Webinar “Gestión circular de la demolición”, realizado el 25 de mayo de 2023
María Eugenia Ubilla, gerente de Medio Ambiente de Flesan.
A través del webinar Gestión Circular de la Demolición se dejó planteado el interés del sector por avanzar hacia la economía circular en el subrubro de la demolición. Tres especialistas en la materia comentaron buenas prácticas y de casos de éxito, generando un alto interés y adhesión del público.
Gran interés generó el webinar “Gestión Circular de la Demolición”, organizado por Construye2025, el pasado 25 de mayo y que hasta el momento tiene más de 800 visualizaciones.
Esta actividad estuvo enmarcada en la “Hoja de Ruta RCD y Economía Circular en Construcción 2035” y en la “Estrategia de Economía Circular en Construcción 2025”, esta última impulsada por nuestro programa, la Cámara Chilena de la Construcción y el Instituto de la Construcción, y que cuenta con la facilitación de la CDT. Asimismo, la actividad contó con el patrocinio de la Escuela de Construcción Civil de la Pontificia Universidad Católica de Chile y la moderación de Alejandra Tapia, coordinadora de Sustentabilidad de Construye2025.
Marcos Brito, gerente de Construye2025, dio unas palabras de bienvenida, en las que recordó que Chile está en sobregiro ecológico, es decir, que ha gastado ya sus recursos naturales sustentables del 2023. “La economía circular nos ofrece enormes oportunidades en toda la cadena de valor, desde la formulación de proyectos hasta el fin de vida de las construcciones. Hoy, lo que nos convoca es cómo podemos dar un uso más eficiente a los recursos, reduciendo la extracción de materias primas vírgenes y avanzar así hacia una gestión circular de los residuos de la demolición, a través de nuevos modelos de negocios y empleos verdes”, señaló Brito.
La gestión circular consiste en planificar y ejecutar obras de demolición, considerando principios y estrategias que permitan mantener el valor de materiales y recursos por el mayor tiempo posible, reducir impactos en el medio ambiente y evitar el daño a la salud de las personas.
“En esta instancia, queremos mostrar casos donde se abordarán los desafíos de la economía circular, mediante iniciativas y buenas prácticas”, destacó Brito.
En representación del Ministerio de Medio Ambiente, Rubén González, profesional de la oficina de implementación legislativa y economía circular del MMA, compartió el contexto de la NCh3727 “Gestión de residuos – Consideraciones para la gestión de residuos en obras de demolición y auditorías previas a obras de demolición”: “Los procesos de normalización permiten definir términos y estándares. Desde el Ministerio de Medio Ambiente vimos que era necesario definir un ámbito normativo para el sector de la demolición en su avance hacia la economía circular”, afirmó.
Tras la visión de lo público, Alejandra Tapia se refirió a la importancia de implementar la economía circular en la demolición. Comenzó con una reflexión sobre el impacto de la producción y el consumo y lo devastador que es para el planeta. “Tenemos que replantear este modelo que vemos que genera tremendos impactos”, dijo.
Se refirió también al marco regulatorio, señalando que éste está basado en el modelo de la economía lineal, por lo que no considera la economía circular. Por ello, se explica el “tremendo aporte de la norma técnica NCh3727 impulsada por el Ministerio de Medio Ambiente donde define el término gestión circular”, señaló agregando que “hay oportunidades en la transformación, y en diversificar servicios, como vamos a ver en nuestros expositores”.
Los especialistas de este webinar mostraron cómo reusan materiales, innovación y emprendimiento, cómo el diseño toma estos conceptos, se generan empleos verdes y nuevas oportunidades de negocios en torno a la recuperación de materiales, componentes y productos de construcción. Asimismo, se expuso sobre “la necesidad de contar con un marco regulatorio integrado que facilite la valorización”, contó Tapia.
A continuación, la arquitecta mostró un video basado en la NCh 3727, el cual quedó alojado en el sitio web del Construye2025, disponible para todo el público:
Buenas prácticas y casos
María Eugenia Ubilla, gerenta de Medio Ambiente de Flesan, presentó buenas prácticas basadas en los más de 40 años de la empresa siendo líder de las demoliciones en Chile, dando soluciones profesionales para la ejecución de proyectos en cumplimiento con la normativa ambiental y comprometidos con avanzar en la industria de construcción hacia una economía circular, mediante la mejora continua, la innovación y alianzas estratégicas para la gestión de residuos.
“El poder trabajar la norma nos ha permitido permear nuestros dolores y que la demolición deje de ser un oficio y sea un subrubro profesional que merezca el detalle, el manejo y el control que se merece”, manifestó Ubilla.
La siguió Reynaldo del Pozo, director ejecutivo y CEO de Reusamaterial, una empresa familiar que partió el 2016 con proyectos de arquitectura enfocados a la sustentabilidad, al confort térmico y lumínico, y que luego le fueron encargando algunos proyectos de construcción, donde se encontraron con la problemática de los residuos. “En una primera casa que construimos, nos encontramos con 140 m2, donde sacamos cuatro camiones de 8 m3 cada uno de puros residuos. Eso nos llevó a plantear una nueva metodología como empresa, y tras un trabajo de estudio e investigación, nos encontramos que sólo se reutiliza un 1% del material del activo construido. Frente a esa situación, nosotros cambiamos nuestros métodos”, compartió.
Especificó que, en Reusamaterial, pasaron de una construcción lineal a una circular en la que los nuevos principios son el diseño, la deconstrucción y la reutilización. Además, en la empresa generaron la primera plataforma marketplace, con el fin de conectar empresas y comunidad. De esta forma, se puede conectar el material saliente de las obras con el que ingresa. La plataforma www.reusamaterial.cl es georreferencial y se adjudicó un fondo Corfo y un fondo de O’Higgins Lab.
Para finalizar, Anamaría De León, consultora en Economía Circular y Académica de la Pontificia Universidad Católica de Chile, conversó sobre las cualidades de diseño circular, presentadas a través del libro inspiracional “Diseño circular de viviendas para Chile: estrategias y ejemplos de inspiración”, que desarrolló con Felipe Ossio en colaboración con dos académicos de Bélgica.
Asimismo, profundizó en los aspectos que se deben considerar desde la etapa de diseño, tanto para incorporar materiales y componentes reutilizados como para asegurar que en etapas futuras estos sean reutilizables, a través de ejemplos en Chile y el mundo.
El webinar completo está disponible aquí:
El sector de la construcción se prepara para continuar impulsado la economía circular en todo el ciclo de vida de la edificación. Cómo lo está haciendo se conversará en el webinar “Gestión Circular de la Demolición”, organizado por Construye2025 para el 25 de mayo.
En el contexto de la Hoja de Ruta RCD Economía Circular en Construcción 2035 y la Estrategia Economía Circular en Construcción 2025, Construye2025 organiza el webinar “Gestión Circular de la Demolición”, con el objetivo de introducir la economía circular en las distintas etapas de la demolición, y abordar los desafíos para su implementación mediante iniciativas y buenas prácticas.
“La gestión circular consiste en planificar y ejecutar obras de demolición en un activo construido, considerando principios y estrategias que permitan mantener el valor de materiales y recursos por el mayor tiempo posible, reducir impactos en el medio ambiente, y evitar el daño a la salud de las personas”, comenta Alejandra Tapia, coordinadora de Sustentabilidad de Construye2025.
A nivel nacional, se ha avanzado en la materia a través de la norma NCh3727 “Gestión de residuos – Consideraciones para la gestión de residuos en obras de demolición y auditorías previas a obras de demolición”, que presenta una serie de buenas prácticas para la actividad. Asimismo, ya hay ejemplos de deconstrucción y reutilización de materiales.
Para dar el contexto del escenario actual, Carolina Garafulich, presidenta de Construye2025, y Rubén González, profesional de la Oficina de Economía Circular del Ministerio de Medio Ambiente, darán unas palabras de bienvenida.
Los temas centrales serán presentados por María Eugenia Ubilla, gerente de Medio Ambiente, Flesan; Reynaldo Del Pozo, director ejecutivo de ReusaMaterial, la arquitecta Anamaria De León; y Alejandra Tapia, de Construye2025.
El webinar se realizará este 25 de mayo, a las 10:00 horas, y cuenta con el patrocinio de la Escuela de Construcción Civil de la Universidad Católica.
Inscripciones abiertas aquí: https://forms.gle/MX9DA2hdVgkatHeQ9
El trabajo conjunto de dos empresas ha hecho posible que los residuos inertes de demolición se valoricen en Tiltil, donde se procesan para dar origen a áridos reciclados.
Un total de 12 mil toneladas de áridos artificiales y reciclados al mes pueden procesarse mensualmente en la planta que Río Claro administra en Rungue, Tiltil. De ese volumen, al menos siete mil toneladas son de áridos reciclados. Una de las empresas que ha confiado en el servicio es Flesan, donde -producto de las demoliciones de infraestructura que realizan- tenían mucho hormigón disponible para valorizar.
“Generamos demasiados residuos de construcción y demolición. En el proceso, hemos visto un aumento en el valor de las disposiciones finales, el transporte y otras variables. Así es que buscamos alternativas y nos encontramos con Río Claro, donde trabajan de manera correcta en cuanto a normativa y tienen lo que estamos buscando, que es darle un sentido al residuo de demolición”, explica María Eugenia Ubilla, gerenta de Medio Ambiente de Flesan.
Así, al tomar una losa de hormigón armado, en Río Claro extraen el fierro que conforma la estructura, para su reutilización; mientras que el resto del material inerte -una vez limpio- va a la chancadora. “Comenzamos con una muestra pequeña de 20 toneladas y Río Claro se encargó de caracterizar las obras, para evaluar las partidas que podían reciclarse. Ojalá ese sea el camino para una mayor cantidad de residuos de demolición y construcción”, dice la ejecutiva.
Según Carla Salinas, asesora de Proyectos de Río Claro, el proceso implica un tratamiento previo en las zonas de acopio de los residuos y del hormigón endurecido, para luego pasar a planta con el material. “No demora más de un día generar 600 toneladas de árido de distinta granulometría, de acuerdo a la norma NCh163. “Nuestra planta funciona de acuerdo a todos los estándares de seguridad y también alineada con lo que exige la Seremi de Salud”, explica.
Desde 2016, Río Claro ha estado trabajando con escoria negra para hacer un árido artificial y hoy, gracias a un proyecto aprobado por la Seremi de Salud, la empresa puede generar más de siete mil toneladas por mes de árido reciclado de hormigón endurecido o bien, árido producto del procesamiento de escorias.
La labor realizada en la planta de Rungue en Tiltil le cayó como anillo al dedo a Flesan, pues luego de una demolición se genera mucha pérdida de material. “La gente piensa que yo recibo una casa y la demuelo inmediatamente. Pero hay todo un proceso de desmantelamiento: quincallería, baños, pisos, ventanas. Todo tiene una segunda vida; y, luego, nos abocamos a los temas reciclables: madera, fierro, plástico, obviamente, por cada tipo de obra. Siempre ha sido un dolor el escombro”, comenta María Eugenia Ubilla.
Futuro sostenible
Según la gerente de Medio Ambiente de Flesan, la economía circular llegó para quedarse. Pero no se trata solo de tomar el escombro de demolición y utilizarlo en un camino o hacer material para sub bases. “Tengo que asegurarme de que el residuo no venga contaminado, tomar una responsabilidad en base a los residuos si los quiero convertir en un material. Eso ya la gente lo sabe, se rompió la barrera del conocimiento y ahora estamos en una etapa mucho más importante. Ahora, tenemos que evidenciarlo, para que la gente quiera participar y unirse”, señala.
En este contexto, la especialista espera que la gestión de los residuos de construcción y demolición se potencie. “Que se entienda el concepto de residuos de construcción y demolición y, en base a eso, que la ignorancia no sea un arma de doble filo, sino sea que sea algo que le permita a los demás buscar alternativas que nos lleven hacia la protección del medio ambiente porque claramente los recursos naturales no son infinitos y eso lo sabemos desde hace muchos años”, concluye María Eugenia Ubilla.
El programa estratégico impulsado por Corfo coordinó una mesa de trabajo a la que llegaron representantes del Ministerio de Medio Ambiente, centros tecnológicos y empresas que trabajan por la correcta gestión de estos desechos.
Una decena de entidades relacionadas con los Residuos del a Construcción y Demolición (RCD), se reunieron la tarde del jueves en las oficinas de Construye 2025. La razón para ello es que el programa impulsado por Corfo está colaborando en un estudio sobre los Residuos de Construcción y Demolición (RCD), encargado por el Ministerio del Medio Ambiente y que está siendo ejecutado por la consultora Gescam.
El estudio ya está en su segunda etapa y, entre otras cosas, busca desarrollar un reglamento específico para los RCD, así como hoy los hay para residuos domiciliarios (RSD), aguas servidas (lodos) y establecimientos de salud (REAS).
Esto luego de las primeras brechas que se encontró en el estudio Escenarios y políticas públicas para los RCD, fue el hecho de que no hay una definición legal de qué engloban este tipo de desechos.
A la mesa de trabajo convocada por Construye2025 llegaron especialistas en el tema de empresas y entidades como Flesan, Río Claro, Fundación Basura, Recylink, Axisdc, Aza, Disal, Idiem, Viconsa, Echevería Izquierdo, Resiter, CDT, CTeC y UC para informarse de los hallazgos que Gescam hizo al revisar los casos de países como Francia, España y República Checa, además de dar a conocer sus experiencias en la industria.
Ejemplos citados fueron la enorme valorización que pueden conseguir materiales nobles, o incluso elementos como refrigerantes, en demoliciones o el ahorro millonario que puede implicar en transportes el buen trabajo a la hora de reutilizar materiales.