La emergencia climática ha traído nuevos desafíos a la industria de la construcción. Desde Corfo aseguran que con la implementación de programas como Construye Zero será más sencillo enfrentarlos.
La industria de la construcción enfrenta actualmente nuevos desafíos en materia de sustentabilidad, en el marco de una crisis climática global que ha puesto en el centro del debate la necesidad de implementar nuevas herramientas y tecnologías capaces de generar obras con menor cantidad de emisiones e impacto ambiental.
El año pasado, Corfo desarrolló por primera vez el Programa Tecnológico de Transformación Productiva ante el Cambio Climático, para abordar brechas de competitividad asociadas a desafíos de la crisis climática identificadas en los sectores productivos. Concretamente, convocar a sectores como el de la construcción era una de las metas,’cuyo impacto desde la utilización de materias primas, generación de residuos y emisión de Gases de Efecto Invernadero, puede mitigarse con la incorporación de soluciones tecnológicas’, señala Fernando Hentzschel, gerente de Capacidades Tecnológicas de la estatal.
Construye Zero, iniciativa encabezada por el CTEC, fue una de las tres escogidas, y junto a su red de socios recibirán fondos desde este año para su ejecución, para dar respuesta a los retos identificados de forma consensuada con la industria.
‘Los desafíos a resolver en este programa consideran desde la eficiencia energética e hídrica hasta la reducción de CO2, haciéndose cargo de buena parte de la Hoja de Ruta que el sector había levantado en esta materia. De esta forma, y desde nuestro quehacer por impulsar el desarrollo tecnológico productivo sostenible, vemos en Construye Zero una oportunidad relevante para continuar con la sofisticación y mejora de una de las industrias más importantes y de mayor impacto en nuestra sociedad’, comenta Hentzschel sobre la iniciativa.
Lo que plantea esta iniciativa que involucra también a otros actores del sector es innovar de forma colaborativa. Eso a sus ojos,’es un desafío en sí mismo’, por lo que lograr que se mantenga el compromiso y participación de las empresas que forman parte está entre los principales retos.
‘Lo que esta forma de trabajo nos asegura es que exista una pertinencia tecnológica de los desarrollos que se originan y también incide en que las capacidades de cada participante se focalicen en resolver problemáticas comunes con soluciones innovadoras’, concluye.
Fuente: Diario Financiero