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Estrategia de economía circular en la construcción: cambiando el paradigma

Fecha: 30/11/2020

Tras el lanzamiento de la “Hoja de Ruta RCD y Economía Circular en Construcción”, y la “Hoja de Ruta Nacional de Economía Circular”, en desarrollo, la industria se comprometió a realizar acciones concretas para cambiar la forma en que desarrolla nuevos negocios.

La Cámara Chilena de la Construcción (CChC), el Instituto de la Construcción (IC) y el programa Construye2025, impulsado por Corfo, con la facilitación técnica de la Corporación de Desarrollo Tecnológico (CDT), iniciaron su proceso colaborativo para generar un plan de acción público-privado. Con miras a 2025, se lanzó la “Estrategia de Economía Circular en Construcción” que busca dar continuidad a la “Hoja de Ruta RCD  y Economía Circular en Construcción 2035” y en concordancia con la “Hoja de Ruta Nacional de Economía Circular 2040” liderada por el Ministerio de Medio Ambiente.

  En una jornada a la que asistió la ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt, los principales actores de la industria hicieron hincapié en el trabajo articulado y colaborativo para impulsar medidas orientadas a disminuir el uso de recursos, minimizar el impacto ambiental y proteger el patrimonio natural. “A nivel global, la industria de la construcción genera prácticamente el 40% de los gases de efecto invernadero y el 40% de los consumos de materia prima”, recordó Juan Carlos León, director del proyecto de Estrategia Economía Circular y gerente de la CDT.

  Por eso, al abrir el encuentro, el ejecutivo destacó la necesidad de hacerse cargo de los impactos que genera la industria. “La pandemia ha significado tener que llevar adelante algunas iniciativas de cambio como la transformación digital, pero también tenemos que pensar cómo vamos a recuperarnos y cuál va a ser la nueva economía que vamos a desarrollar. La resiliencia va a estar muy ligada a la economía circular”, dijo.

En agosto de este año Construye2025 junto a los ministerios de Medio Ambiente, Vivienda y Urbanismo, Obras Públicas y Corfo, lanzó la “Hoja de Ruta RCD y Economía Circular en Construcción”, sin embargo se hacía necesaria una bajada específica para iniciativas aún más concretas desde el sector privado. “Queremos ser el primer sector económico que -de manera potente y con un compromiso completo- pueda avanzar en la manera de pensar la forma en que desarrolla nuevos negocios”, añadió Juan Carlos León.

Un compromiso de todos

Por su parte, el vicepresidente de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), Carlos Zeppelin, llamó a avanzar rápido y con fuerza por una cultura de construcción circular, que permita nuestro desarrollo sostenible en la industria a largo plazo. “Esa es la razón porque estamos impulsando en conjunto esta iniciativa multisectorial que establece nuestro compromiso como industria de articularnos frente a un desafío común y transformador, que implica construir pensando futuro, aumentar la productividad del sector, reducir la dependencia de los recursos naturales, controlar la cantidad de residuos generados y generar mayor crecimiento en la economía, así como también en los ámbitos social y ambiental”, explicó.

Esta tarea de largo aliento requiere de una colaboración permanente y de la articulación de los esfuerzos de la cadena de valor, en torno a una estrategia sectorial de economía circular en nuestra industria. “Es fundamental cambiar el paradigma de cómo construimos. Buscamos poder visualizar oportunidades y desafíos, consensuar una visión compartida para crear acciones y difundir e inspirar el compromiso de todos: sector público, sector privado, academia y ciudadanía”, comentó Zeppelin.

En tanto, el presidente del Instituto de la Construcción (IC), Miguel Pérez, hizo hincapié en que esta fue la primera actividad que hace público el trabajo que están realizando el Instituto de la Construcción, la Cámara Chilena de la Construcción y el programa Construye2025. “Realizar una estrategia sectorial de economía circular en construcción es, sin duda, un tremendo desafío que convoca a todos quienes formamos parte de la cadena de valor de la industria”, afirmó.

En este sentido, el titular del IC, recalcó la importante misión que significa coordinar y articular esfuerzos públicos y privados para colaborar en el desarrollo de la sustentabilidad, calidad y productividad de la construcción, fomentando políticas, normas y mejores prácticas. “Nuestro desafío es que todos contribuyan con una amplia diversidad de ideas, opiniones y enfoques que nos permitan pasar de una economía lineal a una economía circular. Estableciendo así el carácter colaborativo y global que implica esta propuesta de economía circular en la que cada sector es importante para la materialización de un desarrollo sustentable efectivo”, argumentó.

Derribando mitos

Durante el encuentro, la ministra del Medio Ambiente, Carolina Schmidt, celebró que la construcción sea la primera industria en generar una estrategia sectorial en el marco de la “Hoja de Ruta Nacional”. Según la autoridad medioambiental, el gobierno ha buscado derribar el mito de que el cuidado del medioambiente y el crecimiento económico se oponen. “Esto no es así: un desarrollo sustentable e inclusivo potencia nuestro crecimiento y abre enormes oportunidades para el desarrollo de nuestro país y desde el ministerio estamos trabajando para que, en conjunto con el sector privado, podamos avanzar hacia la economía circular”, puntualizó.

El sector de la construcción no es solo el principal consumidor de materias primas a nivel global, sino que genera más del 35% de los residuos que actualmente se producen en nuestro país. “Se estima que, en Chile, se generan pérdidas del orden de US$315 millones anuales por mermas en materiales. Estos residuos son altamente aprovechables pero terminan en residuos o escombros”, afirmó la ministra Schmidt. 

En este contexto, con la incorporación de la economía circular en el mundo de la construcción se abrirían innumerables posibilidades para la optimización y el ahorro de recursos, así como también para la innovación y el emprendimiento. “Por ello, en conjunto con los ministerios de Obras Públicas y de Vivienda y el programa Construye2025, presentamos la ‘Hoja de Ruta RCD y Economía Circular en Construcción’, que fue desarrollada con una amplia participación ciudadana. Este documento será la guía para desarrollar las políticas, acciones y metas hacia un desarrollo circular y sostenible”, recordó la secretaria de Estado.

A continuación, la coordinadora de Sustentabilidad del Programa Construye2025 de Corfo, Alejandra Tapia, llamó a las personas a liderar el cambio, empujando e implementando acciones que nos ayuden a avanzar hacia una construcción más circular y sostenible. Finalmente, el presidente de la CChC de Punta Arenas, Carlos Braun, invitó a los actores clave de la industria a trabajar de forma colaborativa y responder a las preguntas más complejas sobre nuestro futuro, abriendo un proceso histórico de innovación para la industria.

“Esta estrategia es la oportunidad que tiene la construcción para inspirar al país y a otras industrias, asumiendo un compromiso basado en la acción. Esta invitación es a ser parte de la reinvención de nuestra industria, dejando un legado que enorgullezca a Chile”, indicó Braun. Para cerrar, el representante del gremio en la ciudad más austral de Chile, se refirió a la nueva estrategia de economía circular en la construcción como una oportunidad para generar una reactivación económica verde posterior al COVID-19 y también para cuidar las bases de nuestro desarrollo.

Analizarán aporte de los modelos contractuales colaborativos para ejecución de proyectos

Fecha: 18/11/2020

“Aquí lo fundamental es cómo somos capaces entre todos de generar un ambiente colaborativo y de confianza en pos de un objetivo en común, que es el término del proyecto en tiempo y costo”, señala Carlos Zeppelin, vicepresidente de la Cámara Chilena de la Construcción, patrocinadores de la actividad.

La creciente complejidad que involucra la ejecución de un proyecto, en especial cuando estos son de mayor tamaño, como ocurre en el sector minero, puede redundar en mayores costos y plazos, generando espacios de divergencias entre mandantes y contratistas.

Ante esta realidad, los modelos tradicionales de contratación han ido dando paso a dinámicas colaborativas, que permitan ejecutar exitosamente el proyecto asignando de mejor manera sus riesgos entre las múltiples partes, aspecto que será abordado en el webinar “Modelos contractuales colaborativos”, el que girará en torno a los beneficios que entregan herramientas como el modelo IPD “Integrated Project Delivery”, que apuntan a la generación de enfoque de trabajo en común entre las empresas involucradas.

La actividad se realizará el próximo miércoles 25 de noviembre, desde el mediodía, contando con el patrocinio de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) y Construye 2025, con la colaboración de SFM Group. El evento busca dar respuesta al hecho que “desde hace un tiempo, en Chile han empezado a evidenciarse fuertemente conflictos entre mandantes y contratistas. Hemos levantado algunas estadísticas, tenemos varias encuestas que van mostrando este fenómeno. Esos conflictos se han exacerbado como consecuencia de la pandemia del Covid-19, en que se han paralizado obras, y se han incrementado los costos por medidas sanitarias y ha caído la productividad en las obras, lo que han dado origen a divergencias”, explica Carlos Zeppelin, vicepresidente de la Cámara Chilena de la Construcción, uno de los patrocinadores de la actividad.

Ante dicho escenario, “lo que estamos impulsando fundamentalmente son mecanismos que han sido utilizados internacionalmente, herramientas para poder ir racionalizando estos conflictos, teniendo una participación activa entre las partes. Acá hay un principio fundamental que estamos promoviendo, que tiene que ver con algo que hemos ido perdiendo cada día más como país, que es la confianza entre las partes”.

Al respecto, el dirigente del gremio  comenta que “todos estos instrumentos en general se basan en la buena fe y la confianza entre las partes, no puedes regular por escrito todo lo que puede pasar, menos en contratos a largo plazo, a 20 años. Aún cuando los contratos fuesen en plazo menores, y ante el hecho de que existan en el mundo una serie de incertidumbres, tanto tecnológicas, ambientales, entre otras, refuerza la necesidad de generar relaciones colaborativas y de confianza“.

Mirada en común

Carlos Zeppelin destaca la importancia de este tipo de instancias, como una forma para ir generando conciencia, e impulsar una mirada de trabajo mucho más colaborativa.

“Tiene que ver fundamentalmente con una mirada común de todos los involucrados, orientada a cumplir con los objetivos del proyecto”, asegura, destacando además que “este tipo de herramientas lo que ha generado es un aumento de la productividad, y un mejoramiento en la oportunidad de entrega de los proyectos”.

Estas herramientas de diálogo adquieren mayor relevancia, considerando los efectos que ha tenido la pandemia.

Lo que ha impactado en el conflicto fundamentalmente son las paralizaciones y ralentizaciones debido a la pandemia. Cuando paralizas, tienes un punto de conflicto, ya que se generan mayores costos directos y gastos generales que alguien debe asumir”, señala el vicepresidente de la Cámara Chilena de la Construcción.

Carlos Zeppelin, vicepresidente de la CChC.

A ello se suma el que “hoy día hemos visto aumentos de costos relevantes producto de todas las medidas sanitarias, el distanciamiento social, la cantidad de test que hay que hacer, entre otras medidas. Esto ha implicado a la vez una baja en la productividad, teniendo que muchas veces colocar turnos adicionales en las faenas. A mi modo de ver, estos aspectos son los que van a generar situaciones de conflictividad”.

Respecto del mecanismo que será presentado en el evento, el ejecutivo explica que se trata de “una herramienta muy potente, que viene siendo estudiada desde  hace mucho tiempo, y que hoy está mucho más consolidada . Por eso, creo que hay que potenciarla. Existe un abanico de herramientas, pero creo que debemos focalizarnos y concentrarnos en un par de de ellas, y desarrollarlas bien, generando planes pilotos para su implementación. Una de éstas es la que se presentará en el webinar”.

“Aquí lo fundamental es pensar cómo somos capaces entre todos de abrir los espacios de conversación, de generar un ambiente colaborativo y de confianza en pos de un objetivo en común, que es el término del proyecto. Así se han desarrollado los proyectos más exitosos el mundo, generando espacios colaborativos y de confianza que permitan esto”, menciona.

Inscripciones en: https://contratoscolaborativos.gr8.com/

Fuente: Minería Chilena

Sector construcción lanza Estrategia sobre Economía Circular

Fecha: 03/11/2020

Iniciativa reúne a los principales actores de la industria con el objetivo de impulsar medidas que disminuyan la demanda de recursos, logren menor impacto ambiental, la regeneración del medio ambiente y la protección del patrimonio ambiental.

Este martes 03 de noviembre, se presentó la visión y se inició el proceso colaborativo para la cocreación de la Estrategia de Economía Circular en Construcción, iniciativa en la que participan como actores activos la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), el Instituto de la Construcción (IC) y el programa Construye2025 de Corfo, junto con la facilitación técnica de la Corporación de Desarrollo Tecnológico, CDT.

La Estrategia busca generar un plan de acción público-privado al 2025, como continuidad de la Hoja de Ruta RCD Economía Circular al 2035 y en el marco de la Hoja de Ruta nacional de Economía Circular al 2040.

En un evento virtual que congregó a más de 80 personas, se reunieron los actores clave de la industria para lanzar esta iniciativa que busca potenciar la Economía Circular en sector Construcción. En la ocasión, Carlos Zeppelin, vicepresidente de la Cámara Chilena de la Construcción, planteó que el desarrollo de esta estrategia es un desafío relevante para el sector. En ese sentido destacó que el hecho de “que hoy estemos reunidos es una oportunidad para relevar lo importante que es que avancemos rápido y con fuerza en nuestro país, por una cultura de construcción circular, que permita nuestro desarrollo sostenible en la industria a largo plazo. Esa es la razón porque estamos impulsando esta iniciativa multisectorial que establece nuestro compromiso como industria de articularnos frente a un desafío común y transformador, que implica construir pensando futuro, aumentar la productividad del sector, reducir la dependencia de los recursos naturales, controlar la cantidad de residuos generados y generar mayor crecimiento en la economía, así como también los ámbitos social y ambiental”. Para ello, añadió, “es fundamental cambiar el paradigma de cómo construimos para enfrentar los desafíos actuales y futuros”. Una reinvención que va de la mano de la innovación, desarrollo  de nuevos modelos de negocios y creación de empleos de calidad en el sector de la construcción que, al mismo tiempo, ayudarán a disminuir el impacto climático”.

 

En la misma línea, para el presidente del Instituto de la Construcción, Miguel Pérez, “realizar un Estrategia Sectorial de Economía Circular en Construcción es, sin duda, un tremendo desafío que nos convoca a todos quienes formamos parte de la cadena de valor de la industria”.  Estableciendo así el carácter colaborativo y global que implica esta propuesta de economía circular en la que cada sector es importante para la materialización de un desarrollo sustentable efectivo.

En la oportunidad también  participó la ministra del Medio Ambiente, Carolina Schmidt, quien celebró que la Construcción sea la primera industria en generar una estrategia sectorial en el marco de la Hoja de Ruta Nacional. “El sector de la construcción no es solo el principal consumidor de materias primas a nivel global, sino que genera más del 35% de los residuos que actualmente se producen en nuestro país (…) Prevenir y reducir los residuos de la construcción y la demolición, sin duda producen impactos medioambientales significativos, pero también enormes beneficios y oportunidades directas para las empresas del sector”. A ello añadió que “con la incorporación de la Economía circular en el mundo de la construcción se abren innumerables posibilidades para la optimización y el ahorro de recursos, así como también para la innovación y el emprendimiento”.

Por su parte, desde el Programa Construye2025 de Corfo, Alejandra Tapia, coordinadora técnica de Sustentabilidad, felicitando la posibilidad de concretar esta iniciativa, indicó que “es posible desacoplar la extracción de recursos en pro de generar un crecimiento económico centrado en el bienestar de las personas y en armonía con el medio ambiente”. Junto a ello, instó a protagonizar esta nueva etapa que vive la industria: “hago un llamado a distintos liderazgos, cualquier personas desde el rol que desempeña, puede ser un gran líder para empujar, implementar acciones que nos ayuden a avanzar hacia una construcción circular y más sostenible”, concluyó.

Tras las palabras de bienvenida, se puso en contexto las diversas oportunidades que la Economía Circular ofrece al sector, junto con algunos casos de éxito que buscaron remover voluntades en pos de  esta estrategia. Finalmente, la comunidad de líderes movilizadores de la estrategia, representado por Carlos Braun, presidente de la CChC de Punta Arenas, anunció su compromiso de adhesión para con esta anunció su compromiso de adhesión para con esta iniciativa.

Estrategia

La Estrategia de Economía Circular en la Construcción, pretende establecer en Chile la cultura de construcción circular, viéndola como un desafío y al mismo tiempo como una oportunidad que permita el desarrollo sostenible, social, ambiental y económico de la industria, a través del incentivo de iniciativas coordinadas entre el sector público, privado, academia y  la validación ciudadana.

Este proyecto es de carácter nacional  y busca impulsar medidas que disminuyan la demanda de recursos, lograr menor impacto ambiental, la regeneración del medio ambiente y protección del patrimonio ambiental, junto con la mejora de la  calidad de vida de las personas. Sumado a esto, también instala la oportunidad de innovación y nuevos modelos de negocio circulares, para generar una reactivación económica verde posterior al escenario de pandemia por Coronavirus al que nos hemos enfrentado este 2020.

Este objetivo tiene diferentes pilares de acción, los que van desde invitar a la academia a incorporar integraciones tempranas entre las diferentes especialidades como diseño,  arquitectura, construcción industrializada y la formación de capital humano, con criterios de economía circular y desarrollo sustentable, hasta potenciar el compromiso del ámbito arquitectura y de los sectores industriales, proveedores, inmobiliarias, constructoras y por supuesto, la participación ciudadana.

Estas alianzas serán cruciales para lograr los objetivos desde un estilo de colaboración que permitan co-crear la estrategia de Economía Circular en Construcción y ponerla en práctica.

Para más información, puede escribir a economiacircular@cdt.cl

La construcción, una actividad esencial

Fecha: 29/10/2020

Miles de trabajos perdidos y suspendidos mantuvieron en vilo a quienes se desempeñan en la industria. Pero, la reciente autorización para que obras privadas de construcción puedan operar en zonas en cuarentena, abrió una luz de esperanza.

Más de seis mil puestos de trabajo perdidos y otros 16 mil suspendidos, solo en Concepción, es el balance que hace la presidenta regional de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), Helen Martin. Por eso, reactivar la industria tomó  carácter de urgencia en las empresas. “Las mujeres también han perdido una posición que había costado mucho ganar. La reactivación permitirá que todas las que perdieron su trabajo puedan recuperar sus empleos y tener una vida más estable desde el punto de vista económico”, señala.

Según la presidenta regional de la CChC, muchas empresas están complicadas desde hace más de un año, tras el estallido social. La productividad, dice, ha caído hasta en 40% y a ese impacto hay que sumar el incremento de los costos debido a la implementación de todos los protocolos COVID-19. “Hoy las empresas están sumamente debilitadas. Por cada empresa que se pierde toma mucho tiempo recuperarla. Así es que entre más rápido se echen a andar los proyectos mejores probabilidades tenemos”, añadió Helen Martin.

 Igual de preocupado se mostró el representante de la CChC en el Consejo Directivo de Construye2025, Enrique Loeser. “Con la Cámara hemos intentado infructuosamente que la construcción fuera declarada actividad esencial, porque es demasiado importante para la actividad económica del país. Eso es lo que ha sucedido en otros países, especialmente europeos, donde se dieron cuenta que parar la construcción es una complicación grave para la cantidad de trabajadores que están involucrados, más las empresas, pequeñas empresas, subcontratistas, es una cadena muy grande”, dijo.

 En este sentido, en la industria aseguran que activar la cadena de la construcción tendrá un gran efecto multiplicador, ya que ayudaría a mejorar los números de desempleo de forma inmediata. “Las medidas son urgentes, porque la construcción es un mundo muy grande con pymes que trabajan como los subcontratistas, cuya capacidad de aguantar no es indefinida, hoy en periodos de cuarentena salen a buscar trabajo en otros lugares porque necesitan llevar el pan a la casa, lo cual es más riesgoso”, apuntó Helen Martin.

La trazabilidad del COVID-19

 Un protocolo muy estricto acordado entre los ministerios de Economía y Hacienda le ha puesto freno a los contagios en obra y las empresas están tomando todas las medidas para garantizar la salud de sus trabajadores. Todos aquellos que tuvieron contacto estrecho con una persona contagiada deben cumplir con la cuarentena preventiva. Asimismo, algunas empresas han dispuesto transporte propio para sus trabajadores, donde existen listas que muestran qué personas viajaron juntas en el mismo bus y, además, llevan un registro de todas las cuadrillas.

En tanto, desde la Dirección General de Obras Públicas, se piden reportes semanales, en los cuales se controlan todos los efectos COVID-19: cantidad de personas enfermas, número de personas que están en cuarentena, si la obra está o no en una zona con restricción, etc. Toda la masa crítica de trabajadores se mantiene controlada, así como el mapa completo de obras paralizadas o en reprogramación.

Según el jefe de la División de Edificación Pública de la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas, Rodolfo Rojas, uno de los primeros indicadores que muestra si sube o baja la economía es el sector construcción. Esto porque es intensiva en mano de obra si se considera toda la cadena, que incluye a proveedores, transportistas y profesionales que prestan servicios, por ejemplo. “El MOP tiene una ley especial que se está tramitando, sobre reactivación económica y también estamos preocupados de ver el avance de las licitaciones, del monitoreo de los contratos, de la mano de obra de cada proyecto”, señaló.

 Sin embargo, aún cuando se hagan todos los ajustes necesarios para reactivar al sector, el economista de la Comisión Nacional de Productividad, Esteban Rojas, cree que la productividad de la construcción está rezagada en comparación al resto de la economía. “Los plazos y costos nos muestran que, en promedio, en Chile hay mayores proyectos con sobre costo, versus el análisis internacional, y que los proyectos con retrasos, si bien son parecidos en cuanto a número, el porcentaje de retraso es mucho más alto en Chile que en la vivencia internacional”, argumentó.

En este ámbito, la investigación que lleva adelante la Comisión Nacional de Productividad, reveló que en más de 27.000 proyectos de infraestructura pública -desde 2009- las grandes obras tardan en promedio más de tres ciclos políticos en materializarse: los hospitales, las obras de riego, los puentes, y las grandes obras viales. Esto abriría un espacio de mejora, al menos, en la trazabilidad de los sistemas de información, para poder impulsar el desarrollo de este tipo de obras. 

Pero también, el economista apunta a aspectos culturales y a que la industria es reacia al cambio, lo que dificulta la adopción de innovación y tecnología. A esto se suma el shock negativo de productividad en las empresas debido a los mayores costos de ajuste, a las nuevas condiciones del funcionamiento, en un régimen en que primará el distanciamiento social, al menos en lo que resta del año, según el economista de la Cámara Chilena de la Construcción, Byron Idrovo. “Esperamos que las expectativas de los empresarios tenderán a ser menos pesimistas, en la medida que se vayan disipando este escenario de incertidumbre”, agregó.

Foto de Zukiman Mohamad en Pexels

Construye2025 firma convenio con el Instituto de la Construcción y la CChC

Fecha: 28/08/2020

Los principales actores de la industria trabajarán en conjunto por una estrategia sectorial de economía circular, mediante un proceso participativo y colaborativo, que promoverá el desarrollo sustentable del sector.

Conscientes de que la circularidad de la economía se relaciona con la forma en que se crean y operan las ciudades, bajo una mirada sistémica del ciclo de vida, representantes del Instituto de la Construcción (IC), la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) y el programa Construye2025, impulsado por Corfo, valoraron la alianza que les permitirá asumir desafíos como el uso eficiente de los recursos y la gestión de residuos de construcción. “Éstos se reconocen como herramienta de mitigación de los gases de efecto invernadero que produce la actividad y frente a ello, la economía circular representa un cambio que favorece la resiliencia de los sistemas y cadenas de suministro”, destacó el presidente del IC, Miguel Pérez.

En este ámbito, el timonel de la corporación valoró la apertura de nuevas oportunidades de negocio e innovación, tales como diseño libre de residuos, industrialización, prefabricación y digitalización. “Nosotros apadrinamos y nos involucramos en la economía circular desde un principio, porque creemos que es una necesidad imperiosa y su futuro depende de ello. Es una responsabilidad iniciar el lanzamiento de este convenio que convoca a colaborar en la elaboración de la propuesta de una estrategia sectorial para la economía circular de la construcción, con la participación de las principales instituciones del sector”, afirmó.

El convenio -ratificado durante la segunda jornada del Summit Construcción Circular- busca articular los esfuerzos de la cadena de valor para realizar una estrategia sectorial de economía circular en la industria de la construcción, mediante un proceso participativo y colaborativo en todo Chile, que permita promover el desarrollo sustentable del sector, en el contexto de la Hoja de Ruta Nacional de Economía Circular, Chile 2020-2040.

“Este esfuerzo contará con el apoyo de la CDT como entidad facilitadora y ejecutora, acorde a su misión. Los invitamos a participar de forma activa, convencidos de que la economía circular es una oportunidad de desarrollo ineludible que, además, generará muchos empleos de calidad, nuevos modelos y oportunidades de negocio de la mano de un menor impacto en el medioambiente”, explicó Pérez.

Cambio cultural

Asimismo, el presidente del Consejo de Productividad, Innovación y Construcción Sustentable de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), Carlos Bascou, puso énfasis en que el desafío del cambio climático es tan grande, que no es posible abordarlo si no es en conjunto: actores públicos, privados y academia. “Estamos felices de poder aportar desde el gremio. Las empresas son fundamentales, porque es donde se alberga a muchos trabajadores que ya han iniciado este cambio cultural. Trabajaremos con mucho entusiasmo y compromiso en el desarrollo de esta hoja de ruta”, señaló.

Enseguida, Marcos Brito, gerente de Construye2025, en representación del presidente del Comité Directivo del programa, Vicente Domínguez, y de todos sus integrantes, comentó que este es un cambio de paradigma que no será fácil. “Es una manera distinta de mirar las cosas, de hacer industria, estamos muy entusiasmados de poder colaborar y sacar adelante este trabajo”, dijo.

Tras la ratificación del acuerdo tripartito, en el segundo día del Summit Construcción Circular, en el que se habló de la cadena de valor y nuevos modelos de negocio, se desarrolló el panel “Oportunidades de economía circular en la construcción”, en el que participaron Guillermo Molina, gerente de MÁSMAR; Marisol Saavedra, subgerente de Gestión de Calidad e Innovación de Desarrollos Constructivos Axis; Karen Aguilera, gerente general de Revaloriza; Patricia Martínez, académica de la Escuela de Ingeniería en Construcción de la Universidad de Valparaíso.

Posteriormente, Carlos Bascou de la CChC, compartió los alcances del estudio “El sector construcción ante el desafío climático global”, que plantea los retos para las empresas del sector de la construcción en los ejes de mitigación y adaptación al cambio climático.

La reactivación verde en el ADN estatal y empresarial

Fecha: 28/08/2020

Con una visión sustentable plasmada en sus estrategias, Chile busca construir mejores ciudades, con edificaciones y espacios que favorezcan el bienestar y el equilibrio.

Poco a poco, la sustentabilidad se ha ido impregnando en el ADN de las industrias y el sector construcción no ha estado ajeno a esta tendencia. De hecho, Chile está preparando su Plan Nacional de Construcción Sustentable como parte de la Política Nacional de Desarrollo Urbano. Por eso, en medio de las dificultades económicas que enfrentamos, como consecuencia de la pandemia, el concepto está más presente que nunca en el rubro.

Para Paola Valencia, secretaria ejecutiva de Construcción Sustentable del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu), la sustentabilidad busca un equilibrio en el desarrollo humano, para velar por la calidad de vida de hoy y mañana, cuidando el medio ambiente y propiciando un modelo económico donde la equidad y la sostenibilidad se mantengan en el tiempo. “En el caso del sector construcción, la visión sustentable nos permite construir ciudades donde las personas puedan vivir en forma digna, ofreciendo edificaciones y espacios que permitan una buena salud mental y física, y promuevan un equilibrio ambiental y la mitigación de impactos de la construcción”, explicó.

En este sentido, Paola Valencia cree que la crisis abre una oportunidad para impulsar la incorporación del desarrollo sostenible en todas las esferas de la vida, de manera de avanzar en la reducción de desigualdades de todo tipo y asegurar un mejor estándar de vida a las personas.

La coyuntura no solo ha estado marcada por una pandemia, sino también por el calentamiento global, que ha llevado a Chile a comprometerse con los lineamientos internacionales que entregan los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y los compromisos de Cambio Climático y Gestión de Riesgo de Desastres. “En particular, el Ministerio de Vivienda y Urbanismo ha estado trabajando con la Política de Nacional de Desarrollo Urbano que está basada en los Ejes de la Sustentabilidad Urbana, el Plan de Adaptación al Cambio Climático de Ciudades, la Política de Gestión de Riesgo de Desastres y la Estrategia Nacional de Construcción Sustentable”, detalló la secretaria ejecutiva de Construcción Sustentable del Minvu.

Agenda sostenible

Además, Paola Valencia, destaca la conformación de una comisión de sustentabilidad y cambio climático ministerial, que tiene como función construir una agenda clara a mediano y largo plazo en estos temas. Al igual que Valencia, el vicepresidente ejecutivo de Corfo, Pablo Terrazas -que estuvo conversando sobre la reactivación sostenible en el podcast “Cable a Tierra”- ve a la pandemia como una oportunidad.

“Uno siempre debería partir por las cosas que tiene más a mano para acelerar la transformación. Si bien hemos sido un país pobre en combustibles fósiles, somos muy ricos en la energía limpia. Algo que antes era una desventaja, hoy es una ventaja. Tenemos que aprovechar eso. El norte de Chile tiene la mayor radiación solar del mundo y en la Patagonia tenemos récords de viento para producir energía eólica”, afirmó Terrazas.

Asimismo, el vicepresidente de Corfo recordó que el año pasado se adjudicó el consorcio de economía circular en el norte, justamente, para prepararle el camino a los desechos que puedan provenir de la energía solar. “Estamos adelantándonos al futuro. Hemos visto cómo se llena de paneles todo nuestro territorio y creemos que tenemos un potencial para seguir creciendo gigantesco. Tenemos que prepararnos ambientalmente para toda esa capacidad. Eso estamos haciendo con este centro, que uno de sus propósitos es ver cómo reutilizar, reciclar o hacernos cargo de los desechos que produzcan los paneles solares”, señaló.

Según el presidente del Consejo de Productividad, Innovación y Construcción Sustentable de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), Carlos Bascou, la sustentabilidad ha jugado un rol protagónico. Así lo han destacado distintos líderes internacionales, e incluso, fue parte del mensaje de la cuenta pública. “Todo lo que hemos vivido como sociedad, el estallido social y la posterior pandemia, hace que miradas más equilibradas de los modelos de funcionamiento de las empresas y la sociedad deben perseverar. Sostenibilidad es mantener un equilibrio entre crecimiento económico, aspectos sociales y medioambientales. Debe jugar su debido rol en este equilibrio”, explicó.

En este contexto, Bascou recordó que la CChC definió una propuesta que considera el desarrollo sostenible en sus ejes estructurales. “Lo fundamental en los desafíos del cambio climático sector construcción, aborda aspectos tanto de adaptación, como de mitigación. Cada uno de ellos tiene acciones concretas, propuestas y compromisos para hacer que el sector construcción tenga una recuperación sostenible”, concluyó.

Antonio Errázuriz es el nuevo presidente electo de la Cámara Chilena de la Construcción

Fecha: 27/08/2020

La nueva Mesa Directiva Nacional también está integrada por Juan Armando Vicuña, Carlos Zeppelin y Pedro Plaza en calidad de vicepresidentes, además de Patricio Donoso como past presidente.

Antonio Errázuriz Ruiz –Tagle será quien encabece la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) para el período 2020-2021, tras ser elegido en la 180a Reunión del Consejo Nacional de la asociación gremial. La nueva mesa está compuesta por Juan Armando Vicuña, Carlos Zeppelin y Pedro Plaza en calidad de vicepresidentes y Patricio Donoso como past presidente.

“Junto con agradecerles el respaldo entregado el día de hoy, quiero invitar no solo a ustedes como socios de la CCHC, si no que a todos los ciudadanos de nuestro país a unirnos y en conjunto, sacar adelante a Chile, que hoy más que nunca lo requiere”, dijo Antonio Errázuriz.

Durante la 180 a Reunión del Consejo Nacional del gremio se eligió asimismo al Directorio de la entidad, integrado por representantes de los comités gremiales y de las cámaras regionales.

Como directores en representación de los comités gremiales resultaron electos Luis Miguel De Pablo Ruiz, por el Comité de Concesiones; Francisco Javier Prat del Río, por el Comité de Contratistas Generales; Diego Toro Gandarillas, por el Comité de Especialidades; Claudio Cerda Herreros, por el Comité de Industriales; Claudio Nitsche Meli, por el Comité Inmobiliario; Paulo Bezanilla Saavedra, por el Comité de Obras de Infraestructura Pública; Félix Escudero Vargas, por el Comité de Proveedores; y Guillermo Larraín Vial, por el Comité de Vivienda.

Para directores en representación de las cámaras regionales se eligió a Andrew Trench Fontanes, por la Zona Norte; Martín Bruna Valiente, por la Zona Centro; René Poblete Castañeda, por la Zona Sur; y Melcon Martabid Razazi, por la Zona Austral.

 

RESEÑA NUEVA MESA DIRECTIVA

ANTONIO ERRÁZURIZ RUIZ –TAGLE, PRESIDENTE CChC

Ingeniero civil de la Pontificia Universidad Católica de Chile (67 años). Con 37 años de experiencia profesional, ha sido director de varias empresas en el ámbito de la construcción, fue director de la Mutual de Seguridad y vicepresidente CChC.

 JUAN ARMANDO VICUÑA MARÍN, VICEPRESIDENTE

Ingeniero comercial de la Universidad Finis Terrae (50 años). Fue vicepresidente CChC. Fue presidente de la Mesa Directiva Regional de la sede Valparaíso para el periodo 2017-2018.  Es socio de la CChC Valparaíso e integrante del Comité Inmobiliario. Es socio director de RVC.

 CARLOS ZEPPELIN, VICEPRESIDENTE

Ingeniero civil de la Universidad de Chile (62 años). Fue consejero de la CChC, presidente del Comité de Obras de Infraestructura Pública, past presidente de la Corporación de Desarrollo Tecnológico y presidente del Centro de Innovación para la Infraestructura.

PEDRO PLAZA MATUTE, VICEPRESIDENTE

Ingeniero comercial de la Universidad Diego Portales (59 años). Es socio y gerente general Formma Chile S.P.A. Ha desempeñado diversos cargos gremiales en la CChC, entre ellos el más reciente es el de Director CChC.

PATRICIO DONOSO TAGLE, PAST PRESIDENTE

Ingeniero civil industrial de la Pontificia Universidad Católica de Chile y Magíster en Ciencias de la Ingeniería (45 años). Anteriormente fue presidente de la CChC, presidente de la CChC Rancagua y vicepresidente de la Mesa Directiva Nacional desde el año 2014.

 

 

 

Hacer de la crisis una oportunidad, actuando con coherencia

Fecha: 29/07/2020

Por Carlos Zeppelin, presidente Comité de Obras de Infraestructura Pública de la CChC.

Hoy nos enfrentamos a un gran desafío: recuperar el empleo y la inversión ante los devastadores efectos de la crisis sanitaria, económica y social. Por eso, el sector político acordó un marco de entendimiento para el “Plan de emergencia por la protección de los ingresos de las familias y la reactivación económica y del empleo”, con un impulso fiscal significativo. 

En la fase de reactivación plena se debe implementar un potente plan de inversión pública, principalmente a través de los Ministerios de Obras Públicas y Vivienda y Urbanismo, en infraestructura hídrica, en logística y en viviendas. Este plan debe ser de rápida ejecución, con cobertura regional, con cronograma e identificación de territorios que permita su monitoreo y con énfasis en sustentabilidad y mitigación del cambio climático (embalses, agua potable rural, obras de regadío, entre otros).

Evitemos que este nuevo y necesario plan de inversiones incurra en los errores del pasado, como los que deja entrever la publicación conjunta de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) “Evaluaciones del desempeño ambiental CHILE 2016”, que señala: “en líneas generales, los programas de inversión pública no toman en cuenta de manera sistemática los componentes ambientales y climáticos, ni los indicadores o los criterios de sostenibilidad”.

Entre las acciones para dar cumplimiento a este acuerdo de manera sostenible y rápida, destaco las siguientes:

A. Implementar políticas públicas, iniciativas y acciones a través de las compras públicas y licitaciones de proyectos de infraestructura y edificación, que traccionen el desarrollo de la economía circular en construcción.

La compra y contratación pública, representa un instrumento importante para conseguir la implantación de este nuevo modelo productivo y de consumo más sostenible, por su impacto y poder tractor sobre el mercado, y el abandono del adictivo modelo lineal 

Nuestros sistemas de licitación y adjudicación se basan, fundamentalmente, en el precio, lo que supone una grave dificultad para todos estos nuevos desarrollos. La Comisión Europea desarrolló el documento “Compra y contratación pública verde”, de momento de carácter voluntario, el cual consiste en que los organismos gubernamentales adquieran productos, servicios y obras con un impacto ambiental reducido durante su ciclo de vida. La aplicación de criterios ambientales en la contratación pública supone no solo beneficios ambientales, sino también económicos y sociales tanto para la administración, como para el sector privado y la sociedad.

Entre los beneficios para la administración está el incrementar la transparencia y eficiencia, lo que permite lograr metas ambientales asumidas y reducir impactos ambientales y fomenta el ahorro al considerar los costos del ciclo de vida. Además, favorece al sector privado, al dar incentivos para innovar y ser más competitivo; y a la comunidad, al mejorar la calidad de vida de la ciudadanía por la reducción de impactos ambientales.

B. Generar herramientas que incluyan criterios de economía circular en la evaluación de inversión pública, fomenten mercados y faciliten información para la trazabilidad de los RCD.

C. Desarrollar infraestructura adecuada para la disposición final y valorización de los RCD, y un marco regulatorio único y claro para su implementación.

En la actualidad y con miras al cumplimiento de los compromisos del Acuerdo de París, en materia de sostenibilidad, los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas y las acciones necesarias para la adaptación y mitigación al cambio climático, el Ministerio de Obras Públicas, en un convenio de cooperación técnica con el BID y la Universidad de Harvard, se encuentra evaluando un sistema de calificación y una guía orientadora que introduce consideraciones de sostenibilidad en los proyectos de infraestructura, asumiendo una postura integral mediante la evaluación de los proyectos en función del valor que tiene para las comunidades, el uso eficiente de fondos y la contribución a las condiciones de sostenibilidad. El sistema abarca todas las etapas del ciclo de vida de un proyecto: planificación, diseño, construcción, operaciones y deconstrucción y evalúa 60 criterios de sostenibilidad estructurados en 5 categorías: calidad de vida, liderazgo, distribución de recursos, mundo natural y clima y riesgo.

Para el logro de este objetivo es necesario incorporar -al momento de planificar, financiar y construir la infraestructura pública- una nueva mirada en materia de calidad, una coordinación intersectorial e integrada entre la provisión de la infraestructura y el modelo deseado de desarrollo territorial, y un nuevo enfoque en criterios de priorización de las inversiones para un desarrollo sostenible. 

Además, es necesario incluir aspectos de sustentabilidad en las obras de infraestructura tales como: cambio climático, eficiencia energética, eficiencia hídrica, el uso sustentable de recursos naturales, entre otros. Los principales recursos naturales utilizados son los llamados inertes, por lo cual existe un enorme margen para reconvertir el sector hacia la economía circular.

Asimismo, los inspectores de obra juegan un importante papel, especialmente a la hora de aprobar cambios que permitan reutilizar materiales generados en la misma obra, evitando así su transporte a plantas de tratamiento para su posterior incorporación y reduciendo, por tanto, el consumo de combustible y las emisiones de gases de efecto invernadero asociadas.

Los modelos de economía circular no sólo tienen sentido desde la perspectiva ambiental y cuidado de los recursos naturales, sino que también desde la perspectiva económica, ya que son drivers de innovación y de replantear, una y otra vez, nuevas maneras de llevar a cabo los distintos procesos. Por lo mismo, favorecen el desarrollo sostenible de Chile.

Hoy los desafíos van por el lado de una colaboración integral, tanto de lo público como de lo privado, donde los emprendedores no pueden quedar fuera, ya que deben empaparse del concepto y ver la oportunidad de crear nuevos modelos de negocio, generar empleos de calidad, combatir el cambio climático y revolucionar la forma de hacer las cosas.

La tentación de “acelerar la marcha” en pos de una recuperación rápida puede tener un impacto profundo en la continuidad de las acciones, avances y desarrollos que se estaban realizando en materia de sostenibilidad y relacionamiento con el entorno. Este es el momento de poner a prueba la coherencia y fortaleza del propósito de nuestras organizaciones.

Salir de esta crisis no será fácil, pero tampoco se trata de salir de cualquier manera, sino que con coherencia, para que podamos transformar esta crisis en una verdadera oportunidad.

¿Puede la industrialización paliar el déficit de viviendas en Chile?

Fecha: 29/07/2020

Dada su velocidad de respuesta, los sistemas constructivos industrializados podrían mejorar la eficiencia y competitividad del sector. Además, estas técnicas revolucionarias optimizarían el uso de materiales, la mano de obra y los tiempos de entrega. 

Plantas industriales con la última tecnología para la fabricación de viviendas, materiales de alta tecnología y un mejor diseño de ingeniería le están cambiando la cara a la construcción chilena. Según Marcos Brito, gerente de Construye2025, programa impulsado por Corfo, existen varios casos de éxito que reflejan las ventajas que ofrece la industrialización para la edificación. Y es que el país ha ido avanzando en su aprendizaje, “gracias a los esfuerzos conjuntos entre quienes tienen más experiencia, quienes están invirtiendo y quienes se están transformando hacia este nuevo paradigma”, señala.

Del mismo modo, el jefe de la División Técnica de Estudio y Fomento Habitacional (Ditec) del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu), Erwin Navarrete, cree que la industrialización ha despertado especial atención en el sector construcción, que ha ido reconociendo beneficios como: mejoras en la calidad de la construcción al incorporar procesos repetitivos con equipos y mano de obra especializada; optimización en la velocidad de construcción y montaje; y, principalmente, en la sustentabilidad de los proyectos, gracias a la disminución en la generación de residuos. “Incluso considerando el escenario actual a nivel mundial respecto de la pandemia, donde es aún más relevante el cuidado y control en la interacción de los trabajadores, cobra más sentido pensar en esta forma de llevar adelante la construcción”, explica.

Según Jacqueline Gálvez, presidenta interina del Comité de Vivienda de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), como país hemos avanzado mucho en los últimos años, ya que han ido en aumento las empresas que están utilizando industrialización, tanto en vivienda pública como en privada, aún cuando representan una pequeña parte del mercado. Pero, ese es el desafío: “seguir avanzado en su utilización de forma masiva. Esto requiere un trabajo mancomunado de empresas, proveedores de estos sistemas y sector público”, sostiene. 

Además, para la representante de la CChC es importante capacitar a los trabajadores y apoyarlos en el proceso para que no se queden atrás. También destaca el rol de la academia en la educación de los distintos profesionales que intervienen en el sector construcción, que se van a enfrentar a los avances asociados a la industrialización. En opinión del gerente de Construye2025, se trata de integrar toda la cadena de valor, actuando con un mayor nivel de coordinación entre los actores que intervienen, sumando tecnología y planificando en forma industrial, para maximizar eficiencia y calidad, mientras se minimizan los errores.

  En este sentido, Ignacio Hernández, past president de la Asociación de Oficinas de Arquitectos (AOA) tiene la convicción de que, al igual que otras tendencias que se han visto reforzadas y aceleradas producto de la pandemia, como el teletrabajo y economía digital, se acelerará también la penetración de la industrialización en la construcción. 

La madera se abre paso

La prefabricación en hormigón, que incluye paneles pretensados, postensados, módulos prearmados, así como paneles simples y dobles, ya tiene su historia. Pero, en madera también existen sistemas constructivos marco-plataforma, módulos estructurales prefabricados y elementos en CLT (Cross Laminated Timber). Este material, según Hernández, está avanzando muy fuertemente y con ventaja, puesto que Chile tiene industria maderera de clase mundial, una masa de bosques muy abundantes en relación a nuestra población, e ingeniería y arquitectura de excelencia. 

Igualmente, en Chile han aparecido sistemas constructivos no tradicionales, que ya en su génesis han incorporado la industrialización. “Dentro de ellos podemos mencionar los distintos tipos de paneles SIP (Structural Insulation Panel), algunos sistemas de ferrocemento o los sistemas de madera contralaminada”, comenta el jefe de la Ditec, Erwin Navarrete. 

¿Es la industrialización el camino para enfrentar el déficit de viviendas? Según el Past President de la AOA, definitivamente sí. Incluso, Ignacio Hernández, cree posible una industrialización “personalizada”, que no implique renunciar a la identidad de cada barrio y características de los usuarios. Además, ésta podría hacer un aporte significativo en calidad y sostenibilidad, pero también en términos de volumen y plazos, lo cual es urgente debido a los déficits habitacionales crecientes. 

De hecho, en Canadá, potencia forestal al igual que Chile, se propusieron solucionar el déficit habitacional social basado íntegramente en madera. “Creo que Chile, por su diversidad climática y geográfica, puede hacer lo mismo con la suma de las alternativas disponibles, pero con la condición de reforzar fuertemente la capacidad industrial instalada de madera, hormigón y estructuras metálicas, puesto que son todas perfectamente combinables todas entre sí”, señala Hernández. 

Por su parte, la presidenta interina del Comité de Vivienda de la CChC, Jacqueline Gálvez, cree necesario repensar la construcción a partir de las nuevas tecnologías más allá del sistema constructivo: “desde su diseño; financiamiento; normativas aplicables; programas de vivienda, en el caso de vivienda pública; que internalicen estos procesos”, afirma.

Para el jefe de la Ditec, Erwin Navarrete, el déficit de vivienda exige sumar y, en este aspecto, reconoce el aporte que los sistemas de construcción in situ han hecho a la disminución del déficit. “La industrialización llega como una buena alternativa que presenta excelentes atributos para ser competitiva en el mercado de la edificación. Es importante destacar la posibilidad de que la industrialización, no sólo permite de forma eficiente resolver los problemas de déficit presentes en condiciones normales, sino que, dada su velocidad de respuesta, permite resolver déficits generados frente a distintos tipos de catástrofes naturales, permitiendo enfrentar más rápidamente los procesos de reconstrucción de viviendas”, sostiene. 

Casos de éxito

Los socios del Consejo de Construcción Industrializada (CCI) han desarrollado los siguientes proyectos de viviendas:

  1. Viviendas E2E+BauMax

  E2E ha llevado adelante dos proyectos con la constructora Convissa y Gestión Urbana. El primero, “Doña Paula” en Santa Cruz, cuyo primer piso fue industrializado con Baumax y, el segundo, con paneles SIP. “El hormigón iba más o menos rápido, pero el panel SIP, uniendo estos paneles de 1,20×1,20 m2, iba un poco más lento. Y eso estaba afectando a toda la obra y también a Baumax”, precisa Felipe Montes, gerente general de E2E Chile. De esta manera, la Inmobiliaria Gestión Urbana y Baumax, pidieron a E2E incrementar la velocidad y mejorar la coordinación de esta obra. 

Luego de cumplir con los desafíos propuestos en el piloto de “Doña Paula”, siguió el proyecto “Casablanca”. Desde el inicio, dos industrializadores trabajaron juntos: Baumax en el primer piso, hecho en hormigón armado prefabricado y E2E con estructura industrializada en madera para el segundo piso, con un total de 394 viviendas de un proyecto con el Subsidio de Integración Social y Territorial del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (DS19).

2. Viviendas RC Tecnova 

RC Tecnova combina materiales de alta calidad técnica, como el acero galvanizado y el poliestireno expandido (EPS), para el desarrollo de sus paneles modulares, además, crea revestimientos sostenibles, como morteros elastómeros y corcho proyectado orgánico para fachadas y techo. La combinación de estos materiales es el “Metalpol”, producto que ofrece una mayor resistencia, menor peso y que no tiene puentes térmicos. Con él se fabrican paneles para muros, losas y techos, con los que se pueden realizar ampliaciones, construir casas, conjuntos habitacionales e incluso, tabiques y fachadas para edificios de gran altura.

En el proyecto Valle Noble de Concepción, se entregaron 184 casas prefabricadas en dos meses, las que -gracias a este material- son 80% más eficientes energéticamente si se comparan con las que levanta el sistema constructivo tradicional. La “receta” del Metalpol y las máquinas de RC Tecnova se exportaron a Ecuador y, próximamente, la empresa podrían llegar con sus soluciones a Perú y Colombia.

3. Obras DS19 de BauMax 

Baumax es responsable de 180 departamentos DS19 distribuidos en 11 torres de 3, 4 y 5 pisos, en Rancagua, cuyo plazo de ejecución de obra estaba estimado en 5,8 meses. Con su sistema constructivo, la programación bajó a 3,7 meses, esto es, casi un 35% menos de tiempo en obra gruesa. La obra incorporó, por primera vez, la aislación térmica directamente en los muros. 

En Talca, en tanto, 11 torres de 5 pisos debían ser montadas en 7,5 meses, solo con una grúa y un equipo de montaje compuesto por 4 montajistas más un coordinador, un prevencionista y un Ito. La empresa pudo montar un promedio de 1.100 m2 a la semana.

La empresa destaca también las estaciones de bombeo de Icafal, en Ovalle, un proyecto con muros de más de 3 mts de altura. Las restricciones de acceso a la obra eran tan altas que el montaje lo ejecutó la constructora con el apoyo de un coordinador en obra. 

4.E2E en media-altura

  La búsqueda de una solución rápida de construcción para edificios de mediana altura, llevó al mandante del proyecto “Horizonte del Pacífico” de la Región del Biobío, a optar por la industrialización. E2E tenía que lograr departamentos de excelente comportamiento térmico, evitando instalar EIFS (sistema de aislamiento térmico exterior). Éstos debían ser sustentables y rápidos de construir, sin faenas húmedas dentro de la obra. Fueron, de hecho, los primeros edificios habitacionales en madera construidos en Chile de manera industrializada, en un proyecto de 80 departamentos distribuidos en 5 edificios de cuatro pisos.

 

5. Fourcade & Co, Los Naranjos

Este es un innovador proyecto inmobiliario adjudicado bajo el DS19, que combina distintos materiales aprovechando sus virtudes e introduciendo la construcción industrializada a la vivienda en altura. Acero y hormigón para la parte estructural, una piel de madera en los muros perimetrales, para controlar humedad y temperatura, y hormigón en divisiones entre departamentos, con beneficios acústicos, de fuego y control de temperatura interior (masividad térmica). 

Con una arquitectura de vanguardia, que no sólo entrega luz natural a los departamentos por ambos costados, sino que además tiene baños y cocinas con ventilación natural y control pasivo de temperaturas por medio de ventilación cruzada.

Los edificios están compuestos por vigas y pilares de acero rellenos en hormigón + losas colaborantes en su estructura de obra gruesa. Las partes y piezas llegan prefabricadas a terreno, listas para montar. 

El muro perimetral exterior se fabrica bajo un proceso industrial seriado en terreno que culmina con el proceso de montaje, evitando acopio y traslados innecesarios. Duración de producción y montaje: 1 mes, 15 hombres por edificio. 

6. Martabid Empresas + Canada House

En el holding están convencidos de que la construcción industrializada es el camino para generar rápidamente una vivienda óptima, en base a control de calidad en fábrica y montaje mecanizado. “Durante la emergencia por COVID-19, junto al Minvu, el Serviu y cada municipalidad, hemos acelerado la entrega de conjuntos habitacionales en varias comunas, lo que viene a descomprimir en parte el hacinamiento de miles de personas”, afirma José Miguel Martabid Razazi, director ejecutivo de Martabid Empresas.

Los cambios que la pandemia aceleró en los procesos constructivos

Fecha: 29/06/2020

Cuando la cuarentena termine, el mundo no será el mismo. En la industria de la construcción lo tienen muy claro: industrialización y estandarización irán de la mano, para dirigirnos hacia un camino más productivo, con menos errores y plazos conocidos.

Solo en el área de viviendas, más de 800 proyectos se han visto paralizados debido al confinamiento, poniendo en jaque la rentabilidad de las empresas. El escenario es incierto, pues el coronavirus no parece ir en retirada. Frente a ello, muchos actores de la industria pusieron el pie en el acelerador, impulsando cambios en diversas áreas: en temas comunicacionales, tecnológicos, de conectividad y automatización de procesos, que sin esta condición habrían tomado décadas en implementarse, según Carolina Tapia, subgerente de Gestión de Proyectos de la Corporación de Desarrollo Tecnológico (CDT) de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC).

La pandemia puso a prueba la creatividad, la flexibilidad y la rapidez para abordar nuevos modelos de negocio, especialmente, porque parte relevante del proceso constructivo viene definido por el diseño de los proyectos, donde no se considera estandarización ni modulación de unidades. “No están pensados para la prefabricación de elementos o partes del proceso y, actualmente, son intensivos en uso de mano de obra directa en la faena”, explica Carolina Tapia.

Sin embargo, Luis Bass, representante de la CChC en el Comité Ejecutivo de Construye2025, cree que esta es una gran oportunidad para las empresas, ya que al estar paralizadas han podido hacer una pausa para planificar mejor el futuro. “En este sentido, todas las herramientas tecnológicas de integración temprana como el BIM son una oportunidad si la empresa junto con el ecosistema de contratistas y proveedores las adoptan y empiezan a provocar un cambio cultural en la industria”, señala.

Según el ejecutivo, intensificar un trabajo de diseño más detallado permitirá incorporar elementos prefabricados o industriales que impactan directamente en la productividad y disminución de residuos. “Todas las obras en etapa de diseño, tienen espacio para evaluar nuevos sistemas constructivos, que son factibles de incorporar en etapas tempranas. Hay en ese espacio, una oportunidad para replantear la utilización de sistemas industrializados, prefabricados y modulares, que permitirían aumentar la productividad de la industria. Orquestar estos elementos digitalmente puede ser un camino para articular una rápida reactivación de la economía”, enfatiza Luis Bass.

Procesos más eficientes

Y aunque las inmobiliarias que vendieron unidades en verde no podrán modificar las especificaciones de la edificación de ningún modo, sí podrán hacer ajustes en algunos procesos. Por ejemplo, incorporando preensamblado o prefabricación de elementos como escaleras, muebles u otros, pero sin modificar las características de la unidad como las adquirió el cliente final, comenta Carolina Tapia. “En el caso de los proyectos que se encuentran en diseño, es altamente probable que sean analizados para considerar procesos más eficientes, de menor plazo de ejecución y que requieran menor cantidad de trabajadores interviniendo en el proceso constructivo, lo cual fomentará la prefabricación o industrialización de procesos”, añade la ejecutiva.

En la integración temprana de proyectos, gran parte del mundo nos lleva la delantera. Diseñadores (arquitectura, cálculo y especialidades), constructores, proveedores y todos aquéllos que intervienen en el proceso desde el diseño hasta la puesta en marcha del proyecto han cambiado el foco hacia el “diseño para manufactura”, planificando los procesos y la logística para montaje en sitio.

Por su parte, Yves Besançon, Past President de la Asociación de Oficinas de Arquitectos (AOA) y representante en el Consejo Directivo de Construye2025, la emergencia sanitaria nos llevará a optimizar al máximo todo lo concerniente a manejo de residuos y velocidad en la construcción. “Además de lo anterior, la industrialización asegurará la capacitación de mano de obra especializada para la construcción, lo que es fundamental para mejorar la productividad en el rubro que es el menos eficiente, productivamente hablando”, afirma.

Otro efecto que la pandemia podría producir en la arquitectura es la consolidación de la madera como un material sofisticado para edificación en mediana y gran altura que, según Ignacio Hernández, Past President de la AOA, tiene un enorme potencial en Chile. “Pero, también el acero y el hormigón tienen grandes espacios para progresar en la alta industrialización y tenemos profesionales e industria avanzando en esa dirección”, agrega.

La digitalización también tendrá un rol trascendental en el mundo pospandemia, especialmente, en aspectos como revisión, modelación y coordinación a distancia, según el representante de la CChC en Construye2025, Luis Bass.

Junto a la construcción industrializada, la economía circular irá abriéndose camino. “Los volúmenes de desperdicios que produce una obra tradicional; el bajo control de calidad que supone construir en ambientes no controlados y sus consecuentes problemas de post venta; la contaminación ambiental; el manejo de plazos y costos más controlados; y la eficiente explotación y operación de estos proyectos son muy elocuentes al acreditar que una mayor industrialización en esta industria es necesaria y urgente”, enfatiza Ignacio Hernández.

Ventajas de la industrialización

La subgerente de Gestión de Proyectos de la Corporación de Desarrollo Tecnológico de la CChC, Carolina Tapia, resume las ventajas que la construcción industrializada ofrece, en desmedro de la tradicional: 

  • Reducción de variabilidad y, como consecuencia de ello, de errores de procesos.
  • Optimización del uso de recursos. 
  • Disminución de los plazos de ejecución. 
  • Baja en los costos de ejecución, al modelar previamente el proyecto y optimizarlo.
  • Disminución de los residuos generados por el proceso productivo. 
  • Mejora de las condiciones de seguridad para los trabajadores, al trasladarlos a planta y con procesos repetitivos.
  • Reducción del impacto frente a los vecinos y, en general, en todo el entorno del proyecto (menos ruido, polvo).
  • Disminución del espacio necesario para el proceso constructivo.
  • Incorporación de tecnologías para diseño y coordinación de proyectos, como el BIM, o automatización y robótica para ejecución de procesos.

El plan de reactivación de la CChC

La Cámara Chilena de la Construcción presentó su “Plan de Empleo y Reactivación”, que implica la creación de 600.000 puestos de trabajo directos e indirectos en un período de tres años. Su propuesta busca satisfacer demandas sociales asociadas a vivienda, equipamiento urbano e infraestructura básica y abordar problemáticas urgentes, como la crisis hídrica. Todo esto a través de un impulso a la inversión y un estrecho trabajo colaborativo entre el sector público y el privado.

Adicionalmente, el gremio planteó la necesidad de asegurar la continuidad de los proyectos en ejecución y de crear un Plan Nacional de Infraestructura para la Reactivación, así como la urgencia de impulsar el sistema de concesiones, que es clave en el actual escenario. La propuesta en infraestructura considera una inversión total de US$ 13.000 millones, con US$ 4.810 millones de inversión privada y US$ 8.190 millones de inversión pública.

En este sentido, la directiva de la CChC destacó la importancia de la política pública para reducir la insolvencia de las empresas, el perfeccionamiento de las relaciones contractuales, la certeza jurídica para el desarrollo de inversiones, la eliminación de trabas regulatorias y de burocracia, una política de estímulos a la inversión privada y a la contratación. Pero, también la elaboración de una “Agenda Digital” y un plan de retorno para iniciar la reactivación basado en protocolos sanitarios, como el que ya ha puesto en marcha la industria de la construcción.

 

Fotogragías gentileza de Empresas Martabid, Icafal y E2E.

Cómo las startups están transformando la construcción en Chile

Fecha: 26/05/2020

Con modelos escalables, innovación y nuevas tecnologías, las startups están conquistando a la industria que, al aliarse con ellas, ha visto mejoras significativas en su productividad y eficiencia.

Construcción es el sector con menor nivel de madurez y evolución en la incorporación de herramientas y prácticas digitales en empresas y pymes en Chile, según el Índice de Transformación Digital (ITD) nacional para 2019. El estudio elaborado por la Cámara de Comercio de Santiago, PMG Business Improvement y el Comité de Transformación Digital de Corfo, le asignó a la industria apenas 33 puntos de un total de 100 en el ítem “Transformación cultural y digital”. Sin embargo, las empresas del rubro ya están haciendo algo al respecto.

Si bien, no ha sido fácil incorporar innovación y tecnología en los procesos constructivos, nuevos aliados estratégicos están acelerando la adaptación de la industria a los nuevos tiempos: las startups. A fines de 2018, Corfo lanzó un programa semilla orientado a resolver desafíos en digitalización y economía circular en la construcción, que conformó la potente comunidad de emprendimientos “Construir Innovando”, apoyada por la Cámara Chilena de la Construcción y que tiene a Masisa, Echeverría Izquierdo y Melon como empresas fundadoras.

A mediados del año pasado, se hizo la selección de 17 ideas innovadoras de negocio, que prometían ayudar a las empresas del sector a transformarse y ascender en la escala de digitalización que exige la cuarta revolución industrial. Rodrigo Sánchez, gerente de Planificación y Procesos de Echeverría Izquierdo (EI), ha visto a la comunidad consolidarse y hacer aportes relevantes, por lo que espera que este espacio de vinculación con startups se perpetúe. “Hay soluciones que resuelven variadas problemáticas, algunas basadas en BIM que automatizan ciertos procesos; marketplace para hacer el link con proveedores que arriendan maquinaria; otras orientadas a las ventas”, explica.

Para el ejecutivo, mejorar la productividad de la mano de obra, encontrar oportunidades de trabajo colaborativo y coordinarse son acciones indispensables para la industria, por lo que participa en el Consejo de Construcción Industrializada (CCI) y otras instancias que promueven nuevas tecnologías y nuevas formas de hacer las cosas.

Tecnología de precisión

En el camino a la digitalización, las startups se han convertido en un verdadero puntal para los actores con trayectoria en el rubro. “La empresa tiene un proceso que está corriendo y compromisos que cumplir, entonces no es tan simple pivotar. Una constructora, a lo mejor tiene mucho que decir en construcción industrializada, pero en tecnología una startup puede tener un mejor know-how”, sostiene Rodrigo Sánchez.

En este ámbito, destaca un emprendimiento que logró establecer un sistema de control de maquinaria pesada: un dispositivo GPS se instala en el gancho de las grúas torres, alimenta un software en tiempo real y genera información de posicionamiento y alertas de riesgo. “Al detectar la ubicación precisa del gancho de la grúa, el sistema previene colisiones, ya que permite activar un freno antes de que se produzca un accidente y hoy están viendo cómo medir la productividad que tiene la grúa y evidenciar los tiempos muertos”, detalla el gerente de Planificación y Procesos de EI.

Otra herramienta es BIMetriX, que permite identificar en tiempo real el desempeño y la productividad de los equipos de modeladores, así como detectar automáticamente vicios o errores en modelos y verificar el cumplimiento de los estándares BIM.

Menos residuos

Según Nicolás Behar, director ejecutivo de Recylink, la mayor brecha en la construcción es la cultural. “Hay que cambiar la mentalidad de que las cosas se han hecho así desde siempre, la principal barrera es no atreverse a hacer cambios radicales que impliquen transformar la forma en que trabajan, innovar y dar un giro a la mentalidad de la industria”, enfatiza.

Buscando saldar parte de la deuda que el sector mantiene con el medio ambiente, Behar creó Recylink, cuando el 34% de los residuos del país provenía de la construcción. “El problema era tan grande que sentí que era necesario hacer algo para ayudar a resolverlo, era una responsabilidad ayudar al medio ambiente haciendo algo donde pudiéramos tener un impacto y un aporte significativo”, recuerda.

La recepción en el rubro ha sido buena, pues, el fundador de Recylink logró vincularse con personas que compartían el mismo interés ambiental en distintas empresas constructoras. “Con estas mujeres y hombres sustentables comenzamos a trabajar en la gestión de residuos de diferentes proyectos”, señala. Para ello, la tecnología ha sido fundamental, ya que ha hecho a la plataforma intuitiva y fácil de utilizar. No obstante, el factor clave, según Behar, es que el desarrollo de software es interno, lo que ha permitido mejorar e incluir nuevas prestaciones de forma rápida y dinámica. 

Trazabilidad en la construcción

El control de los procesos constructivos hoy tiene una mano amiga y se llama Nubix PRO, una plataforma integrada que persigue la calidad en cada etapa de uno o varios proyectos. “Puede ser la enfierradura del muro de hormigón, para ver que tenga el diámetro correcto, que tiene las amarras que corresponden, que la altura sea la adecuada, etc. Es como tener todas las listas de chequeo siempre disponibles en terreno, lo que le va dando trazabilidad al control del proceso productivo, permitiendo gestionar en forma oportuna las desviaciones”, explica Roberto Puga, gerente general de Nubix PRO.

El registro de cada proceso queda almacenado en la nube, favoreciendo la trazabilidad para apoyar las estrategias de cada inmobiliaria o constructora. “Antes la información llegaba de manera poco oportuna, porque pasaba del papel a una planilla, para generar un reporte. Luego, había que centralizar ese reporte y podía pasar hasta un mes para vincularlo a la calidad de la obra. Ahora, la información está disponible en cuanto se sincronizan los dispositivos al conectarse a la red wifi. Así, una empresa que tiene 5, 10 o más obras, cuenta con información instantánea para visualizar sus avances”, comenta el fundador de Nubix PRO.

Esta herramienta, que ahorra tiempo y horas hombre destinadas a corregir errores, es fácil de usar e incluso tiene la capacidad de integrarse con BIM. Pero, como la innovación no se detiene, Nubix PRO se prepara para entregar trazabilidad certificada de la calidad de la obra, de los protocolos de seguridad implementados y del cuidado medioambiental. “Manejo de residuos y huella de carbono son indicadores diferenciadores, que van a ser relevantes para los compradores”, señala Roberto Puga, que ya tiene a Blockchain en la mira.

Las startups se han convertido en las grandes anclas de la innovación. Por eso, el vicepresidente ejecutivo de Corfo, comentó el décimo aniversario de, Start-Up Chile, que la política pública ha sido exitosa, ya que ha generado grandes retornos para el país. “Pero, sobre todo, ha logrado impulsar un cambio de mentalidad en los chilenos y les ha permitido creer en sus capacidades, atreverse a innovar, a crear, y a competir en mercados que antes podían parecer inaccesibles. Esta aceleradora nos ha permitido como chilenos soñar en grande y, por eso, creemos que es relevante seguir potenciándola, para que muchos más compatriotas puedan acceder a más oportunidades, confiar en sus talentos, y darle valor agregado a nuestra economía”, argumentó.

De las startups que se encuentran activas, el 73,7% mantiene operaciones en territorio nacional y de esa cifra 43,3% son locales y 56,7% extranjeras. Su existencia es, sin duda, un aporte a la economía local, pues ellas contribuyen de manera importante a la generación de ventas y empleo.

Gerente de Construye2025 expuso protocolos para afrontar al Covid-19 en webinar internacional

Fecha: 28/04/2020

Marcos Brito compartió la experiencia chilena y los lineamientos de la Cámara Chilena de la Construcción, mientras que Felipe Montes, gerente general de E2E, se refirió a las medidas adoptadas en la planta de construcción industrializada que administra.

La industria de la construcción chilena ha adoptado una serie de acciones preventivas en obras, para prevenir la expansión del coronavirus. Parte de estos protocolos los compartió el gerente de Construye2025, Marcos Brito, en el encuentro virtual organizado por la Cámara de Comercio de Bogotá: “Buenas prácticas para afrontar la crisis del Covid-19 en el sector de la construcción”. 

Luego de describir el programa impulsado por Corfo -que busca mejorar la productividad y sustentabilidad de la construcción- el ejecutivo presentó la realidad de la industria constructiva en Chile, compuesta por más de 30 mil empresas, de las cuales el 38% corresponde a pymes.  

“Hubo un impacto muy fuerte en el empleo. En Chile, además, estamos en medio de una crisis social que ya había involucrado una paralización económica importante. Hemos estado bien afectados por esto. Sin duda, que el barómetro de la construcción ha sido golpeado”, señaló Brito. 

No obstante, el gerente de Construye2025, destacó que el programa ha ido apoyando la creación de diversas instancias: dos centros tecnológicos para la construcción, el Consejo de Construcción Industrializada (CCI), la digitalización de los permisos de obras y los centros de extensionismo. “Hemos sido un referente para hacer frente a la crisis de productividad asociada a la pandemia, ya que veníamos trabajando de antes en este tipo de avances”, explicó. 

El ejemplo de E2E

Enseguida, Brito presentó a Felipe Montes, gerente general de E2E, empresa de soluciones constructivas de alta precisión, que opera en Chile y Brasil, con miras a expandirse a Estados Unidos. “Somos una empresa de construcción un poco distinta a lo que se conoce como construcción industrializada. E2E ofrece un sistema constructivo industrializado en base a paneles fabricados con la más alta tecnología”, detalló. 

En la planta ubicada en la comuna de Maipú, Región Metropolitana, debieron adaptarse a la nueva forma de trabajar, conviviendo con el coronavirus que ha golpeado especialmente a las industrias productivas. “Estamos con 20 personas por turno y pudimos hacer el distanciamiento necesario para ellas. El turno para camarines implica que entra cierta cantidad de gente, luego se sanitiza; vuelve a entrar el próximo turno y se vuelve a sanitizar. La comida -que usualmente se hace en un casino, ahora cada uno la trae desde su casa, para lo cual dimos un bono a los trabajadores”, comentó Felipe Montes.

Otras medidas que debió tomar la empresa de construcción industrializada para continuar operando en medio de la pandemia fueron: eliminar todos los gastos que no son de primera necesidad y aplazar las inversiones en bienes de capital. 

La construcción industrializada en madera -comparada con la tradicional- genera una menor huella de carbono, ya que produce menos desechos y requiere menos movimiento de carga gracias a que la mayor parte del trabajo se realiza en planta. Además, E2E utiliza madera que proviene de bosques renovables certificados y aislación de celulosa proyectada fabricada con papel de diario reciclado.

El CCI eligió nuevos directores para 2020

Fecha: 30/03/2020

Socios del Consejo de Construcción Industrializada votaron para elegir a los miembros del nuevo Directorio y conocieron los lineamientos y acciones que desarrollan programas como Construye2025 y Planbim.

En la segunda Sesión Plenaria del Consejo de Construcción Industrializada (CCI), llevada a cabo el 12 de marzo, los socios eligieron a los representantes que integrarán el nuevo directorio de CCI, junto con otros designados por el directorio anterior. 

De esta manera, resultaron electos: Tatiana Martínez de Hormipret; Juan Carlos Gutiérrez, del Instituto Chileno del Acero; Fernando Moreno, de Icafal Ingeniería y Construcción ; Sebastián Fourcade, de Fourcade & Co; y Ricardo Fernández, de Volcán. 

Adicionalmente, el directorio estará conformado por su past president Francisca Cruz, gerente general de EI; Erwin Navarrete, jefe de la Ditec de Minvu; Marcos Brito, gerente de Construye2025; Juan Carlos León, gerente general de CDT, Enrique Loeser, de CChC, y un profesional destacado de la industria, que será designado en los próximos días. 

Transformación digital y BIM

En esta Sesión Plenaria se expusieron los grandes hitos de 2019 y las proyecciones para 2020. En la jornada, el gerente de Construye2025, Marcos Brito, explicó el posicionamiento del programa y su papel en la articulación de actores clave para impulsar la edificación sustentable en Chile. “Nuestro programa define un plan de acción con 4 ejes estratégicos: construcción industrializada; construcción sustentable; innovación y mejora continua; y transformación digital”, puntualizó.

Por su parte, el subdirector de Planbim de Corfo, Sebastián Manríquez, se refirió a la baja digitalización en la construcción que, según dijo, es inferior a la que se da en el sector pesquero. En seguida, abordó los requerimientos de BIM, estandarizados para instituciones públicas. “Ya hay requerimientos específicos que se están incorporando en las licitaciones y la guía ‘Estándar BIM para proyectos públicos’”, comentó. 

En esa línea, el socio de IDGconsult y presidente de BIM Forum Chile, Mauricio Heyermann, hizo hincapié en la necesidad de aumentar la productividad de la industria de la construcción a través de la transformación digital. “BIM Forum Chile es una instancia técnica y permanente, que convoca a los principales profesionales e instituciones relacionadas a BIM”, detalló.

Desde 2015, BIM Forum busca canalizar las inquietudes técnicas, el conocimiento y la información. Además, es una instancia de difusión y buenas prácticas para el desarrollo tecnológico en el sector construcción.

El nuevo perfil del maestro de la construcción

Fecha: 30/03/2020

Nuevos procesos y tecnologías están cambiándole la cara al maestro obrero constructor. Hoy la experiencia debe combinarse con la capacidad de adaptarse a herramientas y formas de trabajo que cambian constantemente.

¿Cómo es hoy el maestro de la construcción en Chile? Con la celebración del Día del Maestro Obrero Constructor, cada 19 de marzo, esta pregunta se vuelve necesaria de revisar. Según Rogelio González, presidente del

(OSCL), si bien muchas veces el trabajador cuenta con experiencia y habilidades base, hoy deben desarrollarse destrezas específicas para lograr transformar materiales en productos de calidad. “La incorporación de nuevas tecnologías, en materiales, productos y procesos ha irrumpido con fuerza en algunas especialidades de la construcción”, señala. 

En este sentido, Julián Rodríguez, jefe del Área de Estudios, y Francisca Echeverría, investigadora del Área de Estudios de OTIC CChC, recuerdan el estudio que encargó la Corporación de Capacitación de la Construcción a la Dirección de Estudios Sociales de la Universidad Católica (DESUC), en 2019, para hacer una caracterización del maestro de la construcción desde una perspectiva cuantitativa y cualitativa. “Este arrojó que es diverso, predominando tendencias como que trabajadores más especializados y jóvenes tienen más años de escolaridad”, afirman.

El estudio da cuenta también de la importancia que tiene el sector como generador de movilidad social, considerando que la mayoría de los trabajadores dice ingresar al rubro sin proyecciones, pero una vez dentro muchos hacen carrera. “Además, quienes tienen cargos de mayor responsabilidad sienten mayor cariño por su trabajo ante la sensación de desarrollo laboral”, explican Rodríguez y Echeverría.

Quienes permanecen en el rubro suelen asociarse a personas responsables, trabajadores, principalmente de carácter fuerte y que están dispuestos a enfrentar un trabajo arduo. No obstante, según la investigación de la OTIC CChC, hay un grupo de personas más indecisas, representado por jóvenes y migrantes, quienes suelen estar entrando y saliendo del rubro. Para los primeros, con enseñanza media completa, es más factible encontrar trabajo en otros sectores productivos; mientras que los migrantes se encuentran en búsqueda de oportunidades, lo cual es posibilitado por la oferta laboral de la construcción.

Nuevas tecnologías

Actualmente, hay empresas liderando un cambio en las competencias de los trabajadores, lo que se acentuará debido a las nuevas tecnologías y al escenario laboral que plantea la cuarta revolución industrial. Así lo creen Julián Rodríguez y Francisca Echeverría de la OTIC CChC, que destacan dos aspectos en el cambio de perfil: el fenómeno migratorio y la creciente inserción de la mujer al mercado laboral.

Respecto a la incorporación de trabajadores extranjeros, los desafíos tienen que ver con temáticas que van más allá del aspecto técnico, como por ejemplo comprender las ventajas que la interculturalidad puede traer a los espacios de trabajo, con la comunicación efectiva desde los liderazgos y con hacer frente a posibles situaciones de discriminación en las obras. Frente a la inserción femenina están los estereotipos de género y el reto de que ellas también puedan ocupar cargos de liderazgo.

Muchos procesos constructivos incorporan tecnologías nuevas, principalmente, en las partidas de:

  • Obra gruesa (excavaciones y movimiento de tierra, hormigón, moldajes, andamios y enfierraduras, entre otros).
  • Terminaciones (pintura, yesos, cerámicos, entre otros).
  • Instalaciones (alcantarillado, agua, electricidad, telecomunicaciones).

Lo anterior, según Rogelio González, explica la diferencia entre la cantidad de mano de obra y horas hombre en las distintas partidas, que se ve reflejada en la calidad del producto final, en viviendas, edificios y otros, donde las “no conformidades” están principalmente en las terminaciones e impactan en los procesos de postventa.

“Ahora, los muchachos tienen mucha voz y voto dentro del proceso constructivo, pero la construcción ladrillo sobre ladrillo prácticamente no existe. Hoy todo es más modular, más preciso y más técnico”, añade Raúl Letelier, tesorero de SIMOC, sobre el nuevo perfil del “maestro de la construcción”.

Debido a la velocidad de los cambios tecnológicos, es probable que un trabajador de la construcción sea partícipe, a lo menos dos veces durante su vida laboral, de cambios de paradigma en los procesos constructivos, materiales, herramientas, equipos, afirma Rogelio González, quien enfatiza: “los maestros más exitosos serán los que desarrollen la capacidad de aprender y cambiar, ya sea de modo independiente o a través de cursos de capacitación en el rubro”.

Obras industrializadas

Las faenas de construcción tradicional difieren del trabajo que se ejecuta en obras industrializadas, principalmente, en el grado de control sobre las variables que inciden en los costos, los plazos, la calidad y cuidado al medio ambiente. “En las obras industrializadas, para la transformación de los materiales en productos constructivos, el control de las etapas asegura la calidad y la homogeneidad, entre otras. Lo anterior es más complejo de controlar en una obra tradicional”, explica Rogelio González.

En este sentido, las competencias laborales del maestro en proyectos industrializados son similares a las de un trabajador de la industria fabril, que para transformar los materiales en productos utiliza las nuevas herramientas y tecnología. Por lo tanto, el trabajador tradicional debe poder adaptarse para entrar a los mecanismos industrializados. 

Las grandes empresas se preocupan de capacitar día a día a sus maestros obreros constructores, pero para las pymes, este ítem tan importante en la mejora de la producción, puede hacerse cuesta arriba. Sin embargo, Rogelio González, comenta que existe una amplia oferta de capacitaciones en diversos organismos, disponibles para ellas: Organismo Sectorial, Sence, ChileValora, Corfo, OTIC, ONGs, OTECs, CFTs, IPs y universidades cuentan con planes de formación para los antiguos y nuevos maestros de la construcción, que les ayudan a adaptarse a las nuevas exigencias que trae la industrialización, donde se tiende a estandarizar para mejorar la calidad y la productividad.

El desafío, en este contexto, es la trazabilidad, algo que se complejiza considerando que, en Sence, por ejemplo, existen más de 800 perfiles de construcción distintos, según Raúl Letelier. En cuanto a la seguridad, dice que falta fiscalización en la obra. “La CChC debiera crear observadores en terreno. Eso dio muy buenos resultado en la minería”, concluye el representante de SIMOC.

En tanto, los especialistas de la OTIC CChC rescatan el espacio del Organismo Sectorial de la Construcción (OSCL), instancia tripartita que dio vida al Marco de Cualificación Técnico Profesional, una herramienta estratégica que vincula la educación formal e informal con el mundo del trabajo y que permite que las personas -los trabajadores y trabajadoras de la construcción- puedan transitar por un camino que busca mejorar su formación, empleabilidad y remuneraciones.

Fotografía gentileza E2E.

CChC PIDE A EMPRESAS SOCIAS EXTREMAR MEDIDAS DE PREVENCIÓN ANTE COVID-19 AL INTERIOR DE LAS OBRAS

Fecha: 17/03/2020

Ante la rápida propagación que ha tenido el COVID-19, como gremio hacemos un llamado a todos los chilenos a ser particularmente responsables con su autocuidado y así evitar poner en peligro la salud de otras personas, es especial de aquellas que conforman grupos de alto riesgo.

La situación sanitaria que vivimos demanda el compromiso colectivo y la colaboración de todos para que los servicios de salud estén en condiciones de afrontar adecuadamente el mayor número de requerimientos de atención que, como ya se ha informado, ocurrirá en los próximos días.

Asimismo, es clave que las empresas adopten las medidas anunciadas por la autoridad y refuercen las acciones de prevención para resguardar el bienestar de sus trabajadores y sus familias.

En virtud de lo anterior es que, junto con estar en permanente contacto con nuestros asociados, hemos elaborado con la Mutual de Seguridad un conjunto de recomendaciones para ayudar a nuestros socios y sus trabajadores a superar esta contingencia.

Hacemos un llamado a informarse a través de medios oficiales y a que cada empresa, con el máximo de responsabilidad, implemente medidas tales como:

  1. 1. Medidas preventivas al interior de las empresas:
  • Instalar en todas las obras puntos de lavado de manos con disponibilidad de agua y jabón o habilitar puntos de aplicación de alcohol gel.
  • Instalar recomendaciones visuales en todos los puntos de acceso a la obra y en lugares visibles para los trabajadores.
  • Instalar en cada área/sector/faena/oficinas de obras señalización e informativos de medidas adicionales que adopte la empresa.
  • Evitar reuniones en obra con más de cinco personas y recomendar que mantengan entre ellas una distancia de, a lo menos, un metro.
  • Mejorar las rutinas diarias de aseo y desinfección en baños, duchas, vestidores y sectores destinados a alimentación y reuniones de obra.
  • Realizar charlas diarias sobre medidas preventivas para evitar el contagio en obras, hogares y otras actividades, en grupos de no más de cinco personas.
  • Mantenerse atenta a la información oficial respecto de nuevas medidas y actualizaciones que entregue el Ministerio de Salud o que instruya la autoridad sanitaria respectiva.
  • Al término de la jornada, insistir a todas las personas en la importancia de lavarse las manos inmediatamente lleguen a sus hogares.
  1. 2. Medidas preventivas y de autocuidado para trabajadores de la construcción:
  • No ir a obras si han realizado viajes a países con brote de coronavirus declarado o si sospechan haber estado en contacto con un enfermo y/o estar contagiados. Retomar las labores solo luego de completar el período de cuarentena.
  • Lavarse las manos con agua y jabón o con alcohol gel al llegar a una obra y reiteradamente durante la jornada laboral.
  • Evitar el contacto físico interpersonal. Por ejemplo, preferir el saludo verbal y no tocarse las manos ni la cara.
  • Procurar mantener una distancia de al menos un metro con los compañeros de trabajo, ya sea en faenas o en oficinas en obra.
  • Al toser o estornudar, cubrirse la boca y la nariz con el codo o pañuelo desechable y luego lavarse las manos.
  • Evitar el contacto directo con personas que padezcan cuadros respiratorios agudos.
  • En caso de presentar síntomas, informar a su jefatura antes de presentarse al trabajo y consultar de inmediato en un centro asistencial público o privado.
  • En caso de estar en contacto con una persona sospechosa o confirmada de COVID-19, mantenerse en aislamiento en su domicilio.

Como gremio, nos ponemos a disposición de las autoridades para aportar en lo que estimen necesario y hacemos un llamado para que todos actuemos con la máxima responsabilidad y unidad para enfrentar la compleja situación que enfrenta el país.