Estrategia Economía Circular

¿Cómo nace?

La Estrategia Economía Circular en Construcción nace como un convenio de colaboración entre la Cámara Chilena de la Construcción, el Instituto de la Construcción y el programa Construye2025 de Corfo, ante la necesidad de mitigar los impactos de la industria y alinearse de forma proactiva y sectorial en el marco de la «Hoja de Ruta Nacional de Economía Circular Chile 2020-2040» y la «Hoja de Ruta RCD Economía Circular en Construcción 2035».

Objetivo

Tiene como objetivo articular los esfuerzos de la cadena de valor del sector construcción mediante un proceso participativo y colaborativo, que permita definir iniciativas de economía circular alineadas a las políticas relacionadas y que puedan ser implementadas por la industria en el corto plazo. Las etapas y actividades de la Estrategia son coordinadas e implementadas por una Secretaría Ejecutiva, rol llevado a cabo por la Corporación de Desarrollo Tecnológico (CDT), institución que además actúa como facilitador de la gobernanza y los procesos participativos incluidos en la Estrategia.

Visión

La visión de la Estrategia Economía Circular en Construcción es establecer en Chile la cultura de construcción circular, que permita el desarrollo sostenible de la industria. El sector construcción es uno de los principales consumidores de materias primas. El 40% de lo que se extrae a nivel mundial se destina a la construcción de edificios y parte importante termina en vertederos (entre un 25 y 40% de los residuos a nivel mundial provienen del sector construcción). En Chile, cerca del 34% de los residuos sólidos corresponden a residuos de construcción y demolición (RCD). Al año 2023, este residuo alcanzará un volumen similar a 15,5 estadios nacionales o tres cerros Santa Lucía. Adicionalmente, el sector construcción consume el 32,6% de la energía generada a nivel nacional y es responsable de cerca del 30% de los gases de efecto invernadero emitidos en el país.

Esto demuestra que el modelo económico lineal de “extraer-usar-desechar” está llegando a un límite que no es sostenible ni rentable por mucho tiempo más. Es el momento de que la industria piense en un nuevo modelo de negocio. Una disrupción en el sistema que cambie la forma como manejamos los recursos, como fabricamos y utilizamos los materiales, de forma colaborativa y dentro de los límites del planeta, donde los residuos pasen a ser un nuevo recurso que ingresa al ciclo.

Gobernanza