En diciembre de 2019, el Instituto de la Construcción suscribió un convenio con Corfo para desempeñarse como Entidad Gestora del Programa Construye2025 para el trienio diciembre 2019 – diciembre 2022.
Dado los buenos resultados conseguidos durante este periodo, que se resumen en una administración colaborativa que dio soporte al buen trabajo desarrollado por el equipo y gobernanza del programa, el comité ejecutivo de Construye2025 nominó al Instituto de la Construcción para que continúe como Entidad Gestora del Programa durante el tercer y último trienio al alero de Corfo. Por su parte, el Directorio del Instituto aprobó esta continuidad.
Pablo Ivelic, presidente de Construye2025, señala que el Instituto y el programa comparten propósito y visión. “El trabajo conjunto solo puede ser virtuoso en función de la cooperación y unión de esfuerzos. En adición, el Instituto es una institución de trayectoria, con procedimientos formales y un trabajo muy profesional. Tenerlos como entidad gestora le ha permitido al Construye2025 trabajar con mayor estructura y contar con un apoyo técnico de primer nivel”.
En este sentido, Gustavo Cortés, jefe del Proyecto Construye2025, señala que además de las labores propias de la administración, el IC propuso modificaciones importantes en la gobernanza del programa, particularmente en la nueva conformación del Comité Ejecutivo, única instancia del programa con capacidad de toma de decisiones.
“Hoy, el comité está integrado por representantes del sector público (MOP-Minvu y Corfo), del sector privado (CChC- IC) y academia (PUCV). Por otra parte y dado que los objetivos y propósitos de Construye2025 y el IC están alineados, se ha coordinado el trabajo desarrollado por ambos equipos, de manera de lograr un trabajo coordinado y complementario, evitando la duplicidad de funciones”.
Son varios los logros del programa durante este 2022 y Pablo Ivelic destaca tres. “La formalización de un convenio de trabajo y la implementación de una gobernanza entre la CChC, el IC y Construye2025 para la Estrategia de Economía Circular, el diseño y lanzamiento del concurso universitario “Desafío Net Zero 2030”, que busca inculcar las temáticas de construcción sustentable y economía circular en los futuros profesionales que diseñarán infraestructura en el mañana, y el impulso a la vivienda industrializada que está implementando el Minvu, como parte de las estrategias para abordar de manera eficiente el déficit habitacional”.
Para esta nueva etapa, Gustavo Cortés, comenta que dado que el programa ha logrado instalar temas relevantes en el sector, vinculados a sustentabilidad, productividad e innovación, el trabajo es cada vez mayor y más intenso por lo que el soporte en administración también será mayor. “Nuestro desafío es proporcionar una plataforma adecuada con propuestas innovadoras, protocolos efectivos, información oportuna, para así contribuir a alcanzar los objetivos y metas para el trienio”.
Por su parte, Pablo Ivelic concuerda en que Construye2025 ha sido capaz de instalar temáticas que en su momento no estaban presentes en el discurso del rubro, como la industrialización, la innovación, la gestión de residuos. “Si bien aún hay espacio para seguir avanzando en esas temáticas, creo que el principal desafío está en consolidar la Estrategia de Economía Circular en la Construcción. Es una necesidad de todas las industrias, pero, en particular, en la nuestra por los niveles de emisión que genera el desarrollo de infraestructura”.
Sin duda que durante este trienio se ha logrado implementar una administración formal, colaborativa y eficiente, que a la vez cumple con los estándares de transparencia y trazabilidad que demanda un Programa de Corfo y el Instituto de la Construcción.
“Afortunadamente se ha logrado desarrollar un trabajo armónico, colaborativo, de respeto y confianza entre los actores participantes de este programa, por lo que enfrentamos los próximos desafíos con mucho optimismo”, señala Gustavo Cortés.
En forma paralela, Ivelic añade que los desafíos están relacionados con la complejidad de los últimos años para la industria de la construcción. “A las restricciones impuestas por la pandemia, le sucedieron las alzas en los costos de construcción y la disponibilidad de mano de obra, y ahora una baja en la inversión que afecta el desarrollo de nuevos proyectos. Es difícil instalar temas estratégicos y transformacionales cuando los problemas aquejan a la subsistencia de las organizaciones que conforman la cadena de valor; sin embargo, también es cierto que estos son momentos en donde se requiere pensar diferente y analizar cómo se pueden hacer las cosas de manera distinta. Tengo la convicción de que el próximo período será fructífero con esa mirada”.
Fuente: Instituto de la Construcción
En la feria Edifica 2022 se firmó el compromiso que promoverá la Estrategia de Economía Circular, iniciativa colaborativa a la que suscribieron la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), el Instituto de la Construcción (IC) y Construye2025.
Para instalar en Chile una cultura que apunte al desarrollo sostenible de la industria de la construcción se firmó la “Estrategia de Economía Circular en Construcción”, que fortalecerá el vínculo entre el sector público, privado y la academia.
En la ceremonia participaron Pedro Plaza, vicepresidente de la Cámara Chilena de la Construcción y presidente del Consejo Sostenibilidad del gremio; Ricardo Fernández, presidente del Instituto de la Construcción; Pablo Ivelic, presidente de Construye2025; Ximena Ruz, directora de la Agencia Sustentabilidad y Cambio Climático; y Fernando Hentzschel, gerente de Capacidades Tecnológicas de Corfo, quien puso énfasis en los desafíos de desarrollo productivo sostenible de este sector.
“Es importante consolidar la Estrategia de Economía Circular, mediante una firma de compromiso público y privado que la transformen en un plan de acción”, dijo Hentzschel. Además, la autoridad de Corfo destacó la oportunidad de avanzar, a través de estas acciones, en la productividad de un sector tan relevante -como es la construcción- para nuestra economía, que concentra sobre un 8% de los empleos y que tiene mucho que decir en “desafíos país” como el alto déficit habitacional.
Tras la firma del acuerdo, Miguel Pérez, líder de Economía Circular de la CChC, destacó el intenso trabajo que permitió identificar la serie de tareas sobre las que se necesita trabajar para avanzar en este ámbito. “Las oportunidades que tenemos frente a la economía circular y los acuerdos de producción limpia, son múltiples. Hay que imaginarse que por donde se botan los escombros, lo único que cae son recursos mal utilizados, que se pierden”, indicó Pérez.
Para Pablo Ivelic, presidente del Consejo Directivo de Construye2025, la formalización de un convenio de trabajo y la implementación de una gobernanza entre la CChC, el IC y Construye2025 para la Estrategia de Economía Circular está dentro de los hitos que marcaron al programa durante 2022. Por ello, cree que en los próximos años “el principal desafío está en consolidar la Estrategia de Economía Circular en la Construcción. Es una necesidad de todas las industrias, pero, en particular, en la nuestra por los niveles de emisiones y residuos que genera el desarrollo de la edificación e infraestructura”, aseguró
Valorización y circularidad
Según el representante de la CChC, la meta es lograr que los escombros tengan valor como recursos. “La madre de todas las batallas está en el diseño que nosotros vamos a poder generar”, acotó. En este sentido, afirmó que la palabra “economía” en la circularidad es extraordinaria. “El fondo nos presenta desafíos que involucran todos los aspectos y aquí uno de los más importantes -indudablemente- es la sostenibilidad, que es el medio ambiente”, dijo.
Sin embargo, hay conciencia de que no es el único aspecto por considerar, ya que la productividad es igual de relevante. “La gracia de la economía circular es que junta estos dos mundos, porque si no tenemos un medio ambiente sano no vamos a poder seguir haciendo lo que estamos haciendo y si no tenemos una forma económica y productiva de hacerlo, tampoco lo vamos a poder realizar, entonces aquí se nos juntan dos aspectos que son relevantes”, aseguró Pérez.
Finalmente, el ejecutivo resaltó que una empresa por sí sola no logrará respuestas, ni tampoco lo hará la Cámara Chilena de la Construcción. “Es necesario que trabajen -de manera colaborativa- el sector público y el sector privado”, comentó.
La actividad, que forma parte de la Chile Green Building Week, tendrá como temas centrales #ConstruyeCircular y #ConstruyeZero, que serán abordados por expositores nacionales e internacionales referentes en economía circular y descarbonización, además de paneles de conversación y llamados a la acción.
Para generar una discusión constructiva sobre los desafíos para alcanzar un entorno construido circular, bajo en carbono, resiliente al clima, equitativo y regenerativo, Chile Green Building Council (Chile GBC) realizará el International Summit “Construye Sostenible”, los días 26 y 27 de octubre, de 8:30 a 13:30 horas en el Aula Magna de la Universidad del Desarrollo (Avenida Plaza 680, Las Condes).
“El International Summit se realiza en el marco de la Chile Green Building Week que organizamos desde hace un par de años, con la colaboración de empresas y organizaciones socias y aliadas interesadas en apoyar nuestro trabajo de sensibilizar a los distintos actores del sector para poder contar con más agentes de cambio comprometidos con el desarrollo sostenible”, señala María Fernanda Aguirre, Directora Ejecutiva de Chile GBC.
El programa de la actividad contempla la participación de expositores nacionales e internacionales, además de paneles de conversación con representantes de diversas entidades.
En la primera jornada enfocada en #ConstruyeCircular, participará Fernando Hentzschel, gerente de Capacidades Tecnológicas de Corfo; Stephanie Barger, director Markert Transformation & Development, TRUE Zero Waste Program; y Scarlett Vásquez, directora general de Obras Públicas del Ministerio de Obras Públicas.
Por su parte, en la segunda jornada enfocada en #ConstruyeZero, participará Claudio Orrego, Gobernador Regional Metropolitano de Santiago; Usha Iyer-Raniga, Co Lead One Planet Network, Sustainable Buildings and Construction Programme de UNEP; y Florencia Attademo-Hirt, gerente general Dpto. de Países del Cono Sur y Representante en Chile del Banco Interamericano de Desarrollo.
Si bien nuestro país ha avanzado en la generación de instrumentos e iniciativas alineadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y Metas de Carbono Neutralidad, la última información provista por la comunidad científica y organizaciones nacionales e internacionales, han hecho evidente la urgencia de acelerar la transformación del sector.
“Es urgente que el sector de la construcción fomente la innovación, la industrialización y mejore la productividad, incentivando el desarrollo e implementación de modelos de circularidad para tener una industria que no solo reduzca sus emisiones sino que también sea resiliente y regenerativa”, agrega María Fernanda Aguirre, Directora Ejecutiva de Chile GBC.
El International Summit “Construye Sostenible”, cuenta con el apoyo de Arauco, Aceros AZA, Falabella Inmobiliario, Falabella Retail, Knauf Chile, Rain Bird y Sodimac; y es patrocinado por el Ministerio del Medio Ambiente, Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático, CIPYCS, Construye2025, CTeC, Instituto de la Construcción y Pacto Global.
Las inscripciones para el evento, de carácter gratuito, son a través del siguiente link https://lnkd.in/e-ASQfHe
Más info del evento en https://chilegbc.cl/index.php?sec=international-summit&year=2022
Tras un recorrido por la Feria Edifica 2022 y con el fin de estrechar la colaboración y fortalecer la vinculación entre el sector público, privado y academia, se firmó este acuerdo que pretende fomentar el desarrollo sostenible de la industria.
Con la visión de establecer en Chile la cultura de una construcción circular, que permita el desarrollo sostenible de la industria, se firmó un compromiso para impulsar la Estrategia de Economía Circular en Construcción, una iniciativa de creación colaborativa en la que participaron como actores activos la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), el Instituto de la Construcción (IC) y Construye2025 de Corfo, programa impulsado por Corfo.
Esta firma se realizó en el marco de Edifica 2022, la feria de construcción más importante de Hispanoamérica que, tras tres años, volvió a la presencialidad, mostrando las principales innovaciones de la industria y, además, generando conciencia en el sector, con un espacio dedicado a la gestión de residuos, dando cuenta del impacto que estos generan en el entorno.
La ceremonia contó con la participación de Pedro Plaza, vicepresidente de la Cámara Chilena de la Construcción y presidente del Consejo Sostenibilidad de la misma entidad; Ricardo Fernández, presidente del Instituto de la Construcción; Pablo Ivelic, presidente de Construye2025, además de Ximena Ruz, directora de la Agencia Sustentabilidad y Cambio Climático y Fernando Hentzschel, gerente de Capacidades Tecnológicas de Corfo.
Tras un recorrido por la feria y en el marco de la Semana de la Productividad, que también se desarrolló en esta exposición, los representantes de las tres entidades relacionadas a la estrategia, sellaron este compromiso, con la firma de un acuerdo que busca estrechar la colaboración y fortalecer la vinculación entre el sector público, privado y academia impulsando la mirada circular en la industria de la construcción.
La economía circular, en este sentido, se presenta como un medio para avanzar en la sostenibilidad de la industria de la construcción, abriendo múltiples oportunidades de innovación y nuevos modelos de negocio y emprendimiento para todos los actores de la cadena de valor, permitiendo un uso más eficaz de los recursos, minimizando los residuos e impactos ambientales desde el diseño. Así, la estrategia busca generar un plan de acción público-privado al 2025, en el marco de la Hoja de Ruta Nacional de Economía Circular al 2040.
Con esta hoja de ruta, Chile se posiciona como un país pionero en la materia. Por esta razón, la Construcción quiso avanzar en este desafío trasformador y desarrollar de forma colaborativa esta estrategia sectorial.
Para la Cámara Chilena de la Construcción esta iniciativa resulta fundamental para el desarrollo de la industria y se enmarca dentro de uno de los pilares del COMPROMISO PRO que impulsa a las empresas y obras de construcción a mejorar su desempeño para que el impacto en la sociedad sea cada vez más positivo.
Desarrollo colaborativo
La estrategia de economía circular en la construcción pretende establecer en Chile la cultura de construcción circular, entendiéndola como una oportunidad para el desarrollo sostenible, social, ambiental y económico de la industria, a través del incentivo de iniciativas coordinadas entre el sector público, privado, la academia y la validación ciudadana.
Estas alianzas han sido cruciales para lograr los objetivos desde un estilo de colaboración que han permitido co-crear la estrategia de economía circular en construcción y ponerla en práctica.
Frutos tempranos
Como frutos tempranos de esta estrategia de economía circular, se han ejecutado el Acuerdo de Producción Limpia de Valparaíso y la “mesa interregional de Gestión de Residuos: Hacia la Economía Circular”, iniciativas que buscan extender este esfuerzo a nivel nacional, iniciando en Antofagasta, Puerto Montt y Punta Arenas.
En el caso de los Acuerdos de Producción Limpia (APL), su principal eje de acción es la colaboración; es decir, la promoción de alianzas para impulsar soluciones a temas ambientales que preocupan al país y a las personas. En el caso del APL de Valparaíso está en línea con el trabajo que se ha realizado en la hoja de ruta de economía circular de nuestro país y, principalmente, con la estrategia para avanzar hacia una cultura de construcción circular, mediante la gestión coordinada y colaborativa entre los distintos actores de la cadena de valor en la región de Valparaíso.
También destaca la creación del Comité de Economía Circular del Instituto de la Construcción, con más de 30 representantes de la academia, entidades públicas y privadas que participan activamente en sesiones colaborativas para proponer y concretar acciones libremente y de acuerdo con sus capacidades, propiciando sinergias.
Asimismo, también desde Construye2025 trabajan en acelerar la transformación de la construcción promoviendo la innovación y la sustentabilidad, mediante la articulación entre actores públicos, privados y la academia. Una iniciativa destacada, en esta materia, es el Reto de Innovación en Economía Circular en Construcción, convocado por Corfo, desafiando al sector a hacer un uso más eficiente de los recursos y a disminuir sus pérdidas utilizando nuevas soluciones tecnológicas y modelos de negocios circulares.
Sobre la Estrategia de Economía Circular en Construcción
La Estrategia de Economía Circular en la Construcción, es una iniciativa promovida por la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), el Instituto de la Construcción (IC) y el programa Construye2025 de Corfo, que cuenta la facilitación técnica de la Corporación de Desarrollo Tecnológico, CDT y pretende promover en Chile la economía circular, viéndola como un desafío y al mismo tiempo como una oportunidad que permita el desarrollo sostenible, social, ambiental y económico de la industria de la construcción, a través del incentivo de iniciativas coordinadas entre el sector público, privado y academia.
Con la visión de “establecer en Chile la cultura de construcción circular, que permita el desarrollo sostenible de la industria”, la Estrategia tuvo su puntapié inicial en noviembre del 2020, cuando distintos representantes de las instituciones líderes y autoridades nacionales invitaron a adherir.
Este proyecto es de carácter nacional y busca impulsar medidas que disminuyan la demanda de recursos, lograr menor impacto ambiental, la regeneración del medio ambiente y protección del patrimonio ambiental, junto con la mejora de la calidad de vida de las personas. Sumado a esto, también instala la oportunidad de innovación y nuevos modelos de negocio circulares, para generar una reactivación económica verde posterior al escenario de pandemia.
La Estrategia de Economía Circular en Construcción tuvo un proceso de co-construcción que contó con la participación de más de 800 profesionales del sector a nivel nacional, en charlas y talleres para identificar las iniciativas prioritarias al año 2025.
La Estrategia cuenta con 11 iniciativas, de acuerdo con 6 ejes, cuyos objetivos son:
1. FORMACIÓN: Contar con profesionales, técnicos y operarios capacitados para realizar proyectos que incorporen la economía circular en el sector construcción.
2. MARCO NORMATIVO: Resolver asimetrías de información respecto al marco normativo y fortalecer colaboración entre sector público y privado para desarrollo normativo.
3. BENCHMARKING Y DIFUSIÓN: Visibilizar casos, datos e indicadores para fomentar la incorporación de conceptos de economía circular e innovación en etapas tempranas de proyectos, involucrando a toda la cadena de valor.
4. INNOVACIÓN: Generar instancias de vinculación entre empresas, academia y ecosistema emprendedor para favorecer innovación en economía circular.
5. INCENTIVOS: Generar incentivos que permitan promover que el sector privado cultive una cultura de Economía circular
6. COLABORACIÓN: Crear espacios de encuentro, intercambio de conocimientos, colaboración y construcción de confianza para producir sinergia entre los distintos actores de la cadena de valor de la construcción e industrias relacionadas.
De este modo, la estrategia permitiría guiar y coordinar el desarrollo de diversas iniciativas en el sector, lideradas por distintos actores y en diferentes regiones, de modo tal de potenciar el alcance y evitar duplicidad de esfuerzos. Asimismo, permitirá generar herramientas habilitantes para la innovación y el avance en reducción impactos ambientales de las empresas, tal como la prevención y gestión de residuos, reducción de emisiones y mejora de la productividad.
Para más información, puede visitar: https://economiacircularconstruccion.cl/
Se afianza cada vez más un espacio de trabajo colaborativo donde se pierden los límites entre la Hoja de Ruta y la Estrategia. Se trabaja en un ambiente de confianza, no libre de obstáculos, pero que a pesar del escaso presupuesto y de las barreras, se ha logrado apalancar con esfuerzos propios un sinnúmero de iniciativas que crecen al alero de la economía circular y la gestión de los residuos de la construcción y demolición.
A un poco más de dos años del lanzamiento de la Hoja de Ruta RCD y Economía Circular 2035 impulsada por los ministerios de Vivienda y Urbanismo, Medio Ambiente y Obras Públicas, Corfo y Construye2025 y a casi un año del lanzamiento de la Estrategia de Economía Circular en Construcción 2025, liderada por la Cámara Chilena de la Construcción, el Instituto de la Construcción y el programa de Corfo, se afianza cada vez más un espacio de trabajo colaborativo, en el que se pierden los límites entre hoja de ruta y estrategia, se trabaja en un ambiente de confianza, no libre de obstáculos, pero que -a pesar del escaso presupuesto y de las barreras- se ha logrado apalancar con esfuerzos propios un sinnúmero de iniciativas que crecen al a alero de la economía circular y la gestión de los residuos de la construcción y demolición.
Probablemente, nuestro país es uno de los más atrasados en la región en materia de regulación, con un “Reglamento sanitario para el manejo de residuos de las actividades de la construcción y demolición” aún en desarrollo, que promete dar certezas sobre la gestión de los residuos, fomentar nuevas actividades económicas y empleos verdes, pero sin fecha de publicación.
A pesar del retraso de nuestro marco regulatorio, cabe destacar los esfuerzos que realizan actores tanto públicos como privados y la academia para avanzar a pesar de las dificultades, y he ahí la fortaleza de “avanzar juntos para llegar lejos”.
En materia de avances en el marco regulatorio, en el año 2021 el Ministerio de Medio Ambiente lideró el desarrollo de la norma NCh3727 “Gestión de residuos – Consideraciones para la gestión de residuos en obras de demolición y auditorías previas a obras de demolición” para avanzar en procedimientos específicos de gestión de RCD en faenas de demoliciones sean estas planificadas o producto de desastres. Esta norma incorpora una herramienta para la planificación de la demolición, como lo es la auditoría previa, la que permite identificar los tipos de residuos, estimaciones y proponer su gestión en forma previa a las faenas. Cabe destacar que en países europeos, el realizar auditorías previas a la demolición es obligatorio por ley para obras desde los 1000 m2, sean demoliciones parciales, totales, o remodelaciones. Actualmente, MMA ha levantado información sobre las normas que requiere el sector en economía circular para su ejecución, y se encuentra estudiando modificaciones regulatorias para el sector industrial y de construcción, además de trabajar par a impulsar la agenda de ciudades circulares, y desarrollar estándares, en conjunto con ONEMI – SINAPRED para una gestión circular de residuos derivados de desastres y catástrofes, en el marco de los compromisos de la hoja de ruta.
Plan de Gestión RCD en obras MOP
Para contar con un catastro respecto de la generación y disposición de residuos e incentivar alternativas de circularidad en su manejo, el Ministerio de Obras Públicas (MOP), lidera un plan que considera medidas y procesos sistematizados para el adecuado manejo y la trazabilidad de residuos. De esta manera, perseguirá la reducción, la reutilización y el reciclaje.
Para lograr los objetivos, el MOP promoverá la coordinación para facilitar procesos, procedimientos y regulación. Igualmente, fomentará la gestión sustentable de los Residuos de Construcción y Demolición (RCD) con foco en economía circular en construcción, en las licitaciones públicas.
Por eso, desde junio de 2021, el Manual de Planes de Manejo Ambiental para obras concesionadas de la Dirección General de Concesiones, incluye en su última versión la exigencia de implementar Planes de Gestión de RCD. De hecho, a junio de este año 41 contratos de la Dirección de Vialidad, 11 contratos de la Dirección de Arquitectura y 9 de la Dirección de Obras Hidráulicas aplicaban dicho plan, al menos en lo que respecta al reporte de las fichas para gestión de residuos, con el apoyo de la coordinadora ambiental de la Secretaría Ejecutiva de Medio Ambiente y Territorio (SEMAT).
Reutilización de material fresado en obras
La coordinación pública para el marco regulatorio y fomento a la economía circular en construcción es uno de los ejes clave del MOP, pues permite fortalecer y desarrollar redes colaborativas en el sector público para la gestión sustentable de los RCD y la economía circular en construcción a escala regional y local. Una de las metas en este ámbito es la utilización de RAP (pavimento asfáltico reciclado) que resulta de las labores de renovación de las pistas de aterrizaje de los aeropuertos, caminos básicos u otros. Con este objetivo, en la Región de Antofagasta, se firmó un acuerdo para la aplicación del concepto de economía circular en la utilización de RAP. El acuerdo fue suscrito por el Ministro de Obras Públicas, el gobernador regional, el Seremi del Ministerio de Vivienda y Urbanismo y el alcalde de Mejillones.
En este contexto, en el aeropuerto Andrés Sabella, de Antofagasta, se realizó el mejoramiento de la pista y los pavimentos de las áreas de movimiento, lo que implicó extraer decenas de toneladas de asfalto superficial. De este pavimento asfáltico, 2.000 metros cúbicos se utilizarán tanto en el hospital de emergencia de Mejillones, como en los accesos y vías de La Chimba. En el caso del hospital, el RAP se aplicará para generar una base estabilizada que permita una posterior pavimentación con lechada asfáltica. Todo esto bajo la supervisión del Departamento de Proyectos de la Dirección de Aeropuertos.
APL Economía Circular en la Construcción
El Acuerdo de Producción Limpia (APL): Hacia la Economía Circular en la Construcción de la Región de Valparaíso, impulsa la coordinación pública para el marco regulatorio y el fomento a la economía circular en construcción. En este contexto, busca desarrollar las bases para la implementación de la Hoja de Ruta RCD y la economía circular en la construcción estatal. Además, el APL apunta a fortalecer las redes colaborativas en el sector público para la gestión sustentable de los RCD y la economía circular a escala regional y local.
Otra de las metas de esta iniciativa es generar un ecosistema de innovación para proyectos colaborativos y facilitar incentivos para apoyar la valorización de residuos y la creación de nuevos modelos de negocios circulares.
La Seremi de Obras Públicas evaluará la factibilidad de contar con instrumentos que incentiven la innovación en la industria, incluyendo ámbitos como el diseño circular en proyectos regionales, la adecuada gestión de residuos y el uso de materias primas secundarias obtenidas a partir de la valorización como, por ejemplo, el uso de áridos reciclados en proyectos de pavimentación.
De esta manera, un documento detallará los instrumentos de incentivo propuestos y sus requerimientos en materia de innovación.
Criterios para el Manual de Carreteras
La incorporación de criterios de economía circular en el Manual de Carreteras implica la coordinación pública para el marco regulatorio y fomento a la economía circular en construcción. Uno de los objetivos del MOP, en este aspecto, es lograr un nuevo volumen de “Sustentabilidad en Proyectos Viales”, donde se incluirán criterios asociados a economía circular y gestión de residuos y un índice de calificación sustentable para proyectos viales.
Las soluciones de conservación con material reciclado como el RAP y otros serán parte de los contratos de caminos básicos y redes de caminos sustentables. Igualmente, se están incorporando en los términos de referencia ambientales para nuevos proyectos -desde el inicio del semestre- criterios de sustentabilidad y distintos planes de manejo, incluyendo el Plan de Manejo de Residuos y el Plan de Manejo de Eficiencia Energética y de Manejo del Recurso hídrico.
Además, bajo la supervisión de la Dirección de Vialidad, se desarrollarán proyectos de pavimentado con material reciclado y asfalto espumado; estudios y tramos de prueba para el uso de escorias siderúrgicas en infraestructura vial (pavimentos, terraplenes, etc.), para la utilización de desechos plásticos en la construcción de pavimentos (Caso MACREBUR); para el aprovechamiento de desechos de caucho en la construcción de pavimentos asfálticos y para el uso de diversos materiales reciclados y obtenidos de residuos.
Perfiles laborales, marco regulatorio y más
Desde Construye 2025, se ha encargado el estudio “Propuesta para un Marco Regulatorio Integrado y Fomento a la Valorización de los Residuos de la Construcción y Demolición, RCD” a la consultora Moraga y Cía. El propósito de este estudio es contribuir a acelerar los cambios en el marco regulatorio y fomento, que se requieren para implementar actividades productivas relacionadas a la valorización de residuos de construcción y demolición, entregando una orientación a los distintos servicios públicos para realizar dichas modificaciones, eliminar barreras, y establecer considerar la coordinación entre las distintas entidades para su aplicación. El estudio presenta el levantamiento del marco regulatorio existente, brechas y varias propuestas, así como un nutrido repositorio de experiencias y referentes internacionales.
En cuanto a formación, cabe destacar el proyecto de tres perfiles laborales para el manejo de residuos de la construcción (RCD) el cual surge de un convenio de colaboración entre ChileValora y el Instituto de la Construcción en representación de Construye2025, como proponente técnico, y tiene a las constructoras Su Ksa S.A., Desarrollos Constructivos Axis S.A. y Constructora Viconsa Limitada, como proponentes financieros del proyecto. Además, contó con la participación de instituciones de formación académica e institutos de formación técnica y profesional, entre otros. El objetivo del proyecto es el levantamiento de tres perfiles ocupacionales que permitan promover la certificación de competencias laborales en trabajadores y trabajadoras de la Construcción, en el manejo de residuos de la construcción – RCD, para mejorar gestión de residuos y hacer un uso más eficiente de materiales y recursos de la industria. Los perfiles desarrollados son: Jornal Ambiental, Encargado(a) de bodega y logística y Capataz para el manejo de residuos de la construcción (RCD).
Hoy estos perfiles, se encuentran a la espera de la validación por parte del Organismo Sectorial de Competencias Laborales (OSCL) del sector construcción.
Áridos reciclados, innovación y economía circular
Por otra parte, el programa ha realizado diversas articulaciones, coordinaciones y actividades con el sector público y privado para fomentar la valorización de los residuos, entre las que destacan las “Jornadas de fomento al uso de áridos reciclados”.
En fomento, una de las iniciativas destacadas es el “Reto de Innovación Economía Circular en Construcción” convocado por Corfo, cuyo objetivo es disminuir la pérdida de recursos en el sector construcción y las externalidades negativas, a través de soluciones tecnológicas aplicadas a modelos de negocios, productos y/o servicios que incorporen la Economía Circular.
En cuanto a los resultados mínimos esperados, resalta el desarrollo de nuevos productos, procesos y/o servicios, que requieran desarrollo tecnológico e innovación, que permitan resolver el desafío de disminuir y evitar la pérdida de recursos en el sector construcción, a través de la incorporación de atributos de Economía Circular. La primera fase del reto seleccionó a ocho proyectos, algunos de ellos se pueden visualizar en el canal del programa, en los videos del Congreso Construyendo Chile realizado en agosto de este año.
En el ámbito de sustentabilidad, este 2022, Corfo hizo un llamado a un Programa Tecnológico para el Cambio Climático, instrumento que por primera vez convoca dentro del llamado al sector construcción, cuyo foco se prioriza en economía circular desde el programa.
En el territorio nacional, las iniciativas relacionadas a economía circular y gestión de RCD son las impulsadas principalmente por las Comisiones Regionales de Construcción Sustentable (Corecs), lideradas por las Seremis de Minvu y Serviu, donde participan representantes de los ministerios de Medio Ambiente y Obras Públicas principalmente, y según la región, Corfo y otros representantes de entidades públicas y privadas.
Las Corecs son un importante motor para la promoción de la construcción sustentable en las regiones, actualmente hay 15 comisiones de las cuales 10 abordan en sus hojas de rutas y líneas de trabajo la economía circular y la gestión de residuos. Este último tema, se aborda en mayor medida en la difusión de normativas, diagnósticos y acciones para la cuantificación de residuos. Las principales preocupaciones, se relacionan a la falta de infraestructura para disponer en forma adecuada los residuos, ya que en al menos 7 regiones no cuentan con ella.
En cuanto a las acciones desarrolladas, cabe destacar a la Corecs de Atacama, quienes se encuentran desarrollando una estrategia para implementar en la Comuna de Caldera, una instalación para disposición final de RCD y una Planta de Reducción de Residuos Sólidos, administrada por la Ilustre Municipalidad de Caldera. La primera etapa consta de capacitaciones a los distintos servicios públicos de la región sobre el marco regulatorio actual e iniciativas destacadas en materia de economía circular en el país.
En cuanto a las iniciativas desarrolladas por la Estrategia de Economía Circular 2025, destacan los Acuerdos de Producción Limpia en Economía Circular y Gestión de RCD, liderados por la Cámara Chilena de la Construcción en Valparaíso, y otro Interregional en postulación, que comprende los territorio de Antofagasta, Magallanes y Los Lagos, en colaboración con las Corecs.
Por último, en el contexto de la estrategia, el Instituto de la Construcción articula a través del Comité de Economía Circular, a más de 30 representantes de la academia, entidades públicas y privadas que participan activamente en sesiones de trabajo colaborativo para proponer acciones concretas.
El “Plan regional de industrialización de vivienda en madera” buscará superar el déficit de 30 mil viviendas en la región del Biobío y 600 mil en el país, en un trabajo conjunto entre el GORE Biobío, MINVU, MINAGRI, INFOR y CORFO que busca abordar el déficit habitacional instaurando el uso de la madera y la industrialización de viviendas de este material de alto estándar.
El gobierno, a través de los Ministerio de Agricultura y Vivienda y con la participación de Corfo, dará inicio a un programa cuyo objetivo será iniciar la instalación de una nueva industria de viviendas en madera de alto estándar que permita aumentar de manera considerable su fabricación en las regiones del país y con ello trabajar entre ministerios y servicios y crear una agrupación en torno a la industrialización de viviendas con estructura de madera.
El ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, destacó el llamado del Presidente Boric a que “no sea solo la industria forestal, clásica, que ha ido avanzando con los años en plantas de celulosa, con mayor uso de biomasas, trazabilidad y la industria de los aglomerados, sino que seamos capaces de hacer industria de la madera, construcción de casas y también de muebles”.
Por su parte, el ministro de Vivienda y Urbanismo, Carlos Montes destacó las características de la región de Biobío y señaló que “en Biobío se ha definido una iniciativa ligada a la construcción en madera y a coordinar a todas las instituciones que tienen algo que ver con la construcción en madera de tal forma de hacerlo bien, preocupándose del desarrollo sustentable y especialmente, creando un centro regional que influya en el país (…) y Biobío tiene que sentirse en el país como un lugar de creación, en este caso en torno a la madera”.
En esa misma línea, el gobernador regional de Biobío, Rodrigo Díaz, dijo que “si somos capital maderera del país, si INFOR está acá, si las universidades tienen expertos en esta materia hemos conversado con el Ministerio de Agricultura para avanzar. Hoy, hay construcción industrial de madera en la región y se construyen aproximadamente tres casas al día, pero necesitamos avanzar más en ese tema y por eso nos hemos constituido como directorio para dar señales para que se invierta en este tema”.
El ministro Valenzuela también llamó a que “Chile se tiene que atrever a un nuevo modelo de desarrollo industrial con trazabilidad y buen diseño y la región del Biobío reúne todas las características para ser la capital chilena de las viviendas de calidad en madera. Acá está la industria forestal, la materia prima, el laboratorio de maderas estructurales del INFOR, que es fundamental en este proceso y hay una historia industrial que permite realizar esta industria”.
Por su parte, la directora ejecutiva del Instituto Forestal (INFOR), Sandra Gacitúa destacó el trabajo realizado por esta institución en su laboratorio de madera estructura. “El laboratorio de madera estructural del INFOR apoya los encadenamientos productivos que genera la construcción industrializada de viviendas y ayuda a disminuir el déficit habitacional que aporta en los ámbitos ambientales y sociales del país y que, además, incentiva la investigación y desarrollo en esta área de interés”, señaló.
Además de los ministros Valenzuela y Montes participaron en la actividad el Gobernador Regional del Biobío, Rodrigo Díaz; la directora ejecutiva del Instituto Forestal (INFOR), Sandra Gacitúa; y los seremis de Vivienda y Urbanismo y Agricultura de la Región del Biobío, Claudia Toledo y Pamela Yáñez.
Esta iniciativa público privada contará, además de los servicios públicos ya mencionados, con diversos organismos y entidades privadas como la Asociación de Pequeños y Medianos Industriales de la Madera (PYMEMAD); la Corporación de la Madera (CORMA); la Central Unitaria de Trabajadores (CUT); y la Cámara Chilena de la Construcción (CCcH); además de las Casas de Estudios de la Universidad del Bío- Bío y la Universidad de Concepción.
Fuente: Ministerio de Agricultura
Representantes del Gobierno, centros de investigación y de las principales empresas del sector construcción reflexionaron sobre los avances y desafíos que enfrenta nuestro país en el congreso “Construyendo Chile”.
La industria de la construcción tiene por delante dos grandes desafíos. El primero es la productividad que, desde hace más de dos décadas, está estancada; el segundo, la sustentabilidad, cada día más urgente en medio de la crisis climática global. Estos retos fueron abordados en profundidad por speakers internacionales y nacionales, entre ellos, el ministro de Obras Públicas, Juan Carlos García; el ministro de Vivienda y Urbanismo, Carlos Montes y el vicepresidente ejecutivo de Corfo, José Miguel Benavente.
Por eso, Construye2025, programa impulsado por Corfo y administrado por el Instituto de la Construcción, está concentrado en tres ejes: industrialización, sustentabilidad y transformación digital, que se han convertido en los motores que -colaborativamente- impulsan la academia, el Estado y la industria para transformar a este importante sector.
“Si la productividad hubiese avanzado como lo han hecho las otras industrias, con la misma cantidad de personas que trabajan en la construcción, podríamos haber agregado US$4.500 millones adicionales al PIB; y si la lleváramos a los niveles de países referentes, podríamos haber sumado US$13.500 al PIB”, comentó el presidente de Construye2025, Pablo Ivelic, al abrir el congreso “Construyendo Chile”.
Durante la jornada, tanto los expositores nacionales como los internacionales abordaron también el desafío de la sustentabilidad. Y es que, tal como comentó Pablo Ivelic, la construcción consume un tercio de las materias primas, genera un tercio de los residuos que se producen en el país y emite un tercio de los gases de efecto invernaderos, a pesar de representar el 8% del PIB.
Sin embargo, desde 2016, Construye2025 ha estado trabajando para transformar a la industria. “Hemos logrado instalar los conceptos de productividad y sustentabilidad, no solo desde el concepto, sino también desde la acción”, afirmó el presidente del programa quien conversó con los ministros de Estado y el vicepresidente ejecutivo de Corfo sobre la infraestructura nacional.
Distribuir los riesgos
Según el ministro de Obras Públicas, Juan Carlos García, una crisis como la que enfrentamos hoy, marcada por la inestabilidad en los precios y el aumento en los costos de los materiales, representa una oportunidad para avanzar más rápido. “Hemos podido dar pasos que no se daban hace bastante tiempo: productividad y sostenibilidad ya no se van a mirar por separado. Deben verse en conjunto, porque avanzamos más rápido cuando trabajamos juntos. La base del problema de la productividad y la sostenibilidad es, desde mi punto de vista, que no se distribuyen los riesgos en los procesos”, dijo.
En este ámbito, el ministro García comentó que el Estado le endosa más riesgos de los prudentes al sector privado; el sector privado los devuelve en precios y otro tipo de solicitudes, pero, finalmente, quien asume esos costos es el territorio.
“Tenemos una variación de precios sin parangón en la historia. Hoy el Estado no puede proyectar. Modificar las licitaciones para que la variación de precios sea parte del proceso de construcción es importante para distribuir riesgos y optimizar los recursos, porque es poco productivo tener una empresa que quiebra en un momento tan sensible”, añadió el titular de Obras Públicas, quien valoró la integración de variables como coordinación sostenibilidad y participación ciudadana.
Viviendas: tarea de todos
Finalmente, el ministro de Vivienda y Urbanismo, Carlos Montes, abordó un punto más político, pero, no menos importante: la construcción de la vida en común. “Todo lo que nos pasa está vinculado a los procesos mundiales. Es muy importante tener presente lo que va a ocurrir en Chile, pues podemos seguir en un escenario de confrontación o avanzar hacia la construcción. Tenemos que preocuparnos simultáneamente de la desigualdad; de fortalecer la democracia; y también del desarrollo sustentable”, afirmó.
En este contexto, nació el Plan de Emergencia Habitacional que buscó darle jerarquía a la crisis de vivienda. “Hay muchas familias viviendo mal, muchos niños que no tienen dónde hacer las tareas. Esto no es simplemente estadística, las personas están descontentas con lo que se ha hecho, porque no quieren seguir viviendo en estas condiciones. Hay 1.500 campamentos en el país. La realidad es muy dura”, explicó el ministro Montes.
Enseguida, la autoridad hizo hincapié en la necesidad de organizarse en torno a objetivos comunes. “Esto supone una voluntad política de coordinarse”, dijo. Pero, además, destacó que el déficit de viviendas es un problema del país. “Es cierto que venía antes de la pandemia, luego se agregó la migración. Por eso, hay que diversificar los caminos. Hay distintas realidades y hay que construir respuestas de acuerdo con ellas”, afirmó.
En este sentido, el Estado no solo está empujando la innovación y el desarrollo productivo, sino también atendiendo los nuevos desafíos y demandas. “Hay llamados especiales, tecnológicos, asociados a temas de construcción que consideran digitalización y circularidad, como el programa de transformación productiva del cambio climático”, recordó el vicepresidente ejecutivo de Corfo, José Miguel Benavente, quien recordó que el organismo está impulsando las compras públicas innovadoras y destacó que Construye2025 es uno de los programas “Transforma” más exitosos.
Experiencias internacionales
Brendan Pope, líder de Innovación y Diseño de Fleetwood Australia, fue uno de los expositores invitados al congreso “Construyendo Construcción”. El arquitecto, con más de 15 años de experiencia en construcción modular, ha impulsado fuertemente la conexión entre la industria y la academia, pues es un apasionado por el intercambio del conocimiento y la gestión del cambio. Por eso, creó la competencia estudiantil de arquitectura “Copa Desafío”, que convoca a diversas universidades. Este año el reto que se impuso a los estudiantes fue la carbono neutralidad.
Junto con relatar su experiencia resolviendo problemas junto a los estudiantes, el especialista en construcción modular se refirió a las limitantes comunes entre Chile y Australia, como la falta de mano de obra calificada y también al rol de la industrialización en el desarrollo de infraestructura frente al crecimiento demográfico. “Poder hacer más con menos es una promesa necesaria para el futuro. En los últimos años, la construcción fuera de sitio ha tenido un crecimiento significativo. De hecho, en siete años, Fleetwood ha duplicado sus ganancias”, dijo.
El siguiente invitado internacional fue el coordinador de proyectos, Cátedra UNESCO de Sostenibilidad (UPC), Guillermo Penagos, quien se conectó desde Medellín, para compartir su experiencia sobre el impacto de los fenómenos climáticos en la construcción. “La relación entre criterios de desempeño e impactos ambientales nos puede ayudar con la productividad y la sustentabilidad”, afirmó. Según Penagos, las pequeñas y medianas empresas deben desarrollar modelos de negocios asociados a la circularidad.
Tras su exposición, el especialista colombiano participó en un panel de conversación junto Alejandra Tapia, coordinadora de Sustentabilidad de Construye2025; Paola Valencia, gerente de Sustentabilidad de E3 Ingeniería; y Henrique Benites, investigador de la Universidad de Nueva Gales del Sur, que se sumó desde Brasil para hablar sobre nuevos modelos de negocio, enfocados en la circularidad regenerativa.
Más tarde, expuso Pablo Camarasa de Fran Silvestre Arquitectos, quien se conectó desde Valencia, España, quien comparó los métodos de producción de automóviles con los que se están utilizando en construcción. “Lo que se pretende es que no haya errores, por eso, se usan sistemas de producción en cadena”, señaló.
En total, en Congreso Construyendo Chile reunió a más de 50 expositores nacionales e internacionales, en forma presencial y online, que se enfocaron en hablar sobre los desafíos actuales y futuros de la sostenibilidad, industrialización y transformación digital en la industria de la construcción.
– Carlos Montes, ministro de Vivienda y Urbanismo
– Juan Carlos García, ministro de Obras Públicas
– José Miguel Benavente, vicepresidente ejecutivo de Corfo
– Modera: Pablo Ivelic, presidente de Construye2025
Panel Resultados y desafíos del Reto de Economía Circular en Construcción de Corfo
Conduce: Elizabeth Zapata, directora de Desarrollo Tecnológico de Corfo
Expositores:
– Natalia Reyes, en representación del Pasaporte de Materiales
– Francisco Cruz de Dexfloor
– Sebastián Aguilera de Revaloriza
– Christopher Frías, de Ecopolímero
– Camilo González, de Cobijo Panel
– Hugo Peirano, Reviste
El Centro Interdisciplinario para la Productividad y Construcción Sustentable – CIPYCS, inauguró el pasado jueves el laboratorio IMA [Lab] perteneciente a la Infraestructura del Nodo Metropolitano UC, el primer edificio reconfigurable de Latinoamérica y que será clave en la investigación y testeo de materiales de construcción, los cuales podrán ser sometidos a condiciones climatológicas reales y a nuevos desafíos para la materialización de este tipo obras.
La inauguración se realizó en el Campus San Joaquín, y contó con la presencia del rector de la Pontificia Universidad Católica de Chile, Ignacio Sánchez, además de diversas autoridades académicas de las Casas de Estudios que son parte de CIPYCS, de la Cámara Chilena de la Construcción y de CORFO.
En su discurso inaugural, el rector Sánchez destacó el IMA [Lab] como una iniciativa interdisciplinaria que responde a la misión de las universidades de crear y transferir conocimiento para dar solución a grandes problemas. “Este tipo de laboratorio ha sido diseñado para el desarrollo e innovación, para resolver problemas constructivos, modulares y prefabricados, dando cuenta de la importancia de vincular la investigación a la sociedad e industria”, sostuvo.
En la oportunidad, los más de 60 invitados recorrieron las dependencias del edificio, junto a académicos de CIPYCS, comprobando los distintos usos y posibilidades que ofrecen las instalaciones, como los espacios para testear materiales, las fachadas adaptables, la iluminación flexible y los sensores de ambiente.
Lorenzo Constans, presidente del directorio CIPYCS, agradeció el trabajo del equipo y ahondó en la visión de impulsar el desarrollo e innovación de la industria de la construcción, buscando hacerla más productiva, y sostenible a través de infraestructura de vanguardia y servicios de innovación a lo largo de Chile. “El IMA [Lab] forma parte de la infraestructura de CIPYCS, que lidera la Pontificia Universidad Católica de Chile, en sociedad con institutos y planteles de educación superior a lo largo de Chile. Eso le da un carácter distinto, de ayuda y complemento, no solamente en el ámbito educacional sino también geográfico, de plantear desafíos distintos en cada una de las regiones”, agregó.
Por su parte, Sergio Vera, Director de CIPYCS, resaltó los desafíos de la industria de la construcción, del déficit habitacional y la necesidad urgente de proveer viviendas y barrios que entreguen una buena calidad de vida a cientos de familias, ahora y en el futuro. “Son desafíos enormes, y por eso debemos repensar cómo hacemos las cosas, como diseñamos, calificamos, construimos y operamos en ambientes construidos hoy y en el futuro. Por lo tanto, el camino de la construcción es el desarrollo de innovación y soluciones que se hagan cargo de estos desafíos. Este es la razón de CIPYCS”, finalizó.
La tecnología de este laboratorio modular adaptativo permitirá avanzar en el desarrollo de viviendas, en momentos en que Chile debate propuestas para combatir el déficit habitacional con una mirada sostenible en el marco de la crisis climática.
RECUADRO
IMA [Lab], se suma también el EVI-Lab (laboratorio de realidad virtual para el desarrollo de procesos de diseño, construcción y operación); y el observatorio VISTA, una plataforma de libre acceso georreferenciada, de productividad y construcción sustentable.
Gracias a la permanente búsqueda de oportunidades y a la tecnología, la empresa cementera ha mejorado su propuesta de valor con foco en la productividad, la seguridad y la experiencia de clientes.
La digitalización y la innovación están insertos en el ADN de Melón, una compañía que, sumando a su oferta de innovadores productos y soluciones constructivas, ha desarrollado una serie de herramientas digitales con el objetivo de mejorar la calidad de éstos y de sus servicios. Un camino que Pablo Covacevich, subgerente Digital, y Jorge Villarroel, subgerente de Innovación de Melón, recorren diariamente trazando una meta tras otra.
Para la empresa, la búsqueda de oportunidades es permanente y ellas están en todos lados. Igualmente, las soluciones tecnológicas se aplican a las diversas áreas de la compañía, donde la evaluación temprana de los resultados ha sido fundamental. Los proyectos desarrollados -muchos de ellos con un enfoque colaborativo- han mejorado las operaciones, la logística y también la parte comercial. Un ejemplo de ello es Optimix, un sistema de optimización de despachos, en el que han participado la academia y el Estado, a través de Corfo. Dicha herramienta mejora el proceso de despacho, privilegiando el servicio. Además, desarrollaron Infomix, un sensor especial para la productividad en edificación, al estimar la resistencia en línea y conocer con precisión el tiempo de desmolde del hormigón.
“Hacemos la evaluación de la necesidad, tanto con los clientes como con el equipo multidisciplinario de transformación digital. Muchas veces, las necesidades hay que analizarlas desde un lenguaje más técnico y también destinar los esfuerzos e inversiones, para priorizar estratégicamente los proyectos”, explica Pablo Covacevich, subgerente Digital de Melón.
Con más de 12 años de trayectoria en la empresa, el ejecutivo ha logrado transmitir la importancia de utilizar los datos para conocer el viaje del cliente en toda la cadena de valor, es decir, desde la etapa de cotización hasta el servicio postventa. “La industria de la construcción es la que menos ha crecido en cinco años. Es un trabajo muy físico y análogo. Así es que todo lo que podamos hacer para que los procesos sean más eficientes para nuestros clientes es importante”, añade el ejecutivo. “Para eso desarrollamos un ecosistema de aplicaciones, para nuestros procesos internos, y para nuestros clientes, todas funcionando en sincronía para garantizar el control en los procesos como también, que sean seguros y eficientes”, dice.
Para Pablo Covacevich y Jorge Villarroel, el proceso de producción y entrega del hormigón es crítico, porque el cliente debe recibir el producto con las características especificadas y en el tiempo solicitado. Esto significa que los productos deben destacarse por su calidad y que el servicio debe ser el mejor.
“Todos nuestros procesos deben ser limpios. El desafío es convertirnos en una empresa moderna, innovadora, digital y sostenible. Nos pusimos esa meta hace varios años, acercándonos aún más al cliente con el fin de comprender de mejor forma sus necesidades para así brindarle un mejor servicio. Hemos ido mejorando en todo el viaje, para lograr soluciones simplificadas y eficientes, con la menor cantidad de ‘grasa’ posible en todas las etapas desde la cotización y servicio postventa”, comenta el subgerente Digital de Melón.
Sin duda, el camino no ha sido fácil, pues, según, Jorge Villarroel, para que los productos lleguen con la calidad que se necesita, hay todo un proceso productivo. “La tecnología ha ido avanzando y los procesos internos han ido generando mayores oportunidades para ser más eficientes. Las nuevas necesidades de nuestros clientes exigen potenciar y crear capacidades que no existían en la compañía pero el trabajo sistémico y multidisciplinario ha permitido avanzar en la senda correcta de cara descomoditizar nuestro negocio, teniendo una oferta de servicios para nuestros clientes más atractiva”, sostiene.
Un ejemplo claro es la Firma Digital. La pandemia resultó ser la oportunidad perfecta para implementar un sistema que prescindiera de la papelería. “El cambio cultural fue duro, porque había que convencer a las personas en la obra de que no recibirían un papel, teniendo el proceso digitalizado e instantáneo. Desarrollamos el proceso en dos meses mediante las metodologías modernas”, recuerda el ejecutivo.
Por Pablo Ivelic, presidente de Construye2025.
La industria de la construcción ha presentado, en forma sostenida, dos carencias de alto impacto. Sus índices de productividad no han podido despegar, mostrando un estancamiento en las últimas décadas. Al mismo tiempo, presenta una oportunidad gigantesca en el ámbito de sustentabilidad ambiental, siendo el rubro que más materia prima consume, el que más residuos genera y el que mayores gases de efecto invernadero emite.
Con esta realidad a la vista, en 2015, Corfo impulsó la creación del Programa Estratégico “Productividad y Construcción Sustentable”, hoy conocido como Construye2025. Su principal fortaleza radica en el carácter público-privado de su constitución, y su rol articulador -entre las diferentes hélices que participan de la industria- ha permitido generar procesos transformacionales para nuestro rubro.
Tras los seis primeros años del Programa se han movilizado esfuerzos del mundo académico, del sector público y de la empresa privada, materializando iniciativas tan relevantes como dos centros tecnológicos para la construcción, el Consejo de Construcción Industrializada, el Planbim, el DOM en Línea, así como la elaboración de la Hoja de Ruta RCD Economía Circular en Construcción 2035 y la Estrategia de Economía Circular en Construcción, por nombrar algunas.
El trabajo de este período y los innegables beneficios para el rubro han sido posibles gracias a la co-construcción de una hoja de ruta el año 2016, en la que participaron diversos actores de la industria, y se fijaron los principales objetivos y los focos de acción para un período de 10 años.
El mundo está cambiando, nuestro país ha evolucionado, nuevas tendencias nacen y necesidades específicas se tornan más urgentes. Resultaba necesario revisar y afinar el trabajo para el próximo cuatrienio. Esta actualización de la Hoja de Ruta resume el trabajo de revisión de nuestra carta de navegación de cara al año 2025. Fiel al funcionamiento del Construye2025, ha sido elaborada incorporando las visiones de los diferentes actores de la industria mediante talleres, entrevistas y un trabajo participativo de co-construcción.
Tenemos la convicción de que este trabajo nos posiciona a la vanguardia. Y estamos convencidos que -manteniendo el trabajo conjunto entre todos los actores de nuestra industria- lograremos acelerar la transformación de la construcción, avanzando a un país más productivo y más sustentable.
En línea con las nuevas tendencias y las necesidades más urgentes del país, el programa estratégico de Corfo presentó la actualización del documento que incorpora a diversos actores que buscan acelerar la transformación de la construcción.
Para aumentar la productividad, articulando a diversos actores y considerando también a los usuarios de las edificaciones, Construye2025 se ha guiado por una serie de lineamientos que apuntan a transformar al sector construcción.
Desde su creación en 2016, año en que se fijaron los objetivos y focos de acción para un período de 10 años, el programa impulsado por Corfo cuenta con una hoja de ruta clara y certera. Hace pocos días se presentó un nuevo documento actualizado tras un trabajo colaborativo, que incorporó diversas visiones de diferentes actores de la industria sobre brechas y oportunidades que se presentan en la construcción.
“Hay una tremenda oportunidad en sostenibilidad ambiental. Nuestra industria es la que más materiales, más residuos y más emisiones de gases de efecto invernadero genera. Con eso en mente, en 2015, Corfo impulsó el programa estratégico Construye2025, que articula las diferentes hélices (de innovación) existentes. En este tiempo, se han producido avances y transformaciones, entre ellas, el nacimiento de dos centros tecnológicos: CTeC y Cypics”, afirmó el presidente de Construye2025, Pablo Ivelic.
Además, el líder del programa destacó iniciativas como el Consejo de Construcción Industrializada, Planbim, DOM en Línea y la Estrategia de Economía Circular en Construcción. “Se elaboró una nueva hoja de ruta porque el mundo ha cambiado y Chile también. Este trabajo de revisión se hizo convocando a todos, con muchos talleres; fue bien participativo y dio fruto a una mirada colectiva para 2025. Estamos convencidos de que con esto vamos a transformar a nuestra industria desde la productividad y la sustentabilidad”, añadió Ivelic.
Más coordinación, más oportunidades
De esta manera, manteniendo el trabajo conjunto de todos los actores del rubro, Construye2025 irá acelerando la transformación que demanda un contexto de cambio climático. “Aunque la industria de la construcción no es muy atomizada, tiene desafíos que son difíciles de resolver. Era necesario tener una hoja de ruta clara en torno a la circularidad. Asimismo, mostrar que la sustentabilidad no solo es un costo por asumir, sino que una oportunidad. Es muy importante que la coordinación sea público-privada, porque hay ciertas capacidades que sin estas instancias de coordinación no se explotan”, añadió el gerente de Capacidades Tecnológicas de Corfo, Fernando Hentzschel.
En tanto, el gerente de Construye2025, Marcos Brito, presentó los diversos ejes que cruzan la hoja de ruta, donde la innovación y el capital humano se configuran como ejes transversales de las diversas acciones. Además, recordó los objetivos y valores del programa, los aprendizajes y los próximos retos.
“Queremos ser un referente para la industria nacional y también a nivel latinoamericano, porque hemos hecho nexos y ha sido positivo ver que otros países nos quieran seguir el paso. Además, tenemos un propósito que nos llama a trabajar juntos, acelerando esta transformación para ser un país más productivo y sustentable”, afirmó Marcos Brito.
Durante, el proceso de actualización de la “Hoja de Ruta 2022-2025” se hicieron entrevistas a muchos de los profesionales involucrados en la gobernanza del programa, se elaboró una matriz que identificó más de 150 brechas; y se estructuró el trabajo futuro en cinco ejes: industrialización, sustentabilidad, transformación digital, capital humano e innovación.
Por Marcos Brito Alcayaga, gerente de Construye2025.
Recientemente, presentamos la Hoja de Ruta 2022-2025, que incorpora diagnósticos sectoriales actualizados y pone especial acento en continuar y fortalecer iniciativas originales de la estrategia.
La estrategia se organiza en cinco ejes estratégicos: industrialización, sustentabilidad, transformación digital, capital humano e innovación, en donde hemos agrupado 13 iniciativas y 25 acciones, que nos guiarán de cara a los esfuerzos que nos imponen los desafíos del cambio climático y la carbono neutralidad al sector construcción.
De esta manera, en el ámbito de la industrialización, buscaremos articular esfuerzos para el desarrollo de un manual de constructabilidad, que ayude a mejorar el diseño con foco en industrialización; junto con manuales de aplicación que promuevan el uso de componentes estandarizados de construcción. Asimismo, gestionar el levantamiento de soluciones constructivas, productos y servicios disponibles a nivel nacional, que puedan ser visualizados y así potenciar su adopción en la industria.
Por otra parte, creemos que es importante seguir difundiendo casos de proyectos y soluciones constructivas exitosas en Chile, para que se repliquen y multipliquen; y junto con ello, medir la mayor cantidad de obras, con la herramienta que desarrollamos junto al Consejo de Construcción Industrializada (CCI), para así poder descubrir dónde están las principales oportunidades de mejora para las obras de construcción tradicional e industrializadas.
La sostenibilidad es un eje vertical, en el que se enmarca la propia Hoja de Ruta RCD y Economía Circular en Construcción 2035 del programa y su importante rol frente a la Estrategia Nacional de Economía Circular. Es en este eje donde se articulan iniciativas para propiciar modelos de negocio, productos y servicios de economía circular, apoyando otras iniciativas a través de distintas instancias de colaboración. Además, promover la economía circular en certificaciones e, incluso, en la rehabilitación de edificios existentes. En este contexto, destacar, además, la importancia de contar con plataformas de medición estandarizada de huella de carbono, que es el principal indicador de sostenibilidad.
En el eje de capital humano hay un compromiso con buscar herramientas para fomentar y fortalecer la capacitación y certificación de los trabajadores, trabajar en el desarrollo de nuevas capacidades en el mundo técnico para la construcción y renovar las mallas curriculares de los profesionales del sector, incorporando cada vez más la integración femenina. Finalmente, todo tiene que ver con las personas y cómo estás asumen los desafíos que el sector se plantea, por lo que será importante en este eje trabajar con un comité transversal de instituciones académicas y de formación.
Sin duda, el apoyo de Corfo durante estos seis años y del Instituto de la Construcción, durante los últimos dos, ha sido crucial para poder observar cómo poco a poco los temas que impulsamos al inicio hoy ya están cada vez más incorporados en los sectores público y privado, así como en la academia y sus mallas curriculares. El cambio de paradigma ya ha comenzado a ocurrir.
Pero no podemos avanzar solos, como siempre, uno de nuestros principales desafíos es reunir y congregar a representantes del sector que puedan generar los cambios necesarios, aunar esfuerzos y voluntades y trabajar unidos en forma estratégica. Tal vez una de las principales variables de éxito en esta etapa es medir. Midiendo y conociendo indicadores en ámbitos de productividad, sustentabilidad y transformación digital, podemos detectar con mayor precisión las áreas de mejora y, con ello, apuntar las iniciativas a objetivos que logren mejorar estos indicadores.
Por lo mismo, y más que antes, el principal esfuerzo estará centrado en contar con todas aquellas instituciones y personas que puedan aportar en el logro de estas mejoras, que estén dispuestas a trabajar en conjunto para movilizar esfuerzos sectoriales, con convicción y determinación, ya que -a la luz de las nuevas leyes de Eficiencia Energética y Cambio Climático– se nos agota rápido el tiempo para lograr todas las mejoras que nos estamos proponiendo como país. Asimismo, la urgente necesidad de eliminar campamentos y combatir el déficit habitacional, para lo cual urge una mayor productividad en nuestra capacidad productiva y despliegue de proyectos. El desafío es de todos.
La construcción industrializada se robó la pantalla en la Semana de la Construcción, donde el ministro de Vivienda y Urbanismo, Carlos Montes, presentó el plan que incluye un llamado a las constructoras a innovar para acortar los plazos.
Actualmente, 641 mil familias en Chile demandan una vivienda digna y de calidad. Por eso, organismos públicos, privados y profesionales del mundo de la construcción abordaron el problema en la Semana de la Construcción, impulsada por la Cámara Chilena de la Construcción.
Durante el encuentro, el panel “Cómo solucionar el déficit de viviendas”, convocó al ministro de Vivienda y Urbanismo, Carlos Montes; el vicepresidente de Corfo, José Miguel Benavente; y el vicepresidente de la Cámara Chilena de la Construcción, Claudio Nitsche, quienes abordaron las principales aristas de la problemática.
“Detrás de las cifras hay personas: 18.000 en situación de calle, 81.000 familias y casi 1.000 campamentos, lo que representa un crecimiento de un 74% con respecto a 2019. Así, también hay 270.000 familias allegadas, 236.000 familias hacinadas y otras 36.000 con viviendas en condiciones irrecuperables. Si a esta suma agregamos que los 270.000 allegados seguramente generan una nueva familia hacinada en la vivienda que los acoge, con toda probabilidad estaríamos hablando de más de 2.300.000 personas viviendo en condiciones precarias, deficitarias e inaceptables”, dijo Claudio Nitsche, vicepresidente de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC).
En este contexto, el Estado, los gremios, las organizaciones civiles y los constructores se están cuadrando para hacerse cargo de la falta de vivienda. “Es clave para mejorar sustancialmente la calidad de vida de más del 10% de nuestra gente”, añadió la autoridad de la CChC.
Enseguida, el ministro de Vivienda y Urbanismo, Carlos Montes, apuntó a la desigualdad, que varía de región en región y está marcada por una fuerte centralización. Frente a ello, el secretario de Estado se comprometió a reducir el déficit de viviendas mediante un Plan de Emergencia Habitacional, con nuevos modelos articulados con privados y una serie de instrumentos de gestión urbana, arriendo social, uso de suelo público, creaciones de pequeños condominios y construcción industrializada de viviendas. “Todo esto buscando reducir costos y tiempo de producción”, recalcó.
Y es que, según Carlos Montes, el rol del Estado es aunar esfuerzos y recursos. “Este plan requiere también del compromiso de las empresas constructoras tanto para construir en forma tradicional como también para innovar en la producción de la vivienda industrializada y bueno, por cierto, se requiere profundizar en la profesionalización de la mano de obra para asegurar calidad”, comentó.
Además, hoy como nunca se requiere reorganizar el acceso a los insumos. “No basta decir que subieron, sino que hay que preguntarse por qué subieron, qué parte tiene relación con el petróleo, con la situación mundial y qué parte tiene que ver con un modelo de acceso a los insumos. Para eso hay una comisión en la Corfo que busca trabajar justamente este tema”, añadió el ministro Montes.
Caso australiano
Uno de los principales especialistas en industrialización de la construcción en Australia, Damian Crough, Executive Chairman de Prefaubaus, expuso sobre la escasez de mano de obra, falta de calificación y un alza de más de 40% en el costo de la madera y acero. “Esta presión en particular y una cultura de cero emisiones de carbono y la economía circular nos ha llevado a ver los beneficios de la construcción industrializada para sacar un mejor provecho al uso de los materiales y reducir las emisiones”, señaló.
El gobierno de Australia ha apoyado métodos modernos y está invirtiendo en distintas áreas, trabajando junto a los privados para desarrollar estrategias y tecnologías que permitan mejorar en la construcción. “Hoy existen robots que construyen en 3D, por lo que se necesita crear conciencia y entender cómo estas tecnologías se desarrollan y se aplican”, explicó.
Enfoque colaborativo
Encontrar las rutas para reducir el déficit de 641.000 viviendas en Chile, es una tarea compleja y que requiere diálogo. “Quienes tienen menos acceso a la ciudad son quienes la construyen. Desde allí, es necesario repensar quiénes son nuestros clientes, quiénes son las personas y cuáles son sus necesidades. La política habitacional está cambiando y necesitamos respuestas rápidas. Si las personas no participan activamente, el camino se ve truncado. Debemos trabajar en conjunto donde las personas sean el centro de la solución”, afirmó Mariana Fulgueiras, integrante del Laboratorio de Innovación Pública de la Universidad Católica.
En tanto, para José Miguel Benavente, vicepresidente de Corfo, existen dos dimensiones clave: construcción y demanda. “Construye2025 reúne al mundo privado y público, con una oferta de valor, para responder a las demandas con una alta participación del sector privado. Tenemos urgencias, elementos regulatorios y una desarticulación entre el sector público y privado donde hay reglamentaciones que se cruzan con otros ministerios que pueda afectar a la construcción. De esta forma, el mandato a todos los ministerios ha sido la creación de mesas ejecutivas para ir avanzando semana a semana”, explicó.
Mientras que el director ejecutivo de Déficit Cero, Sebastián Bowen, puso énfasis en el “nudo” del déficit de información social. “Necesitamos saber cuál es la demanda real y cómo se distribuyen estas familias para generar una estrategia mucho más dirigida”, acotó. Por eso, llamó a construir ciudades con “sentido orgánico”, aprovechando la infraestructura que pueda dar respuestas como es el caso del plan ferroviario para la Región Metropolitana y la Región de Valparaíso, que -en conjunto- responden al 60% del déficit habitacional en Chile.
Finalmente, el arquitecto de Bordeurbano, Raúl Araya, explicó cómo su empresa logró desarrollar una solución de vivienda de micro-radicación en un emblemático cerro en Valparaíso. “Cuando la persona es sujeta del proceso constructivo, todo el entorno resulta beneficiado”, indicó. Soluciones habitacionales como la del Cerro Toro, con ocho unidades de vivienda, logran que tantos usuarios como vecinos puedan comprender y ser parte del proyecto. Esto, según el profesional, genera una mayor satisfacción al hacer partícipe a toda la comunidad en el proceso constructivo.