Iniciativa, que buscar introducir y dirigir a las empresas del sector Construcción hacia el nuevo paradigma de “Economía Circular”, concluyó su ejecución 2019 dando cuenta de su impacto en la industria.
El pasado 18 de diciembre se realizó el cierre 2019 del Programa CONSentido, iniciativa promovida por los programas sociales de la Cámara Chilena de la Construcción, CChC y que fue impulsada y ejecutada por la Corporación de Desarrollo Tecnológico, CDT.
En la ocasión, cerca de 50 invitados se congregaron en la terraza de Espacio CDT, en el piso 22 del Edificio Corporativo de la CChC, para conocer de mano de sus ejecutores, los resultados obtenidos durante este año de aplicación. Así, Paola Yáñez, Jefe de Proyectos de la CDT, presentó los principales resultados de este programa, entre los que destacaron los más de 3 mil beneficiados en diversos ámbitos de acción. De este modo, la profesional subrayó la realización de talleres prácticos con trabajadores y profesionales en materias de gestión de residuos y economía circular. En total, fueron 50 obras que recibieron talleres de sensibilización (visibilización de residuos), de definición de roles y de identificación, separación y acopio.
Junto a lo anterior, se sumó la realización de un seminario internacional de gestión de residuos, con experiencias nacionales e internacionales que permitieron abordar los desafíos que estas temáticas presentan a la industria.
“El programa nació como respuestas a brechas que se identificaron en un diagnóstico preliminar y, si bien había
mucho por qué trabajar el 2019, priorizamos mejorar las respuestas que se puedan dar a la problemática pensando en que hoy la urgencia está en gestionar los residuos de la construcción. Esto, sin dejar de lado que el Programa CONSentido, busca dar los primeros pasos para encaminar al sector en lo que es la Economía Circular. En ese contexto, en 2019, abordamos distintos ámbitos de trabajo: participamos de mesas público-privadas, durante todo el año, velando por cómo estos nuevos lineamientos pueden apoyar al sector; realizamos ediciones técnicas, que tratan de darle una bajada práctica estos temas; impulsamos una misión tecnológica, con la idea de poder ir a ver qué se está haciendo afuera, para ver qué se puede aplicar acá y también tuvimos un año para implementar un proyecto en obra, con el foco de que las empresas constructoras, comenzaran a hacer una separación de residuos y comenzar a mover el sistema de valorización de los mismos. Nuestra meta era llegar a mil beneficiarios y llegamos a cerca de 3 mil. Hemos sido el puntapié inicial para muchas obras que hoy ya tienen instalados puntos de separación de residuos y han comenzado a valorizarlos”, comentó Paola Yáñez.
Misión Tecnológica
En septiembre, en el marco del programa CONSentido, se realizó una misión tecnológica a España con el objetivo de descubrir y rescatar buenas prácticas en esta materia. José Pedro Campos, Director Ejecutivo de Instituto de la Construcción, junto con Alejandra Tapia, Coordinadora Técnica de Construye 2025, dieron cuenta de la experiencia de la Misión y del aprendizaje obtenido en cada una de las actividades en España.
“Fue una muy buena experiencia, yo felicito a la CDT y al programa CONSentido, fue una misión muy completa, desde el punto de vista de tener entrevistas con la academia, con las asociaciones, con la industria, con los ayuntamientos, con las empresas de reciclaje y participar, finalmente, de un congreso internacional que nos permitió a los participantes mirar lo que se está haciendo en Europa, en Latinoamérica y en Chile. De modo que fue una misión muy interesante y muy completa”, comentó José Pedro Campos.
Desafíos
La gestión de residuos en obra y el caminar hacia una Economía Circular en el sector ha dejado una serie de desafíos para la industria. En esta materia, Andrés Mondaca, reciclador de base que ha sido parte de las actividades de CONSentido, indicó que con este programa “se ha generado una pequeña conciencia de los que es el reciclado. Están dejando el espacio adecuado para ir separando el cartón, el plástico, los metales, las botellas, etc. Y eso de a poco se ha ido generando y eso es bueno, positivo. Espero que con el tiempo, se haga más habitual y la obra cuando comience la obra tenga los espacios listos para acopiar los materiales y así poder trabajar de forma más agilizada”.
Por su parte, para Paola Yáñez el principal desafío está en “no perder el impulso y tratar de sumar a más actores a este cambio y a esta optimización de los procesos. Hay que mover el mercado de valorización de residuos y es una tarea pendiente. Hasta la fecha no se ha vinculado con estos actores que son claves para incorporar lo que hoy hemos definido como residuos, dentro de un sistema a que vuelvan a tener la vida de un material o como nueva materia prima”.
El programa
Programa CONSentido tiene como principal objetivo el articular un grupo de colaboración dispuesto a generar información, estandarizar procedimientos, capacitar e innovar, con el compromiso de aportar al sector y contribuir a la Hoja de Ruta de Economía Circular a nivel País.
Desde ahí, su compromiso es dar bajada de los temas estratégicos, al día de las empresas de construcción y proveedores de materiales, brindando conocimientos, instalando capacidades y herramientas aplicables. De este modo, busca cerrar círculos entre eslabones de la cadena, inicialmente, proyectistas, proveedores de materiales, y empresas constructoras, con el fin de avanzar en soluciones concretas enfocadas a la economía circular.
Fuente: CDT
Al momento de evaluar los primeros tres años de funcionamiento, “lo más importante fue haber posicionado la construcción industrializada, la construcción sustentable con la Hoja de Ruta de RCD y economía circular, y haber accionado estos grupos de trabajo y que tengamos proyectos ya funcionando”, a juicio de Brito.
De esta manera, ambas instancias podrían buscar aumentar recursos y consolidar un apoyo desde la industria. “El IC es una institución con más trayectoria y más robusta”, reconoció el gerente de Construye2025. En ese sentido, señaló que el IC no será una entidad solo administrativa, sino más bien es necesario “que nos podamos sentar a trabajar en conjunto para buscar importantes sinergias entre los dos”.
La encargada de presentar un análisis de la contingencia y hacer un llamado a reflexionar sobre la crisis social y cómo es posible hacer un aporte desde la construcción fue Helen Ipinza, asesora sectorial en construcción y logística en Corfo.
Luis Bass, representante de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) en el Consejo Directivo, comentó las conclusiones obtenidas desde el día de la reflexión por la seguridad, realizada el 5 de noviembre, instancia que debido a la contingencia, se abrió a analizar la crisis social. En total, se sumaron 1.327 empresas y 488.000, pudiendo identificarse “los principales dolores de los trabajadores, que eran temas de salud, endeudamiento, vivienda y pensiones”, de acuerdo con Bass.
Desde el punto de vista de los trabajadores del sector, Raúl Letelier, gerente técnico del Centro de Evaluación y Certificación de Competencias Laborales CECC SIMOC, ve desde más cerca la problemática que se está viviendo en la industria: “hay mucha desigualdad, tenemos compañeros que aún almuerzan en las plazas o que no tienen cómo llegar a sus puestos de trabajo, de qué me sirve certificarme si no mejora mi sueldo”. Por ello, opina que hay sus hijos no quieren estar en el sector de la construcción, porque ven las frustraciones de sus padres para llegar a fin de mes. “Hoy está la responsabilidad de poner énfasis en los problemas que la gente está viviendo”, insistió.
El Consejo de Construcción Industrializada (CCI) fue el resultado de un profundo análisis realizado por Construye2025 en torno a su iniciativa de hoja de ruta “Prefabricación e Industrialización de Viviendas”, la que luego pasó a integrar el “Plan de Industrialización y Construcción Limpia”, ampliando el concepto hacia la gestión de residuos de construcción y demolición, el desarrollo de marco normativo y el desarrollo de capital humano especializado.