitectura/ingeniería para preparar los diseños y luego, a través de un proceso de licitación, selecciona a un constructor para que ejecute el proyecto; existe una necesidad y un alto interés del sector de la AIC en modernizar los métodos tradicionales e implementar nuevos métodos para mejorar la coordinación, integración y colaboración de los participantes, y, por ende, el desempeño del proyecto (p. ej., costo, tiempo, calidad y sustentabilidad).

En términos generales, el método de desarrollo (project delivery system) define los roles y las relaciones entre los participantes (estructura organizacional); la secuencia de los eventos y las técnicas de gestión (sistema operacional); y las responsabilidades contractuales para definir, diseñar, construir y operar un proyecto (relación contractual)[1]. Los métodos tradicionales más comunes en el sector de la AIC son Diseño – Licitación – Construcción (DBB, por sus siglas en inglés), Diseño – Construcción, Ingeniería – Adquisiciones – Construcción (EPC, por sus siglas en inglés). Finalmente, los nuevos métodos son Integrated Project Delivery (IPD), Lean Project Delivery (LPD), Project Alliancing (PA), Asociaciones Público – Privadas (p. ej., DBFOM, por sus siglas en inglés).

Esta gran diversidad de métodos representa, a su vez, un gran desafío a la hora de decidir cuál de ellos usar. Muchos de los problemas del sector de la AIC tienen sus orígenes en la aplicación del método de desarrollo debido a la forma en que los participantes de los proyectos toman las decisiones para su diseño y selección. El proceso de toma de decisiones sigue siendo intuitivo y se basa en la experiencia previa. En la cultura tradicional, todavía prospera, por ejemplo, que el mandante resuelva los problemas basándose en su ingenio y sus creencias.

El mandante, inicialmente, debe diseñar un método de desarrollo apropiado para cada proyecto. Es decir, un método en particular, por ejemplo, DBB, no es adecuado para todos los proyectos. Un desempeño deficiente de un proyecto no siempre radica en la aplicación de métodos tradicionales, ni un mejor desempeño radica en la aplicación de nuevos métodos. Pero sí radica en la comprensión y el conocimiento para diseñar y seleccionar un método apropiado para un proyecto en específico. Es necesario tomar una decisión racional para la selección y aplicación de un tipo de método, según las características del proyecto y de su mandante.

El diseño y selección de un método de desarrollo no solo implica la negociación del tipo de contrato, que normalmente estipula cláusulas que definen principalmente cómo ejecutar los procesos; sino que también hay que considerar cómo los participantes del proyecto se deben comportar y relacionar, y qué herramientas y metodologías (p. ej., BIM, Lean) van a utilizar para realizar el proyecto.

El diseño y selección debe enfocarse en un marco que integre los elementos de la estructura organizacional, sistema operacional, y la relación contractual de acuerdo con las características del proyecto. La optimización solo de una parte, por ejemplo, BIM como sistema de gestión, sin considerar el todo, probablemente no dará los resultados esperados.

Desde el programa Construye2025 se está trabajando en la articulación de diferentes iniciativas para lograr esta integración, entre ellas: Construcción Industrializada, Estrategia RCD, Comité Gestor de I+D y el Comité Gestor de Modernización de Marcos Contractuales. Este último comité, que está conformado por diferentes actores del sector de la AIC y la academia, busca contribuir en la generación y difusión de conocimiento para modernizar los marcos contractuales que se usan en la construcción en Chile, y así alcanzar un nuevo estándar de contratos, que disminuya los conflictos en proyectos de construcción, para mejorar la productividad en la industria y transformarla en un referente internacional.

Asimismo, el Comité está trabajando en forjar una alianza con el Grupo Institucional de Relaciones Contractuales Justas y Equilibradas de la CChC. El propósito es aunar fuerzas entre las instituciones para impulsar y consolidar una cultura de relaciones contractuales más justas, equilibradas y colaborativas en toda la cadena de valor del sector de la construcción.

[1] Thomsen, D.,.J., Dunne, D., Lichtig, W.A., 2009. Managing integrated project delivery.

 

Tecnologías digitales aplicadas en la industria de la construcción

Realidad virtual y aumentada, internet de las cosas, big data y gamificación se tomaron el diálogo en el encuentro organizado junto a Chilecreativo, proyecto Transforma de Economía Creativa, impulsado por Corfo.

Dos invitados compartieron sus experiencias en el encuentro de industria de Construye2025 y Chilecreativo, que fue moderado por Katherine Martínez, secretaria ejecutiva del Consejo de Construcción Industrializada (CCI); y Felipe Mujica, gerente Chilecreativo. El primero de ellos fue Julio Barrales, socio y gerente comercial de DRS Ingeniería y Gestión, quien expuso sobre la construcción del nuevo hospital de Quellón, su tecnología y su vínculo con las industrias creativas. Junto a él, estuvo Francisco Guerra, supervisor de obras civiles en el contrato de normalización del citado recinto hospitalario, quien contó su experiencia utilizando la plataforma Dalux, basada en BIM.

“Uno puede aplicar reconocimiento en terreno, tanto de no conformidades, como poder levantar registros de cómo se están presentando las obras. Para mí, eso ha sido de gran apoyo, principalmente, cuando hay que verificar una no conformidad o cuando hay un elemento del que yo quisiera una aclaración por parte del arquitecto proyectista. Tomo la fotografía, me posiciono dentro del lugar en el plano y elevo el informe. Ese informe lo hago de forma inmediata en terreno y me llega al computador o al computador de las personas que están incluidas dentro del correo. De esa manera, de forma instantánea, la información y requerimiento llega al profesional”, comentó Francisco Guerra.

Enseguida, se incorporó a la conversación Francisco Javier Domínguez, profesional BIM de la inspección técnica de obra del hospital de Quellón por DRS, quien explicó que llevar BIM a la obra permitió generar eficiencia en la emisión de todos los reportes, tanto de no conformidades, como de observaciones de la obra, en tiempo real.

“BIM en la obra funciona a través de varias metodologías que hemos incorporado, desde el modelo a la plataforma Dalux. La información, evidentemente, que no tiene un solo emisor, ni un solo receptor, sino que se emite desde varios ámbitos, ya sea desde la oficina, mediante el modelo mismo, o a través de la obra que llega también la información a la oficina y puede ser adjuntado a todos los informes y no conformidades que se presentan al inspector fiscal para que los incorpore al libro de obra”, detalló Domínguez. Para generar un reporte del estado de seguimiento del modelo BIM, el profesional explicó que se necesita pasar a otras aplicaciones, como BIMcollab, que aglutina todo el estado y la información de la obra. Así, se generan reportes concluyen en informes o conformidades que se entregan por libro de obra a la constructora para ser resuelto.

Drones y copilotos virtuales

Luego de esto, Julio Barrales, presentó un video en el que la empresa mostró el uso de drones que desarrollan videos para que los mandantes puedan ir viendo el avance en sus obras. Gracias a la grabación de videos que pueden ser semanales, quincenales o mensuales, es posible conocer el avance gráfico con ortofotos y curvas de nivel.

Otro de los entregables gracias a los drones son las imágenes 360º en obra, que, en tiempos de pandemia, donde no todos quieren arriesgarse a salir de sus casas para visitar una obra, particularmente, interesante, para el calculista, el arquitecto y todas las especialidades relacionadas con las distintas fases constructivas.

Además, para reforzar la seguridad, en DRS, utilizan copilotos virtuales. “En un Ipad, cuando el profesional se sube a la camioneta marca su ruta, para identificar por dónde va a ir, de modo que no tenga accidentes. Tiene unos sensores que permiten que se vaya viendo su rostro, por si está cansado y que, de alguna forma genere alarmas que permitan salvar su vida o evitar algún accidente. Hay una cámara que va grabando y tiene sensores por si se sale de la línea o si hay obstáculos, es un muy buen amigo tecnológico que nos permite navegar en forma tranquila”, explicó Julio Barrales, socio de DRS Ingeniería y Gestión.

 

Inteligencia artificial

Otra muestra de la colaboración entre la construcción y las industrias creativas fue la experiencia en Mercado Urbano Tobalaba, que expuso Agustín Soto, gerente de Innovación de Inmobiliaria Territoria. “Con inteligencia artificial cómo podemos entender qué está ocurriendo en el entorno día a día, saber cuáles son los momentos peak, cómo son los flujos, hacia dónde se dirigen, cuántas personas pasan, cuántos autos, bicicletas, buses y motos circulan, para así entender a qué nos estamos enfrentando y cómo podemos medir la performance de nuestro proyecto inmobiliario con esta información”, comentó el ejecutivo.

De esta manera, Territoria busca construir proyectos que se ajusten a las necesidades de la ciudad, como en el caso del Mercado Urbano Tobalaba, un lugar en el que la comunidad podrá desarrollar cualquier tipo de actividad, un polo de tecnología y experiencia a los pies del metro Tobalaba.

“Hemos logrado incorporar más de 21.000 m2 de áreas verdes en los distintos niveles, para que la gente pueda desenvolverse, sin perjudicar la rentabilidad del negocio que es algo súper importante para los proyectos inmobiliarios. También lo sustentable, nosotros estamos desarrollando un microsistema circular para ser eficientes con la energía y los residuos. Por eso, tenemos un programa ‘basura cero’, que busca netamente reducir a cero kilos la basura que va a vertederos, reutilizarlo todo”, relató Agustín Soto.

En Inmobiliaria Territoria, también tuvieron en cuenta la relevancia que ha cobrado el transporte limpio, donde el uso de la bicicleta, por ejemplo, está creciendo más de un 15% anual. “Estamos desarrollando un hub que permita a la gente acceder a la ciudad, con los amenities y la capacidad suficiente de bicicleteros, duchas, lockers y toda la experiencia relacionada con el mundo de la bicicleta, con más de 2.000 casos de estacionamientos, el más grande Chile hasta el momento. Y también tenemos una conexión subterránea directa con el metro”, afirmó el gerente de Innovación de la empresa.

Otro concepto importante en Mercado Urbano Tobalaba, que surgió de la mirada a las tendencias y al cliente, es la omnicanalidad. “Estamos desarrollando un comercio físico, no vemos el comercio digital como una competencia, sino como un perfecto complemento, y también hay que reconocer que el comercio digital necesita infraestructura física para poder responder las necesidades del cliente final. Esto es claro: darle la flexibilidad y libertad al consumidor final de cómo quiere hacer sus transacciones y recibir sus productos”, señaló Soto.

Las experiencias que se compartieron en el encuentro de Chilecreativo y Construye2025, dieron cuenta de cómo la tecnología puede ponerse al servicio de las personas, en un terreno donde el aterrizaje de la digitalización no ha sido fácil. Pero, donde Territoria logró visualizar un centro tecnológico que “conversara” con la industria creativa, utilizando inteligencia artificial para el análisis del entorno; un lugar en el que el Blockchain ayudará a trazar los residuos y donde una torre completa estará dedicada a la innovación. 

Nueva plataforma CES estandariza y agiliza el ingreso y revisión de proyectos

El portal que será lanzado en diciembre generará indicadores que permitirán contar con información estadística de parámetros relevantes para la construcción sustentable.

Hace casi dos años, gracias al convenio de colaboración entre los ministerios de Energía y Obras Públicas más el Instituto de la Construcción, en conjunto con CES, tomó forma la idea de mejorar el funcionamiento operativo de la certificación. Así, en marzo de este año, la administración comenzó a trabajar en su nueva plataforma web y en el sitio público para mejorar los procesos y, al mismo tiempo, lograr un lenguaje en común con la Certificación de Vivienda Sustentable (CVS). 

“La nueva plataforma es más eficiente porque automatiza acciones que hoy se hacen de manera manual. Los asesores podrán inscribir sus proyectos por sí mismos y cuando éstos tengan suficiente avance, podrán ingresar información general y específica para cada requerimiento. Luego, el mismo asesor enviará a revisar estos antecedentes, de modo que el evaluador podrá analizar toda la información de forma estandarizada, para luego emitir sus observaciones”, explica la arquitecto asistente de CES, Romy Lückeheide.

Además, una vez ingresadas las observaciones del evaluador, la nueva plataforma generará informes de revisión con sus comentarios por cada requerimiento y en cada etapa. Junto con esto, el sistema arrojará una cartilla de puntaje, en la que se visualizará en detalle el puntaje optado y el puntaje ganado por categoría y por requerimiento.

De esta manera, cuando el proyecto logre la Precertificación o la Certificación, el equipo de proyecto podrá descargar un reporte final con, al menos, indicadores de porcentajes de reducción de ahorro de agua, emisiones de CO2, energía y residuos. En este aspecto, los indicadores que se rescaten de cada proyecto permitirán contar con información estadística de parámetros relevantes para la construcción sustentable.

“La plataforma está conectada al sitio público, que se modernizó y fue lanzado en septiembre y, ahora, la información que ingrese por proyecto, automáticamente, se vinculará con el sitio público, lo que facilitará la publicación de la información general de los proyectos”, detalla la arquitecto Romy Lückeheide.

Los alcances de esta nueva plataforma, que se lanzará en diciembre próximo, se expondrán en una serie de charlas virtuales que se programarán tras el debut de este sistema, que será más estandarizado y más eficiente.

Fuente: CES

Minvu avanza en implementación de nuevos estándares térmicos que mejorarán calidad de vida y plusvalía de las viviendas

Junto con optimizar las condiciones de habitabilidad de las viviendas, esta actualización de la Reglamentación Térmica permitirá mejorar la eficiencia energética del parque habitacional y reducir las emisiones de material particulado (MP) y Gases de Efecto Invernadero (GEI), contribuyendo a descontaminar el país y a mitigar los efectos del cambio climático.

Desde el 2000 Chile cuenta con una Reglamentación Térmica que establece requerimientos mínimos a las viviendas nuevas, en materia de eficiencia energética y habitabilidad. Actualmente, el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) se encuentra tramitando una propuesta de actualización de los estándares que fija esta reglamentación, que mejoran la calidad de las edificaciones.

Puedes leer el artículo completo AQUÍ.

Fuente: Revista Negocio&Construcción

Empresas del sector construcción están entre las más innovadoras

Varias empresas del rubro lideran la lista de Most Innovative Companies 2020. En total, se destacó a 26 compañías que han identificado a la innovación como una variable competitiva clave para el desarrollo de su posicionamiento actual y futuro, y cuentan con un componente tecnológico creciente, con un enfoque que tiende cada vez más a la incorporación de la inteligencia artificial.

Dentro de las empresas más innovadoras en los 26 sectores que analiza la edición 2020 del ranking, se encuentran:

ConstruTech

iConstruye www.iconstruye.com

iConstruye es una empresa proveedora de software para la digitalización del ciclo de abastecimiento, haciéndose cargo de las necesidades de las empresas desde el requerimiento al pago. Contempla soluciones de compra, recepciones, bodega, portal de pagos, facturación electrónica y un marketplace de materiales y servicios para la construcción entre otros.

Para Most Innovative Companies 2020, destaca en su categoría por su desarrollo completo de una solución de facturación electrónica y por haber implementado su ‘propio laboratorio digital para atraer empresas innovadoras, con el objetivo de convertirse en el principal ecosistema de soluciones tecnológicas para la construcción’.

Ingeniería y construcción

Axis Desarrollos Constructivos www.axisdc.cl

Axis es una empresa constructora con 30 años de experiencia y presencia nacional. Participa activamente en los sectores de viviendas en extensión, retail, edificación comercial, industrial e institucional como universidades, colegios y hospitales. Cuenta con oficinas en Santiago, Puerto Varas y Punta Arenas.

Most Innovative Companies 2020 la consideró líder en su área por dos argumentos El primero es haber sido ‘una de las primeras empresas constructoras en utilizar baños prefabricados en Chile’. El segundo es AxisOpenLab, que es reconocido por ser el ‘primer programa de innovación abierta liderado por una empresa constructora; en el proyecto participaron profesionales de Axis, agencia de innovación, académicos, profesionales de otras empresas y estudiantes, entre otros’.

Inmobiliarias

Eurocorp www.eurocorp.cl

Eurocorp es una empresa dedicada al rubro inmobiliario, desde la compra del terreno, diseño, construcción y desarrollo del proyecto inmobiliario de carácter residencial, hasta la venta, arriendo y administración de los inmuebles.

Most Innovative Companies 2020 la considera la más innovadora de su sector por el hecho de que generó ‘nuevos sistemas inteligentes, eficientes y sostenibles para la generación de agua caliente sanitaria’. Adicionalmente, Eurocorp ha ‘innovado en el modelo de negocio de la distribución eléctrica dentro de los edificios a los departamentos’.

 

Fuente: El Mercurio

Analizarán aporte de los modelos contractuales colaborativos para ejecución de proyectos

“Aquí lo fundamental es cómo somos capaces entre todos de generar un ambiente colaborativo y de confianza en pos de un objetivo en común, que es el término del proyecto en tiempo y costo”, señala Carlos Zeppelin, vicepresidente de la Cámara Chilena de la Construcción, patrocinadores de la actividad.

La creciente complejidad que involucra la ejecución de un proyecto, en especial cuando estos son de mayor tamaño, como ocurre en el sector minero, puede redundar en mayores costos y plazos, generando espacios de divergencias entre mandantes y contratistas.

Ante esta realidad, los modelos tradicionales de contratación han ido dando paso a dinámicas colaborativas, que permitan ejecutar exitosamente el proyecto asignando de mejor manera sus riesgos entre las múltiples partes, aspecto que será abordado en el webinar “Modelos contractuales colaborativos”, el que girará en torno a los beneficios que entregan herramientas como el modelo IPD “Integrated Project Delivery”, que apuntan a la generación de enfoque de trabajo en común entre las empresas involucradas.

La actividad se realizará el próximo miércoles 25 de noviembre, desde el mediodía, contando con el patrocinio de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) y Construye 2025, con la colaboración de SFM Group. El evento busca dar respuesta al hecho que “desde hace un tiempo, en Chile han empezado a evidenciarse fuertemente conflictos entre mandantes y contratistas. Hemos levantado algunas estadísticas, tenemos varias encuestas que van mostrando este fenómeno. Esos conflictos se han exacerbado como consecuencia de la pandemia del Covid-19, en que se han paralizado obras, y se han incrementado los costos por medidas sanitarias y ha caído la productividad en las obras, lo que han dado origen a divergencias”, explica Carlos Zeppelin, vicepresidente de la Cámara Chilena de la Construcción, uno de los patrocinadores de la actividad.

Ante dicho escenario, “lo que estamos impulsando fundamentalmente son mecanismos que han sido utilizados internacionalmente, herramientas para poder ir racionalizando estos conflictos, teniendo una participación activa entre las partes. Acá hay un principio fundamental que estamos promoviendo, que tiene que ver con algo que hemos ido perdiendo cada día más como país, que es la confianza entre las partes”.

Al respecto, el dirigente del gremio  comenta que “todos estos instrumentos en general se basan en la buena fe y la confianza entre las partes, no puedes regular por escrito todo lo que puede pasar, menos en contratos a largo plazo, a 20 años. Aún cuando los contratos fuesen en plazo menores, y ante el hecho de que existan en el mundo una serie de incertidumbres, tanto tecnológicas, ambientales, entre otras, refuerza la necesidad de generar relaciones colaborativas y de confianza“.

Mirada en común

Carlos Zeppelin destaca la importancia de este tipo de instancias, como una forma para ir generando conciencia, e impulsar una mirada de trabajo mucho más colaborativa.

“Tiene que ver fundamentalmente con una mirada común de todos los involucrados, orientada a cumplir con los objetivos del proyecto”, asegura, destacando además que “este tipo de herramientas lo que ha generado es un aumento de la productividad, y un mejoramiento en la oportunidad de entrega de los proyectos”.

Estas herramientas de diálogo adquieren mayor relevancia, considerando los efectos que ha tenido la pandemia.

Lo que ha impactado en el conflicto fundamentalmente son las paralizaciones y ralentizaciones debido a la pandemia. Cuando paralizas, tienes un punto de conflicto, ya que se generan mayores costos directos y gastos generales que alguien debe asumir”, señala el vicepresidente de la Cámara Chilena de la Construcción.

Carlos Zeppelin, vicepresidente de la CChC.

A ello se suma el que “hoy día hemos visto aumentos de costos relevantes producto de todas las medidas sanitarias, el distanciamiento social, la cantidad de test que hay que hacer, entre otras medidas. Esto ha implicado a la vez una baja en la productividad, teniendo que muchas veces colocar turnos adicionales en las faenas. A mi modo de ver, estos aspectos son los que van a generar situaciones de conflictividad”.

Respecto del mecanismo que será presentado en el evento, el ejecutivo explica que se trata de “una herramienta muy potente, que viene siendo estudiada desde  hace mucho tiempo, y que hoy está mucho más consolidada . Por eso, creo que hay que potenciarla. Existe un abanico de herramientas, pero creo que debemos focalizarnos y concentrarnos en un par de de ellas, y desarrollarlas bien, generando planes pilotos para su implementación. Una de éstas es la que se presentará en el webinar”.

“Aquí lo fundamental es pensar cómo somos capaces entre todos de abrir los espacios de conversación, de generar un ambiente colaborativo y de confianza en pos de un objetivo en común, que es el término del proyecto. Así se han desarrollado los proyectos más exitosos el mundo, generando espacios colaborativos y de confianza que permitan esto”, menciona.

Inscripciones en: https://contratoscolaborativos.gr8.com/

Fuente: Minería Chilena

4º Seminario Internacional de Construcción Industrializada

4º Seminario Internacional de Construcción Industrializada: Industrialización en tiempos de reactivación, organizado por Construye2025 y el Consejo de Construcción Industrializada (CCI), con el apoyo de la Corporación de Desarrollo Tecnológico (CDT).

Gestión de residuos en la construcción del aeropuerto de Santiago permite potenciar la reducción de emisiones de CO2

Más de 228 mil kilos de madera, 32 mil kilos de cartón y más de 1.000 kilos entre latas y botellas plásticas, son algunas de las impactantes cifras de reciclaje que ha logrado el consorcio a cargo de la ampliación del principal terminal aéreo del país.

Junto con proponer un diseño basado en BIM, que favoreció el trabajo colaborativo en una mega obra de ingeniería como es el Aeropuerto Internacional Arturo Merino Benítez, el consorcio Vinci Construction Grands Projets Astaldi, complementó su oferta con un completo programa de gestión de residuos en obra. Mandatado por el Ministerio de Obras Públicas, el proyecto de más de 250.000 m², no solo duplicaría la capacidad de acoger pasajeros, también generaría una gran cantidad de residuos en su construcción, pero CJV tenía un plan preparado desde el inicio.

En su Resolución de Calificación Ambiental, el consorcio presentó un programa de gestión sustentable que aplicaría a la empresa y a todas las contratistas durante la construcción del proyecto, con la visión de reducir las emisiones directas de carbono en 40% antes de 2030, respecto al 2018. En una entusiasta conversación con Alejandra Tapia, coordinadora de Sustentabilidad de Construye2025, la encargada de medioambiente de Vinci Construction Grands Projets Astaldi, Carolina Véliz, explicó el camino recorrido en la gestión de residuos del aeropuerto.

 La propuesta de economía circular de Vinci Construction Grands Projets Astaldi buscaba proteger los recursos, reforzando la oferta de materiales reciclados y valorizando los residuos, en un contexto de respeto al medio ambiente, reduciendo el consumo de agua, previniendo la contaminación acústica y con un enfoque de cero pérdidas netas. 

“En residuos, hacemos la gestión para el reciclaje de algunos elementos como metales; madera, con acopios en varios puntos de la obra, la que se utiliza para la generación de energía; reciclaje de cartón, que se retira mensualmente de la obra; y puntos de acopio para reciclaje de latas, botellas y polietileno expandido que una empresa usa para generar pintura vial”, explica Carolina Véliz.

Mejor segregación, más reciclaje

Han sido cerca de dos años trabajando fuertemente, no solo en estas acciones, sino también en la concientización sobre la adecuada gestión de residuos. De hecho, en septiembre, hicieron una serie de charlas para incentivar el reciclaje y mejorar la segregación de residuos. Además, en una jornada dedicada al medio ambiente, la empresa dispuso un buzón de ideas, para que los trabajadores pudieran presentar soluciones susceptibles de ejecutar en la obra. De ellas, se preseleccionaron alrededor de 40, que están en evaluación.

 “Con gestión del cambio, reforzamos los mensajes para que la gente se de cuenta del impacto que genera no segregar y que no solo se aplica esto en una obra, sino que también se puede aplicar en el futuro”, señala Stephane Chaing, gerente de Logística & Lean de Vinci Construction Grands Projets Astaldi. La importancia de gestionar los residuos, según el profesional, radica en la presión que imponen los accionistas para cumplir con el Acuerdo de París y en tener que llegar, a 2050, con una generación de CO2 que sea igual a cero, compensado. “Este año hay un concurso en todas las filiales de Vinci para incentivar nuevas ideas que sean replicables en varias obras”, dice. Junto con los resultados económicos, en CJV, valorizan la reducción de la huella de carbono como un criterio más. “Tenemos la ambición de que sea parte del ADN”, explica Chaing. 

Gracias a los grandes volúmenes de material, destinados a reciclaje  -en una obra en la que priman el hormigón y el metal- se calcula una reducción de 230 toneladas de CO2, es decir, “un 3,1% del total de emisiones generadas solo por residuos”, comenta la encargada de medio ambiente del consorcio. Lograr la segregación en obra ha sido un desafío diario, donde el cambio de mentalidad ha sido fundamental. 

“Quizá los protocolos han tenido que adaptarlos a la realidad chilena. Eso lo veo súper positivo, porque no son procesos de tecnología grande sino de cambio de mentalidad. Aportan una visión, una política de reducción de huella de carbono. El aeropuerto es un espacio gigante, con varias áreas y se destaca el orden, se ve un despeje del área”, destaca Joaquín Cuevas, especialista en el manejo de Residuos y Medio Ambiente, quien apoyó a la empresa en las jornadas.

Según Cuevas, el futuro -en este ámbito- es prometedor, pues la gestión del residuo en Chile debiera generar nuevos puestos de trabajo. “Las empresas, así como tienen prevencionista de riesgos, debieran tener un jornal de aseo y reciclaje”, enfatiza.

Industrialización, digitalización y nuevos actores se toman la construcción del futuro

Invitados internacionales y figuras locales de la industria abordaron los temas que marcarán la pauta en la construcción, en el cuarto “Seminario Internacional de Construcción Industrializada”, organizado por Construye2025 de Corfo y el Consejo de Construcción Industrializada.

Con un formato virtual, debido a la contingencia, se realizó el cuarto “Seminario Internacional de Construcción Industrializada: Industrialización en tiempos de reactivación”, organizado por el programa Construye2025 de Corfo y el Consejo de Construcción Industrializada (CCI), más el apoyo de la Corporación de Desarrollo Tecnológico (CDT). 

El encuentro fue inaugurado por el vicepresidente de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), Carlos Zeppelin, quien se refirió a los desafíos sanitarios, económicos, sociales y ambientales que enfrenta la industria y el rol que juega la industrialización frente a ellos. “La construcción industrializada es una muy buena herramienta, que reduce impactos en obra y minimiza los residuos de la construcción. La invitación es a que las acciones se implementen ya, buscando la eficiencia y los mejores estándares, a confiar y construir confianza, trabajando en equipo”, afirmó. 

En ese contexto, el gerente de Construye2025, Marcos Brito, llamó a ampliar la mirada sobre la industrialización, la que va mucho más allá de prefabricar. “Es un concepto mucho más amplio, que involucra ordenamiento y una manera de producir mucho más eficiente”, señaló. 

Por su parte, la presidenta del CCI, Francisca Cruz, hizo hincapié en lo complejo que ha sido el año para un rubro “tremendamente expuesto a la mano de obra in situ, que ha tenido dificultades muy grandes para poder mantener la continuidad operacional”. Por eso, es que la industrialización -según dijo- no es solo una tendencia, sino una necesidad. “Cuando el ambiente es más controlado, hay más certidumbre y seguridad”, acotó. 

Pero la industrialización también responde a la necesidad de reducir los residuos, un punto al que las empresas están poniendo cada vez más atención. Asimismo, la presidenta del CCI, valoró el rol de la innovación y la digitalización en la oferta y la estrategia de negocios. 

La mirada internacional

Una de las invitadas al seminario fue la socia de McKinsey & Company en Madrid, Maria Joao Ribeirinho, quien reafirmó el enfoque industrial que está tomando el rubro en un escenario en que los requisitos de sostenibilidad son cada vez más amplios. En este ámbito, las tendencias de futuro son, al menos, tres, en su opinión: la industrialización, la digitalización y la entrada de nuevos actores. “En diferentes lugares del mundo hablamos de modularización: unidades individuales, a veces paneles; unidades volumétricas; o estructuras completas. Podemos tener diferentes constructos para lo que es modular y aunque el término módulo es cada vez más popular, no hay una sola solución para todos los proyectos. Pero, lo más importante es que estamos viendo una mentalidad más modular en la industria: paneles 2D, 3D o estructuras modulares completas”, afirmó. 

Según la especialista de McKinsey & Company, lo importante es pensar con una “mentalidad modular”, para poder dividir el producto en componentes. “Una construcción modular puede ayudarnos a disminuir tiempos y tiene menor variabilidad en los resultados, que son competitivos y sustentables, porque el proceso genera menos contaminación y menos materiales sobrantes”, indicó. 

 En este sentido, el camino apuntaría a aumentar la escala y sofisticar la fabricación de módulos, hacer modelamiento 3D, gestionar la colaboración digital aumentada y mejorar la programación de los proyectos y la ejecución offsite. “Las herramientas digitales nos pueden ayudar con la eficiencia en la gestión de la mano de obra”, argumentó Maria Joao Ribeirinho.

Respecto a la irrupción de nuevos actores, la invitada internacional comentó que, en el espacio modular, ya existen muchas empresas que hacen la estandarización en la producción de módulos y otras que se mueven en el e-commerce. “Esto genera mucha más competencia y transparencia de los precios”, afirmó. 

Finalmente, compartieron sus puntos de vista Scott Fisher, CEO de PrefabNZ en Nueva Zelandia; y Johann Betz, fundador de Offsite Design. Este último, puso énfasis en el desafío de construir viviendas asequibles y de buena calidad; mientras que el primero aseguró que el Lean Manufacturing debiera ser la piedra angular de la industria, ya que la construcción offsite está por sobre esta base. “La producción limpia sin desperdicios debiera ser un requerimiento fundamental”, señaló Fisher. 

 

Epyma 2020: El evento digital que reunirá al sector maderero para construir estrategias de desarrollo

Pymes madereras, academia y sector público se darán cita el próximo 12 y 19 de noviembre para abordar desafíos relacionados con potenciar la industria global con foco local, y de la misma manera proponer soluciones productividad y sustentabilidad para la construcción. El evento será transmitido por maderaaltovalor.cl, y contará con la participación Sebastián Sichel, presidente del Banco del Estado de Chile, quien brindará una charla enfocada al sector.

La actividad financiada por Corfo, en el marco del desarrollo del quinto año del Programa Transforma “Madera Alto Valor”, es el principal encuentro regional de de empresarios forestales y madereros con el mundo público, académico y profesional en torno a iniciativas que impulsen la actividad del Polo de Desarrollo maderero de las regiones de Maule, Ñuble, Biobío (agrupadas en la Macro Zona Norte), y también en Araucanía y Los Ríos (Macro Zona Sur), como base de crecimiento y proyección de la actividad empresarial.

José Pablo Undurraga, gerente del Programa Transforma Madera Alto Valor, relata que el concepto desde el cual se configura este evento tiene que ver con la realidad exportadora de Chile, pues, existe un mercado importante que acoge productos y servicios de distintos orígenes.  “Y la madera no es la excepción, el 70% de la producción se va a exportaciones, a distintos mercados (…) en ese punto lo importante es realizar un acompañamiento a las pymes regionales para que eleven sus estándares de calidad, por ejemplo, a través de la certificación. De igual manera la idea es insertar la madera en el rubro de la construcción como un nicho de negocio”, sostuvo el Gerente del programa financiado por Corfo.

De igual manera, Undurraga es enfático al recalcar que al abordar la industria a nivel local, se trata de mover la economía territorial. “Hay que centrarse en el impacto con las comunidades, también en cuáles son las condiciones de uso de los recursos; el equilibrio social, ambiental y cultural, además de impactar en el PIB regional”, comentó.

En cuanto al alcance, Epyma 2020 se desarrollará en dos fechas, siendo primera el 12 de noviembre donde se reunirán Maule, Ñuble y Biobío (Macro Zona Norte), y en una segunda instancia, el 19 de noviembre, para Araucanía y Los Ríos (Macro Zona Sur). “Tenemos identificados 13 polos de desarrollo en esta regiones, donde existe una oferta concreta de productos madereros, para estructura como para terminaciones y distintos usos”, dijo José Pablo Undurraga.

En tanto, el director regional de Corfo Maule, Raphael Zúñiga, indicó que Epyma 2020 resulta ser muy relevante en estos tiempos, porque la industria maderera local no ha parado, a pesar de la pandemia. “Nos encontramos en un contexto adecuado para poner en práctica los lineamientos que el programa ha trabajado durante sus cinco años de ejecución, que tienen que ver con dar un nuevo impulso al sector maderero en Chile. Así como también generar una cultura en torno a la diversificación y desarrollo de una industria secundaria en el rubro, y generar capacidades complementarias, entre las grandes, medianas y pequeñas empresas, tanto madereras como constructoras”, dijo.

Evento 100% digital

Para la correcta realización del evento, que contempla un programa que se llevará a cabo de las 15.00 a 18.00 horas, según las fechas indicadas por Macro Zonas, se está realizando un trabajo colaborativo con la Universidad Autónoma de Chile a través de su Facultad de Arquitectura y Construcción y su canal de televisión UATV, quienes entregarán el soporte digital para que Epyma 2020 sea transmitido.

En cuanto a la alianza generada, el decano de la Facultad de Arquitectura y Construcción de UA, Daniel Schmidt, indicó que además de brindar el soporte técnico, la esencia de la participación va relacionada al quehacer del equipo como arquitectos y constructores, que forma parte de una cadena de valor. “Contribuir a difundir y conocer mejor el trabajo de las Pymes Madereras nos permite vincularnos de manera más efectiva a este material, que es el único en construcción renovable que aplica a un desarrollo sustentable”, finalizó Schmidt.

Cabe destacar que Epyma 2020 será transmitido por maderaaltovalor.cl, la inscripción es gratuita, solo debes registrarte en: https://forms.gle/tmgKychRoQWiLb369

Sector construcción lanza Estrategia sobre Economía Circular

Iniciativa reúne a los principales actores de la industria con el objetivo de impulsar medidas que disminuyan la demanda de recursos, logren menor impacto ambiental, la regeneración del medio ambiente y la protección del patrimonio ambiental.

Este martes 03 de noviembre, se presentó la visión y se inició el proceso colaborativo para la cocreación de la Estrategia de Economía Circular en Construcción, iniciativa en la que participan como actores activos la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), el Instituto de la Construcción (IC) y el programa Construye2025 de Corfo, junto con la facilitación técnica de la Corporación de Desarrollo Tecnológico, CDT.

La Estrategia busca generar un plan de acción público-privado al 2025, como continuidad de la Hoja de Ruta RCD Economía Circular al 2035 y en el marco de la Hoja de Ruta nacional de Economía Circular al 2040.

En un evento virtual que congregó a más de 80 personas, se reunieron los actores clave de la industria para lanzar esta iniciativa que busca potenciar la Economía Circular en sector Construcción. En la ocasión, Carlos Zeppelin, vicepresidente de la Cámara Chilena de la Construcción, planteó que el desarrollo de esta estrategia es un desafío relevante para el sector. En ese sentido destacó que el hecho de “que hoy estemos reunidos es una oportunidad para relevar lo importante que es que avancemos rápido y con fuerza en nuestro país, por una cultura de construcción circular, que permita nuestro desarrollo sostenible en la industria a largo plazo. Esa es la razón porque estamos impulsando esta iniciativa multisectorial que establece nuestro compromiso como industria de articularnos frente a un desafío común y transformador, que implica construir pensando futuro, aumentar la productividad del sector, reducir la dependencia de los recursos naturales, controlar la cantidad de residuos generados y generar mayor crecimiento en la economía, así como también los ámbitos social y ambiental”. Para ello, añadió, “es fundamental cambiar el paradigma de cómo construimos para enfrentar los desafíos actuales y futuros”. Una reinvención que va de la mano de la innovación, desarrollo  de nuevos modelos de negocios y creación de empleos de calidad en el sector de la construcción que, al mismo tiempo, ayudarán a disminuir el impacto climático”.

 

En la misma línea, para el presidente del Instituto de la Construcción, Miguel Pérez, “realizar un Estrategia Sectorial de Economía Circular en Construcción es, sin duda, un tremendo desafío que nos convoca a todos quienes formamos parte de la cadena de valor de la industria”.  Estableciendo así el carácter colaborativo y global que implica esta propuesta de economía circular en la que cada sector es importante para la materialización de un desarrollo sustentable efectivo.

En la oportunidad también  participó la ministra del Medio Ambiente, Carolina Schmidt, quien celebró que la Construcción sea la primera industria en generar una estrategia sectorial en el marco de la Hoja de Ruta Nacional. “El sector de la construcción no es solo el principal consumidor de materias primas a nivel global, sino que genera más del 35% de los residuos que actualmente se producen en nuestro país (…) Prevenir y reducir los residuos de la construcción y la demolición, sin duda producen impactos medioambientales significativos, pero también enormes beneficios y oportunidades directas para las empresas del sector”. A ello añadió que “con la incorporación de la Economía circular en el mundo de la construcción se abren innumerables posibilidades para la optimización y el ahorro de recursos, así como también para la innovación y el emprendimiento”.

Por su parte, desde el Programa Construye2025 de Corfo, Alejandra Tapia, coordinadora técnica de Sustentabilidad, felicitando la posibilidad de concretar esta iniciativa, indicó que “es posible desacoplar la extracción de recursos en pro de generar un crecimiento económico centrado en el bienestar de las personas y en armonía con el medio ambiente”. Junto a ello, instó a protagonizar esta nueva etapa que vive la industria: “hago un llamado a distintos liderazgos, cualquier personas desde el rol que desempeña, puede ser un gran líder para empujar, implementar acciones que nos ayuden a avanzar hacia una construcción circular y más sostenible”, concluyó.

Tras las palabras de bienvenida, se puso en contexto las diversas oportunidades que la Economía Circular ofrece al sector, junto con algunos casos de éxito que buscaron remover voluntades en pos de  esta estrategia. Finalmente, la comunidad de líderes movilizadores de la estrategia, representado por Carlos Braun, presidente de la CChC de Punta Arenas, anunció su compromiso de adhesión para con esta anunció su compromiso de adhesión para con esta iniciativa.

Estrategia

La Estrategia de Economía Circular en la Construcción, pretende establecer en Chile la cultura de construcción circular, viéndola como un desafío y al mismo tiempo como una oportunidad que permita el desarrollo sostenible, social, ambiental y económico de la industria, a través del incentivo de iniciativas coordinadas entre el sector público, privado, academia y  la validación ciudadana.

Este proyecto es de carácter nacional  y busca impulsar medidas que disminuyan la demanda de recursos, lograr menor impacto ambiental, la regeneración del medio ambiente y protección del patrimonio ambiental, junto con la mejora de la  calidad de vida de las personas. Sumado a esto, también instala la oportunidad de innovación y nuevos modelos de negocio circulares, para generar una reactivación económica verde posterior al escenario de pandemia por Coronavirus al que nos hemos enfrentado este 2020.

Este objetivo tiene diferentes pilares de acción, los que van desde invitar a la academia a incorporar integraciones tempranas entre las diferentes especialidades como diseño,  arquitectura, construcción industrializada y la formación de capital humano, con criterios de economía circular y desarrollo sustentable, hasta potenciar el compromiso del ámbito arquitectura y de los sectores industriales, proveedores, inmobiliarias, constructoras y por supuesto, la participación ciudadana.

Estas alianzas serán cruciales para lograr los objetivos desde un estilo de colaboración que permitan co-crear la estrategia de Economía Circular en Construcción y ponerla en práctica.

Para más información, puede escribir a economiacircular@cdt.cl

Representantes de la industria conversaron sobre las tecnologías digitales aplicadas a la construcción

El viernes 30 de octubre, a las 11 horas, se llevó a cabo el Encuentro de Industria, realizado en alianza entre ChileCreativo y Construye2025 de Corfo, Tecnologías digitales aplicadas en la industria de la construcción.

Agustín Soto, gerente de Innovación de Territoria, y Julio Barrales, gerente comercial y socio de DRS Ingeniería y Gestión, conversaron sobre la incorporación de nuevas tecnologías digitales en el sector de la construcción y su intersección con empresas y profesionales de las industrias creativas como videojuegos, arquitectura, diseño y multimedia. A cargo de moderar el panel estuvieron Katherine Martínez, secretaria ejecutiva del Consejo de Construcción Industrializada y Felipe Mujica, gerente de ChileCreativo.

Los expositores contaron acerca de la aplicación de tecnología en proyectos de gran escala como el Mercado Urbano Tobalaba (MUT) de Territoria y la construcción del nuevo Hospital de Quellón (DRS).

Respecto del Hospital de Quellón, entre otras cosas, Julio Barrales habló sobre la experiencia con drones, los que permiten tomar videos para que los mandantes puedan ver los avances de las obras, realizar análisis de movimiento de tierra, imágenes 360º en obra, entre otras herramientas tecnológicas utilizadas en la construcción.

Barrales destacó el desarrollo tecnológico y cómo este puede ser aplicable a otras industrias, e hizo hincapié en cómo los liderazgos tienen que cambiar, relevando que nunca es tarde para aprender, sobre todo en temas de tecnología.

«Creemos que las tecnologías nos permiten un mejor trabajo en equipo, son herramientas a disposición de las personas para facilitar el trabajo. La tecnología tiene que estar a disposición de los seres humanos, y no al revés«, comentó.

A su vez, Agustín Soto habló de los nuevos modelos de construcción, comercio y urbanismo. «Hoy más que nunca nos damos cuenta que las reglas del juego han cambiado. Debemos responder a nuevas variables: un comercio con sentido, sostenibilidad, espíritu de colaboración, economía circular, entre otros factores. Las personas buscan experiencias nuevas y ya no es la transacción si no la cultura lo que las mueve. Para responder estas preguntas nos apoyamos en tecnología: levantar la mayor información posible para hacer un proyecto que se ajuste a los usuarios«.

También expuso sobre los cruces que se generarán entre MUT y el nuevo Centro Tecnológico para las Industrias Creativas, del cual son socios.
Si te perdiste la charla, puedes revisarla AQUÍ.

La construcción, una actividad esencial

Miles de trabajos perdidos y suspendidos mantuvieron en vilo a quienes se desempeñan en la industria. Pero, la reciente autorización para que obras privadas de construcción puedan operar en zonas en cuarentena, abrió una luz de esperanza.

Más de seis mil puestos de trabajo perdidos y otros 16 mil suspendidos, solo en Concepción, es el balance que hace la presidenta regional de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), Helen Martin. Por eso, reactivar la industria tomó  carácter de urgencia en las empresas. “Las mujeres también han perdido una posición que había costado mucho ganar. La reactivación permitirá que todas las que perdieron su trabajo puedan recuperar sus empleos y tener una vida más estable desde el punto de vista económico”, señala.

Según la presidenta regional de la CChC, muchas empresas están complicadas desde hace más de un año, tras el estallido social. La productividad, dice, ha caído hasta en 40% y a ese impacto hay que sumar el incremento de los costos debido a la implementación de todos los protocolos COVID-19. “Hoy las empresas están sumamente debilitadas. Por cada empresa que se pierde toma mucho tiempo recuperarla. Así es que entre más rápido se echen a andar los proyectos mejores probabilidades tenemos”, añadió Helen Martin.

 Igual de preocupado se mostró el representante de la CChC en el Consejo Directivo de Construye2025, Enrique Loeser. “Con la Cámara hemos intentado infructuosamente que la construcción fuera declarada actividad esencial, porque es demasiado importante para la actividad económica del país. Eso es lo que ha sucedido en otros países, especialmente europeos, donde se dieron cuenta que parar la construcción es una complicación grave para la cantidad de trabajadores que están involucrados, más las empresas, pequeñas empresas, subcontratistas, es una cadena muy grande”, dijo.

 En este sentido, en la industria aseguran que activar la cadena de la construcción tendrá un gran efecto multiplicador, ya que ayudaría a mejorar los números de desempleo de forma inmediata. “Las medidas son urgentes, porque la construcción es un mundo muy grande con pymes que trabajan como los subcontratistas, cuya capacidad de aguantar no es indefinida, hoy en periodos de cuarentena salen a buscar trabajo en otros lugares porque necesitan llevar el pan a la casa, lo cual es más riesgoso”, apuntó Helen Martin.

La trazabilidad del COVID-19

 Un protocolo muy estricto acordado entre los ministerios de Economía y Hacienda le ha puesto freno a los contagios en obra y las empresas están tomando todas las medidas para garantizar la salud de sus trabajadores. Todos aquellos que tuvieron contacto estrecho con una persona contagiada deben cumplir con la cuarentena preventiva. Asimismo, algunas empresas han dispuesto transporte propio para sus trabajadores, donde existen listas que muestran qué personas viajaron juntas en el mismo bus y, además, llevan un registro de todas las cuadrillas.

En tanto, desde la Dirección General de Obras Públicas, se piden reportes semanales, en los cuales se controlan todos los efectos COVID-19: cantidad de personas enfermas, número de personas que están en cuarentena, si la obra está o no en una zona con restricción, etc. Toda la masa crítica de trabajadores se mantiene controlada, así como el mapa completo de obras paralizadas o en reprogramación.

Según el jefe de la División de Edificación Pública de la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas, Rodolfo Rojas, uno de los primeros indicadores que muestra si sube o baja la economía es el sector construcción. Esto porque es intensiva en mano de obra si se considera toda la cadena, que incluye a proveedores, transportistas y profesionales que prestan servicios, por ejemplo. “El MOP tiene una ley especial que se está tramitando, sobre reactivación económica y también estamos preocupados de ver el avance de las licitaciones, del monitoreo de los contratos, de la mano de obra de cada proyecto”, señaló.

 Sin embargo, aún cuando se hagan todos los ajustes necesarios para reactivar al sector, el economista de la Comisión Nacional de Productividad, Esteban Rojas, cree que la productividad de la construcción está rezagada en comparación al resto de la economía. “Los plazos y costos nos muestran que, en promedio, en Chile hay mayores proyectos con sobre costo, versus el análisis internacional, y que los proyectos con retrasos, si bien son parecidos en cuanto a número, el porcentaje de retraso es mucho más alto en Chile que en la vivencia internacional”, argumentó.

En este ámbito, la investigación que lleva adelante la Comisión Nacional de Productividad, reveló que en más de 27.000 proyectos de infraestructura pública -desde 2009- las grandes obras tardan en promedio más de tres ciclos políticos en materializarse: los hospitales, las obras de riego, los puentes, y las grandes obras viales. Esto abriría un espacio de mejora, al menos, en la trazabilidad de los sistemas de información, para poder impulsar el desarrollo de este tipo de obras. 

Pero también, el economista apunta a aspectos culturales y a que la industria es reacia al cambio, lo que dificulta la adopción de innovación y tecnología. A esto se suma el shock negativo de productividad en las empresas debido a los mayores costos de ajuste, a las nuevas condiciones del funcionamiento, en un régimen en que primará el distanciamiento social, al menos en lo que resta del año, según el economista de la Cámara Chilena de la Construcción, Byron Idrovo. “Esperamos que las expectativas de los empresarios tenderán a ser menos pesimistas, en la medida que se vayan disipando este escenario de incertidumbre”, agregó.

Foto de Zukiman Mohamad en Pexels

Con exponentes internacionales, se realizará nuevo seminario de construcción industrializada

El 4º Seminario Internacional se llevará a cabo el 10 de noviembre, con la organización de Construye2025 y el CCI más el apoyo de la CDT, con el foco puesto en la reactivación.

Por cuarto año consecutivo, el 10 de noviembre se realizará el Seminario Internacional de Construcción Industrializada, que este año está enfocado en la industrialización en tiempos de reactivación y está organizado por Construye2025 y el Consejo de Construcción Industrializada (CCI), con el apoyo de la Corporación de Desarrollo Tecnológico (CDT).

Dado el escenario de pandemia, en esta oportunidad, en un formato virtual, participarán expositores internacionales, centrados en los temas: “La próxima normalidad en Construcción: Como la disrupción está cambiando el ecosistema más grande del mundo”, “El contexto en Nueva Zelanda y cambios recientes en regulación y política pública para el sector” y el Índice de Constructabilidad de Singapur, para finalizar con un diálogo con el público asistente en torno a los desafíos en los que que es necesario avanzar en Chile con la industrialización.

“Este año, sin duda distinto a los anteriores, realizaremos la cuarta versión de nuestro Seminario Internacional en forma diferente, no solo por ser en formato virtual, sino que podremos transmitirlo por streaming en plataformas que son de acceso global, con traducción incluida, de tal manera podamos compartir sus contenidos -literalmente- con todo el mundo”, señala Marcos Brito, gerente de Construye2025 y director del CCI.

El 4º Seminario Internacional de Construcción Industrializada se llevará a cabo el 10 de noviembre, a las 10:00 am.

Inscripciones AQUÍ.

El programa preliminar puede ser visto AQUÍ.

Consejo Directivo Construye2025: tecnología, colaboración y productividad

Mejorar la trazabilidad de los residuos, incorporar criterios de circularidad en proyectos con financiamiento público y establecer estándares de trabajo fueron parte de los desafíos planteados en el último encuentro.

Luego de la bienvenida del gerente de Construye2025, Marcos Brito, fue el presidente del Instituto de la Construcción (IC), Miguel Pérez, quien abrió el diálogo durante el Consejo Directivo número 34, para valorar el lanzamiento de la Hoja de Ruta RCD y Economía Circular en Construcción y el trabajo colaborativo entre los equipos técnicos que trabajan con una consultora externa, con apoyo directo del IC. Esto último, con el fin de establecer los aprendizajes y visualización de oportunidades que deja el COVID-19 y soluciones de corto, mediano y largo plazo para el sector. “Para este estudio disponemos de un plazo de tres meses aproximadamente”, acotó el presidente del IC, que también expresó su confianza en que los logros del Construye 2025, contribuirán a mejorar la calidad y sustentabilidad de las construcciones.

Enseguida, Helen Ipinza, sectorialista Construcción y Economía Circular de la Gerencia de Capacidades Tecnológicas de Corfo, destacó el rol del IC como entidad gestora. “La Corfo tiene puesta grandes expectativas en el Instituto: apalancar recursos desde el sector privado para seguir funcionando de forma exitosa, instalando los temas de punta y haciendo realidad las tendencias mundiales”, dijo.

En la primera etapa del encuentro, Marcos Brito, aprovechó de dar la bienvenida a dos nuevos representantes del Colegio de Ingenieros, en reemplazo del fallecido ingeniero René Lagos: Sergio Contreras, director del Instituto de la Construcción, y Juan Carlos Gutiérrez, director ejecutivo del Instituto Chileno del Acero y representante de Chile en la Asociación Latinoamericana del Acero.

El balance del programa

El equipo de Construye2025 dio cuenta algunos de los logros alcanzados este año: el lanzamiento de la hoja de ruta de residuos de construcción y demolición, y economía circular; la creación de un Comité Gestor de Investigación y Desarrollo; y el acuerdo de entendimiento para la Estrategia de Economía Circular con la Cámara Chilena de la Construcción, el Instituto de la Construcción, que contará con el trabajo de la Corporación de Desarrollo Tecnológico (CDT).

Luego, la secretaria ejecutiva del Consejo de Construcción Industrializada (CCI), Katherine Martínez, se refirió a la fuerza que ha tomado la entidad en los últimos meses, en que se han sumado muchos socios. “En julio, agosto y septiembre, se nos sumó un tercio de los socios actuales, así que fue un crecimiento bastante importante que creemos que responde a la necesidad de las empresas en incorporar más industrialización y conocer cuáles son los sistemas constructivos disponibles a propósito de la pandemia”, afirmó.

Además, la secretaria ejecutiva del CCI, contó los avances alcanzados con el Ministerio de Obras Públicas, para incluir elementos prefabricados e industrialización en los proyectos. Actualmente, el Consejo trabaja con grupos técnicos tales como: uno destinado a definir indicadores para medir la industrialización; otro de brechas y normativa, que está generando un anteproyecto de norma de industrialización con la secretaría técnica del Instituto de la Construcción; y otro que conecta el trabajo del BIM FORUM y el CCI en el tema de BIM para la industrialización robótica, establece estándares de trabajo común.

  Posteriormente, la directora ejecutiva de Planbim, Carolina Soto, se refirió a la nueva plataforma de learning enfocada en metodología BIM, con un curso gratuito que estará abierto por un año, con mil cupos mensuales. “Nos metemos full en cómo aplicar el estándar, cómo se construyen los requerimientos de información o los términos de referencia de un proyecto, o cómo responder a esos términos de referencia si se está participando en un proyecto público por ejemplo, en el cual se está pidiendo BIM acorde con el estándar BIM para proyectos públicos, así que quería poner eso aquí, los dejamos a todos invitados”, detalló.

Después, la coordinadora de Sustentabilidad de Construye2025, Alejandra Tapia, abordó las metas que tienen que ver con la infraestructura para la valorización y las licitaciones públicas: “que incorporen criterios de circularidad, el porcentaje -al igual que otros países- el tema del porcentaje de reciclaje, etc., y la trazabilidad, también con herramientas para gestionar los pasivos ambientales”, afirmó.

Además, Alejandra Tapia mencionó el reglamento sanitario para el manejo de RCD desarrollado gracias al trabajo de la mesa pública, pero liderado por el Ministerio de Salud. “Vamos a hacer pronto una reunión para tener feedback de la industria sobre este reglamento, ya que también define temas de las plantas de valorización. Estamos viendo también mesas de trabajo con el MOP, en medioambiente una normativa con auditoría interna en demolición, el capital humano con MINVU, la consultoría nuestra que tiene que ver con los modelos de negocio y también comenzamos a conversar con el Ministerio de desarrollo social para incorporar criterios de circularidad en proyectos con financiamiento público”, detalló.

Finalmente, Ignacio Peña, profesional de apoyo de Construye2025, detalló el trabajo del Comité gestor I+D, constituido por CIPYCS, el Centro Tecnológico de la Construcción, el IDIEM, el Centro de Innovación en Madera de la UC, Innova Chile y Brinca. “Queremos diagnosticar lo bueno y lo malo de los proyectos ya ejecutados, empezar a hacer una ruta de los desafíos y sobre todo empezar a alinear las distintas estrategias”, dijo. Además, Ignacio Peña, recordó que en septiembre se lanzó el Centro Tecnológico de las Industrias Creativas, que trabaja con realidad virtual y con el cual se está trabajando en conjunto. 

Finalmente, algunas de las metas proyectadas a 2022 son: contar con una planta de áridos reciclados, incorporar la economía circular en las áreas de formación académica y fortalecer el trabajo con Planbim y los centros tecnológicos. 

Reducción por diseño: eliminación de residuos y potenciales de proyecto 

En un taller de la Escuela de Arquitectura UC, un grupo de tesistas investigó los potenciales proyectuales de la reducción de residuos en edificios, considerando las etapas de construcción, ocupación y demolición. En él vieron que la independencia total de las capas constructivas evita una generación de residuos innecesarios, entre otras conclusiones.

El sector construcción es el mayor generador de residuos, con una participación que varía entre el 23% y el 34% en el período 2000-2009 respecto al total de residuos generados por el país (fig. 1), unas 5.7 millones de toneladas de las 16.9 millones de toneladas generadas en total (Conama, 2010).

Figura 1. “Producción de residuos por sector”. En base a MMA, 2012. Cap. 3: Residuos.

Al mismo tiempo, en la tríada Reducción, Reutilización y Reciclaje de materiales, componentes y residuos de la construcción, la prioridad conceptual de las estrategias de Reducción y Reutilización se ve opacada por el predominio de las estrategias de Reciclaje, tanto en la investigación académica como en la práctica (fig. 2). Sin embargo, dentro del proceso de producción es la etapa de diseño la que permite abordar la reducción de residuos de la manera más integral, considerando todas las etapas del ciclo de vida. 

Figura 2. Jerarquía de procesos de Prevención de Residuos 

La lógica misma de la construcción ofrece un abanico lo bastante amplio de alternativas que van desde la recuperación de barrios y la reutilización de edificios en desuso, la recuperación de ruinas, hasta el reciclaje de materiales o escombros para ser incorporados nuevamente en un ciclo de producción de materiales de construcción.

En el Taller de Investigación y Proyecto “Reducción por Diseño: Eliminación de Residuos y Potenciales de Proyecto”, un grupo de tesistas del Magister en Arquitectura Sustentable y Energía (MASE) de la Escuela de Arquitectura UC, supervisados por los profesores Renato D’Alençon y Macarena Burdiles, investigaron los potenciales proyectuales de la reducción de residuos en edificios considerando las etapas de construcción, ocupación y demolición. Los conceptos de economía circular y las herramientas de análisis de ciclo de vida fueron el marco conceptual en la investigación y en la elaboración de una propuesta de proyecto, para definir estrategias, evaluar el desempeño y elaborar el diseño. El grupo de tesistas estuvo integrado por Marjorie Barros, Keren Codriansky, Luciano Lizana, Andrea Pérez candidatos a Título de Arquitecto y Grado de Magíster, y Elizabeth Zegarra candidata a Grado de Magíster.

Los trabajos investigaron la correspondencia de las estrategias de Reducción de Residuos de la Construcción y la etapa de Diseño Arquitectónico como concepto central para discutir críticamente y elaborar proyectualmente el rol de la arquitectura en este escenario, considerando todas las etapas que componen el ciclo de vida: diseño, construcción, ocupación y desmantelamiento.

La investigación “Flexibilidad y Deconstrucción para la Reducción de Residuos de Construcción: Capas Constructivas de los Sistemas en Madera” de Keren Codriansky apuntó a estudiar el impacto que tiene el diseño de un proyecto de arquitectura a partir de su sistema constructivo en la generación de residuos, analizado dentro de una escala temporal.

El estudio analiza el impacto que tienen los diferentes ciclos de vida de las capas constructivas de un edificio y su relación con la generación de residuos en todas las etapas de su existencia: construcción, uso y demolición para sistemas constructivos en madera. Con este objetivo, se cubican los residuos generados en cada etapa del edificio de un modelo base, diseñado según parámetros estándares de construcción en madera, analizando las capas que mayor cantidad producen y las causas de esta problemática, que incluyen uniones, durabilidad material, interferencia de ciclos de vida, entre otros.

Las conclusiones apuntan a que la independencia total de las capas constructivas evita una generación de residuos innecesarios, aumentando la flexibilidad de la construcción tanto estructural como programática, prolongando los ciclos de vida de sus partes y piezas, y permitiendo el desarmado parcial o total de la construcción.

La investigación “DECONSTRUCCIÓN Y REUTILIZACIÓN DEL PATRIMONIO INDUSTRIAL: Diseño de módulos de albañilería para reutilización off-site en Nuevo Barrio Yungay” de Andrea Pérez explora los límites de la reutilización material en edificios existentes con riesgo de demolición con el fin de reducir los residuos generados en la construcción, buscando mediante diferentes prototipos de deconstrucción incluir su material dentro de una economía circular y rescatando no solamente el material, sino que también la comprensión de técnicas pasadas para poder preservarlas.

Específicamente se analiza la deconstrucción del patrimonio industrial en torno al Ex Ferrocarril Circunvalación Santiago, mediante el diseño de prototipos de desmantelamiento en un sistema constructivo de albañilería confinada.

La investigación explora diferentes hipótesis de desmontaje y prototipos para el desmantelamiento de edificios industriales, buscando la posibilidad de diseñar módulos de fácil montaje y desmontaje, y la aplicación de estos módulos en la rehabilitación de otros edificios existentes, con el fin de rescatar patrimonio industrial de alto valor local y poner en práctica el uso de los prototipos propuestos para diferente aplicaciones: muros exteriores, divisiones internas y fachada.

Innovación en el diseño de espacios educativos

Por Maureen Trebilcock, arquitecta, académica Universidad del Bío-Bío

La gran mayoría de los establecimientos educacionales se ha limitado a replicar el esquema clásico que consiste en varias aulas repetidas y conectadas por un pasillo monótono. La organización interior del aula, en la gran mayoría de los casos, promueve que el profesor sea la fuente primaria de la información en base a un sistema de instrucción. Los tiempos actuales indican que el método de enseñanza-aprendizaje debiese estar centrado en el/la estudiante, donde el/la profesor/a cumple un rol de guía y mediación. Así, los estudiantes asumen un rol activo que les permite aprender a través de diferentes modalidades de aprendizaje, tales como desarrollo de proyectos, aprendizaje colaborativo, juego y movimiento, aprendizaje socioemocional, entre otras. De esta manera, el espacio educativo como mediador entre las prácticas docentes y el aprendizaje de los estudiantes tiene un gran potencial para desarrollar habilidades creativas e innovadoras en los estudiantes, estimulando la participación activa, el encuentro y la comunicación. El entorno físico de los establecimientos educacionales influye y modela el aprendizaje de los estudiantes, constituyéndose en un tercer profesor.

Con la idea de proponer nuevos espacios educativos que reflejen estos cambios de paradigmas en la educación, la Universidad del Bío-Bío está desarrollando un proyecto de innovación regional denominado “FutureEduSpace: Generación de Capacidades Tecnológicas para la Construcción de Espacios Educativos Escolares Vanguardistas y Sustentables desde la Región del Biobío” financiado por el Fondo de Innovación para la Competitividad Regional FIC-R del Gobierno Regional del Biobío. El proyecto tiene por objetivo mejorar la calidad de la infraestructura escolar través de la implementación de espacios educativos vanguardistas, creativos, confortables y sustentables que propicien la innovación pedagógica y contribuyan a mejorar la calidad de la educación, y al mismo tiempo, impulsen la creación de un polo industrial especializado en diseño, construcción e industrialización que satisfaga esta nueva demanda desde la región del Biobío para el sur del país. 

El principal desafío del proyecto es diseñar y construir un prototipo de espacio educativo que cumplirá un rol demostrativo y de transferencia tecnológica a oficinas de arquitectura y diseño, a constructoras y a pymes, para promover el desarrollo de espacios educativos sustentables y confortables en madera. Una vez concluidos los 24 meses de este proyecto FIC, se espera que el prototipo cumpla también un rol para la capacitación de profesores, que permita explorar el efecto que un ambiente innovador cumple en el aprendizaje. Como resultado de esta propuesta se pondrá a disposición, como bien público, un paquete tecnológico compuesto por un manual de diseño y construcción de espacios educativos, especificaciones técnicas, cursos de capacitación, así como la implementación del prototipo demostrativo. 

El equipo interdisciplinario que lleva adelante esta propuesta está liderado por la arquitecta M. Beatriz Piderit y coordinado por la arquitecta Maureen Trebilcock, donde también participan educadores, ingenieros, diseñadores, antropólogos y arquitectos. La propuesta se apoya en las capacidades instaladas en el Centro de Investigación en Tecnologías de la Construcción CITEC UBB y del Centro Tecnológico para la Producción y Construcción Sustentable CIPYCS. La asociatividad es un componente esencial de este proyecto, para lo cual se conformó un Comité Técnico Asesor, en el cual participa el programa Construye 2025, junto con organizaciones representantes de los sectores educación, arquitectura, diseño, construcción y manufactura. 

Quedan pocos días para el cierre de la Convocatoria al instrumento “Consolida y Expande de Reactivación Sostenible”

Quedan pocos días para el cierre de la Convocatoria al instrumento “Consolida y Expande de Reactivación Sostenible” con el que Corfo busca apoyar el escalamiento nacional e internacional, a nivel comercial y/o industrial, y la validación y empaquetamiento en los mercados de destino, de un Producto Tecnológico Comercializable, las cuales esperan generar impactos sociales y/o medioambientales positivos.

En este contexto, acá hay algunos tips que creemos te pueden interesar:

· Webinar de Consolida y Expande Innovación: Reactivación Sostenible

En esta charla compartimos consejos y otros antecedentes para que tengas una postulación exitosa al instrumento Consolida y Expande Innovación Reactivación Sostenible.

Puedes acceder a la charla haciendo click aquí.

Recuerda que si tienes dudas particulares de tu postulación puedes escribir a innovacion@corfo.cl , estaremos atentos a las consultas que puedas tener en el proceso.

Además, están disponibles las grabaciones de nuestro ciclo de talleres de formulación en donde se entregan tips para reforzar distintos aspectos de tus proyectos:

· Problema y solución: Las bases de una idea de negocio

En esta charla se busca dar a conocer tips para identificar una problemática relevante y desde ésta plantear una solución coherente y proporcional. Puedes acceder a la charla haciendo click aquí.

· Modelo de negocios para postulantes

En esta charla se busca dar a conocer a las empresas la importancia de un modelo de negocios al momento de postular. Puedes acceder a la charla haciendo click aquí.

· Coherencia en la postulación

En esta charla se busca dar a conocer elementos generales mínimos que se requieren para que un proyecto sea coherente. Puedes acceder a la charla haciendo click aquí.

· Tips para Presupuesto

En esta charla se busca dar a conocer elementos generales y tips para poder elaborar presupuestos coherentes y robustos en las formulaciones. Puedes acceder a la charla haciendo click aquí.

Recuerda que para este instrumento la Convocatoria cierra el 4 de noviembre a las 12:00 hrs.

Los pilares en la sustentabilidad del Hospital Quillota Petorca

Losas prefabricadas, además de montaje en talleres de materiales enviados desde distintos puntos de Chile y el extranjero -como ventanas, puertas, fachadas y ductos de climatización- contribuyeron a que el proyecto se precertificara y dejar en alto su compromiso con la sustentabilidad.

Con la asesoría de B-Green y la evaluación del IDIEM de la Universidad de Chile, el nuevo Hospital Biprovincial Quillota Petorca logró un significativo cambio en la infraestructura sanitaria y, por supuesto, la precertificación CES (Certificación Edificio Sustentable). Esta mega obra hospitalaria, mandatada por el Servicio de Salud Viña del Mar Quillota y ejecutada por el Ministerio de Obras Públicas, quintuplica la superficie del Hospital San Martín de Quillota y está prácticamente listo, pues, según el equipo de Sacyr Ingeniería e Infraestructuras Chile, presenta un 98% de avance.

¿Cómo se llevó a cabo el proceso constructivo del establecimiento? Sacyr presentó su oferta de proyecto y construcción en el último trimestre de 2016, la que fue adjudicada y, luego, se firmó el acta que daba comienzo al contrato el 23 de enero de 2017, entregándose el terreno el 3 de marzo de 2017, para empezar la construcción en julio de 2017.

Para el proyecto, Sacyr creó el Consorcio Hospital Biprovincial Quillota Petorca, formado por SACYR y SOMAGUE INFRAESTRUCTURAS, el cual aportó la mayor parte del personal de la obra, organizado en 14 departamentos diferentes. Producción se organizó en cuatro equipos, uno para cada uno de los tres edificios diferenciados: TH o Torre de Hospitalización, el UPC o Unidad del Paciente Crítico y el CDT o Centro de Diagnóstico y Tratamiento, además de un cuarto equipo para los trabajos exteriores y de urbanización, además de las medidas de mitigación del EISTU (Estudio de Impacto sobre el Sistema de Transporte Urbano).

En estos más de tres años, las obras de construcción se vieron obstaculizadas por diversas situaciones, como un hallazgo arqueológico y la pandemia por COVID-19. Sin embargo, ya solo están pendientes unidades de remates, pruebas de instalaciones, manuales y capacitación.

Mucha industrialización

“La obra presenta un grado de industrialización muy alto, empezando por las losas prefabricadas que se usaron en la obra gruesa y, en general, por el montaje en talleres de materiales que se enviaban desde distintos puntos de Chile y del extranjero: ventanas, puertas, fachadas, ductos de climatización, mamparas se montaban en el extranjero y se traían a obra para ser instalados, o se premontaban y se traían a obra para ensamblarlos en talleres e instalarlos directamente como producto terminado”, explican en Sacyr Ingeniería e Infraestructuras Chile.

Otro de los aspectos llamativos de esta gran obra hospitalaria es el estricto cumplimiento a la normativa de gestión de residuos, dispuesto en la RCA (Resolución de Calificación Ambiental) del proyecto. “A través del Departamento de Medio Ambiente del Consorcio se han llevado a cabo estrategias internas de clasificación de residuos, más allá de las exigencias normativas. Todos los residuos que salen de la obra son separados y catalogados, para ser conducidos a vertederos autorizados y plantas de tratamiento y valorización”, detallan los especialistas de Sacyr.

Hospital Quillota Petorca en cifras

  • 551 estacionamientos
  • 282 camas
  • 24 salas de procedimientos
  • 15 cupos de diálisis
  • 9 pabellones
  • 9 boxes de Unidad de Emergencia
  • 8 boxes odontológicos
  • 6 pisos, un subterráneo y un nivel terraza con acceso a helipuerto
  • 3 salas de parto integral
  • 1 multicancha

Fuente: CES

Alejandra Tapia: “No estamos acostumbrados a visibilizar cómo nuestro quehacer impacta a otros y al medioambiente”

Para la coordinadora de Sustentabilidad de Construye2025 el actual modelo económico no resiste más y se hace urgente desacoplar el crecimiento económico mediante una economía baja en carbono y eficiente en el uso de recursos, mejorando el bienestar del ser humano y la equidad social, y al mismo tiempo reducir el impacto planetario de sus actividades.

A nivel global, la industria de la construcción utiliza un 40% de los recursos naturales, consume el 40% de la energía y emite el 40% de los Gases de Efecto Invernadero (GEI) en su ciclo completo, al tiempo que genera sobre el 30% de los residuos sólidos -en Chile esta cifra llega a 35%-, siendo esto último el principal problema ambiental generado por el sector.

Para enfrentar este problema, el programa Construye2025 -impulsado por Corfo- elaboró una Hoja de Ruta RCD y Economía Circular en Construcción, junto a los ministerios de Vivienda y Urbanismo, Medio Ambiente y Obras Públicas, la que fue lanzada en agosto tras dos intensos años de trabajo y la participación de distintos actores del mundo público, privado y la academia.

Conversamos con Alejandra Tapia, coordinadora de Sustentabilidad de Construye2025, sobre el propósito de esta iniciativa, la experiencia de coordinar a tantos actores, los avances logrados hasta la fecha y cuál será su aporte en la ansiada economía circular que busca la industria.

 

¿Cómo fue la experiencia de generar esta Hoja de Ruta y cuáles fueron los principales aprendizajes durante el proceso?

El trabajo colaborativo es muy importante y, sin duda, la inteligencia colectiva, donde muchos piensan para identificar los problemas y buscar soluciones, permite trabajar desde distintos puntos de vista y disciplinas, y esto, genera una mayor riqueza en las soluciones, sinergias y compromisos para la implementación de iniciativas.

Los principales aprendizajes se relacionan con los esfuerzos para tomar compromisos concretos, escuchar y visibilizar al otro, reconocer su experiencia e integrar las distintas acciones.  Si bien siempre existió un alto compromiso de parte de todos los participantes, el adquirir compromisos institucionales fue uno de los objetivos más difíciles de lograr, así como el posicionamiento de la temática con las autoridades y otras divisiones dentro de los ministerios. Esto, debido a que estamos acostumbrados a trabajar en silos, compartimentos independientes, y desconocemos o no nos interesamos por lo que están haciendo otros.

¿Cuáles son las principales brechas que dificultan hoy una gestión sustentable de recursos y residuos en la construcción?

Las principales brechas en gestión de residuos se deben a un cambio cultural en la forma de pensar y hacer las cosas. Esto involucra a toda la cadena, desde el marco regulatorio y fomento hasta las competencias profesionales y técnicas para la reducción de extracción de recursos, despilfarro, y la gestión de los residuos en obra.

En un taller de co-creación de soluciones en la Asociación de Oficinas de Arquitectos, un importante arquitecto dijo “generalmente diseñamos y construimos hasta la línea de edificación y no pensamos qué pasará con lo que se desecha desde la obra”. Esto refleja claramente, que no estamos acostumbrados a visibilizar cómo nuestro quehacer impacta a otros y al medioambiente. En cuanto al cierre de brechas relacionadas al marco regulatorio, actualmente, se está trabajando en un reglamento para el manejo sanitario de los residuos de la construcción y demolición, el que define aspectos básicos para su plan de gestión, desde su generación hasta los requisitos para instalaciones de valorización y disposición final. Este reglamento ha sido liderado por el Ministerio de Salud quien ha trabajado en una mesa pública con los ministerios de Medio Ambiente, Vivienda y Urbanismo, Obras Públicas, Subdere y Construye2025.

¿Cuáles son los ejes y metas concretas de esta Hoja de Ruta?

Se definieron  cinco ejes estratégicos que impulsan la economía circular en construcción: el ordenamiento y planificación sustentable del territorio; la coordinación y articulación pública; ecosistemas y cadenas de valor sustentables y circulares; la necesidad de desarrollar y fortalecer plataformas de datos que entreguen información para el diseño de políticas públicas y creación de nuevos mercados en torno a la economía circular; y la remediación ambiental para los impactos resultantes de la extracción de áridos y disposición inadecuada de los residuos de construcción y demolición (RCD).  En cuanto a las metas, éstas se plantean al 2025 y 2035, algunas de las destacadas son:

EJE 1 – META 2035: El ordenamiento y la planificación del territorio consideran el crecimiento de la edificación e infraestructura y los impactos que genera su construcción, estableciendo instrumentos que fomentan la economía circular y uso eficiente de los recursos en las actividades productivas que se llevan a cabo en la región.

EJE 2 – META 2035: El 50% de la edificación e infraestructura pública nueva de Chile cuenta con criterios y atributos circulares, acreditados a través de certificaciones.

EJE 3 – META 2035: A nivel nacional, el 40% de la oferta de materiales, productos, piezas y componentes para la construcción cuenta con atributos circulares.

EJE 4 – META 2035: El país cuenta con plataformas de trazabilidad de materiales y residuos para la economía circular del sector construcción.

EJE 5 – META 2035: El país cuenta con programas a nivel regional para la remediación, restauración y mitigación de los riesgos generados por la extracción ilegal de áridos y disposición inadecuada de RCD.

¿Por qué la economía circular juega un rol tan relevante para lograr una transformación real en la industria de la construcción?  ¿Cómo lograr que todos los actores de este sector estén convencidos de seguir este camino?

El actual modelo económico no resiste más, no solo desde el punto de vista de la disponibilidad de recursos, sino que también desde el bienestar del ser humano y la equidad social. No es posible que el modelo económico beneficie solo a unos pocos, no solo económicamente, sino que también en desmedro de la calidad de vida de otros, a partir del deterioro del medio ambiente y la inequidad que conlleva todo esto en el ámbito territorial. A raíz de esto, surge la necesidad de desacoplar el crecimiento económico mediante una economía baja en carbono y eficiente en el uso de recursos, mejorando el bienestar del ser humano y la equidad social, y al mismo tiempo reducir el impacto planetario de sus actividades.

Es perentorio avanzar hacia un modelo de economía circular, considerando los desafíos globales vinculados a la disponibilidad de materias primas, agua y energía, movilizar a las empresas hacia un cambio de paradigma, en el que la economía circular y la innovación son una clara oportunidad de creación de valor para adaptarse a los nuevos contextos y exigencias de comunidades más conscientes de su entorno.

¿Qué implicancias tiene esta transformación hacia una economía circular en términos de capital humano?

En la hoja de ruta, en el eje 3 se plantea una serie de acciones conducentes a habilitar el capital humano, por ejemplo, fomentar la economía circular en la formación profesional, técnica y oficios de la cadena de valor, y ecosistema, y la difusión de buenas prácticas. La formación de capital humano puede desempeñar un papel fundamental, al preparar a los futuros profesionales para un nuevo paradigma económico, especialmente para crear la base de competencias que impulsen la innovación circular.

¿Qué oportunidades trae este cambio de paradigma para emprendedores y startups de la industria de la construcción?

La economía circular es un modelo económico que plantea nuevos modelos de negocio a partir de tres principios (Fundación Ellen McArthur 2015), que en síntesis corresponden a preservar y mejorar el capital natural, es decir reducir la extracción de materiales vírgenes; optimizar el rendimiento de los productos, dándole la mayor duración y usos posibles; y diseñar las externalidades negativas de manera de reducirlas, como el cambio climático y efectos dañinos para la salud de las personas.

Bajo este nuevo paradigma, existen muchas posibilidades de innovación para emprendedores y startups, desafíos para formular nuevos modelos de negocios que consideren estos principios, así como la creación de plataformas, tecnologías y la transformación digital para el desarrollo de la economía circular.

¿Cómo proyectas la industria de la construcción en los próximos 10 años?

Sin duda, mi anhelo es un sector de la construcción más sustentable y circular, pero esto no pasa solo por las edificaciones e infraestructura, tiene que ver con una cultura que considera que mi comportamiento y entender que el cómo hago las cosas también impacta en los demás.

Ser responsables de los impactos de nuestras actividades y empatizar, es parte del comienzo. Espero que en 10 años más se haya repensado el diseño y construcción de nuestros edificios e infraestructura, de tal manera de haber reducido la extracción de recursos, que su duración y utilidad sea el mayor tiempo posible, alargando la vida de materiales y haciendo recircular los recursos.

Fuente: Masisa LAB

41 proyectos ya iniciaron el proceso para obtener la Certificación de Vivienda Sustentable

Gran interés ha generado en los desarrolladores inmobiliarios la Certificación de Vivienda Sustentable (CVS), lanzada en mayo por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu), con el propósito de poner a disposición de la industria de la construcción una herramienta que permita elevar los estándares constructivos de la vivienda residencial en Chile.

Si bien hay múltiples certificaciones internacionales consolidadas en el mercado, existía una necesidad por contar con un modelo nacional enfocado exclusivamente en las construcciones residenciales, que permitiera reflejar las distintas realidades constructivas, climáticas y contextos de la industria chilena a lo largo del territorio.

En palabras de Erwin Navarrete, jefe de la División Técnica de Estudio y Fomento Habitacional del Minvu, la CVS es un paso crucial en materia de sustentabilidad en la construcción pues “gracias la colaboración de importantes actores del sector, hemos logrado implementar una herramienta que permitirá evaluar la sostenibilidad de lo construido y que nos pone en una posición de liderazgo en estas materias en Latinoamérica. Seguiremos trabajando porque los beneficios de la sustentabilidad lleguen a todos los sectores, en especial a los más vulnerables, pues es un buen camino para mejorar su calidad de vida”.

Actualmente la CVS cuenta con 41 proyectos registrados, tanto para precertificación como certificación, alcanzando con ello una cobertura de 462.626 m2 a lo largo de Chile. Las viviendas registradas en www.cvschile.cl están, principalmente, emplazadas en la Región Metropolitana, sin embargo, hay que destacar el trabajo desarrollado por el resto de las regiones, las que están fuertemente comprometidas por sumar más proyectos. Tal es el caso de la Región de los Lagos, que es la segunda zona con más proyectos inscritos, seguida por la Región de La Araucanía. En cuanto a las características de los proyectos, un 92% de ellos son viviendas en extensión y altura, y un 8% corresponde a viviendas unifamiliares.

Goycolea 100, de Inmobiliaria Tarragona, ubicado en la Comuna de La Cisterna, se convirtió en el primer proyecto en precertificarse, alcanzando la categoría más alta del sistema, correspondiente al nivel sobresaliente. Gracias a las estrategias de sustentabilidad implementadas por Inmobiliaria Tarragona, en términos de eficiencia energética e hídrica, entre otros aspectos, el proyecto logra un ahorro promedio de un dividendo al año, el cual va en directo beneficio del usuario final.

Para Natalia Reyes, Jefa de Sustentabilidad del Centro Tecnológico para la Innovación en la Construcción, entidad que está a cargo de la administración de la certificación “desde nuestras labores de administración del sistema hemos podido constatar el gran interés que ha suscitado la Certificación de Vivienda Sustentable, tanto a nivel de profesionales consultores en sustentabilidad y eficiencia energética, como entre los desarrolladores inmobiliarios. Es así como a la fecha, ya se cuenta con 142 profesionales acreditados como Asesores CVS y hemos visto entre los desarrolladores, que además de poner en valor los atributos sustentables de sus proyectos, buscan insertar el pilar de la sustentabilidad a nivel integral en sus propias operaciones”.

Gracias a herramientas como la CVS, se incentiva al mercado inmobiliario a redoblar sus esfuerzos para avanzar hacia un modelo más sustentable y amigable con el medioambiente y, de esta manera, movilizar, tanto la oferta como la demanda por este tipo de construcciones.

Fernando Colchero, Asesor de la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios de Chile (ADI) e integrante del Comité Directivo de la CVS complementa “la creación de la CVS constituye un hito relevante en el camino para profundizar la penetración de la sustentabilidad en proyectos de vivienda. La CVS permite al comprador tomar una decisión más informada respecto al nivel de sustentabilidad de su vivienda, así como también, permite al desarrollador planificar de forma más precisa cuáles son las medidas de sustentabilidad que permiten alcanzar cada nivel de certificación”.

Desafío de los próximos años

Para complementar y potenciar todas las iniciativas que se están desarrollando para incorporar estrategias de sustentabilidad en el mercado inmobiliario nacional, es indispensable contar con instrumentos de fomento para promover este tipo de iniciativas. Tal es el caso de Banco Estado, que recientemente lanzó su plataforma “Mundo Verde”, la que agrupa, tanto a productos de inversión, como de financiamiento, cuyo objetivo es apoyar la reactivación económica de forma sostenible. Entre estos productos se destaca el crédito hipotecario denominado Ecovivienda, que consiste en un préstamo destinado a la adquisición de viviendas nuevas que cuenten con calificación energética con letra D o superior (A-B-C). Este dispondrá de una tasa del 1,79% anual, con un financiamiento del 80% y a 20 años plazo.

Beneficios para el desarrollador

Una vivienda con atributos de sustentabilidad, según la experiencia internacional, aporta un gran valor al activo inmobiliario desde el punto de vista de su comercialización. Junto con mejorar la imagen de la empresa posicionándola como un actor preocupado por los actuales desafíos medioambientales que enfrenta la sociedad y demuestra un uso eficiente de los recursos, tanto en su construcción como posterior operación.

Beneficios para el usuario

La CVS permite al usuario mejorar su calidad de vida, pues transparenta la información sobre el estándar de una vivienda en términos de habitabilidad, confort interior, gasto de energía y agua. Contar con viviendas certificadas permite aportar al cuidado del medioambiente, ya que en éstas se han utilizado métodos y materiales amigables con el entorno, lo que reduce la huella de carbono de la vivienda.

Acerca de la Certificación de Vivienda Sustentable

Cabe recordar que la CVS es una herramienta que evalúa y valora, de manera objetiva, el estándar de viviendas en etapa de diseño y construcción, considerando criterios ambientales, sociales y económicos. A través de esta certificación es posible evaluar la correcta implementación de más de setenta estrategias o requerimientos de sustentabilidad, las cuales se encuentran agrupadas en seis categorías: salud y bienestar, energía, agua, materiales y residuos, impacto ambiental y entorno inmediato.

La CVS cuenta con dos etapas de certificación; por un lado, está la Precertificación, la cual se puede obtener en la fase de diseño, una vez que se ha obtenido el respectivo permiso de edificación, con el propósito de que el proyecto pueda comercializarse dando a conocer este atributo. Por otro lado, está la Certificación, la cual se obtiene luego de la recepción final de las obras, pues esta evalúa el proyecto ya construido.  Y por otra parte, la CVS cuenta con tres niveles de certificación denominados el más básico es “Vivienda Sustentable certificada”, el segundo nivel es “Vivienda sustentable destacada” y el tercer nivel y el más exigente es “Vivienda Sustentable Sobresaliente” según el puntaje que acumula el proyecto en el cumplimiento de los requerimientos de la certificación.

Su creación y desarrollo ha sido liderado por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo, con apoyo de los ministerios de Energía y del Medio Ambiente, además de la colaboración del Colegio de Arquitectos, la Asociación de Oficinas de Arquitectura, el Instituto de la Construcción, la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios, la Corporación de Desarrollo Tecnológico, la Cámara Chilena de la Construcción y el Centro Tecnológico para la Innovación en la Construcción, entre otras entidades públicas y privadas. Esta última institución, será la encargada de administrar el sistema, durante los próximos diez años.

Con la reactivación es el momento de la industrialización

La revista Negocio&Construcción conversó con distintos socios y patrocinadores del Consejo de Construcción Industrializada, impulsado por Construye2025, sobre lo que pensaban respecto a la reactivación y el aporte que la industrialización va a generar en el rubro de la construcción.

Puedes leer sus opiniones AQUÍ.

Las brechas que aún debemos resolver

Si bien el confinamiento nos ha obligado a trabajar de manera remota, desde nuestras casas, con mucho apoyo de plataformas digitales, la gestión de nuestro plan de acción ha sido exitosa, por cuanto hemos podido ganar una cierta agilidad en los procesos de coordinación, reunión y seguimiento de compromisos, al disminuir tiempos de traslados y la coordinación de reuniones presenciales.

Por otra parte, este contexto nos ha impuesto diversos y grandes desafíos, especialmente desde la productividad y sustentabilidad, que son los dos grandes objetivos estratégicos de Construye2025.

Mira la columna de opinión de Marcos Brito, gerente de Construye2025, en la revista Negocio&Construcción AQUÍ.

Encuentro: Tecnologías digitales en la industria de la construcción

Manejo de realidad virtual, drones, internet de las cosas (IoT) y big data, no son solo el futuro, sino que son tecnologías que están siendo ocupadas en la actualidad por inmobiliarias y constructoras chilenas en proyectos en nuestro país.

Son esos los temas que abordaremos en un nuevo Encuentro de Industria de Chilecreativo, en alianza con el programa Construye2025, impulsado por Corfo.

Conversaremos con Agustín Soto (gerente de Innovación de Territoria) y Julio Barrales (gerente comercial y socio de DRS Ingeniería y Gestión) sobre la incorporación de nuevas tecnologías digitales en el sector de la construcción y su intersección con empresas y profesionales de las industrias creativas como videojuegos, arquitectura, diseño y multimedia. Veremos casos concretos de aplicaciones en proyectos de gran escala como el Mercado Urbano Tobalaba (MUT) de Territoria y la construcción del nuevo Hospital de Quellón (DRS).

Modera: Katherina Martínez, Secretaria Ejecutiva del Consejo de Construcción Industrializada.

En la actividad, se abordarán tecnologías aplicadas por oficinas que saltaron a su aplicación en obras y conoceremos qué están haciendo, cómo lo hicieron, recomendaciones y experiencias con la construcción 4.0.

Coordenadas:

Viernes 30 de octubre / 11 hrs.

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Startup que transforma los desechos de vidrio ganó el concurso Construye Futuro 2020

Con su producto sin huella de carbono, Ecomobiliario se quedó con el primer lugar del torneo de emprendimiento e innovación organizado por la Escuela de Ingeniería de la PUCV.

Más de cien postulantes, tres meses de trabajo con mentores y desarrollo de prototipos dieron forma al primer torneo de emprendimiento e innovación “Construye Futuro”, que organizó la Escuela de Ingeniería en Construcción de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV). Seis grupos llegaron a la fase final -en la que Ignacio Peña, profesional de apoyo de Construye2025 fue parte del jurado-, con desafíos ligados a la transformación digital y la economía circular, en la que Ecomobiliario resultó ganador.

El equipo liderado por Sebastián Quiroz creó un nuevo material de construcción con fragmentos de botellas de vidrio, gracias a investigaciones y ensayos de laboratorio, logrando que fuera resistente, duradero, amigable con el medio ambiente y de alto impacto. “Puede ser utilizado en mezclas de hormigón y morteros para reparaciones en muros, revestimientos, rellenos, drenajes pero también en la fabricación de bancas, basureros, escaños y macetas”, explicó el estudiante de ingeniería en construcción de la PUCV. 

La ventaja comparativa de Ecomobiliario, frente a otros productos similares, es que la materia prima es donada por las personas, a través de un programa de recolección de botellas, siguiendo así con los lineamientos de la construcción sustentable y economía circular. 

El segundo lugar del concurso fue para Edgardo Aguilera y Felipe Madariaga con su sistema de construcción expansivo, que busca solucionar el exceso de desechos que deja la construcción. Su diseño modular elaborado con 70% madera y 30% de polipropileno reciclado implica un ahorro de 30% en los costos de construcción, diseño modular para mayor rapidez de montaje y mayor resistencia al fuego, humedad y termitas. 

El tercer lugar fue para Upcycling que, según su cofundador, Ignacio Narvaez, combina residuos plásticos y diseño con un modelo de gestión con compromiso de compra de ecotiles para mejorar la reputación de las empresas, bajar los costos totales y aumentar la tasa de revalorización de residuos y diseño. 

Finalmente, el cuarto puesto fue para Blyke, proyecto presentado por Franco Ovalle, que ofrece una plataforma para el estacionamiento de bicicletas, donde la llave es el propio celular. Este modelo se adapta a los espacios públicos para llevar la tecnología a otras ciudades con menos costos de administración. 

Normativa de construcción industrializada permitirá importantes avances en el sector

El Instituto de la Construcción formó recientemente, el comité “Anteproyecto de norma industrialización”, que tendrá como misión establecer una mirada común respecto a los términos y definiciones de construcción industrializada.

Mayor productividad, precisión y optimización, aseguramiento de la calidad, disminución en los plazos de construcción y menores costos generales de una obra, son algunas de las ventajas de la construcción industrializada.

Se trata de que en una obra se usen métodos más definidos de ejecución de las actividades programadas, permitiendo un trabajo continuo, que evite los vacíos, los tiempos muertos y por ende reduzca en forma significativa las mermas y pérdidas.

“La construcción industrializada permite una mirada integral en un proyecto, comprometiendo a toda la cadena de valor, desde los que diseñan hasta los que desarrollan y ejecutan la obra”, señala Francis Pfenniger, director del Instituto de la Construcción y académico de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Chile.

Sin embargo, para que la construcción industrializada tenga un desarrollo efectivo, es fundamental contar con una normativa que establezca estándares mínimos para el funcionamiento de los sistemas constructivos.

Para ello, el Instituto de la Construcción formó recientemente, el comité “Anteproyecto de norma industrialización” que tendrá como misión establecer una mirada común respecto a los términos y definiciones de construcción industrializada.

Este trabajo surge luego de que el Consejo de Construcción Industrializada conformara, a principios de este año, el grupo técnico denominado “Brechas, Normativa y Regulación CCI”, en el que se identificó la necesidad de una norma chilena.

“Aún hay mucha confusión en el uso de los términos, por ejemplo, se confunde industrialización con prefabricación, por lo tanto, debemos trabajar para que todos estemos de acuerdo en cómo nos vamos a referir a las partes que componen una construcción industrializada”, comenta Francis Pfenniger, presidente de este comité.

Y agrega que “nuestro desafío es tener a fin de año el anteproyecto de norma terminado. Tenemos un comité extraordinariamente masivo, formado por representantes de la academia, constructoras, asociaciones, proveedores y servicios públicos, donde todos hacen muy buenos aportes”.

Sin duda que una norma es el soporte técnico de entendimiento común entre los actores que participan en la industria, por lo tanto contar con un anteproyecto de norma es fundamental para el desarrollo normativo.
“El Instituto de la Construcción es la entidad más idónea para llevar a cabo este trabajo, no solo por su experiencia en el desarrollo de documentos técnicos y su capacidad articuladora, sino también porque es una entidad transversal que reúne a la academia, los colegios profesionales, empresas privadas, asociaciones gremiales y los ministerios”, señala Francis Pfenniger.

Desafío “Ven, prueba tu tecnología y prepárate para escalar”

El Ministerio de Obras Públicas (MOP) invita al mundo privado a presentar ideas para mejorar la infraestructura pública, hasta el 16 de octubre.

La colaboración estatal con empresas y entidades con capacidades y propuestas innovadoras en la construcción de nuevas soluciones para los desafíos que hoy enfrenta la industria es lo que busca el MOP, a través del desafío “Ven, prueba tu tecnología y prepárate para innovar” de CL URBAN LAB.

Quienes asuman el reto podrán contar con una serie de facilidades por parte del ministerio, para prototipar sus promisoria soluciones. El plazo para presentar las propuestas vence el próximo viernes 16 de octubre y éstas serán recibidas en el siguiente correo:  dgop.innovacion@mop.gov.cl

CL URBAN LAB es una plataforma especializada en innovación abierta aplicada a la infraestructura pública. Sus herramientas permiten el desarrollo de modelos de gestión de alto valor para gobiernos, concesionarias de infraestructura y servicios públicos, así como para instituciones y organizaciones interesadas en mejorar la calidad de vida de las personas a través de la infraestructura vial, eléctrica, hídrica, logística y/o de telecomunicaciones.  

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