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Es clave aumentar la productividad en la construcción y enfrentar los desafíos que tenemos en sostenibilidad

Fecha: 06/05/2019

‘Es clave transformar la industria de la construcción en Chile. Se hace urgente lograr producir más con los mismos recursos, dado el déficit habitacional que tenemos y la necesidad de contar con una mejor calidad del stock edificado, en términos de eficiencia térmica, consumo energético de las viviendas, sustentabilidad e incorporación de tecnología y nuevos sistemas constructivos para mejorar la productividad’, afirma Marcos Brito, gerente de Construye2025, programa impulsado por Corfo.

Precisamente, para impulsar este salto, dice, es que se formó, Construye2025, cuyo fin es unir a los sectores público y privado, y también a la academia, en pos de accionar una estrategia a largo plazo, que fue definida el año 2015 y plasmada en una hoja de ruta. ‘El rol de Construye2025 es articular a todos estos actores para que tomen acción y se generen los cambios necesarios con una mayor velocidad. De esta manera, somos una especie de catalizador del cambio que se requiere en esta industria’, señala. Comenta Marcos Brito que este es el tercer año de implementación de Construye2025 y que se han enfocado en cuatro áreas. Una de ellas es construcción industrializada.

En este ámbito, los proyectos concretos del programa son fortalecer y consolidar al Consejo de Construcción Industrializada en una forma de corporación público-privada, que pueda trabajar en forma independiente, y potenciar el crecimiento del mercado para las soluciones industrializadas de construcción, incluyendo sistemas industrializados de gestión, de programación, de incorporación tecnológica y prefabricación de elementos constructivos.

Por otro lado, cuenta, en construcción limpia, ‘contamos con la Estrategia para la Gestión de los Residuos de Construcción y Demolición (RCD), que se hace cargo, a través de una web interministerial, de levantar una hoja de ruta específica para este tema, en que se involucren ministerios públicos y empresas privadas, para hacer frente a este desafío y buscar resultados de corto y largo plazo de forma conjunta’.

COMPETENCIAS Y CONTRATOSA su vez, indica, ‘por el lado del capital humano se está trabajando con el Organismo Sectorial de Competencias Laborales de la Construcción (OSCL) en instalar mapas de procesos, los que se encargaron anteriormente para construcción industrializada, de tal forma que se puedan desarrollar luego nuevos perfiles operacionales para los maestros de la construcción, enfocados en construcción industrializada’. También, explica, se trabaja en que se aumente la capacitación, pues se ha visto que la certificación pasa a ser una herramienta fundamental para diagnosticar qué cosas hay que certificar primero y desde ahí generar una mejor respuesta, así como levantar en paralelo la calidad de las OTEC, estableciendo un estándar mínimo de calidad para impartir esas certificaciones’.

El fin último en este tema, explica, es apoyar el desarrollo del Marco de Cualificación, que es un tema probado ya en países industrializados y desarrollados, en el que se sistematiza un esquema que permite, a través de conocer primero el mapa de procesos en un tipo de obra, se determina también después cuáles son las rutas formativas de las personas que intervienen en estos procesos y de ahí, se identifican los perfiles y cuáles son las necesidades, niveles de complejidad y de capacitación para cada cargo. Asimismo, señala, está apoyando la creación de un Consejo de Competencias Laborales, que es muy probable que esté liderado por el Ministerio del Trabajo y la Cámara Chilena de la Construcción, para así pensar en cuáles son los oficios del futuro que se van a requerir para la construcción.

Y finalmente, explica, la cuarta área son los Marcos Contractuales de la construcción, que se refiere a esquemas o formatos de contratos para distintos tipos de obras de construcción, dada la alta brecha que existe hoy, hay un desconocimiento enorme en el mercado de qué elementos se tienen que incorporar en un buen contrato de construcción, de tal manera que se distribuya uniformemente el riesgo entre los que participan y se prevengan disputas posteriores o claims, como se llaman técnicamente, para que así la inversión que se realiza en construcción quede en la obra y no en disputa en tribunales.

PASOS FUTUROS

Marcos Brito explica que actualmente Construye2025 está en un momento de consolidación, ad portas de entrar a una segunda etapa como programa. ‘Estamos revisando nuestra hoja de ruta para así incorporar elementos nuevos, como la transformación digital, la economía circular y todavía afinar un poco más el foco de qué es lo que podemos hacer como programa, dónde debemos estar y qué objetivos debemos perseguir para lograr la visión que tiene Construye2025’.

Fuente: El Mercurio