Construir un mundo sostenible requiere más mujeres ingenieras

Por Marlena Murillo Segura, vicepresidenta Red de Mujeres Ingenier@s y vicepresidenta Consejo Especialidad Civil del Colegio de Ingenieros de Chile A.G.

La sostenibilidad es representada por un mundo en paz, donde hay respeto por la diversidad, donde existe inclusividad, no existe hambre, donde cada persona tiene una educación de calidad. Y se promueven las alianzas para avanzar en un objetivo común.

Además de preservar, conservar el ecosistema, y reducir la pérdida de biodiversidad. Tenemos que dejar lo mejor para nuestras próximas generaciones.

Ahora es cuando la ingeniería es crucial para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU al 2030. Y el objetivo final es la igualdad. La ingeniería por sí misma debe ser lo más diversa posible.

Las mujeres son subrepresentadas en ingeniería, por ello se han generado soluciones de ingreso inclusivo a universidades.

El incorporar más mujeres en este campo, implica más modelos de rol para las generaciones futuras.  Y son las nuevas generaciones las motivadas a darse cuenta de que el desarrollo sostenible genera un mundo mejor. Y le da propósito a la ingeniería.

Las mujeres representan el 50% de la población mundial, por ello necesitan los mismos recursos y gestionar los mismos cambios globales. 

Sin embargo, pocas son las mujeres que están trabajando en el diseño y desarrollo de soluciones basadas en tecnología sostenible, lo que permitirá que todos podamos tener una calidad de vida mejor.

Atraer y apoyar a más mujeres en ingeniería nos beneficia a todos, incrementando el potencial para desarrollar soluciones inclusivas e innovadoras para los complejos problemas que enfrenta el planeta.

El cambio climático, el acceso a agua potable y saneamiento, energía limpia y ciudades más habitables son todos desafíos actuales que debe resolver la ingeniería. 

Y tanto en las ciudades como en zonas rurales, las mujeres son quienes soportan frecuentemente una carga mayor, lo que implica que podemos aportar perspectivas únicas para desarrollar soluciones de alto impacto.

El contratar más ingenieras puede mejorar el diseño de nuevos productos y soluciones en beneficio tanto de hombres como de mujeres. Dado que, al incorporar la mirada desde otra perspectiva, promueve y provee una solución más integral y completa.

Sin embargo, muy pocas ingenieras alcanzan posiciones de liderazgo y uno de los factores puede ser la falta de oportunidades y de apoyo para la progresión profesional. Por ello, la generación de redes en las asociaciones gremiales, en la academia, en empresas, permite tener espacios para poder analizar y debatir cómo nos apoyamos entre nosotras y cómo podemos también integrarnos y aportar en el desarrollo de nuestro país con nuestros pares hombres.

Tener más mujeres en posiciones de liderazgo, ayuda a dar visibilidad dando oportunidad a más ingenieras, además asegura el tomar decisiones ejecutivas más equitativas, inclusivas y representativas.

Si queremos albergar alguna esperanza de lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible para el año 2030, debemos aprovechar las habilidades y el talento de hombres y mujeres por igual, y esto significa trabajar continuamente para crear un entorno más propicio para que las mujeres, en el campo de la ingeniería, estudien, trabajen y prosperen. 

Las mujeres tienen una importante labor que hacer en la construcción de un mundo más igualitario. Solo necesitan las mismas oportunidades para hacerlo.

Referencias bibliográficas:

United Nations Sustainable Development – 17 Goals to Transform Our World

Measuring progress towards the Sustainable Development Goals – SDG Tracker (sdg-tracker.org)

http://ingenieria.uchile.cl/admision/admision-especial-pregrado/94355/cupos-equidad-de-genero

Construye2025 invita a sumarse a los modelos de negocios circulares

En webinar a realizarse el 24 de junio, a las 10:00 horas, el programa de Corfo dará a conocer resultados de consultoría que presenta modelos de negocios circulares para la implementación en el sector.

Los nuevos desafíos globales vinculados a la disponibilidad de materias primas, agua y energía, movilizan a las empresas hacia un cambio de paradigma, en el que la economía circular es una clara oportunidad de creación de valor, nuevos negocios y oportunidades de crecimiento económico, desacoplando la histórica dependencia de la extracción de recursos renovables y no renovables. 

Por ello, Construye2025, programa impulsado por Corfo y administrado por el Instituto de la Construcción, realizó un estudio denominado Portafolio de Modelos de Negocios Circulares para la Construcción”, para impulsar modelos de negocios circulares en la construcción, el que será presentado en un webinar el jueves 24 de junio.

Alejandra Tapia, coordinadora de Sustentabilidad de Construye2025, destaca que el sector es el mayor consumidor de materias primas y otros recursos, utilizando cerca del 50% de la producción mundial de acero y más de 3 mil millones de toneladas de materias primas. En tanto, a nivel mundial, los residuos de la construcción y demolición (RCD), representan cerca del 35% de los residuos sólidos y, en Chile, el 34%. 

Por ello, “se hace evidente que no podemos seguir así, en un crecimiento económico basado en una economía lineal, en la que se extrae, fabrica y construye; luego se desecha y demuele”, sostiene la profesional.

Esta consultoría que se presentará en el webinar es el resultado del proceso de desarrollo de tres modelos de negocios circulares que estarán a disposición del sector construcción, para su implementación y posible postulación a fondos concursables, el que será expuesto por los especialistas de Social Renovable Henrique Sala Benites y Cristian Zegers Cádiz. 

Alejandra Tapia, coordinadora de Sustentabilidad de Construye2025, comenta que también estará disponible el análisis internacional de más de 100 modelos de negocios en economía circular en construcción para acelerar la transición hacia la circularidad. 

“Esta es una iniciativa de la Hoja de Ruta RCD Economía Circular en Construcción 2035 y está en sintonía con dar más herramientas a los emprendedores e innovadores del sector que necesitan avanzar en economía circular, pero que necesitan un empujón o ayuda para hacerlo”, explica Tapia.

Para completar el círculo, tendremos como invitado a Gerardo Wijnant, representante de Doble Impacto, plataforma de inversiones que busca financiar proyectos que obtengan rentabilidad económica, generando impacto positivo en la sociedad y el medio ambiente.

La actividad se realizará el jueves 24 de junio, entre las 11:00 a 13:00 horas, y se transmitirá vía Zoom.

Inscripciones AQUÍ.

PROGRAMA

11:00 – 11:20: Bienvenida de Construye2025 y Hoja de Ruta RCD y ECC – Alejandra Tapia

11:20 – 11:45: Contexto economía circular y modelos de negocio – Social Renovable

11:45 – 12: 20: Modelos de negocio – Social Renovable

12:20 – 12: 40: Doble impacto – Gerardo Wijnant

12:40 – 13:00: Preguntas

 

Industrialización de la construcción: clave para el desarrollo

Por Elías Arze Cyr, representante AIC en Consejo Directivo Construye2025.

Una de las razones de nuestro subdesarrollo es la baja productividad del país y, particularmente, de la construcción. En efecto, en su último informe, la Comisión Nacional de Productividad menciona que la productividad en obras de edificación en altura, medida en términos de m2/persona-día es un 53% mayor en países como Alemania, Canadá, Japón y Estados Unidos y agrega que eliminar las brechas en edificación y en obras de infraestructura vial implicaría un aumento de la contribución al PIB del sector en 12.850 millones de dólares al año, equivalente a construir anualmente 52.000 viviendas y 1.500 Km rutas pavimentadas.

Por otra parte, la construcción, que representa un 7% del PIB, se estima que es responsable de un 35% de los desechos sólidos que se generan en el país.

Mirando estos dos aspectos, productividad y sustentabilidad, la industrialización de la construcción, consistente en la producción en fábrica de sus componentes, aparece como una gran oportunidad para mejorar en forma sustantiva estos dos aspectos. Es obvio, las fábricas, al dedicarse a un determinado tipo de productos deben estandarizar sus procesos, optimizar sus rendimientos y minimizar sus pérdidas para mantenerse competitivas. La industrialización conlleva además una mejora en la certeza de cumplir plazos y presupuestos al depender más de procesos controlados que de las incertidumbres del trabajo en obra, amén de reducir el riesgo de accidentes laborales tema en el cual la construcción no es un ejemplo.

Cabe preguntarse por qué, comparado con otros sectores de la economía, la construcción se nos fue quedando atrás. Las razones son, a mi juicio, tanto históricas como de naturaleza de la actividad:

– Históricas, porque siendo el acero el material que le dio el mayor impulso a la industrialización de la construcción en el mundo, Chile recién pudo contar con producción de acero en los años 50 y su importación era prohibitiva por su política de protección de la industria a través de altos aranceles. Ello favoreció la construcción en hormigón. Cabe hacer presente que si bien la prefabricación en hormigón existe, su desarrollo se vio restringido por las condiciones sísmicas del país, que limitaron su desarrollo. 

– De naturaleza de la actividad, porque siendo ésta no transable (no compite con productos importados), la construcción no se vio sometida a la competencia internacional, lo que le permitió desarrollarse sin necesidad de tener estándares internacionales de productividad.

Cabe hacer presente también que a lo largo del tiempo ha habido destacables esfuerzos de personas y empresas por avanzar en la industrialización y que tenemos ejemplos a la vista, como son algunos edificios metálicos y varios que incorporaron elementos prefabricados, pero el grueso de la construcción de edificios en Chile fue de hormigón puesto en obra, situación ha ido cambiando gracias a los esfuerzos del programa Construye2025 (ex Productividad y Construcción Sustentable o PYCS) y de las organizaciones que participan en él (CChC, CORMA, AIC, varias universidades y otros). 

Nos encontramos probablemente al inicio de un proceso de cambios que conlleva varias etapas y grados de sofisticación. Efectivamente, una primera etapa de la industrialización de la construcción es la prefabricación de elementos (vigas, columnas, losas, paneles, etc), una segunda es el preensamblaje, consistente en el armado en fábrica de componentes de la edificación y la tercera, la más sofisticada, es la modularización, en que se prearman en fábrica módulos completos, incluyendo toda la electrificación, cañerías, etc. Ejemplos de construcción modular de edificios son cada vez más frecuentes en el mundo. 

Recientemente hemos visto cómo en China se levantaron hospitales en 10 días con ocasión del COVID y probablemente el caso más espectacular sea el del edificio Mini Sky City, también en China, de 57 pisos, que se levantó en sólo 19 días. La modularización exige abordar los proyectos con ese concepto desde su fase conceptual y aquí hago un llamado a los arquitectos y empresas de ingeniería ya que resulta evidente que mientras antes en el desarrollo de un proyecto se contemple el uso de elementos prefabricados mayor será el provecho que se haga de esta técnica.


Se inicia consulta pública de la Estrategia Nacional de Huella de Carbono

El objetivo es validar las acciones propuestas para lograr la neutralidad del carbono en el 2050.

El sector de la construcción genera cerca del 40% del total de emisiones de gases de efecto invernadero globales. Por esto, para dar cumplimiento a los desafíos en materia de carbono neutralidad al 2050, es crucial la definición de una estrategia de descarbonización para el sector.

En este escenario, en el año 2019, se formalizó el Comité de Huella de Carbono para el Sector Construcción en el Instituto de la Construcción (IC), al alero de su Convenio de Colaboración con el Ministerio de Vivienda y Urbanismo, y que está conformado por instituciones relacionadas al sector que, de manera voluntaria, ofrecen el conocimiento para redactar y poner en marcha una Estrategia Nacional para la reducción de las emisiones de carbono de todo el sector construcción (edificaciones e infraestructura), a lo largo de todo su ciclo de vida.

Entre los participantes están Certificación Edificio Sustentable, Corporación Chilena de la Madera, Instituto del Cemento y del Hormigón, Cámara Chilena de la Construcción, Volcán, Asociación Chilena del Vidrio y Aluminio, Ministerio de Energía, Ministerio de Obras Públicas, Ministerio del Medio Ambiente, Ministerio de Vivienda y Urbanismo, Chile Green Building Council, Pontificia Universidad Católica, Universidad Andrés Bello, Universidad de Chile, WSP Chile, AZA, ECOEd y consultores independientes.

A la fecha, ya se han definido los lineamientos principales de una hoja de ruta y desarrollado un completo estudio de análisis del estado de arte en huella de carbono a nivel nacional e internacional.

En base a estos productos, se desarrolló una consultoría para elaborar la primera propuesta de la “Estrategia Nacional de Huella de Carbono para el Sector Construcción” que establece lineamientos, metas e indicadores de seguimiento para fomentar en el sector construcción un manejo sustentable de sus recursos, a través de la gestión eficiente de la huella de carbono a lo largo de todo el ciclo de vida, aportando así a los objetivos de carbono neutralidad establecidos para esta industria.

Este documento se encuentra disponible para consulta pública hasta el 6 de julio de 2021, con el objetivo de validar las acciones propuestas para lograr la neutralidad del carbono en el 2050.

Cabe señalar que representantes del sector privado, proveedores de materiales de construcción y gremios profesionales, han planteado compromisos muy importantes para el desarrollo y aplicación de la estrategia, tales como certificados de huella de carbono contenida (cuna a puerta) de materiales de construcción, desarrollo de calculadoras para productos específicos, medición de huella en construcción de edificios, actividades de capacitación y difusión.

Dada la relevancia de estas acciones, es fundamental la participación de todos los actores en este proceso de consulta pública.

Accede al documento aquí https://bit.ly/2THy2yo

Este 16 de junio comienza consulta pública de la Estrategia Nacional de Huella de Carbono

El objetivo es validar las acciones propuestas para lograr la neutralidad del carbono en el 2050.

El sector de la construcción genera cerca del 40% del total de emisiones de gases de efecto invernadero globales. Por esto, para dar cumplimiento a los desafíos en materia de carbono neutralidad al 2050, es crucial la definición de una estrategia de descarbonización para el sector.

En este escenario, en el año 2019, se formalizó el Comité de Huella de Carbono para el Sector Construcción en el Instituto de la Construcción (IC), al alero de su Convenio de Colaboración con el Ministerio de Vivienda y Urbanismo, y que está conformado por instituciones relacionadas al sector que, de manera voluntaria, ofrecen el conocimiento para redactar y poner en marcha una Estrategia Nacional para la reducción de las emisiones de carbono de todo el sector construcción (edificaciones e infraestructura), a lo largo de todo su ciclo de vida.

A la fecha, ya se han definido los lineamientos principales de una hoja de ruta y desarrollado un completo estudio de análisis del estado de arte en huella de carbono a nivel nacional e internacional.

En base a estos productos, se desarrolló una consultoría para elaborar la primera propuesta de la “Estrategia Nacional de Huella de Carbono para el Sector Construcción”, cuyo documento será lanzado para consulta pública el próximo miércoles 16 de junio a las 11:00 horas, con el objetivo de validar las acciones propuestas para lograr la neutralidad del carbono en el 2050.

En este evento online, se expondrá el Estado del Arte Nacional e Internacional en Huella de Carbono del Sector Construcción, presentación que estará a cargo de Pía Wiche, de la empresa consultora EcoEd.

Asimismo, se presentará la Propuesta de Estrategia Nacional de Huella de Carbono para el Sector Construcción, que estará a cargo de Mauricio Villaseñor de la empresa consultora EBP.

Cabe señalar que representantes del sector privado, proveedores de materiales de construcción y gremios profesionales, han planteado compromisos muy importantes para el desarrollo y aplicación de la estrategia, tales como certificados de huella de carbono contenida (cuna a puerta) de materiales de construcción, desarrollo de calculadoras para productos específicos, medición de huella en construcción de edificios, actividades de capacitación y difusión.

Dada la relevancia de estas acciones, es que es fundamental la participación de todos los actores en este proceso de consulta publica.

No te pierdas el lanzamiento e inscríbete aquí https://bit.ly/2Tlolph

Se abre consulta pública sobre reglamentos para Edificaciones en Ley de Eficiencia Energética

  • El Ministerio de Vivienda y Urbanismo tiene abierto dos procesos de consulta en el marco de la Ley de Eficiencia Energética.
  • La consulta del reglamento del Registro Nacional de Evaluadores Energéticos, abierta hasta el 10 de junio; y el reglamento para la Calificación Energética de Viviendas abierto hasta el 22 de junio.
  • Pueden participar personas naturales o jurídicas, empresas, organizaciones sociales, universidades, entre varias.

La ley 21.305 sobre Eficiencia Energética recientemente promulgada, cuyo objeto es promover el uso racional y eficiente de los recursos energéticos, considera diversos procesos participativos. Uno de ellos es la revisión de su implementación a través de sus reglamentos.

La ley contiene iniciativas fundamentales para el desarrollo de la eficiencia energética en Chile, entre los cuales se cuenta el etiquetado energético de toda edificación nueva, lo que permite incorporar la variable de eficiencia energética en la decisión de compra de los consumidores. De esta manera, las personas podrán tomar una decisión informada a la hora de comprar una vivienda.

En su artículo 3, la ley establece que la calificación energética de viviendas, edificios de uso público, comercial y oficinas, será obligatoria para la obtención de la recepción municipal final o definitiva. Esto regirá para proyectos desarrollados por empresas constructoras e inmobiliarias y por los Servicios de Vivienda y Urbanización, debiendo además incluirse la etiqueta de eficiencia energética en toda publicidad de venta que realicen.

Para abordar lo antes mencionado, la ley establece la creación de 3 reglamentos, de los cuales 2 de ellos permitirán la entrada en vigencia de la calificación energética obligatoria.

Uno de ellos es el artículo 3, que mandata al Ministerio de Vivienda y Urbanismo a desarrollar el Reglamento que regule el procedimiento, exigencias y condiciones del otorgamiento de la calificación y precalificación energética y su publicidad, el que será suscrito por el Ministerio de Energía.

Además, el artículo 4 que crea el Registro Nacional de Evaluadores Energéticos, para efectos de la aplicación de la Calificación Energética, mandatando al Ministerio de Vivienda y Urbanismo a reglamentar: los requisitos de inscripción; las causales de inhabilidad e incompatibilidad para inscribirse y mantenerse en él; las entidades o profesionales que podrán efectuar la evaluación para la emisión del informe y etiquetado; los mecanismos para su evaluación; acreditación y registro; las competencias para fiscalizar el cumplimiento de las exigencias establecidas en calificación energética y el proceso de etiquetado, entre otros aspectos.

En este contexto, se invita a opinar sobre la propuesta de reglamento sobre “Registro Nacional de Evaluadores Energéticos” y “Calificación Energética de Viviendas en Chile”, a que se refiere la ley N° 21.305.

La consulta pública del reglamento sobre “Registro Nacional de Evaluadores Energéticos” se encuentra abierta desde el 12 de mayo y hasta el 10 de junio de 2021 a las 23:59 horas.

La consulta pública del reglamento sobre “Calificación Energética de Viviendas en Chile” se encuentra abierta desde el 24 de mayo y hasta el 22 de junio de 2021 a las 23:59 horas.

Documentos en consulta disponibles en:

Consulta pública del reglamento sobre “Registro Nacional de Evaluadores Energéticos”

https://participacionciudadana.minvu.gob.cl/consultas-ciudadanas-virtuales/consulta-p%C3%BAblica-sobre-reglamento-del-registro-nacional-de-1

Consulta pública del reglamento sobre “Calificación Energética de Viviendas en Chile”

https://participacionciudadana.minvu.gob.cl/consultas-ciudadanas-virtuales/consulta-p%C3%BAblica-sobre-reglamento-para-la-calificaci%C3%B3n-energ%C3%A9tica-de

 

Fuente: Ministerio de Energía

Con trabajo colaborativo de más de 50 empresas e instituciones, fue presentada Plataforma Industria Circular

Con el webinar “Sinergias y Economía Circular en la Industria de la Región de Valparaíso”, se dio el cierre al proyecto FIC ejecutado por la Universidad de Valparaíso y el puntapié oficial a Mercado Residuo@Recurso de Plataforma Industria Circular.

La Región de Valparaíso tiene el potencial de ser un territorio líder en economía circular y en ello ha estado trabajando un equipo de la Universidad de Valparaíso, a través del desarrollo y difusión de Plataforma Industria Circular, proyecto financiado con aportes del Fondo de Innovación para la Competitividad FIC-R 2017.

Con el webinar “Sinergias y economía circular en la industria de la Región de Valparaíso”, realizado el pasado 27 de mayo, se cerraron poco más de dos años de trabajo, en los que se incentivó un trabajo de sinergias entre las diferentes industrias locales de toda la región, a través de Plataforma Industria Circular.

Y es que “la Región de Valparaíso no solo posee una economía variada y exportadora, con una ubicación y servicios estratégicos a nivel país, sino también patrones de distribución y coexistencia de diversas industrias que pueden dar paso, como en otros países, a sinergias para la reutilización de materiales, energía o información”, explica José Tomás Videla, coordinador de Plataforma Industria Circular.

“La generación de residuos a nivel internacional es un problema y Chile no se queda atrás”, comenta Patricia Martínez, directora de Plataforma Industria Circular.

El 2018, solo un 10% de los residuos recibía algún tipo de tratamiento o valorización y en la Región de Valparaíso, y así la mayoría de los residuos no peligrosos que se generan a nivel regional, van a algún tipo de disposición final, sin recibir valorización ni algún tipo de tratamiento que permite extender su vida útil.

En la actividad, Victoria Gazmuri, Seremi de Medio Ambiente de la Región de Valparaíso, planteó que “el trabajo en conjunto que se realiza es fundamental para poder avanzar en la economía circular, donde todos son actores relevantes” y también destacó los importantes avances normativos para caminar hacia una economía circular y a un Chile circular sin basura.

En tanto, Alejandro Dinamarca, director de Innovación y Transferencia Tecnológica de la Universidad de Valparaíso, señaló que este es un proyecto muy significativo y con un potencial enorme. Además, “ha mostrado que tiene una etapa de madurez en los conceptos de innovación”, como un eje fundamental para el desarrollo del territorio, específicamente de la Región de Valparaíso. 

Como detalló José Tomás Videla, la iniciativa funciona a través de Mercado Residuo@Recurso, herramienta de facilitación y seguimiento de iniciativas de simbiosis industrial, lo que se entiende como transacciones y reutilización de residuos y subproductos industriales no peligrosos, entre empresas de la región. Lo anterior complementado con el Portal de Información, que presenta contenido de noticias, reportes y de casos exitosos, así como de un directorio de empresas e iniciativas.

Durante el webinar, participaron Tomás Santa María, investigador SIS de la University of Graz, Austria, quien presentó sobre plataformas de simbiosis industrial en Europa y oportunidades para nuevos modelos de negocios; Verónica Kuchinow, fundadora y directora de la consultora Símbiosy; ​Guillermo González, jefe de la Oficina de Economía Circular del Ministerio de Medio Ambiente, quien contextualizó sobre lo que se está realizando a nivel país, para lograr que Chile sea un país más circular, destacando la Estrategia de Residuos Orgánicos, la Hoja de Ruta de Economía Circular en Construcción y la recién aprobada Ley que regula productos y plásticos de un solo uso. Señaló que para el 2040 se espera pasar del 4% de reciclaje actual a un 65%; reducir la generación per cápita en un 25% y tener 180.000 nuevos empleos circulares.

Casos de éxito regionales

Como ejemplos locales, participaron el Centro Regional de Estudios en Alimentos Saludables (CREAS), con tres casos de innovación alimentaria a través de la valorización y reutilización de descartes alimentarios, como el uso de las brácteas (hojas) de alcachofas luego de hacer las conservas con sus fondos; la generación de conservas y productos tratados térmicamente con los descartes de ciruelas, del vino (alperujos) y golden berries de baja calidad, además de la reutilización y valorización de descartes de la industria pesquera, con los que se pueden producir harinas, chips y salsas.

También expuso Revaloriza, empresa que impulsa la economía circular desde la región, mediante la construcción del Primer Centro de Tratamiento y Valorización de residuos de la construcción y que pretende reciclar y valorizar 120.000 toneladas de residuos de la construcción y demolición de la Región de Valparaíso en un plazo de tres años, generando un beneficio económico, social y ambiental.

En tanto, la Municipalidad de Casablanca ha liderado diferentes proyectos en los últimos 5 

os, explicó Patricio Marín, director de Gestión Medio Ambiental del municipio. Su Departamento de Medio Ambiente tiene seis funciones, como plan de gestión de residuos, aplicación de normativa ambiental, elaboración de proyectos, ordenanza de medio ambiente, educación ambiental y protección del patrimonio natural. De esta manera, han trabajado con las empresas de la comuna en un instructivo sobre la recolección de residuos factibles, con el fin de poner las reglas de cómo se deben recibir dichos residuos. Además, con la Subdere y el GORE, el municipio pudo financiar el Centro de Tratamiento Intermedio de Residuos Sólidos, la Planta Municipal de Segregación, y están en proceso de construcción de la planta de compostaje Casablanca, en terrenos del ex vertedero municipal.

CChC, Construir Innovando y Construye2025 buscan a las mejores 50 empresas tecnológicas del país

A través de la iniciativa Mapa Construtech, se abrirá una vitrina para encontrar en un solo lugar empresas que entreguen soluciones tecnológicas al sector construcción. La convocatoria estará abierta hasta el 30 de junio.

La Cámara Chilena de la Construcción, Construir Innovando y Construye2025 están buscando a las mejores 50 empresas tecnológicas en Chile para ser parte de la nueva plataforma “Mapa Construtech”, iniciativa que fue lanzada en el contexto de la Semana de la Construcción.

El objetivo de esta iniciativa es buscar e identificar las mejores soluciones tecnológicas para el sector de la construcción, darles visibilidad a través de una vitrina validada por expertos y ayudar con ello a potenciar su crecimiento, “pero sobre todo será una herramienta que ayude a los empresarios de la industria a conocer las ofertas tecnológicas existentes”, explica Ignacio Peña, coordinador de Innovación y Desarrollo Tecnológico de Construye2025, programa impulsado por Corfo y administrado por el Instituto de la Construcción.

La incorporación de innovación más la transformación cultural y tecnológica en el mundo empresarial y corporativo tradicional son tareas difíciles. Muchas veces triunfa el status quo, para seguir haciendo las cosas de la misma manera. Por ello, “los desafíos que enfrenta Chile y el mundo son cada vez más complejos y relevantes, con potencial impacto directo en la viabilidad y legitimidad del negocio, por lo que se requiere enfrentarlos de manera decidida y colaborativamente”, dice Conrad Von Igel, gerente de Innovación de la CChC.

En este sentido, el trabajo del sector, con nuevas tecnologías y modelos de negocio, a través de la vinculación con empresas tecnológicas, startups y soluciones innovadoras, se presenta como una oportunidad de incorporar nuevo talento y acelerar el proceso de transformación cultural y de adopción de tecnología, especialmente para lograr mejoras en productividad.

“El Mapa Construtech es una importante contribución y un complemento significativo al trabajo que ya viene realizando la iniciativa Construir Innovando (CChC) en la industria. Hacemos una invitación abierta a todas las empresas que quieran aportar con soluciones a esta iniciativa que busca lograr contribuir a acelerar la transformación de la industria de la construcción en Chile”, dice Von Igel.

“Esta es una iniciativa que se ha hecho en otros países y lo que queremos para Chile es que los tomadores de decisiones, los gerentes de innovaciones y el que toma ese rol en una compañía, pueda encontrar las empresas tecnológicas de nuestro país que están listas para darle soluciones a sus problemas, y pueda entender de mejor manera cuál de esas soluciones le sirve, qué tipo de solución es, en qué parte de su cadena de valor entra”, explica Peña.

“Desde Construye2025, estamos muy entusiasmados con el desarrollo de esta iniciativa que venimos desarrollando desde el año pasado, a través del Comité Gestor de Desarrollo Tecnológico de nuestro programa, especialmente por el impacto que esta podría llegar a tener, que sin duda será significativo al contar con el apoyo de la CChC”, precisa Marcos Brito, gerente de Construye2025.

Para realizar la selección de las mejores soluciones que estarán presentes en el Mapa Construtech, se cuenta con la colaboración de entidades expertas en el tema, como Startup Chile, Socialab, UDDVentures, Brinca, Centro de Innovación UC, Open Beauchef, así como los centros tecnológicos de la construcción Cipycs y CTeC, entre otras.

La convocatoria está abierta desde el 28 de mayo y estará disponible hasta el 30 de junio. Las bases y requisitos están disponibles en https://cchc.cl/mapaconstrutech/

Impresión 3D: velocidad, precisión, calidad y sustentabilidad

Las primeras investigaciones para el desarrollo de viviendas sociales están demostrando la factibilidad técnica de la tecnología, su competitividad y el enorme aporte medioambiental, social y económico que puede alcanzar.

Hoy, los nuevos sistemas constructivos y las soluciones arquitectónicas eficientes y sustentables se están robando todas las miradas. La impresión 3D, por ejemplo, está revolucionando la construcción de viviendas sociales gracias a la reducción de los costos, la mayor rapidez en faena y la reducción de desechos en obra, entre otras ventajas.

Marianne Küpfer, socia directora de Proyectos de René Lagos Engineers, y Fernando Marín, director de Proyectos e Iniciativas Globales de la Vicerrectoría de Desarrollo y Gestión de la Universidad Mayor, han sido fieles representantes de la tecnología, que podría cambiarle la cara a las viviendas sociales chilenas, gracias a un proyecto respaldado por Corfo que favorece la impresión 3D de hormigón.

“El principal objetivo del proyecto es crear y validar una metodología que permita que la tecnología de impresión 3D de gran escala (2 o 3 pisos) se pueda desarrollar en Chile, enfrentando nuestras particulares condiciones sísmicas reflejadas en las estrictas normas chilenas. La tecnología ya está desarrollada en varios países del mundo, pero con condiciones sísmicas mucho menos exigentes que las nuestras”, señala el investigador.

La idea de esto sería validar que todas las ventajas de esta nueva manera de construir sean aprovechables en Chile y que las modificaciones estructurales mantengan la tecnología en niveles competitivos, tanto para vivienda social como para otros segmentos de vivienda.

¿Cómo se evaluó la factibilidad de construcción con tecnología H3D para viviendas sociales en Chile? La ingeniera Marianne Küpfer recuerda que el primer paso fue elaborar una propuesta arquitectónica que se ajustara a los estándares Minvu para viviendas sociales y que, al mismo tiempo, se pudiera materializar de manera eficiente con tecnología de impresión 3D. El segundo paso fue verificar la factibilidad técnica de la propuesta en cuanto a un diseño estructural sismorresistente acorde a la normativa chilena; mientras que, el tercero, fue realizar una comparación del prototipo propuesto, con alternativas más tradicionales de construcción en la zona central de Chile, como son la albañilería confinada y el hormigón armado convencional.

Según la especialista de René Lagos Engineers, construir con esta tecnología genera beneficios como la reducción considerable de mano de obra, la eliminación del uso de moldajes, la reducción de residuos de construcción, la ejecución con un alto control de calidad, la versatilidad de formas que se pueden lograr y la flexibilidad de usos que se le puede dar a la tecnología de impresión 3D. Igualmente, Fernando Marín, de la Universidad Mayor, valora la velocidad de construcción y la calidad y precisión de la obra automatizada, lo que permite adelantar en fabrica muchas otras terminaciones que, finalmente, también redundan en los plazos. “Si bien hemos apuntado esta investigación a la vivienda social como objeto de estudio y ya habiendo validado el cumplimiento de la normativa sísmica chilena, la tecnología tiene también muchas otras aplicaciones, tales como paneles, mobiliario urbano y casi cualquier obra de arquitectura de hasta tres pisos por ahora”, argumenta.

Junto con evaluar esta tecnología en su condición actual, los investigadores están trabajando en modificar y mejorar su uso, incorporando en la mezcla de impresión otros materiales como la nanocelulosa, para reducir la cantidad de cemento. “Desde la Universidad Mayor, estamos trabajando ya en ensayos de laboratorios en nuestro Centro de nanotecnología aplicada, para alcanzar esta nueva meta que tributa a los objetivos país en temas medioambientales”, cuenta Fernando Marín.

Si bien los cambios en el rubro de la construcción son difíciles de implementar, toman tiempo y requieren demostrar un beneficio económico, aspectos complementarios como el bajo impacto ambiental y la economía circular han ido abriéndose camino. “El mercado poco a poco va entendiendo lo que esto implica y va exigiendo soluciones habitacionales alineadas con estos aspectos. Para RLE es importante participar en la evaluación de estos nuevos sistemas constructivos, pues la seguridad estructural de las viviendas, ante la alta sismicidad que afecta frecuentemente a nuestro país, debe ser considerada una variable fundamental”, argumenta Marianne Küpfer.

Manufactura aditiva

Para certificar la impresión 3D en hormigón como sistema constructivo no tradicional y masificar su uso en la industria de la construcción, nació el proyecto “Anaquel de manufactura aditiva, hacia un nuevo lenguaje arquitectónico”, que lidera la arquitecta Verónica Arcos. Mediante la fabricación de prototipos arquitectónicos a escala real, se ha ido construyendo un catálogo de piezas que pretende validar la tecnología frente a postulaciones de financiamiento mayores y de más largo aliento.

El proyecto tiene cinco etapas y en este momento están en la segunda. “La meta final del proyecto es certificar la impresión 3D en hormigón como un sistema constructivo no tradicional, para comenzar a masificar su uso en la industria de la construcción, tanto en Chile como en el resto de la región”, señala Verónica Arcos, quien cree que dadas las condiciones de crisis social, sanitaria, económica, política y ambiental, es fundamental operar con sistemas tecnológicos más económicos, sustentables, seguros y eficaces.

La impresión 3D en hormigón, en este sentido, ofrece muchas ventajas que la destacan sobre los métodos convencionales. Por ejemplo, el hecho de que no requiere moldajes, se traduce en la eliminación total de escombros, acelera los tiempos de la obra gruesa y reduce la cantidad de mano de obra en la faena. Además, la arquitecta destaca que el mayor control permite reducir en un porcentaje alto el riesgo como parte del presupuesto y brinda más seguridad a los trabajadores, ya que son los robots los que hacen la faena. “Ofrece una libertad formal nunca antes vista en nuestro campo, dando pie a un nuevo lenguaje arquitectónico: un lenguaje basado en la forma resistente tanto en el proceso de impresión como después del fragüe”, puntualiza Arcos.

Según la especialista, quien es Master of Architecture del Berlage Institute en Rotterdam, la tecnología de punta se traducirá necesariamente en una reducción de costos, procesos más sustentables, mayor rapidez en la faena y en la oportunidad de personalizar las viviendas o edificaciones de los usuarios. “Si se construye un conjunto de 30 viviendas sociales, se podrán tener 30 fachadas distintas, sin alterar los costos de manera significativa. Esos costos serán más bien marginales. Esto permitirá tener barrios más amigables, donde la gente pueda sentirse más identificada con sus casas. Además, pienso que al bajar los costos de construcción, si hablamos de vivienda social, eventualmente se podrían obtener viviendas de mayor superficie que las actuales. Lo que después de la pandemia que estamos viviendo sabemos que es imprescindible”, afirma.

 

Revaloriza: la empresa triple impacto que hará realidad la primera planta de RCD en Valparaíso

La planta de tratamiento y valorización de residuos de la construcción y demolición logró financiarse gracias a Doble Impacto, una plataforma que opera como crowdfunding, pero que pronto podría convertirse en banco para impulsar proyectos con sentido que no encajan en la banca tradicional.

Convencer a otros de financiar proyectos sostenibles es la noble misión de Doble Impacto, la plataforma de inversiones que logró hacer match con Revaloriza, la empresa que instalará la primera planta en Chile que se dedicará a la valorización de residuos de la construcción y demolición (RCD), en la Región de Valparaíso. El proyecto -que lidera Karen Aguilera- pretende reciclar y valorizar 120.000 toneladas de residuos de la construcción y demolición procedentes de la Región de Valparaíso en un plazo de tres años, generando un beneficio económico, social y ambiental.

Revaloriza fue la respuesta de un grupo de empresas constructoras e inmobiliarias que, junto a un equipo multidisciplinario, optó por tomar la iniciativa respecto al manejo de residuos, promoviendo la economía circular en la Región de Valparaíso y la recuperación de pasivos ambientales.

Un terreno de más de 21 mil metros cuadrados, ubicado en el sector industrial de Viña del Mar, fue el elegido para edificar la planta. “Como empresa estudiamos las ciudades que más residuos generan dentro de la región y las que más pasivos ambientales generan son Viña y Concón. Los RCD quedan dispuestos en quebradas y son un peligro por las potenciales remociones en masa”, explica la ingeniera ambiental.

Actualmente, la Región de Valparaíso genera del orden de 896.000 toneladas anuales de estos residuos, lo que la convierte en la segunda región con mayor generación a nivel nacional y, por lo mismo, foco de interés de Revaloriza que quiso tomar un rol proactivo en la solución de ese problema. “Nuestra idea es vincular a todos los actores de la cadena: constructoras, transportistas, recicladores de base, comunidad y autoridades, incluso, a la academia para poder desarrollar nuevos productos e impulsar la innovación regional, buscando ser referentes a nivel nacional”, explica la gerente general de la empresa, Karen Aguilera.

El modelo Revaloriza

En Revaloriza enseñan y capacitan a las constructoras para que logren reducir en 30% el volumen de los desechos que generan, ayudándoles a segregar en origen y a distribuir a plantas de reciclaje. Además, esta pyme ha logrado recuperar antiguos pozos de extracción de áridos (desde 2018) con tierras de excavación que, usualmente, se iban a los fondos de las quebradas.

Con su modelo de negocio triple impacto, la empresa se apega a la Hoja de Ruta RCD Economía Circular en Construcción 2035, que lanzó Construye2025 en 2020 junto a los ministerios de Vivienda y Urbanismo, Obras Públicas, Medio Ambiente y Corfo, y busca solucionar un problema transversal en la industria de la construcción que, además, espera contribuir a la disminución de incendios causados por la presencia de microbasurales clandestinos o mala disposición de residuos.

Algunos de los objetivos de Revaloriza son: fomentar la reutilización de residuos, disminuir el volumen de RCD en puntos de segregación; y, por supuesto, reducir el uso del transporte, el consumo en materias primas, los costos de limpieza y los riesgos laborales. Asimismo, a Karen Aguilera la motiva la disminución de la huella de carbono, lo que espera lograr disminuyendo el tránsito de camiones,  impulsando la valorización de residuos entendidos como recursos, y el uso de materias primas secundarias.

¿Por qué Doble Impacto creyó en Revaloriza? Porque, tal como explica, Gerardo Wijnant, subgerente de Impacto en Doble Impacto, la plataforma de inversiones apuesta por empresas y personas que buscan generar un impacto positivo en la sociedad y el medio ambiente. “Buscamos proyectos con sentido y en el camino nos hemos ido encontrando con diversas iniciativas, de inclusión social, turismo sostenible, eficiencia energética, consumo y producción sostenible, una de ellas fue Revaloriza”, señala el ejecutivo.

Doble Impacto es sinónimo de banca ética, como se conoce a las instituciones financieras que apuestan por una economía centrada en las personas y el planeta. Estas organizaciones se diferencian de la banca tradicional porque invierten en proyectos de economía real y no en instrumentos especulativos, pero también porque sus criterios de inversión se ajustan a los “Objetivos de Desarrollo Sostenible” definidos por la ONU en 2015.

Por otra parte, la entidad plantea que la mayoría de las las empresas tradicionales se consideran una posición exclusivamente maximizadora de beneficios y con una visión a corto plazo, sin embargo, cada vez más se valora a las que se enfocan en otros modelos de economías que consideren el valor compartido, replanteando el sentido que las empresas tienen en la sociedad y su impacto en el medio ambiente. 

Asimismo, la entidad para asegurar el control de los dineros que reciben, manejan una cuenta en un banco nacional, y no aceptan dinero en efectivo, sino solamente transferencias de cuentas nacionales, dado que la banca chilena está regulada.

Ley de Eficiencia Energética en Edificación 

Por Francisco López, subsecretario de Energía.

En Chile nos hemos puesto la meta de ser un país Carbono Neutral al 2050. Es por eso que estamos impulsando decididamente una serie de iniciativas. 

Entre ellas, están el plan de cierre de centrales a carbón, el fomento de las energías renovables, el desarrollo de una industria de hidrógeno verde, y la electromovilidad. 

Todos estos pilares estratégicos son necesarios y están siendo abordados de manera sistemática por el Ministerio de Energía. Pero sabemos que es la eficiencia energética la que más contribuye a esa meta: representa más de 35% de las reducciones de gases de efecto invernadero proyectadas al 2050. 

A mediados de enero, el presidente Sebastián Piñera promulgó la primera Ley de Eficiencia Energética (N°21.305), que promoverá el uso eficiente de la energía que hoy nos conecta, nos ilumina y nos abriga.

Con su puesta en ejecución, lograremos al 2030 una reducción de la intensidad energética del 10%, un ahorro acumulado de US$15.200 millones y una reducción de 28,6 millones Toneladas de CO2: lo anterior equivale a evitar el recorrido anual de 15,8 millones de vehículos livianos o a la absorción anual de 1,8 millones de hectáreas de bosque nativo. 

Esta ley exigirá a los grandes consumidores que implementen sistemas de gestión de la energía. Con ello, reducirán sus consumos de manera sistemática, bajando también sus costos económicos y aumentando la productividad. 

Se exigirá también nuevos estándares de eficiencia energética para el parque vehicular nuevo, promoviendo la electromovilidad. Esta ley, además, declara al hidrógeno, expresamente como combustible. 

Las edificaciones nuevas tendrán un etiquetado como el que hoy tienen los electrodomésticos o vehículos. ¿Por qué esto es importante? Porque las edificaciones consumen casi un cuarto de la energía total del país, y parte importante de ésta se destina a calefacción. 

De esta manera, la ley de Eficiencia Energética establece que edificaciones nuevas, como viviendas, edificios de uso público, edificios comerciales y edificios de oficinas, cuenten con una Calificación Energética para obtener la recepción final o definitiva.

Esta etiqueta deberá incluirse en toda publicidad de venta que realicen empresas. La norma es aplicable a empresas constructoras e inmobiliarias y a Servicios de Vivienda y Urbanismo. Además, la ley crea el registro de evaluadores, quienes realizarán las calificaciones energéticas de las edificaciones. 

Desde lo práctico, creemos que esta indicación de la ley será muy positiva para las personas, pues este etiquetado -por ejemplo- permitirá a las familias tomar una decisión informada a la hora de comprar una vivienda y así optar por la que represente un mayor confort térmico, que considere por ejemplo el uso de equipos eficientes, o energías renovables no convencionales; permitiendo así un mayor ahorro en calefacción, enfriamiento, iluminación y agua caliente sanitaria.

En concreto, la etiqueta de eficiencia energética mostrará cuál es el porcentaje de ahorro en la demanda de energía para lograr calefacción, enfriamiento e iluminación apropiados para la vivienda, y el nivel de eficiencia energética en función del porcentaje de disminución de la demanda de energía. Gracias a ello, las viviendas contarán con una etiqueta con colores, porcentajes y letras, que van desde la A+ a la G, siendo esta última la menos eficiente, mientras que la letra E representa el estándar actual de construcción.

La Ley de Eficiencia Energética es un gran paso, y nos abre grandes posibilidades de acción a todos para reducir nuestra huella de carbono, para ahorrar en costos económicos, para lograr nuestra meta de carbono neutralidad, y mejorar además de manera considerable nuestra calidad de vida.

Los aprendizajes, experiencias y oportunidades que trajo la pandemia 

La llegada del coronavirus nos dio lecciones a todos, pero también despertó nuestra resiliencia y capacidad de innovación. Mandatada por Construye2025, con apoyo del Instituto de la Construcción, la consultora In-Data dio con cinco soluciones clave para la reactivación y la productividad tras “tomarle el pulso” a la industria.

Cada industria ha experimentado los cambios de manera distinta y ha tenido que vivir sus propios aprendizajes. Con el fin de levantar información y entregar propuestas para el sector construcción, mandatada por Construye2025 y con apoyo del Instituto de la Construcción, la consultora In-Data ha estado trabajando en un completo reporte, que recoge soluciones de corto, mediano y largo plazo.

¿Cómo acercar la empresa al trabajador? ¿Cómo evitar la escasez y/o retraso en la entrega de insumos y productos? ¿Cómo bajar los impactos en los tiempos y productividad en obra? ¿Cómo se incorporan tecnologías e innovaciones en el rubro? Han sido algunas de las preguntas que Cristián Yañez, gerente general, y Eva Sánchez, investigadora de In-Data, buscaron responder mediante su investigación.

“Como conclusión, el escenario actual de pandemia dejó una serie de aprendizajes, con foco en ámbitos como recursos humanos y organización; necesidad de planificación y mantención de la cadena de abastecimiento en el rubro; acelerar la implementación de procesos de digitalización y automatización; acelerar soluciones industrializadas en la construcción; y re impulsar la construcción sustentable, tanto en el sector público como privado”, explican los especialistas.

De esta manera, mediante el trabajo participativo de una serie de talleres, In-Data logró priorizar cinco soluciones, que asoció a cinco fichas resumen, que detallan el alcance y/o objetivos específicos a los que responde cada propuesta, el periodo de implementación determinado, el desglose de las actividades específicas requeridas para dar cumplimiento los objetivos y los actores responsables de liderarlas y llevarlas a cabo. Éstas son las cinco propuestas macro:

  1. Registro de competencias y capacidades laborales: desarrollo a mediano y largo plazo (mayor impacto). Se trata de impulsar el rol de los empresarios, en la promoción de competencias laborales de los trabajadores, especialmente enfocando capacitación de mano de obra (o nuevos liderazgos en otras áreas).
  2. Promover una nueva cultura de abastecimiento: desarrollo a mediano y largo plazo (mayor dificultad). Esta solución apunta a crear una cultura “just in time”, que permita instalar un cambio profundo en toda la cadena de abastecimiento, complementada con incentivos y financiamiento. (promover venta de soluciones, no solo de productos)
  3. Desarrollar protocolo BIM: desarrollo a corto plazo (menor dificultad). Estipular la autoría y confidencialidad de la información, para que la maqueta digital pueda ser utilizada como un documento legal.
  4. Premiar y promover la industrialización: desarrollo a corto plazo (mayor impacto). Fomentar la incorporación desde etapas tempranas. Ampliando la perspectiva, esta puede definirse como la organización del proceso sustentado en la racionalización; mecanización o prefabricación; y automatización de métodos y tecnologías.
  5. Acercar sustentabilidad al usuario final: desarrollo a corto, mediano, y largo plazo (menor impacto). Incorporación de la construcción sustentable al proceso de planificación, diseño, construcción y operación de las edificaciones. Esto es, asignar un criterio de calidad en el desarrollo de las obras, optimizando aspectos económicos, ambientales y sociales.

Algunas recomendaciones de In-Data, en el ámbito de las competencias laborales fueron: elaborar una hoja de ruta de capacitación tecnológica, levantar diagnósticos periódicos del estado del capital humano, mirar la experiencia nacional y tomar el desafío de introducir metodologías de innovación a nivel organizacional.

En tanto, en abastecimiento, uno de los consejos clave es considerar el uso de software y aplicaciones móviles para el control de gestión e integración de información terreno. Por el lado del BIM, los consultores invitaron a revisar experiencias internacionales, como el caso del uso de escaneo 3D y modelos BIM, en New Jersey, para reemplazar totalmente el daño causado por un incendio en tiempo récord.

Respecto de la promoción de la industrialización, en In-Data, valoraron las iniciativas desarrolladas por el Consejo de Construcción Industrializada y Construye2025. Mientras que, en el último punto, los consultores apuntaron a la generación de incentivos para el desarrollo de una construcción sustentable.