Tags

Las oportunidades económicas, sociales y medioambientales de la economía circular en construcción

Fecha: 30/10/2023

En dos jornadas llenas de aprendizaje e inspiración, a través de distintas actividades, los asistentes al Seminario “Economía circular en el sector construcción” reflexionaron sobre cómo estamos construyendo nuestras ciudades actualmente y cómo la industria puede ser un gran aporte en la producción limpia y colaborativa.

Una verdadera oportunidad de colaboración y desarrollo se dio los días 5 y 6 de octubre en el Seminario “Economía circular en el sector de la construcción” organizado por la Estrategia Economía Circular en Construcción, impulsada por la Cámara Chilena de la Construcción, Construye2025, el Instituto de la Construcción y la CDT, más la Red ECoEICo del Cyted, el Centro de Innovación UC Anacleto Angelini, la Escuela de Construcción Civil UC, IUS Latam y Compromiso Pro.

Así, con más de 150 asistentes, con invitados internacionales y nacionales, además de talleres sobre la materia, se cumplió el objetivo de ayudar a descubrir cómo transformar la industria de la construcción en un aliado de la circularidad.

El Módulo 1 titulado “Iniciativas internacionales de Economía Circular”, se desarrolló en el Auditorio de Construcción Civil de la Universidad Católica, en el Campus San Joaquín. La bienvenida la dio Felipe Ossio, director de la Escuela de Construcción Civil UC, quien introdujo lo que sería la primera parte de la mañana, en la que se presentaron las ponencias de los invitados internacionales.

Invitados internacionales

El primero en exponer fue el Dr. Luis Braganca, de Ecoeico Portugal, quien presentó “Implementación de estrategias de economía circular en edificios: de la teoría a la práctica”, disertación en la que demostró cómo implementar una estrategia para una industria de construcción más sustentable y de economía circular. Asimismo, presentó el caso de un paso superior ferroviario 2006 en Lisboa y su aumento del paso de la luz, así como también el anteproyecto de rascacielos de 105 pisos, construido con madera, que fue presentado en Canadá y cuyo objetivo es desarrollar una obra que enfrente al cambio climático.

Tras él, siguió la brasileña Mayara Regina Munaro, de la Universidad de Sao Paulo, quien expuso sobre el Pasaporte de Materiales. “La reutilización y el reciclaje de materiales de construcción dependen de un conjunto eficiente de información y seguimiento, que se puede obtener mediante la herramienta pasaporte de materiales. Aunque el Pasaporte de Materiales introduce principios de economía circular y aporta beneficios ambientales, sociales y económicos, está poco explorado en el sector de la construcción”, afirmó la investigadora doctoral. Su exposición exploró la adopción de la herramienta en el sector para generar conciencia, identificando los principales desafíos y oportunidades para incrementar la implementación del pasaporte de materiales en el sector de la construcción.

Avances desde el Biobío

Luego, la académica DCC- FACD, investigadora CITEC-UBB de la Universidad del Bío-Bío, Claudia Muñoz presentó: “Herramienta ÁBACO CHILE, Ecoeficiencia en el ciclo de vida de los edificios”. ÁBACO CHILE es una plataforma web de gestión digital, pública, escalable y de libre acceso, en base a un banco de costos e indicadores medioambientales orientado a hacer más eficiente el proceso de postulación, evaluación y seguimiento de proyectos de construcción pública y privada en Chile, desde el punto de vista económico, social y ambiental.

Es el primer banco de datos paramétrico con integración de indicadores de eco-eficiencia (costos y sustentabilidad) para proyectos de construcción en Chile y considera bases de datos dinámicas con clasificación de recursos y actividades, campos para describir especificaciones técnicas y enlazar objetos BIM, parámetros ambientales y costo social, para dimensionar el impacto ambiental desde el diseño a la etapa constructiva de una edificación.

Muñoz señaló: “Para poder avanzar en la cuantificación de las huellas, tenemos que ponernos de acuerdo: tenemos que tener bases de datos que se validen a escalas nacionales. En el país no contábamos con esto. En 2014 nosotros tomamos este desafío, basados en EcoInvest”. En noviembre de 2015 fue desarrollado por el Grupo de Arquitectura y Construcción Sustentable del Centro de Investigación en Tecnologías de la Construcción CITEC-UBB, de la Universidad del Bío Bío – Chile y Co-ejecutado por la Universidad de Sevilla, España a través del Grupo de Investigación ARDITEC. Es un proyecto de Bienes Públicos para la competitividad del sector de la construcción, financiado por INNOVA CORFO y mandatado por el Ministerio de Obras PúblicasDirección de Arquitectura (MOP-DA) y el Ministerio de Desarrollo Social (MDS)

La profesora cerró su presentación explicando los posibles alcances de la herramienta y que está abierta a seguir perfeccionándose. 

Le siguió Rodrigo García, del departamento de Diseño y Teoría de la arquitectura de la Universidad del Bío-Bío, quien presentó “Desarrollo de la construcción Impresa 3d para la circularidad”. Su exposición demostró cómo está implementada la impresión 3D en las nuevas edificaciones acercándose a la circularidad, integrando mezclas recicladas y mejor desempeño energético a estas edificaciones, queriendo vincular las nuevas tecnologías que aportan a la productividad con la sustentabilidad, para poder construir también un buen desempeño ambiental para el futuro.

Luego, el arquitecto y miembro del Grupo Eje Normativo del Instituto de la Construcción (IC), Cristian Garin, expuso el documento “Análisis y Propuestas Eje Normativo” preparado por el Comité de Economía Circular del IC. Dicho documento se encuentra en el siguiente link y presenta el marco de política pública, legal y reglamentario que influye en la aplicación de Economía Circular en Construcción. 

Su objetivo es levantar en un solo documento de fácil acceso, el marco legal, reglamentario y normativo que orienta las acciones circulares en la Construcción. Esto con el fin de conocer, entender y facilitar el cumplimiento de las metas de la Estrategia de Economía Circular en Construcción 2025, la Hoja de Ruta RCD y ECC 2035 y la Estrategia Climática de Largo Plazo.

Casos y experiencias de diseño

La segunda parte del Módulo 1 se centró en exposiciones sobre innovación en emprendimientos circulares. Comenzó con Felipe Ossio, quien reflexionó sobre el libro “Diseño circular de viviendas para Chile y ejemplos de inspiración”, del cual es autor junto a Anamaría León de la UC y a Waldo Galle y Jeroen Poppe, de la Universidad Vrije de Bruselas. En el texto se describen 16 cualidades de diseño circular que permiten una reutilización, reciclaje y renovación más eficaz de las edificaciones y sus componentes. Ossio describió a través de ejemplos nacionales, los conceptos principales de las 16 Cualidades de Diseño Circular y explicó cómo el texto entrega herramientas para comprender las generalidades de un diseño circular que incorpora la visión del tiempo, cambios y ciclos propios de nuestro entorno, contribuyendo a instalar en nuestra industria los principios sostenibles de la economía circular: mantener en circulación los recursos por el mayor tiempo, con su mayor calidad, dentro de la mayor cantidad de ciclos posibles. El escrito se encuentra disponible en este link

Continuó la Profesora Ruby Mejía de Gutiérrez, de la Universidad de Cali y representante de Ecoeico Colombia. Ella habló sobre los retos y desafíos del uso de residuos en el sector de la construcción, presentando diversos ejemplos en Colombia, además de oportunidades y retos que el uso de los residuos sólidos dan en la construcción civil. En la ponencia, Mejía también mostró resultados que con su grupo de estudio han obtenido.

Luego fue el turno de Irma Mercante, de la Universidad Nacional de Cuyo en Mendoza y representante de Ecoeico Argentina. Ella presentó “Acciones hacia la circularidad en gestión de RCD e indicadores”, un estudio de caso en una fábrica de premoldeados de mortero y hormigón con énfasis en la gestión de residuos. 

En ella, se identificaron estrategias posibles y evaluaron sus desempeños ambientales. La primera fue la sustitución de materia prima virgen por reciclada (PET por RSU), la segunda alternativa fue incorporar el reciclaje de residuos de la planta ex-situ y la tercera mejora fue comprar una pequeña trituradora. Se analizó el análisis del ciclo de vida (ACV); en una segunda fase se hizo un inventario del ciclo de vida e ICV: flujos cuantitativos de entrada-salida. En las fases o escenarios 3 y 4 se realizó el EICV-Interpretación de los datos. 

Para cerrar la mañana, Cristina Engel de Alvarez, profesora titular de la Universidad Federal de Espírito Santo en Brasil y de Ecoeico, quien presentó “Ciudades Inteligentes y sostenibles”, afirmando que es urgente continuar luchando por la búsqueda del equilibrio ambiental, social y económico, y que temas como “la energía, la vivienda, el confort y la eficiencia, siempre estarán entre las preocupaciones de todos los que queremos hacer de nuestro planeta un lugar más sostenible para vivir”.

Reflexión sobre la acción climática

Durante la tarde, se desarrolló el Módulo 2 en el Centro de Innovación UC Anacleto Angelini, con el “Taller de Innovación y emprendimiento circular”. La bienvenida la dio Ramón Molina, director ejecutivo del Centro de Innovación UC. Le siguió Natalia Reyes, jefa de Sustentabilidad del CTEC, quién presentó el “Pasaporte de Materiales” de Chile. Cerró el bloque Joaquín Cuevas, de Obra Limpia, con un taller digital de RCD. 

A continuación, se realizó el Taller Pensamiento Circular en la Construcción, oportunidades de prevención de residuos, dinámica que tuvo una gran participación de los asistentes. Si bien algunos tenían que tomar roles como el de líder, secretario, experto o comunicador, todos se vieron muy involucrados. La misión consistía en enfrentar una Amenaza Ambiental RCD en una zona de vulnerabilidad climática. Los grupos, entonces, tenían tareas de adaptación y mitigación en que tenían que fundamentar y presentar sus estrategias. 

El monitor de dicho Taller fue Pedro Mancilla, quien trabaja en apoyar al ecosistema de innovación con herramientas del juego, lo que les permite encontrar y abrirse a nuevas oportunidades y respuestas. “Hemos conformado un grupo humano, que ha sido capaz de mirar y encontrar soluciones de mayor envergadura ecosistémica. Que no podemos solucionar desde una empresa, una persona o un Ministerio. Se necesitan del grupo”, señaló. Tras compartir los resultados, cerraron con una reflexión conformando un gran círculo entre los asistentes y de esta manera terminó la primera jornada.

Segunda jornada

La segunda jornada de este Seminario, se llevó a cabo el 6 de octubre, en la Cámara Chilena de la Construcción, con el módulo colaboración para la economía circular.

Felipe Ossio, director de la Escuela de Construcción Civil UC, abrió la jornada respondiendo la pregunta: ¿Cómo estamos construyendo hoy? Señaló que los RCD son un problema mundial, pues “estamos generando mucho más residuos, los que tienen una serie de externalidades, como terminar en sitios ilegales con graves impactos ambientales”.

Tan grande es el problema que mientras en China se generan 1.130 millones de toneladas de residuos al año, en Chile, se producen 7,4 millones de toneladas anualmente.

El académico precisó que la vulnerabilidad no sólo es ambiental, sino que también urbana, porque “estos vertederos terminan frente a las calles, a personas y están rodeadas de mafias de la basura, son foco de delincuencia”. 

También estuvo presente Conrad Von Igel, gerente de Innovación y Sostenibilidad de la CChC, quien reflexionó sobre qué significa en la actualidad hacer empresas y a “quiénes estamos afectando cuando hacemos negocios”. Asimismo, presentó una propuesta colaborativa para abordar la sostenibilidad de forma concreta, señalando que el Compromiso Pro es la forma concreta de la CChC para impulsar la sostenibilidad y hacer un acompañamiento a las empresas socias en este camino.

Por su parte, María José Cobo, coordinadora de Proyectos de CDT, comentó que los residuos de la construcción y demolición pueden llegar a significar un 1,19% del presupuesto total de la obra.

Por ello, Cobo entregó datos claves como cuánto cuesta el valor del traslado del material a la obra, al sitio de disposición final y, luego, el valor de disponerlo, asociado a la cantidad de emisiones de CO2 que generan esos procesos. Así, sostuvo que un edificio de 16.000 m2 significa 243,6 millones de pesos en ineficiencias y 1.462.510 KgCO2eq. Para absorber estas emisiones generadas, se necesitan 9.750 árboles para absorberlas, equivalente a un terreno de 72 hectáreas, y a 243 millones de pesos, los que implican 4,2 viviendas sociales de 1.600 UF.

“Estamos consumiendo más de lo que tenemos y presentamos una baja productividad, hay un costo de inoportunidad, por no entregar nuevas oportunidades de empleos verdes para la economía circular”, precisó la profesional. Por ello, insistió en que “queremos apuntar hacia un cambio sistémico de mentalidad, y que los proyectos sean considerados en todo su ciclo de vida, desde cuando nacen hasta cuando mueren”.

Luego, Katherine Martínez, líder de Sostenibilidad Ambiental de la CDT, se refirió al eje de medioambiente de la Estrategia de Economía Circular en Construcción, mostrando cómo están abordando este punto de manera colaborativa, a través de los Acuerdos de Producción Limpia.

¿Qué pasa si avanzamos en conjunto? Se preguntó. “Hemos tratado de avanzar en el problema de los residuos con los Acuerdos de Producción Limpia, en conjunto con la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático, Construye2025, la academia y otros actores del sector”, dijo.

En esta instancia, los asistentes participaron del Taller Pensamiento Circular en la Construcción, oportunidades de prevención de residuos.

Al finalizar, con la firma de una carta de compromiso, se avanzó en este Seminario Economía Circular en el Sector Construcción: Una oportunidad de colaboración y desarrollo, a la que adhirieron Construye2025, CDT, CChC, Instituto de la Construcción, IUS Latam Ecoeico y la Escuela de Construcción Civil UC.

 

Investigadores de la UC buscan convertir a las municipalidades en agentes de cambio medioambiental

Fecha: 29/06/2020

Cuatro especialistas estudiaron el manejo de los residuos de construcción y demolición e hicieron propuestas orientadas a la construcción sustentable, en línea con los desafíos actuales.

Para elevar los estándares ambientales y favorecer una construcción centrada en el medio ambiente, cuatro investigadores se unieron para trabajar en el capítulo IX del Concurso de Políticas Públicas de la Pontificia Universidad Católica “Políticas municipales estandarizadas para el manejo sustentable de residuos de construcción y demolición”.

Felipe Ossio y Juan Molina de la Escuela de Construcción Civil; Homero Larraín de la Escuela de Ingeniería y Cristián Schmidt de la Escuela de Arquitectura fueron los responsables de abordar la problemática de los Residuos de Construcción y Demolición (RCD), desde un enfoque interdisciplinario, considerando sus impactos ambientales, sociales y económicos. 

“Nos dimos cuenta que la alta generación de RCD y su inadecuada disposición final es un problema multifactorial, que involucra a todos los actores en el ciclo de vida del proyecto y al cuadro normativo, regulatorio y legal respectivo. Sin embargo, este último se encuentra atomizado y fragmentado, lo que puede apreciarse en la cantidad de instrumentos asociados a diferentes actores”, explica Felipe Ossio. 

De hecho, para el caso específico de los RCD existen más de 20 tipos de normativas dependientes de diferentes organismos públicos. Según el estudio, lo anterior dificultaría su conocimiento y aplicación, dejando al Estado una capacidad limitada de fiscalización en materias sanitarias y ambientales, algo que agudiza el problema. En efecto, el 60% de las empresas constructoras en Chile declara no conocer leyes, reglamentos, normativas ni manuales sobre gestión de residuos. 

El equipo interdisciplinario de la UC se propuso contribuir proponiendo una política pública que lleve a las municipalidades a ser un agente de cambio y aportar al cumplimiento reglamentario ante las instituciones de nivel regional y nacional. Al mismo tiempo, su trabajo apuntó a elevar los estándares ambientales y permitir así una construcción centrada en el medio ambiente que responda a los desafíos que hoy exige la humanidad.

Disparidad normativa

El estudio reveló que los municipios en Chile presentan un dispar nivel de exigencias en materia de gestión de RCD, desde la nula consideración hasta una serie de normativas no necesariamente bien enfocadas. “Pero, principalmente, pudimos identificar comunas generadoras y receptoras de RCD. Las primeras se caracterizan por generar una alta proporción de los residuos a nivel de su región y no poseen sitios de disposición legal de residuos. Por su parte, las receptoras no producen una gran proporción de RCD a nivel regional y, en general, son comunas que poseen sitios de disposición final legal en su jurisdicción y/o deben hacer frente a sitios de disposición ilegal como micro basurales o vertederos ilegales”, detalla Ossio.

Luego de que el estudio reconociera dos tipos de comunas: generadoras y receptoras de RCD, los investigadores establecieron recomendaciones de acción que, si bien son vinculadas a un tipo de comuna, no son excluyentes para las otras. Asimismo, hicieron sugerencias generales que toda comuna, independiente de si es generadora o receptora de RCD, debería adoptar. “Estas 15 propuestas tienen por objetivo avanzar en la minimización de la generación de RCD y la disminución de sus impactos socioambientales, basados en los principios de la justicia ambiental (Hervé, 2010) y siguiendo la jerarquía de manejo de los residuos”, acota el profesor de la Escuela de Construcción Civil de la UC.

De este modo, las propuestas para las comunas generadoras se asociarán a los primeros eslabones de esta jerarquía, es decir, se centrarán en reducir la generación de RCD en origen y fomentar la valorización de los RCD mediante su reutilización, recuperación o aprovechamiento para otras aplicaciones. Mientras que las propuestas asociadas a las comunas receptoras buscarán asegurar el correcto destino de los residuos no valorizados que son llevados a un botadero.

Y es que, según la investigación, las municipalidades son actores clave dentro de la cadena de instituciones encargadas, tanto en la definición de reglas para la adecuada disposición de RCD como en la supervisión de su cumplimiento en el territorio comunal.

El estudio puede ser descargado desde AQUÍ.

Fotografía gentileza Plataforma Industria Circular + Viconsa.