Noticias

Diez años construyendo transformación: el desafío que nos une

Fecha: 07/04/2025

Por Marcos Brito Alcayaga, gerente de Construye2025

Hace una década, hablar de industrialización, gestión de residuos o transformación digital en la construcción parecía, para muchos, una meta lejana. Hoy, esos conceptos son parte del lenguaje cotidiano del sector y, lo más importante, comienzan a materializarse en proyectos concretos que mejoran la calidad de vida de las personas. Esta evolución no ha sido casual, sino fruto del trabajo persistente y articulado de una industria que entendió la urgencia de transformarse. Y en ese camino, Construye2025 ha sido un catalizador y un articulador clave.

Durante estos 10 años, el programa —impulsado por Corfo y administrado por el Instituto de la Construcción— ha sentado las bases para una construcción más productiva, sostenible y moderna. Hemos demostrado que es posible levantar viviendas industrializadas con altos estándares en tiempos reducidos, implementar modelos de economía circular con impacto real e implementar tecnologías como el BIM, para mejorar la eficiencia y disminuir el impacto ambiental de proyectos en todo el país.

Pero más allá de los logros técnicos, lo que ha hecho posible esta transformación es la convicción de que solo trabajando en conjunto —sector público, privado y academia— podremos cambiar estructuralmente nuestra industria. El Consejo de Construcción Industrializada (CCI), la Hoja de Ruta RCD Economía Circular en Construcción 2035, los centros tecnológicos de construcción (CTeC y CIPYCS), la Estrategia de Economía Circular en Construcción y Hoja de Ruta BIM, son ejemplos concretos de esa articulación efectiva.

¿Hemos avanzado? Sí. ¿Queda mucho por hacer? Sin duda. El déficit habitacional, la resiliencia ante el cambio climático, la capacitación de la mano de obra, el desarrollo normativo y la necesidad de digitalizar más profundamente nuestros procesos, entre tantos otros, son desafíos que no esperan. Y aunque las cifras importan, lo que realmente da sentido a nuestro trabajo es el impacto que esto tiene en las personas: viviendas de mejor estándar, ciudades más sostenibles, obras más eficientes y de menor impacto al entorno.

Estando ya en el 2025, solo resta poder cumplir con las metas planteadas, al menos en cuanto a haber hecho los esfuerzos por acercarnos y poder mostrar que avanzamos, analizar resultados a través de un balance en profundidad y proyectar la hoja de ruta hacia un nuevo periodo. Durante el año, se trabajará en construir la memoria de Construye2025, ofreciendo un relato de lo trabajado, que establezca un nuevo caso base para los próximos años. Asimismo, proyectar un nuevo programa, que plantee nuevas metas, temáticas e iniciativas, para los desafíos del sector que aún no están resueltos.

Los próximos 10 años exigirán aún más colaboración, más y mejores datos para la toma de decisiones, más audacia para innovar y una mayor participación de la tecnología. Ahora, en forma conjunta con el Instituto de la Construcción y un apoyo cada vez mayor del sector, el programa buscará seguir acelerando el proceso de transformación sectorial, hacia una mayor productividad y sustentabilidad. En Construye2025, seguiremos siendo parte activa de esa transformación. Porque el desafío es de todos. Y juntos, ya demostramos que podemos lograrlo.